Uno de los enterramientos aparecidos en la necrópolis. FOTO: MEDERO CUBERO / CORDÓPOLIS |
Esta necrópolis continúa a la que se halló en la construcción de la Ronda de Poniente y confirma la enorme extensión que ocupaban los arrabales de época islámica, muchos de ellos totalmente desmontados en la época del ladrillo.
- Están apareciendo tumbas a distintas capas (hasta tres). Es decir, consta una utilización de la necrópolis durante muchos años en la que un enterramiento se superponía a otro.
ABANDONO EN EL S. XII
Los arqueólogos calculan que estos arrabales se extendían por una zona de unas 3.500 hectáreas en la zona de Poniente. Desde el siglo XII la zona se abandonó y los suelos han tenido un uso casi estrictamente agrícola hasta hace apenas dos décadas, cuando se inició la expansión urbanística de la ciudad.
Tras este hallazgo se está siguiendo el mismo protocolo que en los anteriores. Los arqueólogos estudian y documentan lo hallado, trasladan los cadáveres al silo que posee la Delegación de Cultura y se desmonta la mayor parte de lo encontrado. Según las fuentes, apenas queda ya sitio en el silo tras la cantidad de material trasladado antes de la crisis y tras todo lo hallado en las numerosas excavaciones en Poniente. Ahora, estos últimos cordobeses que llevaban sepultados 800 años acompañarán a muchos contemporáneos a las estanterías de este inmenso edificio propiedad de la Junta.
(Fuente: Cordópolis / Alfonso Alba)