La necrópolis vaccea de Las Ruedas recibe uno de los accésit en los premios de Hispania Nostra. |
1.«Intervención en el territorio o el paisaje»
En la primera categoría, «Intervención en el territorio o el paisaje», el jurado ha decidido conceder el Premio a la propuesta Intervención de acondicionamiento, mejora y restauración paisajística del Parque de las Aguas de Cornellá de Llobregat (Barcelona).
El contexto en el que se engloba este proyecto es la mejora el espacio del Parque de las Aguas, también conocido históricamente como la Central Cornellá, la central de la empresa Aguas de Barcelona, Agbar. El lugar goza de un gran valor a todos los niveles, natural (agrícola, territorial y ecológico), arquitectónico (consta de edificios protegidos como el Museo de las Aguas, de origen modernista, o los pozos de extracción, catalogados), paisajístico, (el jardín como principal ligamen del patrimonio con la tierra y el agua) y obviamente patrimonial y museístico.
El interés de esta intervención radica no sólo en la intervención en el territorio, sino también a nivel cultural, ya que es una herramienta didáctica y pedagógica. Los aspectos más innovadores de la intervención en el territorio, permiten reconsiderar la sostenibilidad a partir del ciclo del agua. Es importante no sólo hacer el estudio y la obra, sino poder mostrarlo de manera pedagógica al visitante; por ese motivo se hace especial énfasis en enseñar los cambios en la gestión del agua, ahora reutilizada para el riego de árboles frutícolas que producen alimento posteriormente incluido en la carta del restaurante del recinto.
El Jurado ha destacado que la recuperación un paisaje degradado, del parque y sus valores así como de su patrimonio industrial y arquitectónico, con el fin de obtener un espacio agradable, ecológico y sostenible, que además es un ejemplo para otros lugares.
El jurado ha concedido dos accésit a las propuestas La necrópolis de Las Ruedas de Pintia, un espacio rehabilitado para la memoria, y a Bodegas subterráneas y Lagares Tradicionales de Moradillo de Roa. (Burgos).
Las Ruedas es el cementerio correspondiente a la ciudad vacceo-romana de Las Quintanas, tradicionalmente identificada con la ciudad de Pintia, ubicada en los términos municipales de Padilla de Duero/Peñafiel y Pesquera de Duero, en el oriente de la provincia vallisoletana. El yacimiento de Pintia, y su necrópolis en particular, se constituye en un unicum dentro del estudio de la etnia prerromana vaccea, pues es el primer y único cementerio conocido de la extensa región de este pueblo que habitó el área central de la cuenca del Duero entre los siglos V al I a.C.
A partir de 1984 la necrópolis vacceo-romana de Las Ruedas, usada anteriormente para la plantación de viñas, fue puesta en cultivo. La introducción del arado de tracción mecánica supuso la remoción de numerosas estelas funerarias y, consecuentemente, la emergencia en superficie de abundantes restos arqueológicos. A partir de entonces, la degradación causada por el arado y por las acciones furtivas se ha mantenido, con diferente intensidad, hasta el presente.
A comienzos de los años 90 se produce un cambio de uso de 2 de las tres parcelas, pasando de un uso agrícola a otra patrimonial merced a la adquisición de una de esas dos parcelas por la Junta de Castilla y León y posteriormente por un particular coque será el investigador principal del llamado Proyecto Pintia. Lamentablemente de las tres parcelas que integran este cementerio, una de ellas sigue siendo cultivada en la actualidad, lo que ha determinado su inclusión en la Lista Roja de Hispania Nostra.
Los ejes principales de la intervención han sido la acción, el conocimiento, la rehabilitación del paisaje funerario y la sensibilización
El paisaje funerario ha sido construido gracias a un trabajo colaborativo de personal y alumnos de la Universidad de Valladolid, gentes de Padilla de Duero, voluntarios pintianos y miembros de la Asociación Cultural Pinita. La sostenibilidad del proyecto se ha basado en un marcado concepto de reciclaje de estructuras. En cuanto al valor social cuenta con programas dirigidos a diversos colectivos y con cursos, campañas de excavación, visitas guiadas y exposiciones en torno a la necrópolis de Las Ruedas.
En este caso el jurado ha querido reconocer la importante labor de protección y difusión que supone esta intervención, así como la implicación de personas de distintos ámbitos en un proyecto que contribuye en gran medida a concienciar a la población sobre la riqueza de su patrimonio y la necesidad de conservarlo.
