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25 de febrero de 2013

El Supremo intenta evitar una nueva subasta de cascos celtíberos expoliados en Zaragoza

El Seprona detiene a un vecino de Illueca sospechoso de expoliarlos en Aranda de Moncayo (Zaragoza). El juez de La Almunia ordena registrar su vivienda y el yacimiento. 
Una galería de Munich (Alemania) tiene previsto sacar a la venta un nuevo lote de las piezas expoliadas en España.
La Fiscalía de Medio Ambiente del Tribunal Supremo, en coordinación con la de Zaragoza, lleva semanas desarrollando una investigación destinada a evitar una nueva subasta de cascos celtíberos procedentes del yacimiento de Aranda de Moncayo. Una galería de Múnich (Alemania) tiene previsto sacar a la venta un nuevo lote de piezas arqueológicas en unos días.

Agentes de la Unidad Central del Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza) de la Guardia Civil, especializados en patrimonio, desplegaron la semana pasada un amplio dispositivo en Illueca y Aranda de Moncayo.

En la primera detuvieron el jueves a un vecino sospechoso de haber expoliado el yacimiento de Aranda de Moncayo del que, según los datos que manejan los investigadores, proceden los cascos que van a salir a la venta en Múnich.

  • En 2008  el museo Römisch-Germanisches-Zentralmuseum (RGZM) de Mainz denunció que los cascos de la colección de Axel Guttmann eran de procedencia española y que se habían exportado ilegalmente. La fiscalía de Múnich retuvo las piezas y solicitó al Gobierno español que reclamara su legítima propiedad en tres meses. No hubo respuesta. Las piezas pasaron a manos de sus nuevos dueños
Los guardias civiles registraron su domicilio con una orden del juez de La Almunia y, posteriormente, el sábado, se desplazaron con él hasta el yacimiento, donde también efectuaron una inspección.

Durante el registro domiciliario, una parte de los agentes que integraban el dispositivo interceptaron varios vehículos que iban a salir de la localidad para inspeccionarlos.

El detenido quedó en libertad tras prestar declaración ante los agentes del Seprona, a la espera de que lo cite a declarar el juez que asuma el caso.

OBJETIVOS 

Fuentes conocedoras de la investigación explicaron que esta tiene dos finalidades. Por una parte, tratar de impedir la subasta, para lo que será necesaria la intervención de los ministerios de Asuntos Exteriores y de Cultura, además del Gobierno de Aragón. Para lograrlo, las instituciones deberán acreditar que se trata de piezas procedentes del yacimiento de Aranda y reclamar su entrega como integrantes del patrimonio español y aragonés.

Las pesquisas comenzaron hace unos meses, cuando un arqueólogo alemán comunicó a las autoridades españolas su convencimiento de que las piezas que iban a salir a subasta en Alemania procedían del yacimiento de Aranda. Las posteriores gestiones de la unidad de Patrimonio Histórico del Seprona apuntaron en la misma dirección. De su confirmación dependerá que las administraciones puedan evitar la subasta programada en Alemania.

El otro objetivo de las pesquisas, cuya instrucción recaerá en uno de los juzgados de La Almunia, es poner fin al supuesto expolio que desde hace años sufre el yacimiento zaragozano.

Las fuentes consultadas explicaron que el Seprona dispone de algunos indicios que apuntan al detenido como sospechoso. Según indicaron, algunas veces había sido visto por la zona con un detector de metales.

REGISTROS 
Los investigadores intervinieron en el registro de la vivienda algunas piezas antiguas de hierro. El detenido, por su parte, aseguró en su declaración que estas pertenecen a su colección personal y que hace más de 25 años que las posee. Los agentes se las llevaron para analizarlas y datarlas.

Una vez haya finalizado ese trabajo, el Seprona remitirá el atestado a la Fiscalía de Medio Ambiente del Supremo para que su responsable, Antonio Vercher, decida si judicializa las actuaciones.

11 de enero de 2023

Denuncian en Lucena el robo del pilar de una fuente del siglo XVII

El Seprona solicita la colaboración ciudadana para aportar nuevos datos que ayuden a identificar a los causantes del delito contra el patrimonio histórico. Se trata de una pieza de piedra del S. XVII labrada en dos de sus caras.
El Seprona ha iniciado las gestiones oportunas para incluir el pilar robado en la lista roja de piezas de valor histórico-arqueológico.

