Los restos del castillo bajo el puente están ocultos por la maleza. FOTO: XOÁN CARLOS GIL |
La cuestión también preocupa a la asociación de afectados por la ampliación de la autopista. Jesús Vázquez, vicepresidente de este colectivo, señala que «estamos viendo el estado en el que se encuentra el monumento. Está catalogado como castillo, pero el Estado parece que se lo pasa por el forro».
El inicio de las obras para la colocación de nuevos pilares para sustentar el puente, se temen, afectará de lleno al yacimiento. «Queremos saber qué pretenden facer. Sabemos por informacións orais que queren que o castelo sufra o menos posible e se supón que terán que trasladalo», señala el arqueólogo.
Esa es la cuestión: el paso de camiones y maquinaria por la finca, que es propiedad de Tranvías de Vigo, obligará a trasladar las piedras y volver a colocarlas en su sitio. Pero los vecinos recuerdan el precedente del año 1978. Entonces, la construcción de los pilares del puente sobre la ría afectó de lleno a la vieja fortaleza y las piedras alteradas no se volvieron a recolocar como estaban.
Constela no sabe si hay decisión sobre su traslado o no. Los vecinos no quieren que se mueva del lugar donde se encuentra. «Pensamos que el traslado no es factible», señala el presidente de la Asociación Cultural de Rande, que ha luchado por potenciar la historia de la ensenada de San Simón y consiguió abrir un museo sobre la batalla de Rande tras una década de lucha con las administraciones.