google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri: Universidad de Jaén
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19 de septiembre de 2024

Investigadores de la UA desvelan que las técnicas agrarias de las áreas de montaña de Alicante tienen dos mil años de antigüedad

Prácticas como la irrigación, el abonado o los abancalamientos se iniciaron en la Edad de Hierro
Los investigadores de la UA durante el trabajo de campo en la montaña alicantina.

Dos artículos recientemente publicados por investigadores de la Universidad de Alicante en revistas de alto impacto internacional demuestran que las técnicas agrarias intensivas utilizadas en la montaña alicantina, atribuidas a la población medieval islámica, son mil años más antiguas de lo que se suponía. “Estas actividades, como son la irrigación, el abonado o los abancalamientos se iniciaron a fines de la Edad del Hierro, hacia el 100 a C., y se han mantenido a través del tiempo y las culturas, mostrándose tremendamente sostenibles ambiental y socialmente”, explica el catedrático de Arqueología de la UA Ignasi Grau, uno de los coordinadores de la investigación junto a la profesora Julia Sarabia, del Instituto Universitario de Investigación en Arqueología y Patrimonio Histórico de la UA.

En concreto, los artículos publicados son, por una parte, Archaeological landscapes and long-term settlements in the Perputxent valley (eastern Iberia): Exploring land use strategies and sustainability in a Mediterranean mountain área, publicado por The Holocene; y, por otra, Roman farmers in eastern Iberia: A spatial, geoarchaeological and bioarchaeological approach to agrarian strategies, publicado en Quaternary International.

Los estudios, que analizan la actividad agraria y el poblamiento rural de fines de la Edad del Hierro y época romana, se han basado en técnicas múltiples como análisis arqueológico, teledetección, análisis geoquímicos, arqueométricos o de micromorfología de suelos. Y con ellas se han caracterizado zonas de huertas en la Vall de Perputxent y bancales en Banyeres de Mariola, unas investigaciones en las que han participado especialistas de las Universidades de Jaén, Burgos, Valencia, el CSIC o la Sociedad Aranzadi de Euskadi y que han contado con la financiación del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y la Conselleria de Educación, Cultura, Universidades y Empleo-GVA.

Ignasi Grau señala como el mosaico agroforestal que conforma nuestro paisaje, el de las comarcas alicantinas, en el que se combinan los cultivos y los huertos con las zonas boscosas, ya era así hace más de 2.000 años. “Lo que vemos ahora es la suma del trabajo de muchas generaciones de personas que han estado haciendo lo mismo durante siglos. Hemos creado una agricultura sostenible a costa de mucho esfuerzo, que empezó a perderse a partir de los años 60 cuando se abandonó el cultivo tradicional”, explica el profesor, para quien la falta de estudios arqueológicos sobre la vida rural sigue siendo una de las grandes asignaturas pendientes de los investigadores ya que “se ha puesto mucho interés en saber qué se hacía en las urbes, pero se desconoce cómo era la vida en el campo cuando, en realidad, el 95 % de la población habitaba en ese entorno”.

9 de julio de 2024

Medio siglo desentrañando la historia de los íberos en la provincia de Jaén

El Instituto de Arqueología Ibérica de la UJA homenajea al catedrático Arturo Ruiz con la publicación de un libro coral sobre sus 50 años de trayectoria en Jaén
Carmen Rísquez, Jesús Estrella, Nicolás Ruiz, Arturo Ruiz, Francisco Reyes y Manuel Molinos.

El Instituto de Investigación en Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén rindió homenaje a la figura de Arturo Ruiz, catedrático emérito de Prehistoria de la UJA, con motivo de sus 50 años de trayectoria, con la publicación del libro ‘Arturo C. Ruiz Rodríguez y la Arqueología Íbera en Jaén’.

El acto de presentación de la obra, celebrado en el Museo Íbero de Jaén el pasado 27 de junio, estuvo presidido por el rector de la Universidad de Jaén, Nicolás Ruiz, que se refirió al evento como un “aplauso colectivo” hacia Arturo Ruiz, “un reconocimiento más que merecido, una forma especial de hacer justicia y, sobre todo, de darle las gracias por todo su trabajo y por construir un enorme legado entorno a su pasión vital: la arqueología”, ha indicado Nicolás Ruiz, que ha destacado la importancia del homenajeado en la historia de la Universidad de Jaén.

En este sentido, el rector se ha referido en su intervención a la figura de Arturo Ruiz como “imprescindible, tanto para la Universidad de Jaén como para esta tierra”. “Desde su llegada al antiguo Colegio Universitario Santo Reino de Jaén, hace 50 años, ha contribuido, de forma decisiva a convertir la UJA en lo que hoy es, un centro de educación superior de prestigio, puntero en determinadas áreas de conocimiento, decisivo para la transformación y el desarrollo territorial, abierto al mundo y con una creciente dimensión internacional”.

Sobre su figura, ha destacado sus perfiles muy marcados: la dimensión docente, porque “es y será un maestro, en el más amplio sentido de la palabra; su “generosa labor científica”, que ha permitido “extraordinarios avances y sorprendentes descubrimientos, que siempre se ha preocupado de compartir y difundir”; su compromiso con la sociedad civil jiennense, “con una ética insobornable, enfocada en la construcción de una sociedad más formada, más decente, más justa y más igualitaria”. “Este será siempre tu gran legado, querido Arturo. Has contribuido a que todos nosotros tomemos conciencia de la singularidad de la civilización íbera, del esplendor cultural, político y económico que tuvieron nuestros antepasados. Gracias por ser como eres, un hombre de talento y de talante, honesto, integro, entusiasta, inconformista y generoso. Gracias por ser un extraordinario compañero de viaje en esa casa común que es la Universidad de Jaén”, ha afirmado Nicolás Ruiz.

Asimismo, sobre la obra presentada, ha asegurado que se trata de un libro colectivo, “cargado de admiración profesional y, sobre todo, de afecto personal, que representa el mejor homenaje a su larga y fecunda trayectoria docente e investigadora”.

Por su parte, el propio Arturo Ruiz ha reconocido emocionarse por recibir este reconocimiento en forma de libro coral, agradeciendo a todas las personas que han asistido su participación. “Han pasado 50 años desde que llegué, en enero del año 1974, en un extraño curso que empezaba en ese mes. Se creaba el Departamento de Arqueología en Jaén y desde entonces hemos hecho un recorrido larguísimo en el que, en medio de todo esto, se creó el Centro Andaluz de Arqueología Ibérica por parte de la Junta de Andalucía, germen del Instituto de Investigación que vino después, el primero que ha tenido la UJA. Y se ha conseguido este Museo de Arte Íbero, que es obra de toda la provincia de Jaén, porque todo el mundo lo ha reclamado cuando se ha dado cuenta de lo que significaba la importancia del patrimonio Ibérico, que Pilar Palazón ya lo sabía. Tenemos un patrimonio excelente de cultura Ibérica, y tenemos hoy un museo donde puede lucir maravillosamente como así va a ocurrir, espero en muy poco tiempo”, ha declarado Arturo Ruiz.

Sobre su labor investigadora, Arturo Ruiz ha asegurado que su objetivo principal era contar la historia de los iberos a partir de los datos arqueológicos, de la historia, algo que considera que ha conseguido a lo largo de sus 50 años de trayectoria profesional. “Estamos haciendo historia de los Iberos, que hasta hace muy poco tiempo no se podía contar, porque no había datos suficientes. Pero ha sido la investigación la que lo ha hecho posible y le ha añadido valor a las esculturas, a la cerámica, a los plomos, a los exvotos ibéricos; le ha añadido el valor que hoy tiene para la sociedad a nivel de autoestima en Jaén y a nivel de reconocimiento internacional”, ha remarcado Arturo Ruiz.

El acto ha contado además con las intervenciones del catedrático emético de la UJA Manuel Molinos, y de la directora del Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica de la UJA, Carmen Rísquez, así como del delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía, Jesús Estrella, y del presidente de la Diputación de Jaén, Francisco Reyes. Asimismo, el acto ha contado también con las intervenciones de alguna de las personas que han participado en la confección del libro, como por ejemplo Juan Eslava Galán, Bartolomé Ruiz, Felipe Criado, Teresa Chapa, Fernando Quesada, Isabel Izquierdo o Ignasi Grau, entre otros.
(Fuente: UJA)

17 de junio de 2024

Un equipo internacional estudia los mosaicos romanos expuestos en el Museo de Jaén

Un equipo de investigadores portugueses y belgas visita el Museo de Jaén para colaborar en el proyecto ‘GeoChemMos’, sobre el análisis de los mosaicos romanos, que lidera el Instituto de Arqueología Ibérica de la UJA
Trabajos de análisis de mosaicos romanos, en el Museo de Jaén.

Un equipo internacional de investigadores portugueses y belgas se ha desplazado hasta el Museo de Jaén para colaborar en la campaña que se desarrolla del 12 al 19 de junio de análisis químicos de los mosaicos romanos actualmente expuestos en el mismo, en el marco del proyecto ‘Análisis geoquímicos para la investigación y puesta en valor de los mosaicos romanos del Valle del Alto Guadalquivir (GeoChem-Mos)’, que lidera el Instituto Universitario de Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén.

