Se confirman las hipótesis que apuntaban a que la terraza central del llamado cerro de la Mora de la localidad gaditana de Ubrique corresponden con el foro de la antigua ciudad romana. Los investigadores confirman la presencia de un altar monumental acompañado de restos de decoración arquitectónica, entre los que se encuentran basas, así como fustes de columnas, las cuales se han puesto en relación con otras evidencias de pedestales de estatuas y restos de columnas dispersos en la ciudad.
Un equipo arqueológico de la Universidad de Granada ha descubierto el foro romano de Ocuri en el municipio de Ubrique, en la provincia de Cádiz. Las excavaciones se han desarrollado en el marco de un convenio entre la UGR y el Ayuntamiento de la localidad gaditana. En ellas han participado investigadores, estudiantes y voluntarios.
El objetivo prioritario de la excavación es confirmar la hipótesis planteada por el erudito local Juan Vegazo a fines del XVIII, quien consideró que la terraza central del cerro conocido como “de la Mora” correspondía con el foro de la ciudad romana. A la llegada de la expedición granadina, solo era visible el posible muro de cierre de la plaza central con aproximadamente un metro de altura y unos 16 m de extensión.
Los trabajos arqueológicos desarrollados ahora han permitido confirmar dicha hipótesis y vislumbrar una serie de elementos arquitectónicos que perfilan edificaciones de gran porte y claramente públicas de época altoimperial. A falta de un estudio más pormenorizado de los elementos aparecidos, los investigadores confirman la presencia de un altar monumental acompañado de restos de decoración arquitectónica, entre los que se encuentran basas, así como fustes de columnas, las cuales se han puesto en relación con otras evidencias de pedestales de estatuas y restos de columnas dispersos en la ciudad. De igual modo, se ha procedido al reestudio de diversas edificaciones emergentes en el yacimiento que permiten definir un lugar simbólico en lo referido a las prácticas religiosas sincréticas romanas, especialmente relacionadas con el agua.
Además de estos datos, una de las grandes aportaciones de la excavación es la constatación de una continuada ocupación del sitio hasta fines del siglo IV, como se percibe por el numerario localizado, entre el que está la primera representación iconográfica cristiana del lugar: una moneda con un crismón. A ello se unen cerámicas procedentes del norte de África que permiten ampliar la ocupación del sitio, anteriormente situada hasta fines del III d.C. y que ayudan a comprender unas rutas comerciales íntimamente ligadas con el Campo de Gibraltar.
También se ha localizado la cimentación de una posible construcción defensiva de época medieval que tendría contacto visual de este lugar con las otras fortificaciones de las inmediaciones y que estarían abocadas al control de esta zona de la sierra gaditana.
Las excavaciones perfilan un espacio fundamental para el conocimiento de la llegada e implantación de Roma en el sur de la península ibérica y del proceso de hibridación con las poblaciones ya asentadas en el territorio.
(Fuente: Universidad de Granada)