Por otra parte, sobre el otro accésit, el pueblo de Moradillo de Roa ha conseguido recuperar el paisaje del Barrio de Bodegas Subterráneas, mantener la belleza de los espacios verdes de la Ribera del Duero, conservar la tradición y patrimonio vitivinícola, adaptar la modernidad al paisaje tradicional ribereño, combinando con respeto ambos escenarios y creando productos de la tierra que ayudan a mantenerla viva.
El verdadero reto no ha sido sólo la reconstrucción de las partes dañadas y solventar los problemas derivados de las humedades y filtraciones, sino también devolver la vida a este legado dañado por el desuso, y convertirlo en un recurso enoturístico para que pueda autosustentarse mientras que a la vez se asegura la conservación del paisaje. Todo el proyecto de las bodegas y lagares tradicionales de Moradillo de Roa está llevado a cabo por voluntarios, que se centran en la promoción y difusión de las bodegas y lagares tradicionales.
El Jurado ha querido reconocer el interés en la protección y puesta en valor de Patrimonio Industrial y Patrimonio Natural en un solo proyecto que presta especial atención a los aspectos históricos, medioambientales, sociales y empresariales. Además, destaca la recuperación tanto del paisaje como de las bodegas y su objetivo de convertirlo en un recurso enoturístico, con el consiguiente beneficio para la sociedad y la economía locales.
En la primera categoría, «Intervención en el territorio o el paisaje», el jurado ha decidido conceder el Premio a la propuesta Intervención de acondicionamiento, mejora y restauración paisajística del Parque de las Aguas de Cornellá de Llobregat (Barcelona).
El contexto en el que se engloba este proyecto es la mejora el espacio del Parque de las Aguas, también conocido históricamente como la Central Cornellá, la central de la empresa Aguas de Barcelona, Agbar. El lugar goza de un gran valor a todos los niveles, natural (agrícola, territorial y ecológico), arquitectónico (consta de edificios protegidos como el Museo de las Aguas, de origen modernista, o los pozos de extracción, catalogados), paisajístico, (el jardín como principal ligamen del patrimonio con la tierra y el agua) y obviamente patrimonial y museístico.
El interés de esta intervención radica no sólo en la intervención en el territorio, sino también a nivel cultural, ya que es una herramienta didáctica y pedagógica. Los aspectos más innovadores de la intervención en el territorio, permiten reconsiderar la sostenibilidad a partir del ciclo del agua. Es importante no sólo hacer el estudio y la obra, sino poder mostrarlo de manera pedagógica al visitante; por ese motivo se hace especial énfasis en enseñar los cambios en la gestión del agua, ahora reutilizada para el riego de árboles frutícolas que producen alimento posteriormente incluido en la carta del restaurante del recinto.
El Jurado ha destacado que la recuperación un paisaje degradado, del parque y sus valores así como de su patrimonio industrial y arquitectónico, con el fin de obtener un espacio agradable, ecológico y sostenible, que además es un ejemplo para otros lugares.
El jurado ha concedido dos accésit a las propuestas La necrópolis de Las Ruedas de Pintia, un espacio rehabilitado para la memoria, y a Bodegas subterráneas y Lagares Tradicionales de Moradillo de Roa. (Burgos).
Las Ruedas es el cementerio correspondiente a la ciudad vacceo-romana de Las Quintanas, tradicionalmente identificada con la ciudad de Pintia, ubicada en los términos municipales de Padilla de Duero/Peñafiel y Pesquera de Duero, en el oriente de la provincia vallisoletana. El yacimiento de Pintia, y su necrópolis en particular, se constituye en un unicum dentro del estudio de la etnia prerromana vaccea, pues es el primer y único cementerio conocido de la extensa región de este pueblo que habitó el área central de la cuenca del Duero entre los siglos V al I a.C.
A partir de 1984 la necrópolis vacceo-romana de Las Ruedas, usada anteriormente para la plantación de viñas, fue puesta en cultivo. La introducción del arado de tracción mecánica supuso la remoción de numerosas estelas funerarias y, consecuentemente, la emergencia en superficie de abundantes restos arqueológicos. A partir de entonces, la degradación causada por el arado y por las acciones furtivas se ha mantenido, con diferente intensidad, hasta el presente.
A comienzos de los años 90 se produce un cambio de uso de 2 de las tres parcelas, pasando de un uso agrícola a otra patrimonial merced a la adquisición de una de esas dos parcelas por la Junta de Castilla y León y posteriormente por un particular coque será el investigador principal del llamado Proyecto Pintia. Lamentablemente de las tres parcelas que integran este cementerio, una de ellas sigue siendo cultivada en la actualidad, lo que ha determinado su inclusión en la Lista Roja de Hispania Nostra.