En concreto, se trata de investigadores expertos en el análisis arqueométrico del patrimonio arqueológico procedentes del Laboratorio Hércules de la Universidad de Évora (Portugal) y del Departamento de Arqueología de la Universidad de Gante (Bélgica). Ambas instituciones forman parte de este proyecto de investigación, que está financiado por la Junta de Andalucía en el marco del Plan Andaluz de Investigación en la modalidad de Proyectos de investigación orientados a los retos de la sociedad, con una duración de tres años (2023-2025) y una financiación de 109.040 euros.

El trabajo, actualmente en ejecución, se centra en el análisis de la composición química de un conjunto de teselas de diferentes materiales y colores pertenecientes a cada uno de los 6 mosaicos expuestos en el Museo de Jaén y datados entre los siglos II y V d.C. La técnica de análisis empleada, dado que no se disponen de teselas sueltas y no puede alterarse la integridad física de los mosaicos, es la fluorescencia de rayos X aplicada utilizando equipos portátiles. Los resultados obtenidos se unirán a los ya conseguidos por el proyecto relacionados con el análisis de imágenes de alta resolución, y con el análisis mineralógico por medio de espectroscopía Raman. Además de los mosaicos del Museo de Jaén, el proyecto incorpora otros mosaicos procedentes de los sitios arqueológico de Cástulo (Linares), El Altillo (Rus) y el Cerrillo del Cuco (Vilches).

“Esta colaboración internacional y el carácter interdisciplinar de la investigación están permitiendo una aproximación más precisa y científica a un patrimonio arqueológico de gran presencia y significado histórico para Jaén y el Alto Guadalquivir”, indica Alberto Sánchez Vizcaíno, investigador responsable del proyecto. Asimismo, explica que las materias primas empleadas en la fabricación de las teselas, tanto las rocas (calizas, areniscas, cuarzo, piedra ferruginosas) como el vidrio (sódico-cálcico o de plomo) están empezando a ser identificadas y clasificadas con objeto de aportar no sólo información sobre su origen y el proceso de fabricación de los mosaicos, sino también sobre su estado de conservación y, sobre todo, “como medio de elaborar nuevas propuestas de puesta en valor de un patrimonio arqueológico de gran relevancia cultural y turística”.

7 de mayo de 2024

Investigadores de la UJA evalúan el estado de conservación del castillo de Campillo de Arenas (Jaén)

Situado en lo alto del Cerro del Castillo, en la Sierra de Alta Coloma, el Castillo de Puerta Arenas, en el término municipal de Campillo de Arenas, fue una de las últimas fortalezas nazaríes que cayeron en poder de Castilla.
Trabajos con dron en el Castillo Puerta de Arenas.

Investigadores de la Universidad de Jaén han realizado una serie de campañas en el Castillo de Puertas Arenas, en la localidad jienense de Campillo de Arenas, con el objetivo de evaluar su estado de conservación para proponer futuras actuaciones de tipo arqueológico.

Para ello, los investigadores han llevado a cabo vuelos con drones (UAS), utilizando diferentes sensores, y gracias a la Geomática ha sido posible levantar, con gran detalle, los lienzos de castillo, realizar un ortomosaico detallado del mismo, así como, y gracias a la fotografía infrarroja, establecer puntos de interés para posibles catas. Además, de cara al futuro, se plantea realizar un gemelo digital del mismo con el fin de estudiar el comportamiento estructural del castillo frente a fenómenos atmosféricos o eventos de tipo sísmico.

Situado en lo alto del Cerro del Castillo, en la Sierra de Alta Coloma, el Castillo de Puerta Arenas, en el término municipal de Campillo de Arenas, fue una de las últimas fortalezas nazaríes que cayeron en poder de Castilla. Destaca por su estratégica situación, controlando el valle del río Guadalbullón y el camino entre Jaén y Granada.

A pesar de su proximidad, lo escarpado de su enclave ha dificultado tanto su estudio en profundidad sobre el terreno, como la realización de labores de conservación. En la actualidad, la utilización de drones (UAS, acrónimo en inglés de Unmanned Aerial Systems), en el campo de la arqueología no solo facilita la toma de datos de una forma no invasiva, contribuyendo a preservar el entorno, sino también de una forma mucho más segura para los investigadores.

29 de marzo de 2024

La UJA prepara un proyecto de investigación en La Bobadilla (Jaén)

El Instituto Universitario de Investigación de Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén (UJA) espera los permisos de la Junta de Andalucía para iniciar los trabajos con georadar en los yacimientos íberos y romanos de la localidad.
Manuel Latorre y Juan Pedro Bellón con el equipo técnico de la UJA que desarrollará el proyecto en La Bobadilla.

Los arqueólogos de la UJA esperan los permisos oportunos de la Junta de Andalucía para iniciar el proyecto suscrito con el Ayuntamiento de La Bobadilla y que en una primera fase consistirá en la prospección con georradar 3-D de la loma del Cerro del Esparto. Unos trabajos 
que se extenderán sobre una extensión de tres hectáreas y donde se asienta un oppidum, o ciudad fortificada nacida del Bronce Final que enlaza con época ibérica y en la que también se encuentra una necrópolis del mismo periodo. 

Según el alcalde de La Bobadilla, Manuel Latorre, para esta primera fase del convenio con la UJA, en la que también participará un equipo de la Universidad Complutense de Madrid, se 
han cuantificado 21.000 euros “que asumirá el Ayuntamiento de la ELA con fondos propios”. Aunque el deseo de Latorre es extender los trabajos hasta las seis hectáreas, para lo que ya está buscando financiación de otras administraciones públicas. El director del proyecto de investigación será el arqueólogo de la Universidad de Jaén, Juan Pedro Bellón

La zona del oppidum se extiende a lo largo de casi veinte hectáreas sobre las que nunca se ha trabajado con georradar, pero en el que se aprecian restos arqueológicos que afloran en superficie.

Por otra parte, la zona de la necrópolis ya fue estudiada por el arqueólogo Maluquer de Motes en los años 70 del siglo pasado y allí realizó 19 sondeos en otras tantas sepulturas, apenas el 5% de los enterramientos que se estima puedan encontrarse en este terreno. De las prospecciones con georadar en la zona del oppidum, Manuel Latorre espera “tener suerte” y que se pueda localizar el antiguo santuario, ya que entre otros vestigios que aparecieron aquí y se exponen en el Museo de Jaén, también se encontraron unos exvotos líticos de época ibérica, 
clara evidencia de la existencia de un lugar de culto. “Desde La Bobadilla apostamos 
por el descubrimiento de nuestro patrimonio con la aspiración de entrar a formar parte del itinerario turístico del “Viaje al Tiempo de los Íberos” que promueve la Diputación de Jaén.

Tras la prospección con georradar 3-D de la superficie del oppidum y de la necrópolis, los técnicos de la Universidad de Jaén tendrán que realizar una valoración técnica de la potencialidad del sitio para el diseño de futuras intervenciones arqueológicas en profundidad, así como el estudio exhaustivo de los antecedentes historiográficos del lugar y el estudio macro-espacial del sitio y de los materiales encontrados con anterioridad y depositados en el Museo de Jaén. 

24 de enero de 2024

Concluyen las primeras actuaciones en el castillo de Salvatierra en Cazorla (Jaén)

Las excavaciones han permitido localizar las cimentaciones de una gran Torre del Homenaje y descartar la existencia de un aljibe en la torre pentagonal. Igualmente, los trabajos han logrado ubicar el acceso principal al castillo. La intervención arqueológica, incluida en el proyecto de conservación y obras del inmueble, cuenta con una inversión de más de 362.000 euros.
Castillo de Salvatierra en Cazorla, también conocido como el de "Las cinco esquinas".

La delegación territorial de Turismo, Cultura y Deporte ha finalizado las obras de excavación arqueológica en el Castillo de Salvatierra, en Cazorla. Una actuación incluida en el proyecto de intervención arqueológica, referida al proyecto de conservación y obras del inmueble y que cuenta con una inversión de más de 362.000 euros.

Así lo ha detallado José Ayala, delegado territorial, quien ha subrayado que la dirección arqueológica ha corrido a cargo de la Universidad de Jaén, a través de la Oficina de Transferencia de Resultados de la Investigación de la UJA (OTRI), y del investigador Juan Carlos Castillo. Ayala ha destacado el compromiso de la Consejería con esta intervención, al tiempo que ha recordado que se trata de “la primera vez que el Castillo de Salvatierra cuenta con financiación para un proyecto de arqueología y conservación”.

El proyecto de conservación, que cuenta con fondos europeos, tiene por objetivo restaurar, preservar y mejorar el patrimonio cultural existente en el entorno rural, así como la recuperación del patrimonio de la población de Cazorla. El Castillo de Salvatierra, conocido también como “De las cinco esquinas”, está declarado Bien de Interés Cultural (BIC) desde el año 1985. La estructura mayor que se conserva es una torre pentagonal en proa, localizada en el extremo sur del recinto amurallado, con forma de trapecio. Además de la torre, se conserva parte del lienzo oriental en pie y el resto a nivel de cimientos.