El Ayuntamiento de Lucena (Córdoba) ha denunciado ante la Guardia Civil el robo del pilar de una sola pieza que daba agua en la Fuente del Cortijo Grande del Duque, una pieza de piedra del siglo XVII cuya desaparición supone un delito contra el patrimonio histórico de la ciudad.

Ubicada en el paraje del arroyo Capotas, junto a la carretera CV-218, y al pie del propio Cortijo Grande del Duque, esta fuente responsabilidad de la Consejería de Medio Ambiente al estar localizada en la cañada real que ocupa el actual camino, ha sido objeto estas últimas décadas de varias intervenciones de consolidación y restauración a cargo del Consistorio lucentino, la última en 2021, con una inversión que se aproxima a los 10.500 euros.

Con unas dimensiones de 1,10 cm de altura, 53 cm de ancho y 50 cm de espesor, presentaba dos caras labradas. La primera con la inscripción que alude al patrocinador del propio pilar, Ximez Manjon, Familiar del Santo Oficio, y la fecha de 1674. En la otra, en la que se incluye el caño de hierro, presentaba escudo con yelmo y campo ovalado, con cruz alisada en su interior (posiblemente de la orden dominica), además de hojas de acantos y plumas. La parte superior aparece labrada con molduras rematada en tronco-cono convexo.

Conocida la noticia del robo, técnicos de la Concejalía de Patrimonio Histórico-Artístico se personaron en la fuente en la tarde del pasado 3 de enero, procediendo tras la confirmación del hurto de la pieza histórica, a la denuncia ante el puesto principal de la Guardia Civil en Lucena. Los agentes del Seprona de Rute han asumido la investigación de lo ocurrido, instando tras la primera fase de la instrucción a la colaboración ciudadana para el esclarecimiento del caso.

La concejala de Patrimonio Histórico-Artístico, Mamen Beato, ha señalado que “la pieza sustraída, de gran tonelaje, ha tenido que ser robada por una grúa o tractor, por lo que puede ser que alguna persona fuera testigo de lo ocurrido, de modo que pedimos la colaboración ciudadana para que si alguien tiene algún dato de la misma o alguna pista, por insignificante que parezca, la pueda ofrecer de forma anónima contactando con el Seprona (687 778 354) o la propia delegación municipal (957 509 990)”.

Por el momento, el Seprona ha iniciado las gestiones oportunas para incluir el pilar robado en la lista roja de piezas de valor histórico-arqueológico, al tiempo que se sospecha que este robo “pueda deberse a un encargo concreto de particulares desalmados que con esta pieza se han llevado una parte de la historia de Lucena”, en palabras de Beato.



Recuperadas tres ánforas romanas del s.I en el sótano de una casa de Alicante

El Seprona de la Guardia Civil de Elche (Alicante) y el Museo del Mar han desarrollado una operación conjunta que ha permitido recuperar tres ánforas romanas de cerámica del siglo I. La propietaria de un domicilio encontró estas piezas históricas en el sótano de su vivienda de la localidad alicantina de Santa Pola y comunicó el hallazgo a las autoridades.
Recuperan tres ánforas romanas de cerámica del siglo I en el sótano de una casa de Alicante.

El Seprona de la Guardia Civil de Elche (Alicante) y el Museo del Mar han desarrollado una operación conjunta que ha permitido recuperar tres ánforas romanas de cerámica del siglo I. La propietaria de un domicilio encontró estas piezas históricas en el sótano de su vivienda de la localidad alicantina de Santa Pola y comunicó el hallazgo a las autoridades.

La Universidad de Alicante ha realizado un primer un análisis preliminar y ha determinado que las tres ánforas romanas de cerámica son posiblemente béticas, de la Época Altoimperial, según ha informado la Guardia Civil en un comunicado.

Estas piezas históricas fueron encontradas probablemente en uno de los pecios del litoral y fue la propia ciudadana quien comunicó que había localizado las ánforas en su vivienda, "posiblemente adquiridas por un familiar ya fallecido".

Tras el aviso de la mujer, agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Elche se personaron en su domicilio el pasado 5 de diciembre. La ciudadana había localizado en el sótano las tres piezas cerámicas de grandes dimensiones mientras limpiaba una casa que quería poner a la venta y pensó que podían tener valor histórico. Los agentes comprobaron que se trataba de tres ánforas que pertenecían probablemente a la época romana.

