El Museo Arqueológico de Gandía abrirá en diciembre una muestra permanente con material extraído de las excavaciones que se están realizando en la fortaleza.
Excavaciones en el castillo de Bairén.
La concejala de Patrimonio de Gandia, Alícia Izquierdo, visitó las excavaciones que, desde principios de mes, el Museu Aqueològic de Gandia (MAGa) está llevando a cabo en el castillo de Bairén. Acompañada de los directores de la intervención, el arqueólogo municipal y director del MAGa, Joan Negre, y del arqueólogo, Pau Garcia, la concejala conoció de primera mano los resultados de estas intervenciones, cuyo objetivo es entender la historia de la fortificación gandiense, recuperar todos sus espacios enterrados y ponerlos año a año en valor para que toda la ciudadanía conozca uno de sus monumentos más relevantes y representativos.
Cabe recordar que tan sólo un 20% del yacimiento ha sido excavado hasta la fecha y que los hallazgos y la información que aporta cada año son siempre sorprendentes. "Poco a poco y con constancia, Bairén se convertirá en un referente, tanto en el mundo de la investigación histórica y arqueológica, como en su papel como eje vertebrador de un nuevo modelo de turismo. Bairén es nuestro pasado, nuestro origen, pero es también una puerta hacia un futuro sostenible, verde y cultural", dijo la concejala.
Sector sur
Los objetivos de la intervención de este año han sido la excavación del sector sur de la alcazaba para evitar el deterioro del espacio y las estructuras que ya habían aparecido en anteriores actuaciones. En concreto, se han podido identificar diversas estructuras de habitación (actualmente bajo estudio) al abrigo de los almacenes, ya recuperados y musealizados el año pasado.
Toda la información y los materiales recuperados en estas excavaciones formarán parte de la muestra "Bairén y el legado andalusí", una exposición de carácter permanente que a finales de año abrirá sus puertas en el MAGa. Se trata de una nueva sala del MAGa que quiere dar a conocer el pasado islámico de la Safor, un período histórico que, entre los siglos VIII y XVI marcó de forma profunda nuestro territorio y que ahora vuelve a ver la luz gracias a estas actuaciones arqueológicas y museísticas.