Autoridades provinciales y municipales visitaron la excavación que dirige Marco Antonio Bernal. |
Serrano valora el buen estado de conservación del aljibe y la confirmación con las catas de que existe un sistema de galerías que será descubierto en futuras intervenciones. Los trabajos ejecutados en la zona del Alcazarejo, autorizados por Cultura sobre una superficie de veinticinco metros cuadrados, como confirma el arqueólogo Marco Antonio Bernal, responsable de las prospecciones, sacó a la luz sillares de la torre del homenaje, el suelo original y estructuras murarias. Como restos muebles, entre la amalgama de basura, se descubrieron osamentas animales —probablemente de cerdos, cabras y vacas—, una moneda de la época de Alfonso XII y otra de la dictadura franquista, así como vestigios anteriores como cerámica fragmentaria de los siglos XV y XVI y restos de artículos de hierro.
APROVECHAR LAS OPORTUNIDADES
“Los resultados están por encima de las expectativas y desvelas cavidades en buen estado. Se trata de una dosis de ilusión más que importante. Permite hacer un diagnóstico de cómo está el Castillo Nuevo para preparar un proyecto para mantenerlo. Las excavaciones aportaron datos y piezas muy interesantes”, explica Juan Francisco Serrano. El alcalde bedmarense subraya que se trabaja en una iniciativa más ambiciosa para aprovechar las posibilidades de esta fortaleza tan importante y de otra cercana, el denominado Castillo Viejo, también medieval, pero de época andalusí.
Entre los planes municipales están concurrir a la oferta del 1,5% Cultural. Se defenderá el acceso a ayudas de 400.000 euros para sufragar las tareas de rehabilitación, con un coste conjunto de 65.000. En esa línea el planteamiento pasa por reconstruir la parte más deteriorada, pues el aspecto superficial del Castillo Nuevo es de profundo deterioro. En este sentido, preocupa la pared que se yergue sobre la iglesia de la Asunción, por la posibilidad de que haya desprendimientos. En este caso concretar el objetivo es consolidar los lienzos antes de proceder a su restauración en sí.
La recta final de las recientes excavaciones contó con la visita de responsables municipales, entre ellos el edil de Bedmar y Garcíez y actual presidente de la Diputación Provincial de Jaén, Francisco Reyes.
Bedmar es un referente provincial y regional en el mundo de la arqueología. Próximamente se darán a conocer los resultados de la campaña de excavación internacional efectuada durante el verano en un yacimiento paleolítico situado en la zona de la Serrezuela. Se trata del lugar en el que han aparecido los restos humanos más antiguos conocidos en Jaén. Los vestigios se localizan en abrigos ubicados en la cueva del Portillo y otras áreas. Desde hace más de un año, el área suscita interés de arqueólogos de varios países por el nivel de los hallazgos y la cantidad de piezas localizadas.
(Fuente: Diario Jaén / Juan Rafael Hinojosa)