El Seprona se puso en contacto con los especialistas del Museo del Mar del Ayuntamiento de Santa Pola, organismo encargado de la recuperación, estudio y custodia del patrimonio de la ciudad. Las piezas fueron trasladadas al museo, donde los especialistas realizarán una autenticación.

Un análisis preliminar realizado por expertos de la UA ha determinado que se trataría de tres ánforas romanas de cerámica, posiblemente Béticas, de la Época Altoimperial, probablemente procedentes del siglo I. Tras ser estudiadas meticulosamente, limpiadas y restauradas en lo posible, se expondrán al público en el museo de Santa Pola.

Transporte de aceite y salsas
En su mayoría, las ánforas halladas en esta zona eran oleícolas, utilizadas para el transporte de aceite procedente de la zona bética de la península y embarcadas en el Portus Ilicitanus, para su traslado a Roma. Otras también eran utilizadas para el transporte de vino y de salsas de pescado (garum) muy apreciadas por los romanos. Por la morfología que presentan estas tres piezas, podría tratarse de ánforas dedicadas al almacenamiento y transporte de alguno de estos productos.

La Guardia Civil y el Ayuntamiento de Santa Pola han recordado que estas piezas pertenecen al patrimonio histórico de la arqueología subacuática y están protegidas. La Ley 4/98 del Patrimonio Cultural Valenciano establece que las piezas arqueológicas, como objetos que integran el Patrimonio Histórico, son bienes de dominio público, propiedad de la Administración.

Así, el artículo 65 de esta ley obliga a toda persona que encuentre un objeto arqueológico a comunicarlo a las autoridades tan pronto como se produzca el hallazgo. No hacerlo puede suponer una infracción considerada grave, y castigada con una multa que oscila entre los 60.001 y los 150.000 euros.

23 de mayo de 2013

Imputado un arqueólogo por guardar piezas sin declarar

Las piezas procedentes de diversas obras de restauración deberían haber sido depositadas en el Museo Provincial. El arqueólogo de la empresa ha sido imputado por un presunto delito de apropiación indebida.
Las piezas intervenidas debían haberse depositado en el Museo
Provincial
El SEPRONA de la Guardia Civil ha recuperado gran cantidad de restos arqueológicos, entre ellos visigodos y romanos,procedentes de diferentes obras de restauración.

 Los restos fueron localizados en el interior de una nave de La Muela (Zaragoza) propiedad de una empresa especializada en este tipo de restauraciones y el arqueólogo de la empresa ha sido imputado por un presunto delito de apropiación indebida.

El pasado día 6 de mayo el equipo del SEPRONA de la Guardia Civil de Casetas tuvo conocimiento de que en una nave del polígono industrial Centrovía de La Muela, propiedad de una empresa especializada en la restauración de bienes muebles e inmuebles antiguos e intervenciones sobre el patrimonio histórico, existía una gran cantidad de restos arqueológicos procedentes de distintas obras y prospecciones realizadas por dicha empresa.

Por estos motivos, el día 8 de mayo los agentes procedieron a realizar una primera visita de inspección a las instalaciones, en colaboración con arqueólogos de la Dirección General de Patrimonio del Gobierno de Aragón, donde fueron recuperadas 68 cajas con restos óseos humanos, restos cerámicos y otras piezas arqueológicas, tales como un cierre de arca de bronce de origen visigodo y varias monedas del mismo metal.

Proceden de tres restauraciones

Se pudo determinar que todas las piezas halladas correspondían a tres prospecciones arqueológicas realizadas bajo la dirección técnica del arqueólogo de la empresa durante los años 2006 a 2009. Restos que podrían proceder de las obras de restauración de la Iglesia de Santa María de la Huerta en Magallón, del Castillo de Montearagón en Quincena (Huesca) y de la Casa Parroquial de Villanueva de Gállego.

Todos estos elementos constitutivos del Patrimonio Cultural Aragónes y que deberían haber sido depositados en el Museo Provincial cuando finalizaron las intervenciones, fueron decomisados por los agentes del SEPRONA y trasladados a las instalaciones del departamento de Cultura del Gobierno de Aragón, siendo depositados a disposición de la Autoridad Judicial.

Exigencias incumplidas

La legislación vigente en materia de Patrimonio Histórico exige que todas las actividades relativas al Patrimonio Histórico se hallen previamente autorizadas por la Dirección General de Patrimonio Cultural. Esta Dirección General, cada vez que autoriza una actividad de este tipo exige a la empresa adjudicataria que la prospección esté a cargo de un arqueólogo, que es la persona que dirige la excavación y se responsabiliza de entregar puntualmente los restos descubiertos en el Museo Provincial y de presentar una memoria de los hallazgos en el transcurso de los dos años siguientes a la finalización de la obra.