La primera intervención, que dará paso al resto de las actuaciones, ha consistido en la localización, a través de georradar, de los muros ocultos, así como para el conocimiento de la estratigrafía de las construcciones y la ejecución de varios sondeos para determinar determinados aspectos. Así, las excavaciones han permitido localizar las cimentaciones de una gran Torre del Homenaje y descartar la existencia de un aljibe en la torre pentagonal. Igualmente, los trabajos han logrado ubicar el acceso principal al castillo.

Paralelamente, se está procediendo al estudio de los materiales arqueológicos a objeto de poder establecer el origen en el tiempo de esta fortaleza. Los primeros indicios apuntan a que podría fecharse a finales del siglo XIII o principios del XIV. Igualmente, se considera que había una ocupación previa islámica, de la época Emiral-Califal, pero desvinculada de la posterior construcción del Castillo de Salvatierra.

José Ayala ha anunciado que, en próximas fechas, se procederá a la licitación de la redacción del proyecto de conservación que servirá como base para la licitación de las obras.
(Fuente: Hora Jaén)

3 de octubre de 2023

La Universidad de Jaén clausuró el Programa de Voluntariado en Cástulo (Linares)

En el programa, que se desarrolló del 11 al 22 de septiembre, participaron diez estudiantes
Fotografía de grupo con los voluntarios.

Un total de diez estudiantes de la Universidad de Jaén han participado en el Programa de Voluntariado en el Conjunto Arqueológico de Cástulo, que se desarrolló del 11 al 22 de septiembre, y que tuvo su acto de clausura con la entrega de diplomas.

Dicha clausura fue presidida por Pilar Fernández Pantoja, Vicerrectora de Igualdad, Diversidad y Responsabilidad Social de la Universidad de Jaén, que estuvo acompañada por José Ayala Mendieta, Delegación Territorial de Turismo, Cultura y Deporte en Jaén, y Marcelo Castro López, director del Conjunto Arqueológico de Cástulo.

Pilar Fernández explicó que los estudiantes seleccionados para este programa pertenecen a varias disciplinas, como son la Arqueología o la Biología, así como al Master de Patrimonio Cultural, por lo que destacó el “la riqueza y el valor de la interdisciplinaridad”. Asimismo, explicó que el alumnado realizó tareas de acompañamiento; de recuperación y conservación, y de catalogación de materiales, así como actividades vinculadas a sus estudios.

Por su parte, José Ayala puso de relieve la conveniencia de la colaboración de las instituciones y resaltó “el esfuerzo de los colaboradores” y el tipo de trabajo realizado por el voluntariado, tanto en el Conjunto Arqueológico de Cástulo, como en el propio Museo Arqueológico de Linares.

Por último, Marcelo Castro manifestó que en este tipo de trabajos arqueológicos es necesaria la colaboración y la interdisciplinaridad, y lamentó la finalización del programa “ahora que estáis empezando a tener vuestro lugar dentro del equipo, ya os habéis ido, y es ahora cuando os necesitamos para que nos apoyaseis, en este tramo final, que es donde se va a concentrar gran parte de nuestro trabajo”.

Asimismo, Castro quiso trasladar a los voluntarios la idea de que la arqueología, como ciencia, tiene que estar dispuesta al permanente cuestionamiento de sus conclusiones. “Conviene distinguir los hechos de las interpretaciones y habéis empezado a caminar hacia esa dirección, que es la que os asegura un futuro profesional en este campo. Nosotros nos dedicamos a conocer y, aparte de conservar, Cástulo es un centro de Investigación”.

27 de abril de 2023

El georradar revela un foso calcolítico, viviendas y pozos en Marroquíes Bajos (Jaén)

La exploración con georradar muestra la presencia de elementos estructurales de diferentes épocas, como viviendas, pozos o áreas colmatadas, parte del foso prehistórico calcolítico, cuya existencia ya sugerían algunos sondeos anteriores, ahora confirmados, y, posiblemente, una infraestructura moderna.
El georradar revela vestigios acumulados a lo largo de los 6.000 años de historia de esta zona arqueológica del centro de Jaén.

El concejal de Cultura, Turismo y Patrimonio Histórico, José Manuel Higueras, ha informado de un nuevo avance en las labores que desarrolla el Ayuntamiento para el conocimiento y la puesta en valor de la Parcela C del Yacimiento de Marroquíes Bajos. Se trata, como ha explicado, de la prospección en el sitio arqueológico con georradar, por lo que, por primera vez se emplea esta técnica en este enclave. “Este estudio, inédito en Marroquíes Bajos y que, de hecho, se ha utilizado en pocas ocasiones en la provincia, tan solo en lugares de gran interés como Puente Tablas y Cástulo, nos permite contar con una radiografía precisa de lo que hay en el subsuelo del parque arqueológico”, ha apuntado Higueras. 

La exploración ya arroja interesantes resultados preliminares, como la presencia de elementos estructurales de diferentes épocas, como viviendas, pozos o áreas colmatadas, parte del foso prehistórico calcolítico, cuya existencia ya sugerían algunos sondeos anteriores, ahora confirmados, y, posiblemente, una infraestructura moderna. Se alteran, por lo tanto, restos arqueológicos de mayor o menor profundidad, lo que es una nueva prueba de la gran superposición de distintos vestigios, acumulados a lo largo de los 6.000 años de historia de esta zona arqueológica y, en concreto, entre estos restos, “una gran estructura central, de gran interés”.

“Con estas certezas, ya podemos plantear con mayor precisión los proyectos que ejecutaremos en Marroquíes Bajos en los próximos meses y años”, ha dejado claro el edil que ha recordado la inminencia del nuevo campo de voluntariado de Marroquíes Bajos, previsto para el verano, que, como se ha mostrado convencido, “seguro que nos dejará muchas sorpresas, gracias, en gran medida, a contar con radiografía del terreno”. Higueras ha recordado que este hito en la investigación sobre Marroquíes Bajos no hubiera sido posible sin la colaboración que presta Construcciones Calderón a este objetivo municipal. 

Gracias a estas sinergias, se ha desplazado hasta el yacimiento uno de los arqueólogos referentes en España, Jesús García Sánchez, del Instituto de Arqueología, Mérida (IAM), centro puntero en esta materia, que ha contado con el apoyo en los trabajos de Darío Garrido, estudiante de doctorado de la Universidad de Jaén. “Hemos realizado una prospección con georradar, una técnica arqueológica no invasiva para la detección de estructuras soterradas a diferentes profundidades. Este método se basa en un emisor y sensor radar que emiten un pulso”, ha precisado el arqueólogo del IAM, que, en este sentido, ha concretado: “Este pulso radar interactúa con los diferentes materiales que encuentra a su paso y nos permite conocer las características y geometría de los elementos que se encuentran soterradas. Una vez que tenemos una serie de datos podemos efectuar cortes a diferentes profundidades que nos permitan comprender los yacimientos de forma tridimensional”.

Una vez obtenidos estos resultados preliminares, Higueras ha anunciado que se trabaja ya en un planteamiento arqueológico preciso que abre la puerta a “un proyecto a corto y medio plazo para musealizar y poner en valor todo lo que hay en el subsuelo”. 

Higueras ha recordado que, en tan solo 3 años de excavación en esta parcela, de apenas 8.000 metros cuadrados han visto la luz cientos de hallazgos que han permitido datar en este terreno las más importantes etapas cronológicas, lo que demuestra que, desde el Calcolítico a los periodos íbero, romano, visigodo e islámico ha habido presencia de pobladores en lo que hoy es el casco urbano de una capital. No en vano, hay ejemplos de importantes vestigios como los primeros hallazgos de enterramientos íberos que se conocen en la ciudad o el descubrimiento de un pozo romano, del siglo I. 

En esta línea, Jesús Calderón, socio director de Construcciones Calderón, ha explicado que la firma ha financiado la prospección geofísica realizada en el yacimiento arqueológico de Marroquíes Bajos, una acción que está dentro del acuerdo de la empresa con el Ayuntamiento de Jaén para la organización de acciones de recuperación y difusión del patrimonio histórico de la ciudad. Al respecto, Jesús Calderón, ha mostrado su satisfacción por esta iniciativa, “que ayudará a dirigir los trabajos que se llevarán a cabo en una nueva edición del campus arqueológico de Marroquíes Bajos, que se desarrollará este verano”.

Jesús Calderón también ha agradecido la colaboración de Jesús García, un gran especialista del CSIC en este ámbito, ya que esta prospección con el georradar “va a permitir localizar las estructuras existentes en el subsuelo, lo que ayudará a planificar y obtener mejores resultados en las siguientes campañas arqueológicas”. Cabe recordar que Construcciones Calderón es un referente en la preservación y recuperación del patrimonio histórico, un área en la que ha desarrollado proyectos en toda España. 