Los ejes principales de la intervención han sido la acción, el conocimiento, la rehabilitación del paisaje funerario y la sensibilización
El paisaje funerario ha sido construido gracias a un trabajo colaborativo de personal y alumnos de la Universidad de Valladolid, gentes de Padilla de Duero, voluntarios pintianos y miembros de la Asociación Cultural Pinita. La sostenibilidad del proyecto se ha basado en un marcado concepto de reciclaje de estructuras. En cuanto al valor social cuenta con programas dirigidos a diversos colectivos y con cursos, campañas de excavación, visitas guiadas y exposiciones en torno a la necrópolis de Las Ruedas.
En este caso el jurado ha querido reconocer la importante labor de protección y difusión que supone esta intervención, así como la implicación de personas de distintos ámbitos en un proyecto que contribuye en gran medida a concienciar a la población sobre la riqueza de su patrimonio y la necesidad de conservarlo.
Por otra parte, sobre el otro accésit, el pueblo de Moradillo de Roa ha conseguido recuperar el paisaje del Barrio de Bodegas Subterráneas, mantener la belleza de los espacios verdes de la Ribera del Duero, conservar la tradición y patrimonio vitivinícola, adaptar la modernidad al paisaje tradicional ribereño, combinando con respeto ambos escenarios y creando productos de la tierra que ayudan a mantenerla viva.
El verdadero reto no ha sido sólo la reconstrucción de las partes dañadas y solventar los problemas derivados de las humedades y filtraciones, sino también devolver la vida a este legado dañado por el desuso, y convertirlo en un recurso enoturístico para que pueda autosustentarse mientras que a la vez se asegura la conservación del paisaje. Todo el proyecto de las bodegas y lagares tradicionales de Moradillo de Roa está llevado a cabo por voluntarios, que se centran en la promoción y difusión de las bodegas y lagares tradicionales.
El Jurado ha querido reconocer el interés en la protección y puesta en valor de Patrimonio Industrial y Patrimonio Natural en un solo proyecto que presta especial atención a los aspectos históricos, medioambientales, sociales y empresariales. Además, destaca la recuperación tanto del paisaje como de las bodegas y su objetivo de convertirlo en un recurso enoturístico, con el consiguiente beneficio para la sociedad y la economía locales.
2. «Conservación como factor de desarrollo»
En la segunda Categoría, Conservación del patrimonio como factor de desarrollo económico y social, se ha concedido un doble premio ex aequo a las siguientes propuestas: Yacimiento arqueológico de Guarrazar (Guadamur, Toledo) y al Museo Cal de Morón, además de un accésit al proyecto Catalogación e informatización del Archivo Histórico y musical de la catedral de Burgos.
El Yacimiento Arqueológico de Guarrazar se encuentra en el paraje de este nombre, famoso a partir de enero de 1859 cuando se hizo público el hallazgo fortuito de un tesoro visigodo de gran relevancia. Los trabajos arqueológicos desarrollados por José Amador de los Ríos, en abril de 1859, desvelaron que el tesoro se escondía en el extremo de una necrópolis cristiana de la que se conservaban varias filas de tumbas y restos de una capilla funeraria. En la capilla había una sepultura cuyo epitafio en latín desvelaba que en el año 693 allí había sido enterrado un presbítero.
A pesar del valor del tesoro, Guarrazar se consideraba un yacimiento de escasa importancia. Sin embargo, los descubrimientos realizados en los últimos años están desvelando que el tesoro no provendría de una o varias iglesias relevantes de Toletum, sino que habría formado parte de la basílica que regía el santuario que hubo en este lugar, al menos desde el siglo VI hasta la invasión árabe en el año 711. Las grandes basas de mármol y sillares de granito que aparecen en los cimientos se consideran evidencias suficientes de la existencia de un rico edificio que ocupaba más de 450 m2.
La intervención promovida a través del proyecto Guarrazar: Arqueología y nuevos recursos consiste en un proyecto de investigación en uno de los yacimientos arqueológicos emblemáticos de la época visigoda; en la actuación de recuperación y adecuación del espacio en el que se halla el yacimiento y en la difusión social del hallazgo. Engloba investigaciones arqueológicas y labores de protección del espacio arqueológico y medioambiental, junto a intervenciones que favorezcan la accesibilidad. Se ha logrado un importante impacto social por la repercusión económica en la zona, por la transmisión de conocimientos y por la sensibilización hacia el patrimonio.