Cierre en bronce de arca de origen visigodo.
De las gestiones realizadas por los agentes con la Dirección General de Patrimonio Histórico sobre las tres excavaciones de las que provenían los restos hallados y, en particular, por la memoria presentada por el arqueólogo sobre la restauración de la iglesia de Santa María de Magallón (BIC, Monumento Nacional y Patrimonio de la Humanidad UNESCO), en la que esta persona, presuntamente, no había entregado el "tesorillo" (en el argot arqueólogo, se conoce así a los restos que en una excavación destacan sobre el grueso del material por su valor, belleza o importancia histórico artística), confirmaron que el arqueólogo no había presentado las memorias correspondientes, no constando el resultado de la excavación pese a haber transcurrido más de 6 años desde su finalización y que tampoco había entregado los restos arqueológicos de ninguna de las obras que dirigió.

Restos hallados

Por todo lo anterior efectivos del SEPRONA junto con personal técnico de la Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón realizaron un registro en el domicilio del arqueólogo con la finalidad de localizar y recuperar las piezas arqueológicas que presuntamente hubieran sido objeto de expolio. En ese registro se recuperaron la mayoría de ellas. 

Entre los objetos recuperados destacan los siguientes:

  • Una vinajera y una aceitera de cristal soplado
  • Un anillo realizado en bronce y hueso
  • Un dado de seis caras realizado en hueso y de origen romano
  • Numerosas monedas de bronce de distintas épocas
  • Otros elementos antiguos de bronce tales como alfileres, hebillas y un dedal de cerámica
Todas las piezas anteriores provienen de la restauración de la iglesia Parroquial de Santa María de Huerta en Magallón. También fueron decomisados un aplique de bronce con decoración vegetal y un pequeño cristo de cerámica que podrían provenir de las obras de restauración de la Iglesia de Ponzano (Huesca).

Apropiación indebida de Patrimonio Histórico

Por todo lo expuesto anteriormente la Guardia Civil procedió a imputar al arqueólogo de la empresa un presunto delito de apropiación indebida en su modalidad agravada por realizarse sobre bienes pertenecientes al patrimonio histórico artístico.

Según los investigadores, las piezas no se encontraban catalogadas ni constaba denuncia por su desaparición, por lo que se ha solicitado a los responsables de Patrimonio el estudio de las mismas a fin de determinar su valor histórico y artístico e incluirlas en el inventario patrimonial de Aragón.

Se continúa con la investigación con la finalidad de hallar el resto de las piezas arqueológicas.

(Fuente: El Heraldo)

19 de diciembre de 2017

Barcos de pesca de arrastre expolian 42 piezas de yacimientos submarinos de Baleares

Hay seis detenidos en la mayor operación contra el expolio de patrimonio sumergido en Baleares Se cree que cerca del 90% del patrimonio bajo el mar balear ya ha sido expoliado
Ha sido la operación más importante contra el expolio de yacimientos submarinos en Baleares.
La Guardia Civil acaba de incautar 42 piezas arqueológicas fruto de lo que el Instituto Armado no ha dudado en calificar como la actuación más importante contra el expolio de yacimientos submarinos en la historia reciente de Baleares. Las piezas recuperadas son en su mayoría ánforas romanas de unos 2.000 años de antigüedad media, aunque también hay ánforas más antiguas, de posible origen fenicio, y jarras medievales.

La bautizada como operación Garum se ha saldado con seis detenidos, tres por la extracción y venta de las piezas y otros tres por un delito de receptación. Las extracciones fueron obra de pescadores profesionales, quienes se valían de las redes de sus arrastreros para hacerse con el material. Los investigadores sospechan incluso que algunos expolios pudieron hacerse manualmente por buceadores.

El Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil estuvo varios días desarrollando una investigación en la que se llegaron a realizar siete registros domiciliarios. Los tres detenidos por comprar las piezas residen en los municipios de Inca, Artà y Santa Eularia des Riu. No se han facilitado datos en este sentido sobre los pescadores que extrajeron el material. La Benemérita informó, no obstante, de que estos tres últimos investigados vienen dedicándose «desde hace décadas» a la pesca de arrastre y ha sido gracias a estas embarcaciones que han conseguido hacerse con «una gran cantidad de piezas a lo largo de los años». Algunas de ellas eran vendidas y otras se las quedaban los propios pescadores.

