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13 de noviembre de 2024

Salen a la luz nuevas estructuras en el yacimiento romano de Isla de Lobos (Fuerteventura)

La IX campaña de excavación en el yacimiento canario comenzó el pasado 4 de noviembre.

Los trabajos de la novena excavación en el Islote de Lobos muestran indicios de nuevas estructuras de interés arqueológico al norte del yacimiento. Así lo ha comunicado el equipo multidisciplinar de investigadores en una visita realizada por el consejero insular de Patrimonio Cultural, Rayco León, el director general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias, Miguel Ángel Clavijo, así como el concejal de Cultura y Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de La Oliva, David Hernández.

El pasado 4 de noviembre, el Cabildo de Fuerteventura, el Organismo Autónomo de Museos y Centros del Cabildo de Tenerife (OAMC) y la Universidad de La Laguna iniciaron la novena campaña en el yacimiento Lobos, que se extenderá hasta el día 22 del mismo mes.

El consejero insular, Rayco León, ha indicado que “el yacimiento de Lobos constituye una de las piezas fundamentales que más sigue dando que hablar de la historia de Canarias. Continúa aportando debate y conocimiento como forma fundamental de conocer nuestro pasado”. “Con todas las entidades implicadas vamos a conseguir que este espacio pueda seguir evolucionando y, poco a poco, sea un atractivo más para el patrimonio cultural de Fuerteventura”.

Por su parte, el director general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias, Miguel Ángel Clavijo, destacó el yacimiento Lobos I “como uno de los más interesantes por la información que está aportando al conocimiento de la historia del Archipiélago. Abre muchas vías de investigación, hay trabajo por muchos años y desde el Gobierno de Canarias vamos a seguir colaborando para seguir enriqueciendo el patrimonio de las islas”.

Los trabajos están codirigidos por Mercedes del Arco Aguilar (conservadora del Museo Arqueológico de Tenerife), María del Carmen del Arco Aguilar (Catedrática de Prehistoria y Profesora Horaria de Universidad de La Laguna) e Isidoro Hernández Sánchez (director del Museo Arqueológico de Fuerteventura) y contará, como es habitual, con un equipo multidisciplinar.

Durante la campaña realizada el pasado 2023, un sondeo con georradar realizado en Playa de La Calera permitió identificar posibles áreas fértiles no conocidas hasta ese momento, lo que abrió la puerta a nuevas expectativas y extiende la zona de investigación en casi 400 metros cuadrados más para explorar nuevas áreas. Como resultado, los trabajos en un área excavada de 32 metros cuadrados muestran indicios de la presencia de nuevas estructuras de interés arqueológico al norte del yacimiento.

Sorpresas
Mercedes del Arco ha apuntado que “el yacimiento nos sigue dando sorpresas. Hemos excavado otras áreas en su parte norte y seguimos teniendo evidencias de ocupación romana”. “Las nuevas prospecciones con georradar han descubierto nuevas estructuras, concretamente un suelo enlosado, y las hipótesis es que podrían extenderse por todo el Islote”.

Las campañas arqueológicas en el Islote de Lobos se realizan gracias a un convenio de colaboración entre el Cabildo de Fuerteventura y OAMC, se han realizado ya hasta ocho campañas arqueológicas, donde también ha colaborado la ULL y otras empresas como Binter Canarias que facilita los transportes interinsulares.

Las intervenciones comenzaron en el año 2012 con el fin de dar respuesta a un hallazgo casual de materiales cerámicos, cuya procedencia romana fue confirmada posteriormente. Las investigaciones han calificado el yacimiento como un taller de púrpura, un colorante para los tejidos que se extrae de la cañaílla y muy apreciado desde tiempos antiguos. Datado a través de radiocarbono y de las manufacturas encontradas, el yacimiento romano de Lobos convierte a Canarias en el límite del imperio romano en el atlántico centro-oriental, encontrándose un variado registro arqueológico que actualmente se expone en el Museo Arqueológico de Fuerteventura.
(Fuente: Cabildo de Fuerteventura)

5 de noviembre de 2024

Nueva campaña de excavaciones en el taller de púrpura romano de la Isla de Lobos (Tenerife)

En esta IX campaña los investigadores se centrarán en intervenir en las zonas donde el pasado año se prospectó con Georadar y se observaron anomalías en el subsuelo, con el fin de definir su naturaleza y determinar la extensión del espacio arqueológico.
Vista aérea del yacimiento de Lobos 1, en el margen derecho de la Playa de La Calera. (Foto de C. Medina)

Desde ayer lunes y hasta el 23 de noviembre tendrá lugar una nueva campaña de excavaciones arqueológicas sistemáticas en el yacimiento romano de La Playa de La Calera (islote de Lobos). Se pone en marcha un año más la investigación de campo que se lleva efectuando desde 2012 en el marco de un proyecto de investigación interinstitucional, ‘Hacia la definición de las Islas Purpurarias. Desde el taller de púrpura de Lobos 1 (Islote de Lobos, La Oliva, Fuerteventura). Trabajos arqueológicos en el islote de Lobos y su contexto territorial próximo’, bajo la dirección de Isidoro Hernández Sánchez, director del Museo Arqueológico de Fuerteventura; Mercedes del Arco Aguilar, conservadora de Arqueología del Museo Arqueológico de Tenerife; y Carmen del Arco Aguilar, catedrática de Prehistoria y profesora honoraria de la Universidad de La Laguna.

El objetivo de esta campaña se centra en intervenir en las zonas donde el pasado año se prospectó con GeoRadar y se observaron anomalías en el subsuelo, con el fin de definir su naturaleza y determinar la extensión del espacio arqueológico. Actualmente se ha trabajado en un área sobre los 500 m2, identificando un taller de púrpura romano de época tardo-republicana y alto-imperial, compuesto por seis grandes concheros especializados en la explotación de murícidos (gasterópodos marinos de los que se extrae el tinte púrpura), estructuras arquitectónicas y espacios relacionados con la vida cotidiana de los murileguli (trabajadores de la púrpura), entre ellos un gran basurero.

El registro de materiales arqueológicos comprende ánforas de almacenamiento, cerámica de cocina, mesa y otros usos, las herramientas especializadas, líticas y metálicas, para la producción de la púrpura y la explotación de otros recursos del mar, así como ajuares de diferente naturaleza.

Los trabajos de campos se financiarán en el marco de un convenio de colaboración, renovado recientemente, entre el Cabildo de Fuerteventura y el Organismo Autónomo de Museos y Centros del Cabildo de Tenerife, contando también con el apoyo de Binter-Canarias para el traslado interinsular del equipo.

El equipo investigador, con un perfil interdisciplinar, integra en esta ocasión a arqueólogos de las tres instituciones, paleontólogos de la Universidad de La Laguna y el OAMC, así como investigadores de las áreas de Petrología y Geoquímica y Edafología y Química Agrícola de la Universidad de La Laguna. 

La revista Spal ha publicado en estos días la última contribución de este equipo sobre el estudio de los Mortaria de Lobos.

21 de octubre de 2024

Hallado uno de los primeros hornos de cal de Lanzarote

María del Cristo González y Esther Chávez llevan a cabo la tercera fase de la investigación arqueológica en el yacimiento de San Marcial de Rubicón (Yaiza). A la decena de enterramientos localizados en la campaña anterior, se le suman ahora otros tres individuos. Es la primera vez que se lleva a cabo una intervención arqueológica en un horno de cal en la isla de Lanzarote.

En el marco del convenio de colaboración entre el Gobierno de Canarias, el Ayuntamiento de Yaiza, la Universidad de La Laguna (ULL) y la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), las doctoras María del Cristo González y Esther Chávez llevan a cabo la tercera fase de la investigación arqueológica en el yacimiento de San Marcial de Rubicón (Yaiza). Entre los hallazgos más destacados de esta campaña se encuentra un horno de cal, el primero excavado en la isla del Lanzarote, lo que representa un avance significativo en el estudio del desarrollo y evolución de la primera ciudad europea fundada en el Atlántico.

Durante cinco semanas, se ha intervenido en diversos sectores del enclave en colaboración con la empresa especializada Baraka Arqueólogos y la participación de más de una docena de estudiantes de ambas universidades públicas canarias. Uno de los principales objetivos del trabajo de campo ha sido continuar con la delimitación del cementerio localizado en la intervención del año pasado donde se recuperaron una decena de individuos, a los que se suman ahora los restos óseos de tres personas adicionales.

La consejera de Universidades, Ciencia e Innovación y Cultura, Migdalia Machín; el director general de Cultura y Patrimonio Cultural, Miguel Ángel Clavijo, el alcalde de Yaiza, Óscar Noda; y la consejera de Patrimonio Histórico del Cabildo de Lanzarote, Ascensión Toledo, visitaron el enclave para mostrar su apoyo al equipo de investigación y reafirmar su compromiso con la recuperación de la historia de Canarias.