La firma ha llevado a cabo intervenciones en monumentos emblemáticos como la Alhambra, la Abadía del Sacromonte o la Catedral de Granada. Además, ha realizado la reparación integral de las cubiertas de la Catedral de Jaén y acaba de ser adjudicataria de la restauración de las murallas de Jaén. En estos momentos, la empresa interviene en la recuperación de las vidrieras de la Catedral de Jaén, el Palacio de Carlos V de la Alhambra o de la Torre del Molino de Torre Cardela (Granada).
(Fuente: Hora Jaén)

5 de abril de 2023

Hallazgos arqueológicos permiten ubicar los campamentos de los ejércitos de la Batalla de las Navas de Tolosa

Los hallazgos arqueológicos obtenidos por investigadores de la Universidad de Jaén (UJA) permiten ubicar los campamentos de los ejércitos de la Batalla de Navas de Tolosa, así como la organización funcional que se estableció en su interior.
Excavación en el sector norte de la fortificación de Castro Ferral.

La Universidad de Jaén lidera el estudio arqueológico de la batalla de las Navas de Tolosa, en el marco del proyecto de investigación ‘Patrimonio Histórico, Naturaleza y Turismo en el Parque Natural de Despeñaperros: análisis arqueológico del campo de batalla de las Navas de Tolosa: escenarios, rutas, materiales y paisaje natural’, financiado por la Junta de Andalucía y la Unión Europea, a través del Campus de Excelencia Internacional (CEI) en Patrimonio Cultural y Natural, dirigido también por la Universidad de Jaén. Aparte de investigadores del área de Historia Medieval y del Instituto en Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén, el equipo integra especialistas de otras instituciones como Patrimonio Nacional, la Universidad Complutense de Madrid y el Centros Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

La profesora de Historia Medieval de la Universidad de Jaén, Irene Montilla Torres, explica que el desarrollo de esta investigación arqueológica parte del diseño de un sistema de prospección arqueológica superficial, fundamentada en la georreferenciación precisa de cada uno de los elementos documentados, siguiendo los casos paradigmáticos de Baecula o Iliturgi, también en Jaén. Hasta el momento, este trabajo ha permitido el registro de casi 3.000 piezas muy relevantes, las cuales se han agrupado en diferentes categorías como: puntas de flecha, clavos de herradura, arreos de caballería, elementos de indumentaria y monedas. “La ubicación precisa de estos elementos en el espacio permite ir más allá del propio objeto, a través del análisis de las interrelaciones que se producen entre los mismos, lo que posibilita el establecimiento de, por ejemplo, los lugares en los que se ubicaron los campamentos de los ejércitos y la organización funcional que se estableció en su interior: zonas para el herraje de las caballerías, espacios destinados a las tiendas de campaña, etcétera”, subraya.

Además del análisis de los restos superficiales y subsuperficiales, también se han realizado excavaciones arqueológicas que se han centrado en la fortificación de Castro Ferral, una pieza clave en la articulación de la batalla. “Estos trabajos están demostrando que no se trataba solo de una torre de control y vigilancia del paso entre la Meseta y Andalucía, como se había considerado hasta el momento, sino de un verdadero castillo de unas dimensiones considerables. Además, se han descubierto varias líneas de muralla superpuestas, que muestran una historia mucho más compleja de lo previsto con anterioridad”, añade.

Estos primeros datos se expusieron el pasado 28 de marzo, en una conferencia invitada en el Museo Arqueológico Nacional (http://www.man.es/man/actividades/cursos-y-conferencias/20221004-2023-a…).

Historia
La Batalla de las Navas de Tolosa se produjo el 16 de julio de 1212, en el actual municipio de Santa Elena, en una zona que se encuentra dentro del Parque Natural Despeñaperros. La contienda se planteó como un enfrentamiento entre la Cristiandad y el Islam por los dos bandos combatientes. Por una parte, el cristiano, comandado por el rey castellano Alfonso VIII, consiguió la bula de cruzada por parte del papa, lo que incitó a aliarse a los reyes de Aragón y Navarra, a un importante número de caballeros procedentes de otros reinos de Europa (Italia, Francia, Inglaterra, etcétera), a las órdenes militares de Calatrava y Santiago (entre otras), así como a las milicias urbanas de todo el territorio peninsular cristiano. A este contingente se enfrentó el dirigido por el califa almohade, Muhammad al-Nasir (llamado Miramamolín en las fuentes escritas) que agrupaba al propio ejército norteafricano, junto a tropas andalusíes, tribus árabes, jinetes turcos (kurdos) y mercenarios cristianos. En ambos casos, se unieron un importante número de voluntarios, llamados a la guerra santa. La confluencia de gentes de muy diversa procedencia en un mismo lugar, representa una oportunidad única de abordar el estudio de estas sociedades.

Plano con la densidad de material arqueológico en Castro Ferral y cortafuegos.

10 de marzo de 2023

La UJA pondrá en valor los mosaicos romanos del Valle del Alto Guadalquivir

Entre los mosaicos destacan especialmente los de la villa de Bruñel (Quesada), de Cástulo y Casablanca (Linares), de la Villa de Fuente de la Peñuela (Santisteban del Puerto), de Marroquíes Altos (Jaén) o de la Villa del Altillo (Rus). El proyecto del Instituto de Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén (UJA) tiene una duración de tres años y cuenta con una financiación de 109.040 euros por parte de la Junta de Andalucía
Análisis fotográfico del mosaico de Casablanca (Museo Arqueológico de Linares-Monográfico de Cástulo).

El Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén (UJA) ha iniciado un proyecto para ampliar el nivel de conocimiento sobre el importante conjunto de mosaicos romanos del Alto Guadalquivir datados entre los siglos II y V d.C. y que actualmente se hayan en los museos de Jaén y Linares, además de en diversos lugares arqueológicos de la provincia jiennense.

Entre estos, destacan los mosaicos de la villa de Bruñel (Quesada), de Cástulo y Casablanca (Linares), de la Villa de Fuente de la Peñuela (Santisteban del Puerto), de Marroquíes Altos (Jaén) o de la Villa del Altillo (Rus), según ha informado este jueves la institución académica.

Denominado 'Análisis geoquímicos para la investigación y puesta en valor de los mosaicos romanos del Valle del Alto Guadalquivir (GeoChem-Mos)', el proyecto tiene como objetivos la identificación de materias primas (piedra, vidrio, cerámica), agentes cromóforos y opacificantes empleados en la fabricación de los mosaicos y la evolución de su uso en el espacio y en el tiempo.

A ello habría que sumar otros aspectos de relevancia, como la mejora del conocimiento sobre los procesos de trabajo implicados y la definición con más detalle de un taller de ejecución de mosaicos en el valle del Alto Guadalquivir.

Finalmente, el proyecto evaluará las alteraciones físicas y químicas sufridas por los mosaicos para que puedan realizarse propuestas oportunas de conservación y/o restauración.

"En definitiva, se trata de aumentar el conocimiento de estos conjuntos patrimoniales para que, a través de una ambiciosa actividad de difusión, consolidarlos como referente científico para la comunidad investigadora y como atractivo turístico, cultural e identitario para la ciudadanía", ha explicado Alberto Sánchez, investigador responsable.

El proyecto, que tiene un carácter arqueométrico, se desarrollará en dos fases. La primera será la generación de fotografías de alta resolución en cada mosaico para dirigir el desarrollo de los análisis físico-químicos y para potenciar la difusión de los resultados.

La segunda fase estará centrada en análisis mineralógicos y elementales, tanto in situ como sobre teselas sueltas, aplicando análisis ópticos en láminas delgadas, micro-espectroscopía Raman y fluorescencia de rayos X.

Además, esta iniciativa tiene un marcado perfil internacional ya que, además de contar con investigadores del Instituto de Arqueología Ibérica y del Departamento de Química Física y Analítica de la UJA, cuenta con la colaboración de los departamentos de Arqueología y de Química de la Universidad de Gante (Bélgica).

Tiene una duración de tres años y cuenta con una financiación de 109.040 euros por parte de la Junta de Andalucía en el marco del Plan Andaluz de Investigación en la modalidad de Proyectos de investigación orientados a los retos de la sociedad.

3 de marzo de 2023

La Universidad de Jaén re-estrena su Laboratorio de Excavación Arqueológica

Con este arqueódromo, pionero a nivel nacional en el ámbito universitario, la Universidad de Jaén dispone de un espacio docente fundamental para la formación práctica del alumnado del Grado en Arqueología
Visita al remodelado arqueódromo de la UJA.

El Rector de la Universidad de Jaén, Juan Gómez Ortega, junto a miembros del Equipo de Dirección de la UJA e investigadores del Instituto de Arqueología Ibérica, ha visitado el Laboratorio Docente de Excavación Arqueológica, una infraestructura recientemente remodelada íntegramente, ubicada en el Campus Las Lagunillas para la formación del estudiantado del Grado en Arqueología.

Dicha remodelación, solicitada por la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la UJA, ha permitido a la Universidad de Jaén disponer de un espacio docente de calidad, pionero a nivel nacional en el ámbito universitario, fundamental para la formación práctica en excavación arqueológica del alumnado de dicha titulación.