Según explican los investigadores, la gran movilidad de las embarcaciones de pesca de arrastre permitió a los expoliadores operar en varios pecios distribuidos a lo largo y ancho del mar balear. Ahí donde las redes no podían llegar -pese a que el arte de pesca del arrastre permite alcanzar grandes profundidades- los buceadores lo conseguían manualmente.

La operación se enmarca en el plan global de actuación del Seprona contra el expolio de los yacimientos submarinos y no han dudado en catalogar ésta como la más relevante en la historia de Baleares y una de las más relevantes a nivel nacional. La situación geográfica que a lo largo de la historia ha hecho del archipiélago un punto estratégico del Mediterráneo, hace al mar balear por eso mismo depositario de una ingente cantidad de restos arqueológicos procedentes de las más variadas culturas de la antigüedad. Por ese motivo, remarcan desde el Seprona, la vigilancia de posibles expolios de estos tesoros submarinos es uno de los principales cometidos de esta división delInstituto Armado como parte de la defensa del patrimonio histórico nacional.

El Consell de Mallorca anunció el pasado mes el inicio de la carta arqueológica de Cabrera como punta de lanza de un proyecto global para cartografiar los yacimientos arqueológicos submarinos de Mallorca. La carta subacuática, que permitirá ubicar y documentar todo el patrimonio sumergido, será una herramienta crucial para proteger estos yacimientos tanto de los expoliadores como de los fondeos.

El conseller insular de Cultura y Patrimonio, Francesc Miralles, detalló que se elaborarán planes concretos para cada uno de los 14 yacimientos del archipiélago de Cabrera, isla que representa «el punto de partida de la futura carta arqueológica subacuática de Mallorca».

Cabrera estaba justo en medio de las rutas comerciales marítimas de la antigüedad, por lo que su elección no ha sido casual. Además, la navegación de sus aguas era muy peligrosa en condiciones meteorológicas adversas, de modo que la concentración de naufragios en aguas de esta isla es una de las más elevadas del Mediterráneo occidental.

Para Miralles, resulta de vital importancia la protección de estos tesoros ante la codicia de «furtivos que, a cambio de unas ganancias mínimas, destrozan la historia de todos».

ALGO DEMASIADO HABITUAL. 

Sebastià Munar, uno de los arqueólogos subacuáticos implicados en el proyecto -realizado en colaboración con la Armada- lamenta que como en Cataluña, la mayor parte del patrimonio histórico balear bajo el mar ya habrá sido expoliado. Las cartas arqueológicas subacuáticas realizadas en aguas catalanas determinaron que más del 90% de los restos ya han sido expoliados y se cree que Baleares presentará porcentajes similares en ese sentido.

23 de mayo de 2016

Investigan a seis personas por supuestos daños y expolios al patrimonio arqueológico en la Campiña cordobesa

Durante la inspección realizada por el SEPRONA, se pudo recuperar un fragmento de inscripción en mármol con la leyenda de SECVNDA, que pudiera tratarse de una lápida funeraria 
Los agentes comprobaron importantes daos al patrimonio arqueológico.
El servicio en concreto se desarrolló tras tener conocimiento el Equipo de investigación del SEPRONA de la Guardia Civil de Córdoba, que una patrulla de la Guardia Civil había sorprendido en una finca ubicada en las inmediaciones de la Campiña Cordobesa, a tres personas, conocida una de ellas por estar supuestamente dedicándose a la búsqueda y comercio de piezas arqueológicas, los cuales utilizando aparatos detectores de metales y pequeñas azadas, realizaban pequeñas excavaciones en la tierra para la búsqueda de piezas arqueológicas metálicas, a los que le fueron intervenidas entre otras siete monedas.

La inspección efectuada en la zona por efectivos del SEPRONA, permitió comprobar que en la citada finca se pudieran haber ocasionado importantes daños al patrimonio arqueológico. Asimismo, durante dicha inspección se pudo recuperar un fragmento de inscripción en mármol con la leyenda de SECVNDA, que pudiera tratarse de una lapida funeraria.

También, se pudo observar, que en la citada finca se habían realizado dos actividades claramente diferenciadas, una de ellas la realizada por los conocidos en el argot como “piteros”, quienes una vez que el aparato detector localiza un resto metálico, remueven el terreno con la finalidad de extraerlo de debajo del sustrato.