En ese sentido, Migdalia Machín ha manifestado que “el patrimonio canario es el pilar que sostiene nuestra identidad atlántica, y a través de su estudio y conservación, reafirmamos el carácter universal de nuestra cultura. Al investigar y preservar nuestro pasado, estamos trayendo a la vida los episodios que nos forjaron, transformando el olvido en recuerdo, y reviviendo una memoria que enriquece el presente y fortalece nuestra identidad canaria.

Este proyecto, respaldado por la colaboración de las universidades públicas de Canarias, no solo nos revitaliza nuestras raíces, sino que también capacita a las nuevas generaciones de profesionales de la arqueología, brindándoles la experiencia práctica necesaria para continuar esta importante labor. De este modo, aseguramos que el estudio y la protección de nuestro patrimonio queden en manos de quienes custodiarán nuestra historia, proyectándola hacia el futuro”.

Por su parte, Miguel Ángel Clavijo ha reiterado que “los avances en San Marcial de Rubicón no solo profundizan nuestro conocimiento sobre el pasado, sino que también consolidan nuestro compromiso con la investigación y la protección del patrimonio. Tras el trabajo de campo, los materiales hallados serán estudiados en profundidad en el Laboratorio de Arqueología y Prehistoria de la Universidad de La Laguna, lo que permitirá obtener un análisis detallado y científico de cada hallazgo”.

Óscar Noda ha querido destacar «el compromiso del equipo de investigación dirigido por las arqueólogas María del Cristo González (Universidad de Las Palmas de Gran Canaria) y Esther Chávez (Universidad de La Laguna), que continúa la exploración en este enclave histórico. Nuestra propuesta es la de acondicionar el yacimiento para crear un parque arqueológico que pueda visitarse de forma controlada. Apostamos por la investigación y divulgación de nuestros valores patrimoniales, así que aquí seguimos sumando recursos junto a la Comunidad Autónoma y las dos universidades públicas canarias”.

Horno de cal
Según González, “el hallazgo más espectacular de este año” es el horno de cal porque “es la primera vez que se ha llevado a cabo una excavación arqueológica en un elemento de esta tipología en Lanzarote”, justificó. Se trata de un horno de cal parcialmente excavado en la roca de aproximadamente tres metros de diámetro y “en su interior se conserva un montón de piedra quemada y cal por lo que estamos excavando la última carga de este horno”, explicó.

Ahora bien, los muros que se han excavado hasta el momento contienen cal, igual que algunos suelos de ocupación, lo que podría indicar que este horno “pudiera estar asociado a la vida de la ciudad e incluso que se usó para construir este asentamiento desde sus inicios”, adelantó la arqueóloga. Sin embargo, hasta que no se lleve a cabo la datación sobre la cal, esto es solo una hipótesis que contribuye al desarrollo de la investigación.

Cabe recordar que San Marcial de Rubicón, ubicado en el municipio de Yaiza en la isla de Lanzarote, es un enclave arqueológico de alto nivel científico y patrimonial, ya que desde aquí se inicia el proceso de exploración y conquista del archipiélago canario en el siglo XV. Esta empresa supuso la construcción de elementos arquitectónicos que se vienen descubriendo en los últimos años, como una torre-fortaleza, una iglesia, unos pozos, tal y como indica la crónica ‘Le Canarien’; así como otras estructuras y espacios relacionados con el asentamiento y la convivencia entre las dos poblaciones.

Estos nuevos hallazgos son posibles gracias al convenio de colaboración entre el Gobierno de Canarias, el Ayuntamiento de Yaiza, la ULPGC y la ULL, que recientemente se ha ampliado de dos a cuatro años (2024 – 2026) para asegurar la continuidad de este proyecto arqueológico fundamental para reconstruir la historia del archipiélago.

6 de junio de 2024

Un nuevo método para medir el tiempo entre hogares neandertales

La revista Nature publicó ayer 5 de junio una investigación basada en técnicas que permiten concretar, como nunca hasta ahora, el tiempo transcurrido entre varios fuegos prehistóricos. Investigadores de las universidades de Burgos, Complutense de Madrid, La Laguna, Valencia y Alicante y del Instituto de Geociencias ha analizado una secuencia de fuegos neandertales, estimando que pasaron al menos 200-240 años entre el primero y el último.

Un equipo interdisciplinar conformado por investigadores de la Universidad de Burgos, la Universidad de La Laguna, la Universidad de Valencia, la Universidad de Alicante, la Universidad Complutense de Madrid, y el Instituto de Geociencias, ha logrado determinar con enorme precisión el tiempo mínimo transcurrido entre varios fuegos neandertales, vinculados a asentamientos temporales de mayor o menor duración, en el yacimiento de El Salt (Alcoy, Alicante). 

La investigación, encabezada por la investigadora de la UBU Ángela Herrejón-Lagunilla y publicada en la revista Nature, aborda uno de los grandes desafíos de la arqueología prehistórica: la escala temporal en la que se llevaron a cabo actividades humanas en el Paleolítico. Los profesores del Grupo de Investigación en Paleomagnetismo de la Universidad de Burgos Juan José Villalaín Santamaría y Ángel Carrancho Alonso firman, junto a Ángela Herrejón, este artículo, además de Francisco Javier Pavón-Carrasco, Mario Serrano Sánchez-Bravo, Santiago Sossa-Ríos, Alejandro Mayor, Bertila Galván, Cristo M. Hernández y Carolina Mallol.

La propuesta abre la puerta a conocer mejor el comportamiento de grupos neandertales concretando, por primera vez con gran precisión, el tiempo mínimo implicado en la acumulación de restos arqueológicos resultantes de sus actividades. Este avance ha sido posible gracias al estudio de los fuegos u “hogares”, y sus restos arqueológicos asociados, mediante una metodología muy novedosa que combina análisis arqueomagnéticos y arqueoestratigráficos.

El estudio, desarrollado durante casi 10 años, analiza una secuencia de 6 hogares procedentes de una misma unidad arqueológica (unidad X, de unos 52.000 años de antigüedad) en el abrigo de El Salt, un conocido yacimiento neandertal, y determina que, con altísima probabilidad, transcurrieron como mínimo unos 200-240 años entre la realización del primer hogar y el último, con diferencias que van de 2-3 décadas entre algunos de ellos a 100 años en otros.

“Se trata de una resolución sin precedentes en la arqueología paleolítica y que cambia de manera significativa las concepciones previas sobre la frecuencia de las ocupaciones humanas en las sociedades cazadoras-recolectoras prehistóricas”, destaca Ángela Herrejón, investigadora del Departamento de Física de la Universidad de Burgos y primera autora del trabajo.

Este estudio pone en tela de juicio la práctica arqueológica habitual de estudiar los materiales como si pertenecieran a un único grupo cultural o a un único periodo y lleva a los investigadores a “replantear la importancia de la forma en la que se excava para no ofrecer interpretaciones sesgadas del comportamiento de los grupos humanos prehistóricos”, asegura Ángela Herrejón.

Hasta ahora, las técnicas de datación disponibles para contextos tan antiguos como la unidad X de El Salt suelen tener incertidumbres temporales muy altas. No es posible aplicar la datación por carbono 14 a materiales más antiguos de 50.000 años y otras técnicas, como la luminiscencia, suelen tener errores de varios miles de años. En el trabajo publicado por Nature, mediante estudios de arqueoestratigrafía se infirió la posición estratigráfica relativa en la que se encuentran los hogares y sus restos asociados. Es decir, qué es anterior y qué posterior, seriando la secuencia de fuegos.

La enorme cantidad de restos arqueológicos de estos contextos, la topografía irregular del sustrato y los complejos procesos de formación y alteración implicados dificultan mucho aislar las ocupaciones neandertales. Ello requiere de un proceso de excavación y registro del material arqueológico muy minucioso, donde cada resto arqueológico y cada facies sedimentaria o porción de sedimento de diferente textura o color que las adyacentes, es coordenada tridimensionalmente y relacionada entre sí.

Una vez inferido el orden estratigráfico de los fuegos, se procedió a cuantificar el tiempo mínimo transcurrido entre sus quemas y este es el principal aporte metodológico del estudio. Para ello se recurre al arqueomagnetismo, disciplina geofísica que estudia el registro de la dirección y/o intensidad del campo magnético terrestre (CMT) en materiales arqueológicos quemados.

“Generalmente, el arqueomagnetismo se utiliza como técnica de datación para un rango temporal de aplicación que no supera los últimos 4.000 años. Aquí estamos hablando de cronologías mucho más antiguas, por lo que el enfoque es diferente” señala Francisco Javier Pavón, investigador del Departamento de Física de la Tierra y Astrofísica de la Universidad Complutense de Madrid y del Instituto de Geociencias (CSIC-UCM).

El método usado por este equipo multidisciplinar no puede brindar un máximo de años, pero sí un mínimo. En el caso de la unidad X de El Salt, los resultados obtenidos tienen implicaciones muy importantes e inesperadas. Los restos de fuegos que calentaron estos asentamientos, que se distribuyen en unos pocos centímetros de espesor de sedimento y algunos de ellos aparentemente en la misma superficie, representan al menos dos siglos.