“Se trata de una infraestructura original y novedosa, que supone un ejemplo a seguir por otras universidades. Además, este arqueódromo tiene un enorme potencial para su uso por varias asignaturas y para programas de transferencia social de resultados o de divulgación de la UJA, como por ejemplo actividades con alumnado de centros educativos o enmarcadas en la Semana de la Ciencia, entre otras”, ha apuntado el Rector durante su visita.

En concreto, las obras de remodelación del conjunto han consistido en la creación de una base pavimentada del mismo, lo cual garantiza su conservación, limpieza y reutilización continuados. De esta manera, el espacio se ha dividido en tres sectores que imitan estructuras de varias etapas culturales, desde tumbas colectivas de la Edad del Cobre a enterramientos individuales, bajo el pavimento de una casa de época argárica. Otro gran espacio reproduce distintos ámbitos domésticos de época ibérica, con casas que han tomado como base las del sitio arqueológico de Puente Tablas. Finalmente, se reproducen estructuras de época romana, con una tumba de inhumación o de época medieval.

El conjunto se ha mejorado, además, con la instalación de una amplia cubierta que facilita el trabajo en los meses de lluvia. Finalmente, con el programa de material docente del Departamento de Patrimonio Histórico se han aportado otros medios, como reproducciones de cerámica de cada época, reproducciones de esqueletos humanos para configurar los enterramientos, etc

22 de febrero de 2023

La arqueología íbera de Jaén toma forma en 3-D

El Instituto de Arqueología Ibérica de la UJA participa en el proyecto europeo 5DCulture en el que desarrollará una línea inclusiva centrada en la recuperación y uso de materiales 3D. Cuenta con una financiación total de 1.111.517,83 euros y se enmarca en el Programa Digital Europe del que forman parte del mismo un total de 12 socios entre empresas, museos, fundaciones y centros de investigación europeos
Modelos 3D de exvotos de Torrebenzalá (Torredonjimeno, Jaén).

El Instituto de Investigación en Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén participa en el proyecto europeo Deploying and Demonstrating a 3D cultural heritage space (5DCulture), que tiene como objetivo la identificación y recuperación de un conjunto de modelos 3D pertenecientes al ámbito de la moda, la arqueología y la arquitectura y con ellos poner en práctica tres escenarios de reutilización.

En estos escenarios se plantea, mediante contenidos en 3D, cómo mejorar la experiencia de los visitantes en museos, áreas arqueológicas o ciudades ante un vestido histórico, una escultura, un sitio arqueológico o un paisaje urbano. Un segundo aspecto de gran alcance será generar nuevas estrategias de utilización de los modelos 3D en el contexto educativo, diseñando diversas actividades para niveles educativos diferentes. “En definitiva, la reutilización de contenido 3D inicia una nueva cuarta dimensión que puede diferir del dominio en el que se originó dicho contenido 3D (quinta dimensión)”, indica el investigador principal del proyecto en la UJA Alberto Sánchez Vizcaíno.

En concreto, el Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica participa en el escenario arqueológico, con una línea de trabajo inclusiva centrada en la recuperación y uso de materiales 3D pertenecientes a la cultura ibera. En concreto, se han seleccionado 60 modelos 3D procedentes de sitios arqueológicos tan relevantes como Cerrillo Blanco (Porcuna), El Pajarillo (Huelma), Puente Tablas (Jaén) o Torrebenzalá (Torredonjimeno), a partir de los cuales trabajar en dos direcciones: en primer lugar, actualización de esos modelos 3D en la Biblioteca Digital Europea (Europeana) dotándoles de mejor información, más histórica, más inclusiva, adaptándola incluso a personas con diversidad funcional; en segundo lugar, diseñar y ejecutar actividades educativas, empleando e imprimiendo esos modelos 3D, dirigidas a grupos de edad diferentes (primaria, secundaria y universidad) y a colectivos con necesidades especiales (discapacidad visual y autismo).

El proyecto 5DCulture, que cuenta con una financiación total de 1.111.517,83 euros, se enmarca en el Programa Digital Europe, está liderado por IN2 Digital Innovations GMBH (Alemania) y forman parte del mismo un total de 12 socios entre empresas, museos, fundaciones y centros de investigación europeos de España, Italia, Irlanda, Eslovenia, Holanda y Austria. En concreto, se trata de: Fundación Europeana (Paises Bajos); European Fashion Heritage Association (Italia); Organización Time Machine (Austria); Asociación Arqueología y Arquitectura en Europa (Irlanda); Inception SRL (Italia); Fundación Bruno Kessler (Italia); Museo the Utrecht (Paises Bajos); Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén (España); Programa Discovery, Centro arqueológico y de innovación (Irlanda); Instituto de la imagen y el sonido de los Paises Bajos (Paises Bajos) y ARCTUR Ingeniería Informática (Eslovenia).

10 de febrero de 2023

Los arqueólogos consideran la existencia de una segunda fortaleza en La Peña de Martos

Los arqueólogos de la Universidad de Jaén informaron de los primeros resultados de las investigaciones efectuadas en la Fortaleza Alta, que les han permitido documentar estructuras de los siglos XV y XVI -último periodo de ocupación de la fortaleza-, así como el foso defensivo del alcazarejo. Consideran la posibilidad que dentro de la propia peña haya otra fortaleza más que sirva de base a la Torre del Homenaje de la Peña de Martos.
Equipo de arqueólogos de la UJA que han participado en los sondeos de la Fortaleza Alta de Martos.

El alcalde de Martos, Emilio Torres y la concejal de cultura, María Eugenia Valdivielso, han avanzado junto al arqueólogo y catedrático de Historia Medieval de la Universidad de Jaén (UJA), Juan Carlos Castillo, los primeros resultados de las investigaciones que se han realizado en la Fortaleza de la Peña.

A través de la Universidad de Jaén y con un equipo multidisciplinar compuesto por Mercedes Navarro Pérez, Carlos Cid Gaitán, Raquel Cámara López, José Luis Serrano Peña, Luis Nieto Albert, Juan Antonio Torres Cordero, Fernando Ortega Camacho y Miguel Ruiz Calvente, se ha trabajado en el terreno durante meses hasta llegar a las primeras conclusiones, de una primera fase de trabajo, apoyadas en una minuciosa investigación, en la que ha sido clave el uso de georradar y los sondeos realizados y que han arrojado resultados sorprendentes.

Según manifestó Juan Carlos Castillo, de las primeras investigaciones realizadas se obtiene una información muy interesante sobre los restos del castillo, pues se constata la existencia “de un complejo de estructuras, que se corresponden a la última fase de ocupación de la fortaleza, de finales del siglo XV primeros del siglo XVI y la existencia de una serie de edificios, ya documentados en los libros de visitas, que se ha empezado a documentar a raíz de los sondeos”.

Se constata también “la existencia de un foso defensivo que protegía el alcazarejo de la fortaleza, que se ha podido documentar”. Castillo adelantó “posiblemente dentro de la propia peña hay otra fortaleza más que sirve de base a la torre del homenaje de la peña de Martos”, pues los trabajos realizados hacen indicar la “superposición de estructuras muy interesantes” y “en trabajos posteriores podrá documentarse como era toda la organización interna de la fortaleza de La Peña de Martos”.

Emilio Torres, ha sostenido la firme convicción que tiene el equipo de gobierno “de trabajar por la recuperación del patrimonio de Martos, y la Fortaleza de la Peña” y calificó de “hito histórico” estos primeros trabajos. “Siempre se ha hablado de la necesidad de recuperar el castillo de la Peña, pero ha sido en esta legislatura, con este equipo de gobierno cuando se ha tomado la decisión y se ha empezado a trabajar”. Igualmente declaró “lo bueno está por venir y nuestro esfuerzo se centrará en seguir trabajando en el proyecto que estamos preparando junto a la UJA para concurrir a convocatorias futuras y conseguir fondos, para hacer un estudio integral y hasta donde la ley nos permita recuperar estos restos arqueológicos”.
(Fuente: Vivir Martos)

3 de febrero de 2023

Jaén es punto de encuentro para arqueólogos especializados en escenarios de batalla

Expertos de primer nivel participan en la II Bienal de Arqueología que gira en torno a la 'Arqueología del conflicto' y se celebra hasta el 4 de febrero en el Museo Íbero de Jaén y en la localidad de Mengíbar
La Bienal de Arqueología se desarrolla en el Museo Ibero de Jaén.

La ‘Arqueología del conflicto’ centra la II Bienal de Arqueología, que se celebra del 2 al 4 de febrero, organizada por el Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén, la Cátedra Arqueólogo Manuel de Góngora – Empresa Familiar Calderón de la UJA y la Universidad Autónoma de Madrid. Durante los tres días de su celebración, los dos primeros en el Museo Íbero de Jaén y el tercer día en la localidad de Mengíbar, ponentes de nivel internacional procedentes de países como Argentina, México, Portugal o Reino Unido van a abordar la arqueología desde el punto de vista del conflicto.

