Arqueólogos trabajando en el yacimiento de Valéncia la Vella, donde se produjo el expolio. |
Monedas de la época de la República de Roma, puntas de flecha de la Edad Media, proyectiles de mosquete de las guerras carlistas, iconos religiosos tanto del islam como del cristianismo y muchas piezas de la época visigoda son parte del botín recuperado por los agentes del Instituto Armado, que han contado con la colaboración de la Policía Local de Ribaroja.
ANÁLISIS DE LAS PIEZAS
Desde hace unas semanas todo este valioso material arqueológico permanece en el Museo de Prehistoria de València, donde bajo la supervisión de su directora Helena Bonet, los arqueólogos analizan pieza por pieza para su catalogación. El objetivo, además de cuantificar el valor del material recuperado por la Guardia Civil, es que en un futuro se pueda exponer en el citado museo para que todos los visitantes puedan disfrutar y conocer la historia de la provincia a través de sus restos.
Esto no sería posible si el arrestado, vecino de Riba-roja, hubiera logrado su propósito, que era poner en circulación las piezas en el mercado negro fuera de España. Aunque ya había vendido algunas de ellas a su círculo más cercano -se desconoce cuántas- el sospechoso se preparaba para sacar un gran beneficio económico de éstas, como así demuestra que estuviera buscando asesoramiento legal y posibles compradores en foros especializados en la materia.
LIBERTAD CON CARGOS
En el registro de su domicilio los agentes comprobaron que tenía un taller para limpiar concienzudamente los objetos expoliados, y que incluso los ponía a la venta en su propia casa. El Juzgado de Instrucción número cuatro de Llíria lo ha dejado en libertad con cargos, acusado de un delito contra el patrimonio histórico, de robo con fuerza, ya que forzó el acceso a las excavaciones, y de un delito de apropiación indebida, indicaron fuentes jurídicas.
El arrestado se colaba en las excavaciones aprovechando los momentos en los que no había nadie trabajando en ellas, tras forzar el vallado que colocó el Ayuntamiento en esta zona protegida, y con un detector de metales peinaba el terreno en busca de su botín. Aunque tiene concedida una autorización de la Generalitat para tener este aparato detector de metales, su suso está limitado para playas, por lo que también podría ser sancionado vía administrativa por ello.
Fuentes del Ayuntamiento de Riba-roja confirmaron que existen diligencias abiertas por estos hechos y que la detención llevada a cabo por el equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Riba-roja forma parte de la llamada «Operación Pandora» a escala europea, pero que por el momento no pueden concretar qué tipo de piezas han sido recuperadas.
(Fuente: Levante / Ignacio Cabanes)