Que el tiempo mínimo de formación de la secuencia de fuegos sea de unos 200-240 años implica que los grupos humanos que los hicieron estuvieron separados por varias generaciones de individuos que, incluso, nunca llegaron a conocerse. No hay que olvidar que son grupos cazadores-recolectores, que se mueven constantemente en busca de recursos.

Las implicaciones arqueológicas son enormes. Lo que se excava en un yacimiento como este no es más que una imagen aislada y concreta de todo un conjunto de actividades realizadas en un territorio mucho más amplio. Lo que aquí se ha obtenido son pequeños fotogramas de escenas de comportamientos humanos separadas por una secuencial temporal que, por primera vez, se plasma con una precisión hasta ahora desconocida, lo que permitirá entender mucho mejor el comportamiento humano en el pasado a través de la Arqueología.

22 de febrero de 2023

Proponen el uso turístico del yacimiento arqueológico del Acequión

El Ayuntamiento de Albacete concurrirá a los fondos Next Generation de la Unión Europea para el uso turístico y cultural del yacimiento del Acequión. El yacimiento arqueológico del Acequión es el más importante del término municipal de Albacete, tanto por sus dimensiones, como por su relevancia histórica, donde se encontraron vestigios de poblaciones de la Edad del Bronce que empezaron a habitarlo con la laguna vacía, precisamente buscando agua en su subsuelo, en el año 2200-2300 aC, hace más de 40 siglos.

El alcalde de Albacete, Emilio Sáez, ha anunciado que el Ayuntamiento concurrirá a los fondos Next Generation de la Unión Europea para el uso turístico y cultural del yacimiento del Acequión. Así lo ha asegurado el regidor albacetense con motivo del acto divulgativo de presentación de este proyecto, celebrado esta tarde en el Teatro Circo, con la presencia, además, del concejal de Igualdad y Participación, Manu Martínez, y de otros y otras representantes de la Corporación, del presidente de la Diputación, Santiago Cabañero; del delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca, y del profesor de Prehistoria de la Universidad Complutense de Madrid y director científico del proyecto, Luis Benítez de Lugo.

El yacimiento arqueológico del Acequión es el más importante del término municipal de Albacete, tanto por sus dimensiones, como por su relevancia histórica, donde se encontraron vestigios de poblaciones de la Edad del Bronce que empezaron a habitarlo con la laguna vacía, precisamente buscando agua en su subsuelo, en el año 2200-2300 aC, hace más de 40 siglos.

Después de numerosos cambios en la población, incluso de muchos siglos sin estar habitado, volvió a acoger población estable en la Edad del Hierro, en la cultura ibérica, que se asentaron sobre las ruinas del poblado de la época ibérica. Forma parte de la cultura de las Motillas, que surgió en la zona de la Mancha en la Edad del Bronce, fortificaciones redondas aparecen en momentos de altísima sequía con la intención de proteger sus bienes más preciados: los pozos de agua.

Primeros estudios
Fue investigado en la década de los 80, dejando importantísima información sobre sus pobladores, y encontrándose gran cantidad de piezas, que están bajo la protección del Museo Provincial de Albacete. La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha lo declaró Bien de Interés Cultural (BIC) en 1991 y desde entonces, no había habido ningún avance al respecto, deteriorándose de una forma evidente al haber quedado sus muros excavados a la intemperie.

En cuanto a los terrenos donde se asienta, son de titularidad privada, de la familia Núñez-Robres Escrivá de Romaní, con la que se ha alcanzado un acuerdo de cesión, gesto que se ha agradecido esta tarde en el Teatro Circo. Se trata de una extensión circular, al centro de la laguna, de 14.338 metros cuadrados, así como otros 713 metros cuadrados como servidumbre de paso desde el camino. La cesión se realiza por un plazo de cinco años, hasta febrero de 2028, prorrogable 20 años más en iguales periodos de cinco años. La familia ha explicado que siempre ha existido voluntad de colaborar con el Ayuntamiento y objetivo común: la preservación y mantenimiento del yacimiento.

El concejal de Igualdad y Participación se ha referido a los pasos dados hasta ahora, recordando cuando, en marzo de 2021, la Asociación Patrimonio Albacetense pidió al Ayuntamiento de Albacete, a través de Foro Abierto, que volviera a prestar atención a este yacimiento. En septiembre de 2021, se constituyó el Comité Asesor para su recuperación y puesta en valor, compuesto por los arqueólogos de las excavaciones de los años 80 y por representantes de la Universidad Complutense de Madrid, Universidad de Castilla-La Mancha, Uned, Universidad Autónoma de Madrid, el Museo de Albacete, el Instituto de Estudios Albacetenses, el Colegio Profesional de la Arquitectura de Castilla-La Mancha y la Asociación Patrimonio Albacetense.

Otros trabajos
Siguiendo con la cronología, en 2022 se realizó un estudio superficial y con georadar de la zona del yacimiento. Encargado a la Universidad de Cádiz, se concluyó con que existen vestigios de época del Bronce, Ibérica y Romana y se ubican con radar los lugares exactos de ubicación de los muros y elementos de construcción que hay bajo la laguna.

También se ha llevado a cabo hasta la fecha un estudio traceológico de cuatro piezas de metal. Se analizaron tres hachas y un puñal que estaban depositados en el Museo Provincial de Albacete para conocer, a través de los trazos sobre el metal, el uso que estos elementos tenían, lo que ha permitido avanzar y mejorar en el conocimiento de los hábitos de vida de los pobladores.

Además, se han catalogado y escaneado en 3D hasta 69 piezas, tratándose del primer catálogo fotografiado y descrito de las principales piezas del yacimiento, de nuevo gracias a la colaboración del Museo de Albacete.

A partir de ahora
Y a partir de ahora, los trabajos consistirán en el vallado de la zona de la Motilla de la Edad del Bronce para evitar expolios, junto con la limpieza vegetal del yacimiento a través de métodos que no pongan en riesgo los muros y las construcciones. Sobre el yacimiento ha nacido vegetación cuyas raíces están comprometiendo el resto arqueológico.

También se van a adoptar medidas de protección y consolidación de los muros descubiertos y, según ha dicho el alcalde, se va a presentar el proyecto a la convocatoria de los fondos europeos Next Generation de la Unión Europea para acometer obras sobre elementos patrimoniales con fines turísticos. En este sentido, el subdelegado del Gobierno ha asegurado que el Ayuntamiento de Albacete y el Gobierno de España comparten un mismo objetivo: “avanzar hacia la dinamización de la economía, el turismo y del patrimonio”, tal y como ha quedado patente en los últimos años.

“Se ha trabajado mucho en muy poco tiempo para dar a conocer y poner en valor este yacimiento, una propuesta que partió de la propia ciudadanía”, ha recordado Emilio Sáez, quien ha agradecido el trabajo de la Concejalía de Participación Ciudadana y de concejal, Manuel Martínez, “por la implicación y la coordinación de todos los trabajos realizados por los diferentes agentes”. El propio concejal de Igualdad y Participación ha querido resaltar también la importancia de este proyecto que, en sus palabras, “supone abrir una ventana a lo que sucedía en Albacete en la Edad de Bronce”.
(Fuente: +Que Alba)

2 de diciembre de 2022

En la Roma de Lobos aflora una zona de procesado de púrpura, un conchero y un 'vertedero'

Durante quince días, y dentro de la séptima campaña arqueológica, el Cabildo de Fuerteventura y Museos de Tenerife profundiza en la huella del Imperio Romano en el yacimiento Lobos I. El consejero de Patrimonio Histórico espera que los fondos del taller romano de elaboración de púrpura regresen a Fuerteventura y se expongan en el Museo Arqueológico.
Los arqueólogos trabajan en el yacimiento Lobos I. Bajo las planchas metálicas, están tapados los seis recintos en forma de L y los seis concheros descubiertos en las seis campañas anteriores. / JAVIER MELIÁN / ACFI PRESS

El Imperio Romano sigue asomando -y con toda la fuerza de una centuria de ocupación, entre casi la mitad del siglo I de la era hasta la mitad del siglo I después de la era- en el yacimiento arqueológico de la Isla de Lobos. Cuando se cumplen diez años de su descubrimiento casual en la playa de la Concha, el taller de producción de púrpura entra en su séptima campaña que se desarrolla durante quince días sobre 18 metros cuadrados donde han aflorado una zona de procesado de púrpura, con restos de combustión y manchas de color púrpura que son indicios de que se preparaba allí el tinte; un nuevo conchero; y una zona de detritus, o 'basurero', donde han aparecido restos de cetáceos, cerámica y metales (entre ellos, anzuelos).

Estas nuevas estructuras confirman que el yacimiento arqueológico Lobos I se extiende hacia el suroeste, algo que habrá que corrobar en sucesivas campañas que organizan el Cabildo de Fuerteventura con el organismo autónomo de Museos de Tenerife y que codirigen la cátedratica de la Universidad de La Laguna Carmina del Arco, la doctora Mercedes del Arco, e Isidoro Hernández por el Museo Arqueológico de Fuerteventura. Durante esta séptima campaña arqueológica, trabaja en el taller romano de púrpura un equipo multidisciplinar formado por ocho arqueólogos (entre los que se encuentran los tres codirectores), una paleontóloga y cuatro operarios.