El rector de la Universidad de Jaén, Juan Gómez Ortega, se ha referido a la temática escogida en esta segunda edición, retrasada por la pandemia, asegurando que “los conflictos son parte inherente al ser humano y fuente de transformaciones profundas a lo largo de toda la historia, desde el punto de vista político, como social o cultural. Por lo tanto, estudiar el pasado de estos conflictos es muy interesante, en este caso más si cabe porque encastra con una línea de investigación que desarrolla el Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica de la UJA desde el año 2000, centrada en el análisis arqueológico de la Segunda Guerra Púnica en el Alto Guadalquivir”, indicó.

Juan Gómez, que agradeció a todas las instituciones y entidades participantes su colaboración, destacó el nivel de excelencia de los ponentes que participarán durante los tres días de celebración de esta II Bienal de Arqueología, “cuyas conclusiones, estoy convencido, van a contribuir al avance en esta línea de investigación”. En este sentido, el Rector de la UJA recordó que, en 2019, en el ámbito de la arqueología, se decidió iniciar una estrategia de organización de grandes eventos, con el objetivo de visibilizar aún más la actividad arqueológica, una de las referentes en investigación de la UJA. “Entre las líneas de investigación destacadas con las que cuenta la Universidad de Jaén, que son bastantes, una es la arqueología por su nivel de calidad y por su larga trayectoria investigadora”, destacó.

El acto inaugural contó, además, con las intervenciones de: Isaac Sastre de Diego, director general de Bellas Artes del Ministerio de Cultura y Deporte, que en su intervención resaltó como características de los grupos de investigación de la Universidad de Jaén la transferencia de conocimiento que realizan, así como “la capacidad que tienen de entender que los avances del conocimiento y el desarrollo de nuevas metodologías debe tener un fin último, que es generar una sociedad de conocimiento que sea útil, en este caso sobre todo para el territorio en el que investigan; Jesús Estrella, delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía en Jaén; José Manuel Higueras, concejal de Cultura del Ayuntamiento de Jaén; Francisca Medina, vicepresidenta primera de la Diputación Provincial; José Santiago Palacios, vicerrector de Estudios de Grado de la Universidad Autónoma de Madrid; Juan Pedro Bellón, co-organizador científico de la bienal y subdirector del Instituto de Investigación en Arqueología Ibérica de la UJA; Jesús Calderón, socio delegado de Construcciones Calderón, que puso de relieve el alto nivel de los ponentes, recalcando la implicación de esta empresa en la organización de esta Bienal como una muestra más de la apuesta que realizan con el patrimonio Histórico, “que se refleje en las intervenciones en la Catedral de Jaén, la Abadía del Sacromonte o el castillo de Castell de Ferro, pero también en la puesta en marcha del arqueódromo del yacimiento de Puente Tablas”, señala.

Temática y programa
La arqueología del conflicto o arqueología de campos de batalla son ámbitos de la investigación que se centran en el análisis histórico y arqueológico de la historia militar, los ejércitos, la logística, las armas y sus transformaciones técnicas, tácticas y estrategias, pero también en la interacción de los conflictos con las transformaciones sociales derivadas de los mismos: los procesos de conquista. En este sentido, a través de las distintas charlas y ponencias, la II Bienal de Arqueología aborda esta temática desde perspectivas amplias, interdisciplinares, diacrónicas, pero también transversales, buscando una presentación de distintas realidades epistemológicas, metodológicas y, por supuesto, arqueológicas, vinculadas a estos ámbitos de la investigación. En concreto, el enfoque prioritario es la articulación del análisis de los eventos (batallas, asedios, asaltos, escaramuzas) respecto de dinámicas temporales más amplias y abiertas que se sitúan ante la amplitud de perspectivas que pueden correlacionarse con esta temática.

Sobre el programa de la II Bienal, está fundamentado en especialistas a nivel internacional, que van a incidir en una temática transversal, que además de la investigación también abordará otros aspectos, como los metodológicos, la transferencia social, la protección y gestión de este tipo de patrimonio. De este modo, la II Bienal cuenta con ponencias sobre la proyección social en la literatura de esta temática, como la del investigador británico Adrian Goldsworthy, uno de los máximos expertos sobre el ejército romano o autor de biografías tan mediáticas como la de Julio César; la presencia del Director General de Patrimonio Cultural y Bellas Artes del Ministerio de Cultura, Isaac Sastre; la perspectiva de la antropología forense con el profesor Francisco Etxeberría o la presentación de novedades de investigación para la provincia de Jaén como la puesta en marcha del Proyecto Navas de Tolosa. Además, se van a realizar visitas al Centro de Interpretación de Iliturgi en Mengíbar o actividades de investigación sobre recreación histórica en esta misma localidad, gracias a la colaboración de su Ayuntamiento.

La II Bienal de Arqueología ‘Arqueología del conflicto’ cuenta con la colaboración de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, la Diputación Provincial de Jaén, el Ayuntamiento de Mengíbar, el Grupo de Investigación del Patrimonio Arqueológico de Jaén de la UJA y el Grupo de Investigación ‘Polemos’ de la UAM.

19 de enero de 2023

Arqueólogos de Jaén descubren diez momias de cocodrilo en Egipto

Los restos de cinco cráneos y cinco esqueletos parciales de cocodrilos, que midieron entre 1,8 y 3,5 metros, se hallaron por arqueólogos de la Universidad de Jaén en una pequeña tumba de la necrópolis de Qubbet El Hawa.
Una investigadora con el cráneo de uno de los cocodrilos hallados. ATRICIA MORA/QUBBET EL HAWA

Situada frente a la ciudad egipcia de Asuán, la necrópolis de Qubbet el-Hawa oculta unas cien tumbas talladas en la roca de la colina. Una de ellas con diez momias de cocodrilo, una "sorpresa arqueológica" porque en esta zona de la orilla occidental del Nilo sus habitantes no veneraban a Sobek, el "dios cocodrilo". Los restos de cinco cráneos y cinco esqueletos parciales de cocodrilos, que midieron entre 1,8 y 3,5 metros, se hallaron en 2019 en una pequeña tumba de la necrópolis. La revista Plos One publica hoy su descripción, en un artículo que firman investigadores del Real Instituto Belga de Ciencias Naturales y de la Universidad de Jaén.

Qubbet el-Hawa se encuentra a unos mil kilómetros al sur de El Cairo y es una necrópolis donde se enterraron a los gobernadores de la frontera sur de Egipto, entre el año 2200 y 1800 antes de la era común. La necrópolis ha sido excavada por distintos equipos de arqueólogos desde hace 150 años. Desde 2008, el proyecto de la Universidad de Jaén, con el profesor de Egiptología Alejandro Jiménez-Serrano al frente, ha descubierto y excavado 25 sepulturas, desde grandes complejos funerarios hasta pequeñas tumbas, como la hallada esta vez con restos exclusivamente de diez cocodrilos.

"Es la primera vez en toda la necrópolis que se han encontrado estos animales momificados", asegura a EFE Jiménez-Serrano, quien apunta que el descubrimiento "es toda una sorpresa", pues en Asuán, según lo sabido hasta ahora, no se rendía culto al dios Sobek, dios del agua y la fertilidad, a menudo representado con una cabeza de cocodrilo. En las antiguas tumbas egipcias es habitual encontrar animales, bien como ofrendas a los difuntos -por ejemplo, aves o alguna parte de un bóvido- o bien como ofrendas a las divinidades. En el primer milenio antes de la era común comenzó la práctica de entregar animales momificados a ciertos dioses para acercarse a ellos y ganarse su favor.

Esto es lo que los investigadores creen que hay detrás de este nuevo hallazgo. Las personas que hicieron esta ofrenda buscaban el favor de la divinidad y los cocodrilos son "los intermediarios" entre el ser humano y el dios, explica el director del proyecto. Los restos se hallaron en 2019 y se examinaron en un laboratorio de campo en 2022. El estilo de conservación de las momias es diferente del encontrado en otros yacimientos, sobre todo porque carecen de indicios de resina o de evisceración -extracción de vísceras abdominales- del cadáver como parte del proceso de momificación.

El estilo de conservación sugiere una antigüedad anterior a la época ptolemaica, lo que concuerda con la fase final del uso funerario de Qubbet el-Hawa durante el siglo V antes de la era común. Ninguno de los especímenes se hallaba envuelto en vendas, material que fue devorado por las termitas, aunque quedaban algunos restos que indican que alguna vez lo estuvieron, o cubiertos por esterillas vegetales.

Sobre una capa de arena
Los animales se encontraron en la parte superior de una tumba, sobre una capa de arena que cubría cuatro enterramientos -dos hombres y dos mujeres- depositados 1.700 años antes. Los habitantes de Asuán eligieron Qubbet el-Hawa para enterrar a los cocodrilos porque la necrópolis ya tenía una consideración sagrada y estaba más cerca de la esfera divina.

Basándose en su morfología, los investigadores identificaron dos especies; cocodrilos de África occidental y cocodrilos del Nilo. Una de las cosas más importantes del descubrimiento, resume Jiménez-Serrano, es que posiblemente "los mataron de hambre".

