Una peculiaridad de este santuario es que se encuentra aislado y alejado de un gran poblado, a diferencia de lo que suele ser habitual en el ámbito ibérico. FOTO: UNIVERSIDAD DE MURCIA. |
Los arqueólogos han concretado las dimensiones del edificio, además de la orientación, características constructivas y estado de conservación de un templo que sólo se conocía por el dibujo de unas excavaciones realizadas en el siglo XIX, y que se suponía que había sido destruido poco después de su exhumación.
Junto a la actuación directa en el propio Cerro, donde también se han realizado catas arqueológicas para analizar las distintas capas de la tierra y el proceso de evolución del yacimiento, se ha llevado a cabo la prospección sistemática de todo el territorio para establecer el grado de relación entre el santuario y los asentamientos ibéricos y romanos con su entorno.
DÉCADAS DE INACTIVIDAD ARQUEOLÓGICA
El equipo de la Universidad de Murcia, del que forman parte, además, el director del Museo Arqueológico de Caravaca, Francisco Brotóns, y la directora del Museo de Albacete, Rubí Sanz, reanudó las investigaciones en este importante enclave a finales del 2013, tras varias décadas de inactividad arqueológica, según han explicado fuentes de la institución docente.
"En esta primera fase, indica el profesor Ramallo, se realizó la prospección sistemática y exhaustiva del yacimiento, referenciando espacialmente todos los hallazgos materiales y trazas de actividad visibles en la superficie del Cerro".
También se llevaron a cabo dos sondeos, en uno de los cuales se identificaron recortes en la roca de base de un edificio de culto de carácter monumental, que ha podido ser delimitado en toda su anchura durante la campaña de septiembre de este año, "verificando la información publicada en el tercer cuarto del siglo XIX", añade el investigador.
INTEGRACIÓN DEL SANTUARIO IBÉRICO EN EL MUNDO ROMANO
El Cerro de los Santos constituye un ejemplo paradigmático para conocer el proceso de integración de los santuarios ibéricos en el Estado romano y los cambios que se producen en la religión ibérica entre los siglos II y I antes de Cristo.
Una peculiaridad de este santuario es que se encuentra aislado y alejado de un gran poblado, a diferencia de lo que suele ser habitual en el ámbito ibérico.
La figura más representativa del Cerro de los Santos es la Dama Oferente, que se encontró en el año 1870 y que, junto a la Dama de Elche, es la otra Gran Dama de la cultura ibérica.
Ambas "apuntalan la originalidad y la personalidad del arte ibérico", señala Ramallo, y se encuentran, como otras figuras del yacimiento, en el Museo Arqueológico Nacional.
Tras el trabajo de campo, el siguiente paso es inventariar, estudiar los materiales y procesar toda la información obtenida durante la excavación de septiembre, añaden las mismas fuentes.
Además, con la financiación de Red Eléctrica de España y la colaboración del Ayuntamiento de Montealegre del Castillo, la Diputación de Albacete y la Junta de Castilla La Mancha, está previsto catalogar todo el material del Cerro de los Santos hallado hasta la fecha y depositarlo en distintas colecciones para ofrecer un ágil instrumento de trabajo a los investigadores sobre la religión en particular y sobre la cultura ibérica en general.
(Fuente: Europa Press)