Además, se han seguido criterios de sostenibilidad tanto económica, buscando el mínimo gasto, como medioambiental, destacando el escaso consumo energético y el bajo impacto en el medio. La gestión de este «yacimiento arqueológico visitable» es de carácter público-privado, ya que cuenta con el patrocinio de Ayuntamiento de Guadamur y la promoción de la empresa privada Actividades Arqueológicas S. L.
El Jurado ha querido reconocer la aportación del yacimiento a la sociedad no como una simple propuesta lúdico-cultural, sino como una actividad didáctica y pedagógica enfocada a la transmisión de conocimientos histórico-arqueológico-medioambientales. Valora la labor realizada en torno a un yacimiento con una importancia clave en nuestra historia como es Guarrazar, y destaca una iniciativa que aúna investigación, protección, y difusión, además de incluir aspectos sostenibles y sociales. Otro factor a tener en cuenta es la creación de nuevos recursos generadores de riqueza. Desde el inicio del Proyecto, se han creado puestos de trabajo directos (excavación, adecuación y mantenimiento del yacimiento) e indirectos mediante la promoción de productos de fabricación local y comarcal (aceite, queso, miel, bollería, artesanía, etc.) y mediante el disfrute de los recursos hosteleros de Guadamur y las localidades de su entorno. El proyecto es, además un ejemplo de colaboración entre un profesional de arqueología y una administración local.
La fabricación de cal ha sido una de las actividades principales del municipio sevillano de Morón de la Frontera y, debido al importante impacto en el paisaje y en la sociedad, se ha constituido como una de sus señas de identidad. Cuando la producción de cal artesanal fue eclipsada y sustituida por la fabricación de cal industrial, los hornos tradicionales cayeron en desuso, cesó la transmisión de conocimientos y se produjo el deterioro de edificaciones y enseres. En España, algunos hornos de Morón fueron los únicos que quedaron en funcionamiento.
Para evitar su desaparición, la Asociación Cultural Hornos de la Cal de Morón tiene como objetivo la recuperación de los saberes, transmisión de conocimientos y revitalización del oficio, a través del Museo de la Cal y de la empresa productora Gordillos Cal de Morón. El Museo de la Cal se creó con la visión de: «sensibilizar sobre la práctica y la importancia de la elaboración de la cal y para mejorar las condiciones de vida de los artesanos, por lo que el proyecto promueve activamente la transmisión de técnicas y saberes a las nuevas generaciones». Un objetivo a largo plazo es restaurar todos los hornos existentes y los elementos subsidiarios para proponer la declaración de «Paisaje industrial de la cal» a nivel nacional, como ya se ha realizado con la declaración de Bien de Interés Cultural, de todos los hornos, por la Junta de Andalucía en 2009.
La ejecución de estos objetivos ha valido para que la UNESCO en 2011 incluyera la revitalización de la producción artesanal de Cal de Morón en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la humanidad y en su lista de buenas prácticas.
Las actividades de la Asociación y del Museo se dedican a la divulgación de la cooperación con los artesanos de la cal, en la recuperación de conocimientos especializados y de técnicas productivas para usarlos en la construcción sostenible. También se realizan labores de difusión: publicaciones audiovisuales e impresas y exposiciones en ferias y congresos nacionales e internacionales.
El valor de esta intervención ha sido la preservación del oficio tradicional y de los lugares de trabajo y las casas de los caleros. El valor del patrimonio material se ha incrementado con la adquisición y conservación de un conjunto de bienes muebles y el conocimiento englobados en el patrimonio inmaterial. Asimismo, se destaca la revalorización del oficio de calero y la restauración del último reducto de la fabricación de la cal artesanal en España.
El Jurado reconoce la importancia que ha tenido el uso de la cal en la construcción a lo largo de la historia y la importancia de su recuperación en la actualidad faceta de Patrimonio Material e Inmaterial que reúne este proyecto, la implicación de la comunidad local, el impacto que ha tenido en el municipio. Manifiesta que este lugar representa una de las escasas representaciones vivas de arquitectura vernácula ligada a la producción tradicional de la cal en Andalucía y en España. Recoge el testigo cultural de los hornos romanos y musulmanes y constituye la prueba material de una forma de vida específica y una cultura de trabajo que, aunque está actualmente en crisis, permanece vigente gracias a la transmisión intergeneracional desde el siglo XVIII hasta la actualidad.