Uno de los cocodrilos, detalla, tiene una muesca en una de las patas traseras, lo que indica que estuvo atado. Los investigadores creen que una vez muertos los enterraron en arena para desecarlos y después fueron empaquetados en tela, vendas o estera y trasladados a la tumba de Qubbet el-Hawa. Se trata de una momificación más simple y accesible, pero lo importante es que sirvieran como transmisores de los deseos humanos frente a la divinidad, recalca el investigador de la Universidad de Jaén. "Se conocen más de 20 lugares de enterramiento con momias de cocodrilos en Egipto, pero encontrar 10 momias bien conservadas juntas en una tumba intacta es extraordinario", resume la investigadora belga Bea De Cupere en una nota de la universidad.

19 de diciembre de 2022

Rus solicitará que se declara como BIC el yacimiento romano de El Altillo

Las actuaciones de los arqueólogos en esta localidad de Jaén han podido documentar una villa romana, mosaicos de grandes dimensiones y zonas de producción, como un alfar y una almazara, así como varios enterramientos.
En este importante yacimiento se ha localizado uno de los mosaicos más grandes de Andalucía que se sitúa en torno a siglo IV después de Cristo.

Los arqueólogos de la UJA Marcos Soto Civantos y José Luis Serrano Peña le han entregado al alcalde de Rus Manuel Hueso un informe técnico sobre los hallazgos localizados en el yacimiento de El Altillo para que desde la administración local se solicite a la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía el reconocimiento como Bien de Interés Cultural (BIC), y de esta manera poder acogerse a las diferentes ayudas para proseguir con las excavaciones.

Manuel Hueso indicó que al disponer de este informe se pueden iniciar actuaciones directas sobre este importante yacimiento donde se ha localizado uno de los mosaicos más grandes de Andalucía de esta época que se sitúa en torno a siglo IV después de Cristo.

Las actuaciones de los arqueólogos han podido documentar una villa romana, mosaicos de grandes dimensiones y zonas de producción, como un alfar y una almazara, así como varios enterramientos.

Los restos documentados corresponden a una extensa villa romana, con ocupación entre los siglos I y V, si bien la mayor parte de las construcciones hasta ahora documentadas corresponden al siglo IV. De entre los restos descubiertos, destaca un edificio residencial de gran tamaño donde se localizan los restos de mosaicos, entre ellos un mosaico con decoración geométrica de unos 9 metros de anchura por unos 18 de longitud, que constituye uno de los mayores conocidos en el sur peninsular y la conservación de algunas áreas productivas (un alfar para la producción de tejas y una almazara para la producción de aceite). Además de otras construcciones diseminadas, se ha delimitado un espacio funerario, una necrópolis asociada a este momento bajoimperial.

16 de diciembre de 2022

Estudiantes de la UJA participarán en el II Programa de Voluntariado Universitario

Un total de 40 estudiantes del grado de Arqueología de la Universidad de Jaén (UJA) participarán en el II Programa de Voluntariado Universitario que organizan la propia Universidad y el Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica con la colaboración de la Asociación de Amigos de los Íberos
Arturo Ruiz, José Moyano y Juan Pedro Bellón.

Un total de 40 estudiantes de la Universidad de Jaén (UJA) participarán en el II Programa de Voluntariado Universitario que organiza el Vicerrectorado de Estrategia y Gestión del Cambio, a través de la Oficina de Cooperación para el Desarrollo y Voluntariado, y el Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica, en colaboración con la Asociación de Amigos de los Íberos y financiado por la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de la Junta de Andalucía, a través del Programa de actuaciones en materia de voluntariado para el actual curso académico.

El programa fue presentado esta mañana por el Vicerrector de Estrategia y Gestión de Cambio de la UJA, José Moyano Fuentes; el Subdirector del Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica de la UJA, Juan Pedro Bellón Ruiz, y el presidente de la Asociación Amigos de los Íberos, Arturo Ruiz Rodríguez.

José Moyano explicó que este Programa se dirige al alumnado matriculado en el Grado en Arqueología de la UJA, así como en el Máster Interuniversitario en Arqueología y el Máster Interuniversitario en Arqueología de los Paisajes Culturales de la Universidad de Jaén y de la Universidad Internacional de Andalucía. “Agradecer que 40 estudiantes de estas titulaciones puedan beneficiarse de participar en proyectos de investigación en activo del Instituto, en campañas de exploración que tienen en marcha, lo cual les va a permitir a los estudiantes una formación integral, complementaria, de mucha calidad, porque conocerán un proyecto de investigación. A la vez, reforzamos el compromiso social del estudiando de estas titulaciones, implicándose en acciones de voluntariado”, apuntó

El objetivo principal es establecer un marco idóneo para la formación transversal y complementaria de los estudiantes, permitiendo su integración en los proyectos de investigación en activo durante el año 2023, entre los que se encuentran el análisis del territorio y el asedio durante la Segunda Guerra Púnica al oppidum de Iliturgi, el análisis de la movilidad ritual ibera en el Alto Guadalquivir, las intervenciones arqueológicas en el Oppidum de Puente Tablas o el estudio de la batalla de las Navas de Tolosa, entre otros.

Esta segunda edición establece la convocatoria de 40 plazas con inscripción gratuita y divididos en dos grupos de mañana y tarde, así como una formación previa a las actividades a desarrollar, tanto salidas de campo, asociadas a microprospección, prospección, excavación arqueológica y arqueología de la arquitectura, como las acciones de laboratorio vinculadas a la catalogación y análisis del material arqueológico documentado en las salidas.

Juan Pedro Bellón destacó que la primera edición realizada el pasado año “tuvo resultados muy positivos, ya que es “algo que el alumnado que del Grado de Arqueología nos venía solicitando para completar sus prácticas”.

Por su parte, Arturo Ruiz, en su condición de presidente de la Asociación de Amigos de los Íberos señaló que la creación de dicha Asociación constituyó “un hito que ha definido la vinculación entre la Universidad y la sociedad, y que, en su momento, su fundadora, en 1998, Pilar Palazón, creyó en la necesidad de que la gente de esta provincia tuviera una mayor dedicación a temas que los identifique, que les haga tomar conciencia”.

En cuanto al Programa, Ruiz destacó el tema del voluntariado, “sobre todo, el tema de los estudiantes, porque la Asociación tiene el objetivo abrirse en los próximos años a la gente joven, y que vayan asumiendo poco a poco el recambio generación y sobre todo, porque es muy importante la práctica de la excavación arqueológica de la investigación del estudiante fuera de la Universidad, en lo que son los proyectos habituales que los investigadores de la UJA tenemos por ahí fuera”. En este sentido, explicó que, a veces, “nos encontramos con trabas que impiden que los estudiantes culminen su labor docente y formativa en las excavaciones que desarrolla la investigación del instituto. Y el descubrimiento de las vías del voluntariado, para hacer efectiva esta práctica y que sea también a través de una Asociación, que sirve de colchón, me parece importantísimo”.

Programa de Voluntariado
Todas las actividades, que se irán ofertando a lo largo del año, están orientadas a mejorar la proyección personal y profesional del alumnado del Grado de Arqueología y del Máster en Arqueología de los Paisajes Culturales, a través de una experiencia singular que promueve la formación, la participación y el trabajo en equipo, al tiempo que contribuye a dotar de un mayor dinamismo a los conocimientos teóricos que adquieren durante la titulación, vinculándolos a una experiencia práctica que incluye toma de decisiones, documentación de contextos arqueológicos y difusión de los resultados.

Entre sus derechos se encuentran el estar debidamente acreditados, recibir una formación adecuada a las tareas que realizarán, ser informados de las actividades propuestas, recibir un certificado de participación o cesar libremente en su condición de voluntario. Entre sus deberes más importantes se encuentran el usar las acreditaciones e indumentarias identificativas facilitadas por la organización y desarrollar, en el lugar y horarios voluntariamente aceptados, las labores acordadas.

En paralelo se establecen un programa de actividades complementaria, como la visita guiada a los asentamientos arqueológicos enmarcados en los proyectos activos del Instituto de Arqueología Ibérica; la participación en la recogida de muestras de sedimento para análisis de biomarcadores, o micromorfología, o el fomento del diálogo y la participación activa del alumnado en las distintas fases de desarrollo de los proyectos de investigación en activo, entre otros.

La acción se enmarca dentro de los objetivos contemplados por el Plan Director de Cooperación al Desarrollo y Voluntariado de la Universidad de Jaén (2021-2023), como son el fomento del conocimiento e impulso de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la cooperación internacional para el desarrollo y los derechos humanos a través de la educación para el desarrollo y el voluntariado entre la comunidad universitaria y el ampliar y enriquecer la formación integral de la generación UJA a través de la educación para el desarrollo y el voluntariado.

Esta presentación se realizó en el marco de la programación de actividades ‘Diciembre en la UJA: Mes de la Solidaridad y los Derechos Humanos’, con motivo de las conmemoraciones del Día Internacional del Voluntariado (5 diciembre) y el Día de los Derechos Humanos (10 de diciembre).