Por las planchas de metal y la valla se sabe dónde está el yacimiento de la factoría de tinte en la playa de la Concha. Bajo el techo, protegidos del sol, el viento y los curiosos, están las seis estructuras habitacionales en forma de L y los seis concheros (dos de ellos excavados) que afloraron en las seis campañas anteriores y que ocupan unos 480 metros cuadrados.

De estos seis receptáculos cuadrangulares aún se desconoce su utilidad exacta, aunque seguramente servirían para depositar las herramientas del taller de elaboración de la púrpura y para zonas de trabajo de procesado del tinte.

Brocha en mano para limpiar la arena de los restos que van a apareciendo, los arqueólogos trabajan esta mañana bajo el sol de Lobos en los 18 metros cuadrados -nueve metros de largo y dos metros de ancho- que centran la campaña actual y que se dividen en cuatro cuadrículas.

En la cuadrícula de la zona de procesado de la púrpura, Ramón Cebrián-Guimerá, doctor en Historia precisamente con la tesis sobre el trabajo de los operarios del taller de pesca y extracción en Lobos del tinte púrpura de Muricidae en época de la Roma Imperial, encuentra restos del molusco stramonita haemastoma -que en Fuerteventura se le llama canaílla- y la muestra a las cámaras. «Se aprecia el golpe que le dieron para extraer la glándula hipobranquial».

Como el molusco que enseña Ramón Cebrián-Guimerá, se han encontrado hasta ahora 184.507 ejemplares, lo que significa una capacidad de tintado de 26 kilos de lana. El proceso de elaboración del tinte comenzaba con la fracturación de la thais por la zona dorsal buscando la glándula hipobranquial que se aloja en la cavidad paleal. «Una vez fracturado el molusco, se extrae con un elemento metálico la glándula hipobranquial que se deposita en grandes ollas de plomo con otras sustancias alcalinas y agua salada».

Esta mezcla de glándulas hipobranquiales, sustancias alcalinas y agua de mar se macera durante una semana con calor tenue, como recoge la fuente textual más importante que es Plinio. Transcurridos los siete días, se empezaban a hacer las primera pruebas de tintado: « se sumergía el vellón de lana o de seda para comprobar si ya tenía el color adecuado«, detalla Cebrián-Guimerá.

Frente a la cuadrícula del doctor en Historia, asoman los vestigios de una nueva estructura muraria que puede ser que protegiera esta zona de trabajo del taller romano de tinte. «El objetivo de esta nueva campaña arqueológica es ampliar la división del Lobos I hacia el suroeste, es decir hasta dónde llega el yacimiento», afirma Isidoro Hernández Sánchez, codirector de la prospección y técnico conservador del Museo Arqueológico Fuerteventura.

Hernández Sánchez recuerda que el yacimiento de la factoría de púrpura de la Isla de Lobos es el yacimiento romano más al sur del Atlántico y que señala el límite del Imperio Romano. A lo que suma que es el yacimiento arqueológico más antiguo de Fuerteventura, datado entre la casi mitad del siglo I de la era hasta la mitad del siglo I después de la era, y que hay que mirar al yacimiento del poblado de Butihondo, en Jandía, para encontrar al segundo en antigüedad: siglo II y relativo a otra cultura muy distinta a la romana, la de los mahos.

Las cerámicas, los metales, los moluscos y los restos de fauna marina y terrestre encontrados en el yacimiento del taller romano de púrpura deben lucir en el Museo Arqueológico de Fuerteventura. Es la demanda que el consejero de Patrimonio Histórico del Cabildo, Rayco León, hizo en las mismas excavaciones.

Ahora mismo, los fondos de las seis campañas (dos sondeos y cinco excavaciones) se encuentran depositados en el Museo Arqueológico de Tenerife, por lo León pide que regresen a Fuerteventura. A lo que añadió que el yacimiento «es uno de los lugares más importantes en la historia arqueológica de Fuerteventura y Canarias. Por eso reivindicamos la importancia de estas campañas continuadas, agradeciendo a la Universidad de La Laguna y Museos de Tenerife por la continuidad de las investigaciones. Serán una de las piezas más relevantes que formarán parte del Museo Arqueológico de Fuerteventura, institución que debe liderar el estudio e investigación en la isla».

23 de noviembre de 2022

La Asociación Europea de Arqueólogos premia una foto de un yacimiento de La Palma

La imagen de la estación rupestre de El Verde, en el municipio de El Paso, fue realizada por José Farrujia de la Rosa, profesor de la Universidad de La Laguna

La Asociación Europea de Arqueólogos (European Association of Archaeologists, EAA), ha concedido el Premio The European Archaeologist Photojournalist of the year 2022 al profesor de la Universidad de La Laguna (ULL), José Farrujia de la Rosa, por su foto del yacimiento rupestre de El Verde, emplazado en el municipio de El Paso, en el que se recoge el momento del ocaso solar durante el solsticio de verano.

La Asociación Europea de Arqueólogos, que anualmente concede tres premios sin distinción dentro de este certamen, propuso como lema de la edición ¿Cuál es el espíritu de la arqueología en el año 2022? y la elaboración de un texto explicativo que acompañara a la fotografía.

En la imagen galardonada se capta el atardecer del 17 de junio de 2022 y la proyección de la luz del sol sobre un panel rupestre grabado con una espiral.

La imagen fue tomada por Farrujia en el marco de un proyecto de innovación y transferencia educativa, desarrollado desde el Área de Didáctica de las Ciencias Sociales de la ULL bajo el título Aprendizaje activo y patrimonio cultural desde la Didáctica de las Ciencias Sociales.

El proyecto, centrado en la educación patrimonial y destinado al alumnado que cursa el Grado de Maestro/a en Educación Primaria de la Facultad de Educación, aboga precisamente por el aprendizaje contextual y por los itinerarios patrimoniales como estrategias didácticas claves en la formación inicial del alumnado del referido grado.

Farrujia indica que una buena imagen puede ayudar a complementar la explicación didáctica de un yacimiento y a facilitar su comprensión por parte del alumnado, especialmente cuando lo que se explica durante la visita es un fenómeno puntual que sólo se registra en determinados momentos del año.

“Las culturas ancestrales basadas en la ganadería y la agricultura, como es el caso de los indígenas de las Islas Canarias, llevaban a cabo sus principales celebraciones durante el verano. En el momento del solsticio, es decir, cuando el sol alcanzaba su órbita más alta, comenzaba el año para los antiguos canarios. A partir de entonces recogían sus cosechas y unían a las cabras con los machos para garantizar la cría”, explica Farrujia en su texto.

Durante el solsticio y al atardecer, tal y como se aprecia en la foto premiada, el Sol al descender, proyecta su luz por el hueco que se ve en la silueta de la montaña e ilumina la roca grabada con la espiral.

“Por eso los antiguos palmeros eligieron estas rocas del barranco, y no otras, para dejar su huella, porque justo allí ”Magec“, el Sol, proyectaba y sigue proyectando su luz al atardecer y sigue anunciando la llegada del verano”, relata José Farrujia.

El premio concedido implica, entre otros aspectos, la reproducción de la foto en la portada del boletín insignia de la arqueología europea, The European Archaeologist (El/la arqueólogo/a Europeo/a), que se difunde entre los más de 11.000 miembros de la Asociación, procedentes de más de 60 países de todo el mundo.

Asimismo, la imagen se difundirá como parte de las actividades promocionales de la asociación y en sus redes sociales, con lo que ello implica para la divulgación de los valores del patrimonio arqueológico canario en el ámbito internacional.

Este galardón, según Farrujia, no hubiera sido posible sin la labor de la Asociación Iruene La Palma y sin los estudios que viene desarrollando en los últimos años su presidente, Miguel Ángel Martín González, sobre la cosmovisión de los antiguos palmeros.

“La arqueología y la educación patrimonial pueden mantener vivo el eco del pasado y, al hacerlo, nos ayudan a comprender mejor nuestro entorno y su valor”, concluye Farrujia en el texto que acompaña a la imagen galardonada.

José Farrujia de la Rosa es el actual Vicedecano del Grado de Primaria, Cultura y Proyección Social de la Facultad de Educación de la universidad lagunera, además de ser autor de diferentes publicaciones y textos científicos sobre el estudio de la vida de los antiguos canarios.

