Arqueólogos trabajando en el yacimiento romano de Los Mondragones. Foto: Miguel Rodríguez |
La Junta de Andalucía intenta atajar estos días la lluvia de críticas de los últimos meses a cuenta de los presuntos destrozos en este yacimiento único en la historia de la ciudad. La Academia de Bellas Artes de Granada emitió un duro comunicado hace pocas semanas pidiendo la declaración del yacimiento como Bien de Interés Cultural (BIC), asumido entre otros por el Fiscal Superior de Andalucía, Jesús García Calderón. Meses atrás, la edil de UPyD, Mayte Olalla, pedía explicaciones a Junta y Ayuntamiento por entender que se cometía un"atropello" contra el patrimonio.
La villa romana que se mostró por primera vez al público en abril de 2013 ocupaba casi 5.000 metros cuadrados e incluía los restos de la antigua casa de una familia acomodada, con mosaicos en buen estado, el molino de aceite anejo y una zona de enterramientos que finalmente ha podido ser identificada como un templo del siglo VI.
Lo que se anuncia como futuro museo in situ es sólo la zona del molino, apenas 1.000 metros cuadrados que se convertirán en museo en fecha por determinar, y que "no es necesario", según la Consejería de Cultura, la catalogación como BIC "dado que como yacimiento ya están protegidos".
CRISTIANOS DE LA ANTIGUA "ILLIBERIS"
La villa romana, a pesar de estar en una zona hoy más bien céntrica, en el distrito Beiro y junto a la Plaza de Toros -la parcela era el antiguo cuartel de Los Mondragones, cedido a la ciudad y que albergará un centro comercial cuando terminen las obras-, era en su momento parte de las afueras, la residencia de una familia pudiente. La ciudad romana se situaba en el actual Albaicín, construida sobre la antigua ciudad íbera y conservando su urbanismo. Por ello, los restos romanos en Granada son muy raros.
El arqueólogo encargado de la investigación, Ángel Rodríguez, ha explicado a los medios que el hallazgo más relevante, además del molino de aceite -"único en la Península Ibérica por lo bien conservado que está"- ha sido un "edificio de culto", que se resiste a identificar como 'basílica' o 'templo', del siglo VI, que incluye una zona de enterramientos. Por las fechas, los expertos han determinado que se trata de un templo cristiano.
La importancia de este hallazgo radica en que en el siglo IV la antigua Iliberis acogió el llamado Concilio de Elvira, que marcó la posterior evolución de la Iglesia en España. Ello hacía suponer una importante comunidad cristiana en la ciudad, pero hasta ahora no se habían encontrado restos de un templo de la época o cercano que mostrase el culto de aquella comunidad 'protocristiana'. El edificio hallado en la villa es lo más parecido.
FINANCIACIÓN DE LA PROMOTORA Y MUSEOS SIN REHABILITAR
Sin embargo, en estos momentos los restos del templo, retirados del lugar en el que fueron hallados para permitir la continuación de la obra del aparcamiento, se encuentran almacenados en unos contenedores y cubiertos con plástico frente a la zona de trabajo del molino de aceite. Los arqueólogos calculan que hay 4.000 metros cuadrados más de villa por descubrir, en los terrenos anejos propiedad de la Junta. Las catas comenzarán en este 2014, aunque el proceso para iniciar los trabajos, pese a desconocer lo que allí se encuentra o su importancia, será "mucho más complejo".
Los mosaicos, que según la delegada de Cultura en Granada, Ana Gámez, "no estaban bien conservados", han sido trasladados al Museo Arqueológico de Granada para ser procesados. Dicho museo lleva cerrado desde 2010 por las humedades que ponen en peligro la estabilidad del edificio, la histórica Casa Castril, y sin consignación presupuestaria para su reforma, ya planteada.
En lo que se refiere a los trabajos restantes, los yacimientos del molino de aceite estarán tres semanas más bajo la inspección de los arqueólogos. Cultura ha explicado que ya hay una empresa que elaborará el proyecto museográfico y otra diferente candidata a gestionar el futuro museo, ambos sin fecha. El coste de los trabajos hasta ahora ha sido de un millón de euros, asumidos por la promotora del centro comercial y el aparcamiento.
(Fuente: El Mundo / José A. Cano)