24 de noviembre de 2022

Nuevo sistema ‘inteligente’ para la reconstrucción de restos arqueológicos

Un equipo de investigación coordinado desde la Universidad de Jaén ha desarrollado un programa denominado IberianGan que reconoce partes de cerámica íbera y sugiere cómo sería el objeto. Mediante inteligencia artificial, ha entrenado a la aplicación que diferencia automáticamente unas piezas de otras con gran precisión y exactitud además de ofrecer una imagen del elemento completo
El equipo de investigación está formado por investigadores vinculados al Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica de la UJA, al Instituto Patagónico de Ciencias Sociales y Humanas del Conicet (Argentina) y al Departamento de Ingeniería Eléctrica y de Computadoras de la Universidad Nacional del Sur (Argentina).

Un equipo de investigación coordinado desde la Universidad de Jaén (UJA) ha diseñado el sistema denominado IberianGan que recrea cómo sería un objeto completo a partir de trozos de cerámica hallados en el valle alto del Guadalquivir. El programa, que reconoce la pieza y sugiere cómo podría ser originalmente, permite que los arqueólogos puedan reconstruir de una manera más exacta los restos encontrados en sus excavaciones.

En investigaciones anteriores, los expertos desarrollaron un catálogo y clasificación exhaustiva de piezas de cerámica íbera. Ahora, han creado una herramienta que ordena cualquier nuevo objeto o trozo hallado de manera automática.

Para ello, usan unos criterios establecidos por los arqueólogos para determinar la forma: abiertos o cerrados, con cuello o sin él, esféricos u ovalados, según ha informado este jueves la Fundación Descubre.

Ahora dan un paso más al haber entrenado al sistema, al que han llamado IberianGan, para que ofrezca una imagen completa del objeto de cerámica al que pertenecía el trozo concreto.

En el artículo 'Reconstruction of Iberian ceramic potteries using generative adversarial networks', publicado en la revista 'Scientific reports', los expertos explican el modelo utilizado y confirman su validez. Han verificado la calidad de las muestras reconstruidas y la utilidad de la herramienta, que facilitará considerablemente los trabajos de ensamblaje de los restos.

En las excavaciones arqueológicas, la cerámica se encuentra normalmente fragmentada, lo que requiere, por un lado, la catalogación de cada elemento y, por otro, el estudio y reconstrucción manual del objeto entero.

"IberianGan resuelve el problema de los trozos mediante comparaciones entre piezas conocidas automáticamente. La mejor coincidencia dentro del conjunto de datos es la solución para esa cerámica", ha explicado el investigador de la Universidad de Jaén y autor del artículo, Manuel Lucena.

El sistema tiene ya catalogado en una extensa base de datos los distintos fragmentos posibles. Además, genera de manera virtual nuevos trozos con las mismas características que los reales. De este modo, la herramienta va construyendo posibilidades de ensamblaje para crear la cerámica completa.

Los expertos han puesto a disposición de la comunidad científica tanto los datos como el código fuente con la configuración y los diferentes enfoques analizados en el estudio en https://github.com/celiacintas/vasijas/tree/iberianGAN con la intención de que puedan replicarse y hacerse extensivos a otras investigaciones.

REDES CONTRARIAS
Así, mediante lo que se conoce como aprendizaje profundo, la herramienta va aprendiendo a diferenciar qué elemento es real y cuál no. El modelo utilizado se basa en redes adversarias generativas o redes antagónicas, GAN por sus siglas en inglés.

Se trata de dos redes neuronales que son contrarias. Juegan a enfrentarse entre sí, de manera que una tiene una carta con la opción 'verdadero' y la otra, la carta 'falso'. Una de ellas siempre gana lo que pierde la otra.

De esta manera, para generar posibilidades, el sistema se entrena creando y confrontando imágenes reales con otras que no lo son. La herramienta discrimina aquella que no es real, pero es capaz de producir algo que parece auténtico a partir de las cartas que ha recibido de su oponente.

APRENDIZAJE
Los investigadores entrenaron a la red mediante la simulación de cerámicas creadas a partir de otras ya ensambladas por los arqueólogos y replicaron la rotura que habrían sufrido en el caso de estar en un yacimiento. Así, ya contaban con los elementos necesarios para que la herramienta aprenda por sí misma cualquier combinación posible para mostrar el elemento real.

Además de confirmar su exactitud con los arqueólogos, los expertos han comparado los resultados obtenidos mediante este modelo de aprendizaje profundo con otros, confirmando que las redes antagónicas son las idóneas para el entrenamiento de las herramientas de reconstrucción de cerámicas íberas.

Por otro lado, proponen ampliar el sistema incluyendo la creación de imágenes tridimensionales a partir de estos mismos perfiles, incluso recrear la decoración que podrían tener las vasijas halladas. También plantean su aplicación con otro tipo de restos, como podrían ser huesos, proyectiles o incluso edificios.

Los trabajos se han financiado mediante el Programa Operativo Feder Andalucía 2014-2022, la Universidad de Jaén, el Centro de Estudios Avanzados en Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Ceatic) y el Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica.

El equipo de investigación está formado por investigadores vinculados al Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibérica de la UJA, al Instituto Patagónico de Ciencias Sociales y Humanas del Conicet (Argentina) y al Departamento de Ingeniería Eléctrica y de Computadoras de la Universidad Nacional del Sur (Argentina).

9 de noviembre de 2022

Investigadores de las Universidades de Jaén y Málaga descubren la tumba orientada al solsticio de invierno más antigua de Egipto

Está situada en la necrópolis de Qubbet el-Hawa (Asuán), perfectamente orientada de tal forma que los rayos del sol bañaran con su luz el lugar donde se iba a situar la estatua de un gobernador de la ciudad de Elefantina, que vivió a finales de la Dinastía XII, en torno al 1830 a. C.
Imagen interior de la tumba, catalogada con el número 33, en la necrópolis de Qubbet el-Hawa (Asuán, Egipto).

Investigadores de la Universidad de Jaén (UJA) y la Universidad de Málaga (UMA) han descubierto la tumba orientada al solsticio de invierno más antigua de Egipto. La tumba, situada en la necrópolis de Qubbet el-Hawa (Asuán) está perfectamente orientada al amanecer del solsticio de invierno de tal forma que los rayos del sol bañaran con su luz el lugar donde se iba a situar la estatua de un gobernador de la ciudad de Elefantina, que vivió a finales de la Dinastía XII, en torno al 1830 a. C.

La tumba, orientada al amanecer del solsticio de invierno y al ocaso del solsticio de verano, registraba perfectamente el ciclo completo del sol, relacionado con la idea de renacimiento.

Mientras el solsticio de invierno suponía el comienzo suponía el inicio de la victoria de la luz del sol frente a la oscuridad, el solsticio de verano generalmente coincidía con el inicio de la inundación anual del Nilo, de tal forma que ambos acontecimientos tenían un importante simbolismo con la resurrección del gobernador difunto.

En este trabajo, publicado recientemente en la prestigiosa revista científica Mediterranean Archaeology and Archaeometry, los investigadores explican que, para conseguir la perfección en la orientación, el arquitecto egipcio simplemente se sirvió de una vara de dos codos, poco más de un metro, una escuadra y unas cuerdas, con los que pudo calcular perfectamente la orientación de la capilla funeraria y la situación de la estatua del gobernador. Asimismo, se indica que el arquitecto egipcio no sólo consiguió la perfecta orientación, sino que también diseñó su volumen con una enorme precisión, tal y como se determinó en un anterior trabajo publicado por la UJA en 2020 y firmado, entre otros, por el profesor Antonio Mozas (también autor de este artículo), en el que se descubrió que el volumen de la tumba fue perfectamente calculado para evitar la coincidencia con una tumba anterior.

La tumba de este gobernador, catalogada con el número 33 y posiblemente construida por el gobernador Heqaib-ankh, fue excavada por la Universidad de Jaén entre 2008 y 2018, momento a partir del cual comenzó su estudio arquitectónico por diferentes especialistas, entre ellos, la profesora de arquitectura Lola Joyanes, de la Universidad de Málaga.

Los científicos andaluces han llegado a estas conclusiones gracias a la identificación del periodo en el que se construyó la tumba, lo que les permitió la utilización de un software específico (Dialux Evo) que reproduce la posición del sol con respecto al horizonte en épocas más antiguas.

“Este estudio demuestra que los egipcios eran capaces de calcular la posición del sol y la orientación de sus rayos para diseñar sus monumentos. Aunque la tumba 33 de Qubbet el-Hawa supone el ejemplo más antiguo encontrado hasta ahora, seguramente no será el único”, aseguran los investigadores.

Estas investigaciones han sido financiadas por la Junta de Andalucía en sus proyectos ‘A way to immortality: beyond the preparation for death during Middle Kingdom at Qubbet el-Hawa (Aswan, Egypt)’ de la Universidad de Jaén y ‘Arqueología, Arquitectura y Paisaje: evolución tipológica y estado de conservación de las tumbas en la necrópolis de Qubbet el Hawa (Asuán, Egipto). Criterios para la intervención y puesta en valor’, de la Universidad de Málaga.