29 de julio de 2019

La Beleña, una "cápsula del tiempo" de hace 5.000 años

La cueva, con numerosos restos humanos desde el Neolítico en buen estado de conservación, fue hallada de forma casual en 2015. El pasado lunes salió a la luz el descubrimiento de un ídolo funerario con más de 5.000 años de antigüedad
Arqueólogos en la entrada de la cueva de La Beleña. FOTO: FELIPE OSUNA / ABC
El descubrimiento de la cueva de La Beleña de Cabra (Córdoba) ha sido sin duda uno de los hallazgos arqueológicos más destacados en las últimas décadas en el municipio egabrense, al que se suman el de la Villa del Mitra y el yacimiento íbero del Cerro de la Merced. Esta semana La Beleña ha saltado a la opinión pública por la aparición del ídolo placa el pasado lunes en la campaña de excavación que se viene llevando a cabo y que debido a su antigüedad (en torno a 5.300 años) muestra la importancia que tuvo la zona del sur de Córdoba. Por si solo, el ídolo muestra el contacto entre culturas de los habitantes que poblaban la zona con otros procedentes de lugares como el Algarve portugués o Extremadura, donde estos símbolos son más abundantes.

La Beleña es una apuesta por el patrimonio del Ayuntamiento de Cabra, entidad que sufraga las campañas de excavación que se llevan a cabo desde su aparición de forma casual por un agricultor. Durante la realización de una labores agrícolas en su olivar, el propietario comprobó que se abría una oquedad en la tierra y aparecía algo parecido a una cueva en la que a priori podían identificarse restos humanos. Tras alertar a las autoridades, se pudo comprobar que se trataba de un yacimiento arqueológico de gran importancia. Era mayo de 2015, y las excavaciones arqueológicas se iniciaron casi de inmediato; los investigadores ya van por la quinta campaña.

Los trabajos de investigación corren a cargo de la Universidad Canaria de La Laguna, cuyos responsables auguran descubrimientos interesantes que poco a poco han ido viendo la luz, siendo el último la aparición del ídolo placa.

CAMPAÑAS ANTERIORES
Ya en los prolegómenos de la campaña actual –sufragada con un montante de 50.000 euros procedentes de las arcas municipales egabrenses- la directora del proyecto, Dolores Camalich, aseguraba que iba a ser la de mayor amplitud. Aún no se sabe cuáles son las dimensiones reales del yacimiento, ya que no se ha alcanzado la base de un depósito en el que han ido apareciendo progresivamente numerosos efectos de carácter funerario que revelan que las estructuras han sido objeto de uso en varias etapas.
Campañas anteriores

Durante las campañas de 2015 y 2016 se pudo documentar una treintena de individuos con un estado de conservación excepcional, lo que posibilitó que el yacimiento arqueológico se integrara en el proyecto de investigación internacional Iberia, financiado por Australian Research Council y Swedish Research Council.

Dicho proyecto está destinado a hacerse cargo de los gastos derivados de las analítica a realizar en la Universidad de Uppsala (Suecia), que cuenta con la participación de numerosos investigadores internacionales con el objetivo conocer el origen de las primeras sociedades de agricultores y ganaderos en Andalucía.

UN YACIMIENTO CLAVE

La necrópolis de la Beleña constituye un yacimiento clave por su situación geográfica, excepcionalidad del registro antropológico documentado y cronología. Los resultados permitirán reconocer los movimientos migratorios, el origen y el legado de las sociedades prehistóricas, así como el desarrollo del Neolítico en la región dentro del marco general europeo.

Antes de la aparición del ídolo, la coordinadora de los trabajos ya expresaba su pretensión de exponer los materiales, la información y las conclusiones de las cinco campañas de excavación en el Museo Arqueológico de Cabra.

Los profesores participantes en la campaña se han mostrado eufóricos con el hallazgo del ídolo placa, al igual que los responsables municipales, sobre todo el alcalde, Fernando Priego, quien ha afirmado la obligación del Ayuntamiento en promover este tipo de iniciativas ante la importancia de que la ciudad de Cabra conserve y atesore estos recursos «porque, al final, también van a propiciar visitas y desarrollo turístico».

21 de julio de 2017

El Cerro de la Merced afronta su sexta campaña de investigación

Las labores se centrarán en el trabajo de laboratorio sobre los materiales encontrados en años anteriores, así como el cerramiento y la protección del yacimiento de Cabra (Córdoba)
Presentación de la campaña en el Museo Arqueológico de Cabra. FOTO: A.J. ROLDÁN
Por sexto año consecutivo el Ayuntamiento de Cabra ha dado inicio a la campaña estival de estudio en el yacimiento del Cerro de la Merced, un poblado íbero ubicado en el término municipal egabrense y en el que un equipo de arqueólogos comandados por el doctor en Prehistoria Arqueología de la Universidad Autónoma de Madrid, Fernando Quesada, viene desarrollando un concienzudo programa de excavación e investigación que está dando sus frutos, puesto que las conclusiones recabadas hasta el momento han conseguido llamar la atención de la comunidad científica internacional al considerarse un fiel testimonio de la vida de las comunidades íberas en la península entre los siglos IV y I antes de Cristo.

Para esta nueva edición, que dará comienzo en los próximos días, los investigadores fijarán la prioridad en la consolidación, protección y puesta en valor del yacimiento, empleando para ello novedosas técnicas de reconstrucción digital para una mejor comprensión por parte del visitante. Además, ya se trabaja en el estudio de los materiales hallados con vistas a su publicación, para lo cual se desarrollará una nueva campaña de análisis de las cerámicas, armas, molinos o utensilios de piedra y metal encontrados en el Cerro de la Merced.

Así se hizo público ayer en un acto al que asistió, además del alcalde egabrense, Fernando Priego, y el profesor Quesada, el arqueólogo provincial de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, Alejandro Ibáñez, dada la colaboración institucional entre ambas administraciones en torno a este proyecto.

TRABAJO DE LABORATORIO
"Por cada hora de trabajo en el campo hay tres en el laboratorio", indicó el arqueólogo, quien justificó que en este sexto año la actividad se centre en la investigación y el estudio de lo ya encontrado. Un trabajo que "está permitiendo descubrimientos" como, entre otros, el hallazgo de una moneda con estampaciones y símbolos que la ubican en 1659 y relaciona el yacimiento con el proceso de búsqueda de tesoros registrado tras la expulsión de los moriscos por Felipe IV, "que supuestamente habían dejado riquezas escondidas a la espera de su vuelta", o la aparición de cuatro hachas pulidas de origen neolítico "de casi 4.000 años antes de la datación del poblado" en la zona del palacio de aquel asentamiento.

Igualmente, el equipo investigador se encuentra culminando el proceso de dibujo técnico y digitalización de alrededor de dos millares de piezas encontradas en el Cerro de la Merced "con vistas a la presentación de la memoria provisional de resultados" a la Junta de Andalucía que permitirá "adelantar el proceso de declaración como Bien de Interés Cultural del yacimiento", algo que le otorgará "una categoría reconocida para su protección" y "gran valor", precisó Quesada.

APUESTA POR LA ARQUEOLOGÍA
"No va a haber excavación en el Cerro de la Merced pero eso no significa que el proyecto esté acabado", aclaró el regidor egabrense, quien agradeció la "importante responsabilidad" que asumieron el profesor Quesada y su equipo con el yacimiento, consiguiendo colocar al municipio en el mapa de la arqueología nacional gracias tanto a este asentamiento íbero como a las cuevas artificiales de La Beleña, que están siendo excavadas por expertos de la universidad canaria de La Laguna. Para ambos, el Consistorio ha destinado solo en esta anualidad más de 100.000 euros de presupuesto, a lo que hay que sumar la partida de 50.000 euros dirigidos a sufragar los gastos de construcción de muros de contención y cerramiento del campo de trabajo ayer presentado.

12 de julio de 2017

Buscan el campamento militar que dio origen a la ciudad romana de Pollentia (Mallorca)

El descubrimiento de una fosa de un campamento militar confirmaría que la ciudad romana es posterior al 123 a.C. Un centenar de arqueólogos y voluntarios se afana en desvelar los secretos de esta ciudad romana.
Un centenar de arqueólogos y voluntarios trabajan en las excavaciones de Pollentia. FOTO: MAR PÉREZ.
Los investigadores del yacimiento de Pollentia están cada vez más cerca de confirmar la verdadera edad de la ciudad romana. Sospechan que la metrópolis situada en Alcúdia data del 70 a.C. y no del 123 a.C. como recogen las fuentes escritas. Los arqueólogos, que siempre han sospechado de esta discordancia entre las fuentes arqueológicas y las documentales, basan esta hipótesis en el hallazgo de una fosa de un campamento militar"Siempre pensamos que quizás en el primer momento de conquista romana crearon un campamento y que, en generaciones posteriores, se levantó la ciudad que conocemos ahora", detalla el codirector del yacimiento Miquel Àngel Cau.

El inicio de esta excavación y el posterior estudio confirmarán la verdadera edad de la ciudad. Después se decidirá la estrategia de cómo proseguir con los estudios de Pollentia.

Durante las campañas extensivas de 2015 y 2016 se realizó un programa de prospección y oficio de geofísica en el que se encontraron los restos de la fosa del campamento que en estos momentos se está empezando a excavar.

