Cientos de personas, casi un millar de onubenses, han desafiado una tarde gélida para reclamar a la Junta de Andalucía la puesta en valor de los importantes restos tartésicos que pretende enterrar bajo los cimientos del antiguo edificio de Hacienda, en la Gran Vía.
Concentración contra el enterrado del legado de Tartessos.
Los congregados, liderados por el movimiento ciudadano en defensa del patrimonio y Huelva Te Mira, han lanzado un mensaje rotundo al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, al PP, a su candidata a la Alcaldía y hoy presidenta de otro Puerto, decimonónico, a la delegada del Gobierno, Bella Verano, y al alcalde de Huelva, Gabriel Cruz: No estamos dispuestos a que enterréis nuestra historia, que es la memoria de la ciudad más antigua de Occidente.
Los cientos de manifestantes han compartido un manifiesto que está dando la vuelta a Huelva y a los foros más importantes de la cultura y que no deja dudas de su empeño.
El manifiesto recuerda que "la ciudad de Huelva se encuentra en un territorio excepcional caracterizado por el estuario del Tinto y Odiel, las marismas y los Cabezos. Un privilegiado medio que proporciona una rica biodiversidad y el soporte para la ocupación continuada del territorio desde hace más de 5.000 años hasta nuestros días. Sus frutos son un patrimonio natural y cultural extraordinario que constituye el paisaje cultural identitario onubense y que, no lo olvidemos, pertenece también a toda la Humanidad".
La existencia de un excepcional patrimonio histórico, mayoritariamente subyacente en el subsuelo, ha valido la catalogación de gran parte de la ciudad como Bien de Interés Cultural Zona Arqueológica de Huelva en 2001.
"Pero lamentablemente la sociedad ha permanecido ajena a la conciencia de esta riqueza patrimonial porque ha fallado la transferencia del conocimiento y su incorporación a las políticas públicas en los ámbitos docente, cultural y urbanístico", señalan.
La ciudad de Huelva ha sufrido una extraordinaria transformación durante la segunda mitad del siglo XX que sigue hoy en día.
"Políticas públicas y planes urbanísticos insensibles al paisaje cultural y a su valor social, han arrasado la mayor parte del patrimonio heredado. El Casco Antiguo ha perdido más del 80% de su arquitectura residencial. Un buena parte de los cabezos han sido desmontados, amputados o han quedado irreconocibles. El Plan General vigente, aprobado en el siglo pasado, considera los cabezos como “vacíos urbanos" a los que ha conferido unos aprovechamientos urbanísticos muy especulativos. Hoy esa amenaza sigue presente en La Joya, Mundaka, Roma y lo que queda de San Pedro. La Ría y las marismas se han visto comprometidas con actividades industriales contaminantes perdiendo usos artesanales más sostenibles".
Huelva también ha sepultado o destruido una buena parte del patrimonio arqueológico que se ha venido descubriendo desde los años 70 del pasado siglo, señalan.
"Así, hemos perdido oportunidades únicas de conocer y poner en valor numerosos restos de Tartesos, de la Onoba romana o de la Welba medieval en las calles del centro. Las pocas integraciones realizadas son ejemplos fracasados o claramente insuficientes, como los restos romanos bajo la tienda Sfera o la muralla protohistórica de San Pedro bajo el supermercado El Jamón", insisten.
Salvo en contadas excepciones como la defensa del Parque Moret, del Parque de la Esperanza o la ermita de La Soledad, la sociedad onubense ha asistido como espectadora impasible mientras le arrebataban su paisaje cultural, insisten desde el movimiento cívico.
Y recuerdan que "n enero de 2016, ahora hace justo siete años, el expolio del yacimiento La Orden Seminario provocó una movilización ciudadana sin precedentes que se tradujo en el despertar de la conciencia colectiva sobre el patrimonio identitario onubense. Fue el surgimiento de Huelva Te Mira que se sumó a organizaciones preexistentes; otras han venido después".
Creen que desde entonces, "la sociedad onubense está ávida de conocer su pasado y su presente. Y anhela formar parte de la toma de decisiones sobre su futuro porque tiene derecho a participar en la identificación, la decisión y la gestión del patrimonio cultural que sus propios antepasados originaron. Un derecho reconocido en convenios internacionales ratificados por España como el Convenio Europeo del Paisaje o el Convenio de Faro".