En 1994 dio comienzo la catalogación e informatización del archivo de la catedral de Burgos, auspiciada y financiada por la Obra Social de Cajacírculo y que hoy continúa la Fundación Cajacírculo, en colaboración directa con el cabildo catedralicio de Burgos. Entre 1994 y 2004 se catalogó en su totalidad el archivo musical. En estos 26 años de ininterrumpido trabajo se han catalogado más de 200.000 documentos, de las secciones generales de Volúmenes, Libros y Registro. 10.000 de ellos en pergamino, recogidos en 77 volúmenes con sus índices. Esto supone alrededor del 40% del corpus documental del archivo histórico. Toda esta documentación se encuentra volcada en la página web www.fundacioncajacirculo.es.
El objetivo principal de estos trabajos es rescatar el archivo, catalogarlo y preservarlo para las generaciones futuras; ponerlo a disposición del público en general y sobre todo de los investigadores y estudiosos; informatizarlo y abrirlo a la comunidad digital; permitir la consulta presencial; y poner a disposición de los investigadores la posibilidad de escanear documentos. Una de las cuestiones más importantes de este proyecto ha sido abrir el archivo al público en general y a la comunidad científica en particular. La ejecución metodológica y sistemática del trabajo y la elaboración de nuevos índices que facilitan la búsqueda de la documentación, han sido otros de los logros.
Por otro lado, se están poniendo a disposición de los investigadores de todo el mundo, miles de documentos de una de las catedrales más importantes de Europa.
El Jurado destaca la prolongada dedicación y la laboriosidad del trabajo realizado; su importancia respecto a la recuperación de un rico patrimonio desconocido para muchos. Considera valiosa la labor de divulgación, que ha sido fundamental y ha motivado el elogio de instituciones y particulares de todo el mundo y la facilidad de acceso que supone su publicación en una página web, permitiendo así que llegue a toda la sociedad.
En la segunda Categoría, Conservación del patrimonio como factor de desarrollo económico y social, se ha concedido un doble premio ex aequo a las siguientes propuestas: Yacimiento arqueológico de Guarrazar (Guadamur, Toledo) y al Museo Cal de Morón, además de un accésit al proyecto Catalogación e informatización del Archivo Histórico y musical de la catedral de Burgos.
El Yacimiento Arqueológico de Guarrazar se encuentra en el paraje de este nombre, famoso a partir de enero de 1859 cuando se hizo público el hallazgo fortuito de un tesoro visigodo de gran relevancia. Los trabajos arqueológicos desarrollados por José Amador de los Ríos, en abril de 1859, desvelaron que el tesoro se escondía en el extremo de una necrópolis cristiana de la que se conservaban varias filas de tumbas y restos de una capilla funeraria. En la capilla había una sepultura cuyo epitafio en latín desvelaba que en el año 693 allí había sido enterrado un presbítero.
A pesar del valor del tesoro, Guarrazar se consideraba un yacimiento de escasa importancia. Sin embargo, los descubrimientos realizados en los últimos años están desvelando que el tesoro no provendría de una o varias iglesias relevantes de Toletum, sino que habría formado parte de la basílica que regía el santuario que hubo en este lugar, al menos desde el siglo VI hasta la invasión árabe en el año 711. Las grandes basas de mármol y sillares de granito que aparecen en los cimientos se consideran evidencias suficientes de la existencia de un rico edificio que ocupaba más de 450 m2.
La intervención promovida a través del proyecto Guarrazar: Arqueología y nuevos recursos consiste en un proyecto de investigación en uno de los yacimientos arqueológicos emblemáticos de la época visigoda; en la actuación de recuperación y adecuación del espacio en el que se halla el yacimiento y en la difusión social del hallazgo. Engloba investigaciones arqueológicas y labores de protección del espacio arqueológico y medioambiental, junto a intervenciones que favorezcan la accesibilidad. Se ha logrado un importante impacto social por la repercusión económica en la zona, por la transmisión de conocimientos y por la sensibilización hacia el patrimonio.
Además, se han seguido criterios de sostenibilidad tanto económica, buscando el mínimo gasto, como medioambiental, destacando el escaso consumo energético y el bajo impacto en el medio. La gestión de este «yacimiento arqueológico visitable» es de carácter público-privado, ya que cuenta con el patrocinio de Ayuntamiento de Guadamur y la promoción de la empresa privada Actividades Arqueológicas S. L.