Por otra parte, el equipo que se encuentra en el yacimiento desde el pasado 3 de julio y que estará excavando hasta día 28, se distribuye en diversos puntos de la ciudad: en los foros; en la fortificación tardía y en la necrópolis del sur para encontrar restos de enterramientos y obtener información de cómo vivían. La novedad este año está en la zona norte, donde se encuentra la fosa militar, denominada Campament de'n França.

Más de 90 personas participan estos días en la XIX Edición del Curso de Arqueología Antonio Arribas. El equipo está formado por estudiantes, profesionales, colaboradores y voluntarios de diferentes partes del mundo que vienen a pasar el verano a la ciudad romana de Alcúdia bajo la dirección de Cau, del ICREA y la Universitat de Barcelona, y de Esther Chávez de la Universidad de La Laguna. Desde ArchaeoSpain de Connecticut, de la Universidad de Portland, de Portugal, Francia, Italia y toda España llegan expertos y estudiantes dispuestos a averiguar la verdadera historia y edad de Pollentia.


UNA ESCUELA DE ARQUEOLOGÍA
"Queremos aprovecharnos de vuestro trabajo", exclama el alcalde Alcúdia, Antonio Mir, quien agradeció la ilusión a todos los participantes de este verano. El estudio de Pollentia dentro de la arqueología romana es muy importante: "Este lugar es una escuela. Por aquí han pasado muchas generaciones que trabajan ahora en arqueología romana por España", explica Cau. "Sin el apoyo del Consorcio de Pollentia formado por Ayuntamiento de Alcúdia, el Govern Balear y el Ministerio de Cultura, no serían posibles estas excavaciones", continúa el investigador. Además, este año han contado con apoyo local. "Cualquier tipo de ayuda es buena" prosigue. "El Grupo Garden nos aporta una parte de la comida de los participantes", detalla.

Los responsables de Pollentia reinvindican un museo propio. Una idea que ha evolucionado y que ahora se materializaría en un centro de investigación de la época romana con el fin de dinamizar y mostrar el trabajo que se lleva a cabo en Mallorca. Es un proceso muy lento: "Un proyecto que va por fases, igual que esta excavación. Pero queremos poner la primera piedra en esta legislatura", dice el alcalde.

2 de diciembre de 2016

Un proyecto general abordará la necrópolis neolítica de La Beleña, en Cabra (Córdoba)

Hay evidencias que apuntan la existencia de una cavidad superior también relacionada con enterramientos. La necrópolis neolítica de Cabra fue sellada 5.000 años antes de nuestra era y permaneció intacta hasta su descubrimiento casual en 2015.
Miembros del equipo científico con responsables municipales y el director del Museo de Cabra. FOTO: J.M.
El equipo científico de la Universidad canaria de La Laguna, dirigido por la arqueóloga Dolores Camalich, va a solicitar a la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía un proyecto general de investigación para desarrollar en el yacimiento arqueológico de la necrópolis de La Beleña.

Así lo ha señalado la propia Camalich en el transcurso de la presentación de la pieza del mes del Museo Arqueológico Municipal, una punta de lanza de dicho yacimiento, tras las campañas de excavación arqueológicas realizadas en los dos últimos años como consecuencia de la emergencia que surgió en el 2015 y para lo que se han tenido en cuenta los resultados logrados en las prospecciones geofisicas que marcaban la inestabilidad de parte del yacimiento y que determinaron la necesidad que para poderla controlar, urgía prorrogar la acción preventiva iniciada en su momento.

Este proyecto general de investigación viene avalado, añadía, por la existencia de evidencias de una cavidad superior de estructuras que deben estar interrelacionadas también con enterramientos. Todo ello marcado por una serie de objetivos vinculados al propio trabajo de excavación e investigación por todo lo que pueden proporcionar de conocimientos a nivel científico y patrimonial, con el fin último de puesta en uso público para disfrute de los ciudadanos.

El yacimiento de esta necrópolis, que se ha incorporado al proyecto de investigación internacional IBERIA y más recientemente a un proyecto de I+D del Ministerio de Economía y Competitividad, ha permanecido intacto desde que se sellara unos 5.000 años a.C., permitiéndole pervivir a lo largo de todo este tiempo sin sufrir ninguna alteración hasta su hallazgo casual en el 2015.

29 de septiembre de 2016

Los técnicos toman muestras de ADN en los enterramientos neolíticos de La Beleña, en Cabra (Córdoba)

El buen estado de conservación de los restos hallados en la necrópolis neolítica del yacimiento de Cabra (Cördoba) permiten a los técnicos tomar muestras del ADN de treinta individuos que se incorporarán al proyecto internacional que realiza el mapa genómico de las poblaciones prehistóricas del sur de la península ibérica.
Los investigadores Aioze Trujillo, Ricardo Rodríguez y Cristina Valdiosera. FOTO: JOSÉ MORENO.
Los trabajos arqueológicos realizados en el yacimiento arqueológico de La Beleña, en Cabra (Córdoba), durante las campañas de los años 2015 y 2016 y que han permitido documentar casi una treintena de individuos con un estado de conservación excepcional, han servido para posibilitar que éste conjunto se integre en el proyecto de investigación internacional Iberia, financiado por Australian Research Council y Swedish Research Council, según ha informado la delegación municipal de Patrimonio y Cultura.

Para ello, los investigadores Cristina Valdiosera, de la Universidad de Trobe (Melbourne, Australia), y Ricardo Rodríguez, del Centro Mixto UCM-ISCIII (Madrid), junto con Aioze Trujillo Mederos, de la Universidad de La Laguna (Tenerife) y miembro del equipo de la excavación en la necrópolis de La Beleña, han estado en el Museo Arqueológico de Cabra tomando muestras para los estudios de ADN antiguo de los restos humanos identificados.

Este proyecto, que se hará cargo de los gastos derivados de las analítica que se van a realizar en la Universidad de Uppsala (Suecia), cuenta con la participación de numerosos investigadores a nivel internacional y busca conocer el origen de las primeras sociedades de agricultores y ganaderos en Andalucía, creando el primer mapa genómico de poblaciones neolíticas y calcolíticas del sur de la Península Ibérica.


La necrópolis de la Beleña constituye un yacimiento clave por su situación geográfica y excepcionalidad del registro antropológico. Los resultados permitirán reconocer los movimientos migratorios, el origen y el legado de las sociedades neolíticas.
(Fuente: Diario Córdoba / José Moreno)

13 de abril de 2016

Eclipses de Sol y de Luna decoraban la cerámica de los antiguos canarios

Los antiguos canarios reflejaron en la decoración de cerámicas y pintaderas eclipses concretos de Sol y de Luna, según un estudio pionero del arqueólogo José Juan Jiménez González, que ha registrado 448 fenómenos astronómicos de este tipo visibles en Canarias en los siglos XIV y XV.
Cerámica aborígen de Aguimes que muestra un eclipse de sol. FOTO: MUSEO ARQUEOLÓGICO DE TENERIFE.
Con esta investigación la decoración de cerámicas y pintaderas "cobra otro sentido", afirma en una entrevista a José Juan Jiménez, conservador del Museo Arqueológico de Tenerife, que impartirá el miércoles 13 de abril la Conferencia Arqueología en penumbra. Eclipses en el Museo de la Naturaleza y el Hombre (MNH).

El evento supone la quinta Cita etnoastronómica abierta al público que organiza la Asociación de Amigos del MNH con el apoyo de Museos del Cabildo de Tenerife y José Juan Jiménez detallará cómo incidieron los eclipses en la arqueología canaria y su representación en objetos arqueológicos.

PREDECIR LOS ECLIPSES
También ahondará en qué supuso para los antiguos canarios que la luminosidad se difuminase en la penumbra con una periodicidad cíclica "que ellos fueron capaces de registrar -para predecir los eclipses- mediante el cómputo de lunaciones citado en las fuentes etnohistóricas, para lo cual debieron conocer el Saros o Ciclo de Saros que acontece cada 223 lunas nuevas, o sea cada 18 años y 10 u 11 días".

Todo comenzó con varias cuestiones que se planteó el especialista: "¿por qué en algunos vasos cerámicos reprodujeron escenas que alternaban y solapaban las figuras del sol y de la luna? ¿Para qué las superponían en algunas pintaderas circulares?".

Entonces decidió contrastar esas semejanzas iconográficas con imágenes de eclipses y realizó un pormenorizado registro de 448 de ellos: 87 de Sol (19%) y 361 de Luna (81%) visibles desde Canarias en los siglos XIV y XV, "una catalogación sistemática con sus coordenadas de observación, fechas y horarios de avistamiento, magnitudes, conjunciones geocéntricas, declinaciones, ortos y ocasos, entre otros indicadores".

Estos datos los trasladó a programas informáticos "para lograr su conectividad revirtiéndola luego a imágenes y gráficos".

De esta forma "se pueden recrear esos eclipses mediante secuencias concatenadas sucesivas e ilustrar aspectos sorprendentes" indica Jiménez, que también es doctor en Prehistoria por la Universidad de La Laguna.