"En no pocas ocasiones la sociedad se ve obligada a defender el patrimonio de la propia Administración que debe garantizar el interés general, el bienestar de la población y el acceso a todo tipo de patrimonio. Es el caso del Cabezo de la Joya, con una de las necrópolis tartésicas más relevantes de la Península Ibérica, y el Cabezo Mundaka, ambos amenazados por planes urbanísticos municipales recurridos ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía por dos colectivos onubenses, Huelva Te Mira y Ecologistas en Acción. Y está sucediendo con el puerto protohistórico descubierto hace unos meses en el solar del antiguo edificio de Hacienda, que hoy nos ha convocado aquí", recoge el comunicado.
A juicio de Huelva Te Mira, "el hallazgo tiene una gran importancia pues permite conocer uno de los elementos funcionales característicos de la ciudad tartésica. A pesar de ello, la Junta de Andalucía, promotora de la obra y además encargada de la tutela del patrimonio histórico, ha decidido aplicar en Huelva criterios muy diferentes a los de otras ciudades andaluzas: sepultar los restos bajo toneladas de hormigón armado impidiendo posteriores investigaciones y su puesta en valor. Justifica la imposibilidad de integración en la existencia del nivel freático, según la única opinión recabada, la del director de la obra".
Recuerda el colectivo que esta semana, tras el revuelo social y ante la inminente campaña electoral, la Delegación del Gobierno está proponiendo como solución alternativa desmontar el puerto trocito a trocito y desplazarlo a otro lugar, una propuesta que inclumple las leyes de Patrimonio española y andaluza. Ambas consideran inseparable el yacimiento de su entorno, prohibiendo su desplazamiento salvo causa de fuerza mayor.
¿Dónde está la causa de fuerza mayor en este caso?, se preguntan y se sorprende que ante la importancia del hallazgo, Cultura no haya recabado todavía un informe alternativo independiente. En ciudades como Sevilla o Cádiz el nivel freático no ha sido impedimento para integrar yacimientos.
1. No nos conformamos con el tapado de los restos ni con una integración fuera de su contexto original. Queremos una cripta arqueológica diáfana, visitable, con acceso público independiente del edifico administrativo que se levante encima.
2. Instamos a la Consejería de Cultura a que revise la Resolución de la Delegación del 29 de diciembre y se desautorice la modificación del proyecto que supone el tapado de los restos, una propuesta que incumple, además, las Instrucciones Particulares del BIC Zona Arqueológica de Huelva por permitir un sótano sin integrar los hallazgos arqueológicos.
3. Instamos a la Consejería de Cultura y a su Delegación en Huelva a que recaben informes técnicos independientes que confirmen la viabilidad de integrar in situ los restos.
4. Instamos al Gobierno de la Junta de Andalucía a que dé ejemplo en la construcción de su nueva sede en Huelva y proponga y financie la modificación del proyecto para garantizar la integración in situ del puerto protohistórico de Huelva.
5. Instamos al Ayuntamiento de Huelva a que consiga la integración del puerto protohistórico y a que incorpore el patrimonio onubense como prioridad en las políticas públicas municipales. Ello supone dar marcha atrás en los planes urbanísticos de los Cabezos de Huelva buscando alternativas mediante la transferencia de aprovechamientos, así como fomentar la investigación, documentación y difusión del patrimonio arqueológico que aparezca en las intervenciones de iniciativa pública y privada en la ciudad, con la puesta en valor de los elementos más interesantes, todo ello conforme a un plan municipal de interpretación del patrimonio onubense que ha de redactar y aprobar.
6. Finalmente, instamos a la Junta de Andalucía y al Ayuntamiento de Huelva a que incorporen a la sociedad onubense a cuantas reuniones organicen para debatir y tomar decisiones sobre el puerto protohistórico y los demás elementos integrantes del paisaje cultural onubense.
Con mayúsculas claman:
¡HUELVA TARTÉSICA TAMBIÉN EXISTE!
POR EL PAISAJE CULTURAL ONUBENSE, POR UNA CIUDAD CON IDENTIDAD
NO AL TAPADO DE NUESTRA HISTORIA,
SÍ A LA INTEGRACIÓN IN SITU DEL PUERTO TARTÉSICO DE HUELVA
Y dan las gracias "a las más de 900 personas que nos han acompañado en esta tarde fría de invierno, y que han firmado el Recurso de Alzada que presentaremos en la Consejería de Cultura".
(Fuente: Diario de Huelva)