El Jurado ha querido reconocer la aportación del yacimiento a la sociedad no como una simple propuesta lúdico-cultural, sino como una actividad didáctica y pedagógica enfocada a la transmisión de conocimientos histórico-arqueológico-medioambientales. Valora la labor realizada en torno a un yacimiento con una importancia clave en nuestra historia como es Guarrazar, y destaca una iniciativa que aúna investigación, protección, y difusión, además de incluir aspectos sostenibles y sociales. Otro factor a tener en cuenta es la creación de nuevos recursos generadores de riqueza. Desde el inicio del Proyecto, se han creado puestos de trabajo directos (excavación, adecuación y mantenimiento del yacimiento) e indirectos mediante la promoción de productos de fabricación local y comarcal (aceite, queso, miel, bollería, artesanía, etc.) y mediante el disfrute de los recursos hosteleros de Guadamur y las localidades de su entorno. El proyecto es, además un ejemplo de colaboración entre un profesional de arqueología y una administración local.
La fabricación de cal ha sido una de las actividades principales del municipio sevillano de Morón de la Frontera y, debido al importante impacto en el paisaje y en la sociedad, se ha constituido como una de sus señas de identidad. Cuando la producción de cal artesanal fue eclipsada y sustituida por la fabricación de cal industrial, los hornos tradicionales cayeron en desuso, cesó la transmisión de conocimientos y se produjo el deterioro de edificaciones y enseres. En España, algunos hornos de Morón fueron los únicos que quedaron en funcionamiento.
Para evitar su desaparición, la Asociación Cultural Hornos de la Cal de Morón tiene como objetivo la recuperación de los saberes, transmisión de conocimientos y revitalización del oficio, a través del Museo de la Cal y de la empresa productora Gordillos Cal de Morón. El Museo de la Cal se creó con la visión de: «sensibilizar sobre la práctica y la importancia de la elaboración de la cal y para mejorar las condiciones de vida de los artesanos, por lo que el proyecto promueve activamente la transmisión de técnicas y saberes a las nuevas generaciones». Un objetivo a largo plazo es restaurar todos los hornos existentes y los elementos subsidiarios para proponer la declaración de «Paisaje industrial de la cal» a nivel nacional, como ya se ha realizado con la declaración de Bien de Interés Cultural, de todos los hornos, por la Junta de Andalucía en 2009.
La ejecución de estos objetivos ha valido para que la UNESCO en 2011 incluyera la revitalización de la producción artesanal de Cal de Morón en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la humanidad y en su lista de buenas prácticas.
Las actividades de la Asociación y del Museo se dedican a la divulgación de la cooperación con los artesanos de la cal, en la recuperación de conocimientos especializados y de técnicas productivas para usarlos en la construcción sostenible. También se realizan labores de difusión: publicaciones audiovisuales e impresas y exposiciones en ferias y congresos nacionales e internacionales.
El valor de esta intervención ha sido la preservación del oficio tradicional y de los lugares de trabajo y las casas de los caleros. El valor del patrimonio material se ha incrementado con la adquisición y conservación de un conjunto de bienes muebles y el conocimiento englobados en el patrimonio inmaterial. Asimismo, se destaca la revalorización del oficio de calero y la restauración del último reducto de la fabricación de la cal artesanal en España.
El Jurado reconoce la importancia que ha tenido el uso de la cal en la construcción a lo largo de la historia y la importancia de su recuperación en la actualidad faceta de Patrimonio Material e Inmaterial que reúne este proyecto, la implicación de la comunidad local, el impacto que ha tenido en el municipio. Manifiesta que este lugar representa una de las escasas representaciones vivas de arquitectura vernácula ligada a la producción tradicional de la cal en Andalucía y en España. Recoge el testigo cultural de los hornos romanos y musulmanes y constituye la prueba material de una forma de vida específica y una cultura de trabajo que, aunque está actualmente en crisis, permanece vigente gracias a la transmisión intergeneracional desde el siglo XVIII hasta la actualidad.
En 1994 dio comienzo la catalogación e informatización del archivo de la catedral de Burgos, auspiciada y financiada por la Obra Social de Cajacírculo y que hoy continúa la Fundación Cajacírculo, en colaboración directa con el cabildo catedralicio de Burgos. Entre 1994 y 2004 se catalogó en su totalidad el archivo musical. En estos 26 años de ininterrumpido trabajo se han catalogado más de 200.000 documentos, de las secciones generales de Volúmenes, Libros y Registro. 10.000 de ellos en pergamino, recogidos en 77 volúmenes con sus índices. Esto supone alrededor del 40% del corpus documental del archivo histórico. Toda esta documentación se encuentra volcada en la página web www.fundacioncajacirculo.es.