EXPERIMENTACIÓN PRÁCTICA
El conservador del Museo Arqueológico ha desarrollado una pionera experimentación práctica que vincula eclipses concretos con la decoración de sendos objetos arqueológicos y esta aplicación científica le permite concretar y proponer cronologías astronómicas para fechar descubrimientos arqueológicos carentes hasta ahora de datación convencional.

Además brinda la posibilidad de que los resultados no dependan del estado de muestras primigenias que pudieron estar expuestas a una contaminación o inadecuada manipulación, sino de la precisión de los cálculos y registros obtenidos de esos fenómenos astronómicos y hallazgos arqueológicos, añade el experto.

José Juan Jiménez menciona como ejemplo la pieza cerámica de tendencia ovoide e hiperbólica, bien conservada, procedente de Agüimes (Gran Canaria) y depositada en el Museo Canario, pintada al almagre en la panza con una circunferencia con radios externos y reserva interior, dos círculos con líneas radiales y dos anillos circulares con reserva, que para el especialista suponen las distintas fases de un eclipse de sol.

Ahora sugiere para esta cerámica una fecha astronómica "situada en el siglo XIV, entre los años 1350 y 1387, cuando se produjeron eclipses de sol de gran magnitud claramente visibles desde aquella localidad aborigen y, más concretamente, alude al eclipse acontecido el jueves 17 de julio de 1376 por su semejanza formal con el reproducido en la vasija".

Por tanto, "resulta evidente que los motivos decorativos de algunas cerámicas y pintaderas reproducen acontecimientos celestes extraordinarios para aquella sociedad", concluye el arqueólogo.

Al respecto recuerda el investigador que las sociedades canarias nativas también contaban con el cielo para observar fenómenos astrales y organizar sus tareas, como la orientación y alineación de construcciones hacia el sol, la luna, los planetas, las estrellas y las constelaciones, que influían en sus creencias, tradiciones orales y mitos celestes.

(Fuente: El Diario / EFE - Ana Santana)

21 de enero de 2016

Un panel rupestre hallado en Fuerteventura podría ser la piedra "Rosetta" del alfabeto indígena

En él se inscribió a la vez en caracteres líbico-latinos y líbico-bereberes la misma expresión: "hijo de Makuran".
La investigación se incluye en la ponencia científica "La cumbre escrita. El Cuchillete de Buenavista", que presentaron María Antonia Perera y José Juan Jiménez en las Jornadas de Estudios de Fuerteventura y Lanzarote y cuyo resumen difunden en internet el Archivo General del Cabildo de Fuerteventura y Museos de Tenerife.

INSCRIPCIÓN EN LÍBICO.LATINO Y BEREBER
José Juan Jiménez, que es conservador del Museo Arqueológico de Tenerife, señala en una entrevista que la inscripción de este panel abre grandes posibilidades de comprensión alfabética y precisa que en él se ha grabado en líbico-latino "hijo de Makuran y de Timamasi, hija de Timamasi" y en líbico-bereber "hijo de Makuran".

Los investigadores seguirán profundizando en esta investigación novedosa, pues se trata de la primera "genealogía de parentesco" descubierta hasta ahora de los antiguos habitantes de Fuerteventura y Lanzarote en un yacimiento rupestre en el que se escribieron en lengua líbica antigua nombres de personas emparentadas empleando dos alfabetos contemporáneos distintos.

Ello implica que en estas islas empleaban dos alfabetos y una misma lengua norteafricana, según se deduce de este descubrimiento arqueológico rupestre que constituye una aportación innovadora para la investigación del poblamiento antiguo de Canarias.

SIMULTANEIDAD DE ESCRITURAS
Según José Juan Jiménez, que también es doctor en Prehistoria por la Universidad de La Laguna, la utilización conjunta de estas expresiones alfabéticas explica el poblamiento de las islas más orientales del Archipiélago al comienzo de nuestra Era por un mismo grupo tribal que quedó disociado tras ser desembarcado en cada una de ellas "expuesto a los condicionantes de la insularidad durante más de mil años".

«Esta simultaneidad de escrituras destaca su procedencia de un ámbito líbico antiguo que tuvo contacto con alfabetos de raigambre latina difundidos en el norte de África merced a la romanización», señala el arqueólogo.

Esto se explica porque los descubrimientos rupestres insulares demuestran que manejaban dos alfabetos y empleaban una misma lengua líbica ubicada a inicios de nuestra Era en el entorno de la provincia romana de Tripolitania.

Para el científico, la escritura que R. Rebuffat encontró en el yacimiento de Gholaia (en la actual Libia) se asemeja a los caracteres descubiertos en Fuerteventura y Lanzarote, posteriormente considerados de ascendencia latina por W. Pichler.

Y su localización inicial cerca del limes Tripolitanus coincide con los emplazamientos defensivos situados para paliar los trasiegos de las tribus nómadas, como Tallibari y Gheriat el-Garbia, las granjas fortificadas de Suq el-Buzra, Qasr Banat y Gheriat esh-Shergia, en un ámbito territorial de romanización, señala el experto.

Según el conservador del Museo Arqueológico, «los caracteres alfabéticos se corresponden con palabras que denotan nombres de ascendientes, antepasados, apelativos étnicos, deidades y elementos astrales».

TÉCNICA DE EJECUCIÓN
Y en cuanto a la técnica de ejecución añade que las inscripciones líbico-bereberes suelen aparecer piqueteadas o incisas, mientras las líbico-latinas se promovieron mediante rayados e incisiones dependiendo cada caso de una u otra isla.

Si bien no suelen aparecer superpuestas, algunos hallazgos reflejan la solapada influencia y «mayor frecuencia en Fuerteventura de la escritura líbico-latina frente a la líbico-bereber mientras en Lanzarote sucede lo contrario, como ha demostrado María Antonia Perera, añade el arqueólogo.

De momento, el alfabeto líbico-latino sólo ha sido descubierto en Fuerteventura y Lanzarote, mientras el líbico-bereber se encuentra presente en todas las islas del archipiélago canario con diversas variantes.

(Fuente: El Día / EFE)

23 de noviembre de 2015

Descubren intacto un enterramiento colectivo de hace 5.000 años en Cabra (Córdoba)

La necrópolis calcolítica se ha descubierto intacta. Se trata de un enterramiento colectivo en cueva artificial, cubierto por una cámara circular abovedada de unos 3 metros de diámetro y pasillo o corredor de acceso. Trabajos posteriores a la excavación han dado como resultado la identificación de restos de 20 individuos.
Este yacimiento supone el único hallazgo de este tipo y época en la mitad sur de la provincia.
Las investigaciones del yacimiento arqueológico de La Beleña II en Cabra (Córdoba) avanza y el equipo de la Universidad de La Laguna (Tenerife) que desarrolla los estudios y que dirigieron las excavaciones realizadas el pasado mes de julio, han presentado los últimos resultados.

Para ello los responsables de la investigación, Dolores Camalich, profesora Titular en el Departamento de Prehistoria, Arqueología, Antropología e Historia Antigua de la Universidad de La Laguna y directora de la excavación, Ayoze Trujillo, antropólogo físico, y Dimas Martín, catedrático de Prehistoria de ese centro universitario. Los datos han sido hechos públicos mediante dos conferencias, una dirigida a estudiantes en el Teatro El Jardinito en la mañana del 20 de noviembre, y una segunda ese mismo día en el Museo Arqueológico de Cabra.

YACIMIENTO ÚNICO
Según los investigadores, este yacimiento detectado el pasado mes de mayo supone el único hallazgo de este tipo y época en la mitad sur de la provincia. Se trata de un enterramiento colectivo en cueva artificial, cubierto por una cámara circular abovedada de unos 3 metros de diámetro y pasillo o corredor de acceso.

Se cuenta con dataciones precisas de este yacimiento Calcolítico, de tal modo que se estima que la antigüedad del enterramiento se sitúa en unos 5.000 años, y que fue usado durante unos 300 años. De cualquier modo se va a realizar de inmediato una datación de los restos hallados de manera individual para ser más precisos en este aspecto.

Los trabajos posteriores a la excavación han dado como resultado la identificación de restos de 20 individuos, hombres y mujeres de diferentes edades, en concreto de 8 mujeres, 7 hombres y el resto infantiles.

El enterramiento en este caso es colectivo y fue empleado como tal a lo largo del tiempo, de manera continuada, es decir que los cuerpos no fueron enterrados a la vez. Según ha destacado el antropólogo forense Ayoze Trujillo, los restos óseos no presentan indicios de patologías relevantes, tan sólo signos de artrosis en huesos de individuos de mayor edad, alguna fractura sin complicación, por lo tanto ello indica que no murieron a consecuencia de una epidemia o a consecuencia de un conflicto armado.

UNA DIETA BASADA EN PROTEINAS DE ORIGEN ANIMAL
Además los estudios de los restos óseos han hecho posible saber que la dieta de estas personas se basaba en las proteínas de origen animal, según ha explicado Ayoze Trujillo. Otro dato interesante es el dimorfismo sexual pronunciado que muestran los restos, es decir diferencias fisiológicas entre hombres y mujeres, ya que los esqueletos de hombres muestran mayor estatura que las mujeres y mayor robustez.