El objetivo principal de estos trabajos es rescatar el archivo, catalogarlo y preservarlo para las generaciones futuras; ponerlo a disposición del público en general y sobre todo de los investigadores y estudiosos; informatizarlo y abrirlo a la comunidad digital; permitir la consulta presencial; y poner a disposición de los investigadores la posibilidad de escanear documentos. Una de las cuestiones más importantes de este proyecto ha sido abrir el archivo al público en general y a la comunidad científica en particular. La ejecución metodológica y sistemática del trabajo y la elaboración de nuevos índices que facilitan la búsqueda de la documentación, han sido otros de los logros.
Por otro lado, se están poniendo a disposición de los investigadores de todo el mundo, miles de documentos de una de las catedrales más importantes de Europa.
El Jurado destaca la prolongada dedicación y la laboriosidad del trabajo realizado; su importancia respecto a la recuperación de un rico patrimonio desconocido para muchos. Considera valiosa la labor de divulgación, que ha sido fundamental y ha motivado el elogio de instituciones y particulares de todo el mundo y la facilidad de acceso que supone su publicación en una página web, permitiendo así que llegue a toda la sociedad.
3. «Señalización y difusión del Patrimonio»
El premio distingue un proyecto de App para la reconstrucción virtual del Castillo de San Vicente de la Sonsierra, además se ha concedido un accésit al proyecto Patrimoniuindustrial.com
El castillo y recinto amurallado de San Vicente de la Sonsierra es un conjunto histórico declarado Bien de Interés Cultural el 22 de abril de 1949. En 2005 el Ayuntamiento de la localidad finaliza la redacción del Plan Director que guiaría los trabajos de rehabilitación y puesta en valor del conjunto que se sucederían desde entonces hasta el presente.
Estas actuaciones incluían la excavación arqueológica, consolidación arquitectónica y adecuación para la visita de los sectores más relevantes, así como el desarrollo de acciones para la difusión del conjunto y de su biografía histórica para los habitantes de la villa y sus visitantes, entre las que se incluye una aplicación móvil que permitiera difundir por medio de técnicas de reconstrucción virtual la historia del conjunto monumental del Castillo de San Vicente de la Sonsierra, con el fin de atraer más visitantes, hacer que estos se interesasen y sumergieran en la biografía e historia constructiva del lugar, e interactuasen con el entorno patrimonial de forma educativa, lúdica y sostenible
El proyecto ha consistido en la generación de una aplicación móvil o app de interfaz intuitiva adaptada a dispositivos de uso generalizado como smartphones, tablets o gafas de realidad virtual, que permite al visitante viajar al pasado y poder observar con sus propios ojos cómo fue y cómo ha evolucionado a lo largo del tiempo este conjunto histórico tan destacado. En 2019 se puso en funcionamiento la aplicación para su descarga gratuita en las tiendas de aplicaciones para Android (Google Play) e iOS (App Store). Posteriormente se instaló la señalización asociada en julio de ese mismo año.
El Jurado ha acordado conceder el premio a este proyecto por su valor para la difusión de este importante bien patrimonial; por la incorporación de las aportaciones tecnológicas más recientes al servicio de la conservación y por la implicación de la comunidad que ha supuesto. El proceso de generación de la app y de la señalización asociada, incluyó el desarrollo de procesos necesarios para la documentación, la generación de contenidos y el correcto funcionamiento de la app. Su implantación ha supuesto una revolución para la actividad turística, social y económica del municipio, no solo por la gran implicación de los habitantes en la creación, uso y difusión de la app y del castillo, sino por el aumento exponencial en el número de visitantes que la herramienta ha traído consigo.
Patrimoniuindustrial.com es una plataforma web multilingüe de contenidos multimedia que retrata, inventaría y difunde el patrimonio industrial del Principado de Asturias.
Difunde el patrimonio industrial a través de un proyecto online que integra la creciente propuesta turística y cultural relacionada con la memoria industrial material e inmaterial en el Principado de Asturias. Combina el diseño, la usabilidad y la interactividad con centenares de recursos audiovisuales, testimonios de trabajadores, mapas interactivos, introducciones de académicos e investigadores y decenas de enlaces web a recursos culturales, empresariales y turísticos.
La web organiza la presentación de sus contenidos en cuatro bloques principales (Minería, Industrias, Transportes e Inmaterial) en cuyo interior se puede acceder a los contenidos multimedia de 18 sectores patrimoniales. Incluye también accesos a las tres versiones multilingüe de la web (español, inglés y asturiano), vídeos aleatorios de enclaves patrimoniales, testimonios de memoria oral y mapas interactivos con fichas de más de 600 enclaves del Patrimonio Industrial de Asturias.