Las diferencias con otros yacimientos del mismo período radican en que se trata de un yacimiento que estaba intacto, y que dada la época en que ha sido hallado, permitirá un estudio más profundo que en otros lugares, donde se realizaron años atrás, ahora será posible un trabajo más profundo.

Un dato indiscutible que los investigadores vienen resaltando desde el inicio es que en las proximidades de este enterramiento existía un asentamiento humano de entidad. De este modo las futuras actuaciones están pendientes de la realización de una prospección geofísica en la zona para determinar la existencia de otros enterramientos similares, algo que se considera bastante probable, con lo cual la zona sería en realidad una necrópolis, no enterramientos individuales.

Otro aspecto en el que se va a trabajar es en el estudio del ADN de los restos, que puede comprobar si hay parentesco entre los individuos que fueron enterrados en este lugar, lo que a su vez permitiría determinar su procedencia y el carácter del enterramiento.

(Fuente: Sur de Córdoba)

19 de noviembre de 2015

Arqueólogos localizan el posible embarcadero romano de la Isla de Lobos, en Fuerteventura

Según Carmen del Arco, directora de la excavación, en el sondeo realizado en un área de plataformas limítrofe a la costa en zona de sotavento ha aparecido material de tipo fundamentalmente anfórico, con lo cual parecería corresponder, en principio, a un área de embarcadero
Visita a las excavaciones del presidente del Cabildo de Fuerteventura. FOTO: DIARIO DIGITAL DE CANARIAS.
El equipo de arqueólogos que trabaja en las tres excavaciones arqueológicas que, hasta ahora, se han localizado en el islote de Lobos no descarta la existencia de un área de embarcadero. “Uno de los sondeos corresponde a un área de plataformas limítrofe a la costa, que es una zona de sotavento, que se utiliza en la actualidad y tradicionalmente para amarrar los barcos y que, por tanto, hemos de pensar que funcionaba también así en la época romana. En ese espacio aparece material de tipo fundamentalmente anfórico, con lo cual parecería corresponder, en principio, a un área de embarcadero”, según dijo Carmen del Arco, directora de la excavación y catedrática de Prehistoria de la  Universidad de La Laguna, durante una visita que realizaron el presidente del Cabildo de Fuerteventura, Marcial Morales, y el consejero de Cultura, Juan Jiménez, a las excavaciones arqueológicas.

El yacimiento fue descubierto a principios de 2012 en Lobos y ha permitido constatar las primeras hipótesis que apuntaban a la existencia de un asentamiento de origen romano de una considerable magnitud y cuya ocupación fue al menos estacional, que estuvo dedicado a la obtención de la púrpura a partir del procesamiento de moluscos marinos, de los que se hasta el momento se han contabilizado más de 70.000 ejemplares.

En una segunda zona en la que trabajan los arqueólogos, explicó Carmen del Arco, “han aparecido elementos domésticos, elementos y estructuras de combustión, ajuar de mesa, ajuar de cocina y algunos restos de fauna terrestre, con lo cual se trataría de un área de procesado de alimentos, aunque junto a ella también vemos que hay en superficie, abundantes restos de extramonita procesada, con lo cual en algún momento y cuando sigan los trabajos con probabilidad podamos encontrar también focos de concheros”.

El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Marcial Morales, anunció que se renovará el convenio con el Departamento de Patrimonio Histórico y el Organismo Autónomo de Museos y Centros del Cabildo de Tenerife, con la colaboración de la Universidad de La Laguna “porque este yacimiento se va a convertir en nivel de referencia a nivel cultural y, por lo tanto, también a nivel turístico".

OBTENCIÓN DE TINTES PÚRPURAS
Hasta ahora sí se habían localizado en Canarias de forma puntual otros restos de cerámica de torno relacionada con las culturas clásicas del Mediterráneo, pero la singularidad del yacimiento de Lobos radica en que la cerámica aparecería ya contextualizada en un emplazamiento concreto y con actividad también relacionada con la obtención de tintes para su posterior comercialización.


Los tejidos teñidos de púrpura gozaron de gran popularidad en todo el mundo antiguo, desde los fenicios hasta los romanos. Eran considerados objetos de lujo y signo de distinción social, hasta el punto de que el propio Estado controlaba su monopolio y se organizaban expediciones comerciales y militares en busca de los productos necesarios para su elaboración. También se establecieron bases en la costa africana atlántica para su extracción.

Junto a Carmen del Arco y Mercedes del Arco, arqueóloga conservadora del Museo Arqueológico de Tenerife, trabajan en la excavación Milagros Estupiñán e Ignacio Hernández, del Departamento de Patrimonio Cultural del Cabildo de Fuerteventura.

20 de octubre de 2015

Los arqueólogos descubren un gran taller de tejidos en el yacimiento celtibérico de El Cerrito (Teruel)

El equipo de arqueólogos de la Universidad Complutense de Madrid ha descubierto numerosas piezas para la elaboración de tejidos en un mismo lugar, lo que permite deducir que habría todo un taller para la elaboración de tejidos, cuando lo habitual en un poblado es que se encuentren pocas piezas de elaboración textil por ser de ámbito doméstico.
La cuarta campaña de excavación arqueológica, que ayer terminó en el castro celtibérico de la Edad de Hierro de El Cerrito en la Laguna del Cañizar, ha permitido descubrir un taller de tejidos en una de las catas realizadas. El equipo de arqueólogos también ha encontrado en esta campaña cerámicas, algunas de ellas con una gran y fina decoración.

GRAN NÚMERO DE PIEZAS HALLADAS
El codirector de la excavación arqueológica en el castro El Cerrito de la Laguna del Cañizar, David Vacas, destacó que en la campaña lo que más ha sobresalido ha sido el gran número de piezas encontradas relacionadas con la fabricación de tejidos, loque corresponde a un taller de tejidos.


David Vacas explicó que las piezas textiles que se encuentran en los poblados celtibéricos, siglos IX al I antes de Cristo, son las que corresponden a una casa, pero lo que se ha descubierto en el yacimiento de El Cerrito corresponden a un taller, a una industria textil, por el gran número de piezas halladas. "La cantidad de piezas encontradas es para una producción textil a gran escala, no es solo para una casa. El hallazgo ha sido muy bueno", afirmó el arqueólogo y codirector de la cuarta campaña de excavación arqueológica en El Cerrito de la Laguna del Cañizar.

CERÁMICA DE GRAN CALIDAD
En esta línea, David Vacas recordó que en la campaña del pasado año hubo ya pistas al encontrar fusayolas y piezas de telares. pero "en este año han aparecido muchas más. Lo sorprendente es el elevado número de piezas para la elaboración de tejidos que se han encontrado en solo punto, por lo que resalta el descubrimiento".

Asimismo, David Vacas valoró las piezas de cerámica que están saliendo en el yacimiento celtibérico de El Cerrito en la Laguna del Cañizar. "Hay cerámica de una calidad excepcional. Hay cerámica que tiene una gran decoración, lo que revela que los habitantes del poblado celtibérico tenían un sentido estético muy importante". Vacas añadió que también se han encontrado restos de cerámica más primitivas, para uso de almacenaje".

MURALLAS IMPRESIONANTES
En los trabajos de excavación arqueológicas de estructuras del poblado, David Vacas señaló que se había buscado las murallas del poblado, lo que ha permitido descubrir en una de las catas realizadas que el agua de la laguna de El Cañizar llegaba hasta las mismas murallas del castro."El poblado era de dimensiones pequeñas, pero sus murallas son impresionantes y han llegado hasta nuestros días", comentó.

El codirector de la excavación arqueológica agregó que con la cata realizada ha permitido saber más sobre el perímetro del poblado de El Cerrito, "conocer los límites que tenía".

La otra cata realizada por el equipo de arqueólogos de la Universidad Complutense de Madrid ha sido en el interior del poblado para conocer la actividad que había dentro, en un trabajo difícil de realizar al tener que retirar escombros y encontrarse la cata arruinada.


TRABAJOS DE LABORATORIO
En el día de ayer el equipo de arqueólogos terminó la excavación en El Cerrito pero continuarán hasta el domingo realizando trabajos en el laboratorio en un local que les ha cedido el Ayuntamiento de Cella y que, por otra parte, se ha ocupado de la logística. "El Ayuntamiento de Cella nos ha tratado genial", destacaron los arqueólogos.

Por otro lado, el equipo de arqueólogos de la Universidad Complutense de Madrid ha entregado al Museo Provincial de Teruel material arqueológico correspondientes a las anteriores campañas arqueológicas.

David Vacas apuntó que el material que se entrega al Museo Provincial de Teruel corresponde a las campañas realizadas en el poblado de El Cerrito los años 2012, 2013 y 2014. Material principalmente cerámico y de piezas para la elaboración textil. Los materiales encontrados en la presente campaña arqueológica están siendo estudiados y catalogados.