En este caso el jurado ha destacado la labor de puesta en valor y recopilación de distintos aspectos relacionados con un tipo de patrimonio muchas veces olvidado, y con una gran importancia en la historia del Principado de Asturias. Asimismo, se destaca también la aportación que supone respecto a su difusión y, en consecuencia, la concienciación social en cuanto a su conservación. La cantidad de entidades participantes ha permitido financiar la creación y actualización de los contenidos entre julio y diciembre de 2019, así como la estrategia e implementación del marketing online y la presencia en redes sociales.
El premio distingue un proyecto de App para la reconstrucción virtual del Castillo de San Vicente de la Sonsierra, además se ha concedido un accésit al proyecto Patrimoniuindustrial.com
El castillo y recinto amurallado de San Vicente de la Sonsierra es un conjunto histórico declarado Bien de Interés Cultural el 22 de abril de 1949. En 2005 el Ayuntamiento de la localidad finaliza la redacción del Plan Director que guiaría los trabajos de rehabilitación y puesta en valor del conjunto que se sucederían desde entonces hasta el presente.
Estas actuaciones incluían la excavación arqueológica, consolidación arquitectónica y adecuación para la visita de los sectores más relevantes, así como el desarrollo de acciones para la difusión del conjunto y de su biografía histórica para los habitantes de la villa y sus visitantes, entre las que se incluye una aplicación móvil que permitiera difundir por medio de técnicas de reconstrucción virtual la historia del conjunto monumental del Castillo de San Vicente de la Sonsierra, con el fin de atraer más visitantes, hacer que estos se interesasen y sumergieran en la biografía e historia constructiva del lugar, e interactuasen con el entorno patrimonial de forma educativa, lúdica y sostenible
El proyecto ha consistido en la generación de una aplicación móvil o app de interfaz intuitiva adaptada a dispositivos de uso generalizado como smartphones, tablets o gafas de realidad virtual, que permite al visitante viajar al pasado y poder observar con sus propios ojos cómo fue y cómo ha evolucionado a lo largo del tiempo este conjunto histórico tan destacado. En 2019 se puso en funcionamiento la aplicación para su descarga gratuita en las tiendas de aplicaciones para Android (Google Play) e iOS (App Store). Posteriormente se instaló la señalización asociada en julio de ese mismo año.
El Jurado ha acordado conceder el premio a este proyecto por su valor para la difusión de este importante bien patrimonial; por la incorporación de las aportaciones tecnológicas más recientes al servicio de la conservación y por la implicación de la comunidad que ha supuesto. El proceso de generación de la app y de la señalización asociada, incluyó el desarrollo de procesos necesarios para la documentación, la generación de contenidos y el correcto funcionamiento de la app. Su implantación ha supuesto una revolución para la actividad turística, social y económica del municipio, no solo por la gran implicación de los habitantes en la creación, uso y difusión de la app y del castillo, sino por el aumento exponencial en el número de visitantes que la herramienta ha traído consigo.
Patrimoniuindustrial.com es una plataforma web multilingüe de contenidos multimedia que retrata, inventaría y difunde el patrimonio industrial del Principado de Asturias.
Difunde el patrimonio industrial a través de un proyecto online que integra la creciente propuesta turística y cultural relacionada con la memoria industrial material e inmaterial en el Principado de Asturias. Combina el diseño, la usabilidad y la interactividad con centenares de recursos audiovisuales, testimonios de trabajadores, mapas interactivos, introducciones de académicos e investigadores y decenas de enlaces web a recursos culturales, empresariales y turísticos.
La web organiza la presentación de sus contenidos en cuatro bloques principales (Minería, Industrias, Transportes e Inmaterial) en cuyo interior se puede acceder a los contenidos multimedia de 18 sectores patrimoniales. Incluye también accesos a las tres versiones multilingüe de la web (español, inglés y asturiano), vídeos aleatorios de enclaves patrimoniales, testimonios de memoria oral y mapas interactivos con fichas de más de 600 enclaves del Patrimonio Industrial de Asturias.
En este caso el jurado ha destacado la labor de puesta en valor y recopilación de distintos aspectos relacionados con un tipo de patrimonio muchas veces olvidado, y con una gran importancia en la historia del Principado de Asturias. Asimismo, se destaca también la aportación que supone respecto a su difusión y, en consecuencia, la concienciación social en cuanto a su conservación. La cantidad de entidades participantes ha permitido financiar la creación y actualización de los contenidos entre julio y diciembre de 2019, así como la estrategia e implementación del marketing online y la presencia en redes sociales.
(Fuente: ABC)