En segundo lugar, los agentes actuantes observaron esparcidos por todo el área de trabajo gran cantidad de restos arqueológicos totalmente fracturados con diversificación de tamaños y formas de lo que se identifica claramente con conglomerados, tégulas, ladrillos y restos cerámicos, relacionados con la actividad agrícola desarrollada en la parcela, posiblemente extraídos a la hora de llevar a cabo la remoción de terreno necesaria para realizar la labor de siembra de los olivos.

Ante ello, se procedió a la instrucción de diligencias de investigación a las tres personas sorprendidas cuando buscaban piezas arqueológicas, así como al propietario de la finca como a las otras dos personas que realizaron las labores agrícolas.

27 de julio de 2017

El Seprona denuncia al autor de prospecciones ilegales en el entorno del yacimiento de Clunia

El Seprona de la Guardia Civil de Burgos ha identificado y denunciado a un varón de 46 años de edad por infringir la Ley 12/2002 de Patrimonio Cultural de Castilla y León, al realizar actividades arqueológicas sin autorización en el yacimiento de Clunia.
La furgoneta tenía practicada un doble fondo en el que se hallaron 64 piezas de metal de época romana.
El Seprona de Santa María del Campo tenía conocimiento de la presencia de una persona, el pasado jueves 20 de julio, en las proximidades del yacimiento arqueológico de Clunia, que auxiliado de un detector de metales estuvo realizando búsquedas con el fin de localizar objetos enterrados.

Las pesquisas practicadas han permitido identificar y localizar a la persona en una localidad de La Demanda, conociéndose que llegó al lugar en una furgoneta.

Personados en su domicilio, fue hallado en el interior de su vehículo un detector de metales y una azada de mano y caídos entre los asientos delanteros un anillo y dos monedas de notable antigüedad.

Un registro más minucioso al habitáculo de la furgoneta ha permitido localizar, en un doble fondo ubicado debajo del asiento del conductor, camuflado por la alfombrilla, otras 64 piezas de metal de igual procedencia, pudiendo datarse de la época romana.


Trasladados al paraje donde realizó las prospecciones, en las cercanías del asentamiento romano, se encontraron dos hoyos excavados practicados recientemente con alguna herramienta.

Se han recuperado e inventariado: 11 monedas, 1 mini campana tallada a mano, 4 botones de metal, 2 figuras talladas a mano, 1 medalla, 1 anillo y otros 47 objetos aún sin identificar por su estado de deterioro.

Los hechos han sido puestos en conocimiento del Servicio Territorial de Cultura de la Junta de Castilla y León en Burgos por infracciones a la Ley 12/2002 de Patrimonio Cultural de Castilla y León, por realizar actividades arqueológicas sin autorización.

RECOMENDACIONES
Para realizar actividades arqueológicas, es imprescindible autorización previa y expresa de la Consejería competente en materia de cultura.

Se considera Prospección Arqueológica la utilización de aparatos detectores de metales para la búsqueda de objetos en Zonas Arqueológicas, Yacimiento Arqueológico Inventariado así como el resto de sitios o lugares arqueológicos inscritos en el Registro de Lugares Arqueológicos.

Los usuarios de estos aparatos deben poseer autorización para realizar actividades arqueológicas. Ante un hallazgo casual de un bien arqueológico están obligados a paralizar su actuación y comunicarlo inmediatamente a la Dirección General competente en materia de Patrimonio y Bienes Culturales.

Antes de utilizar un detector de metales debe de informarse de si el paraje es una zona arqueológica, yacimiento u otro lugar arqueológico, puesto que está prohibida su utilización en dichos lugares sin autorización.

(Fuente: Siete Semanal)

18 de junio de 2015

La Guardia Civil impide la venta ilegal en internet de 200 piezas arqueológicas

Con la Operación "Gladiator" se han decomisado en Murcia monedas de diferentes épocas, bifaces, piezas de cerámica, puntas de flecha, conteras medievales –adornos de diferentes armaduras–, abundantes fíbulas, partes de ungüentarios o lacrimatorios, colgantes romanos, escarabeo egipcio, collar y hebillas romanas, y hojas de cuchillo bizantino, entre otros.
Parte de las piezas recuperadas por el Seprona. FOTO: LA OPINIÓN
La Guardia Civil de la Región de Murcia, en colaboración con el Servicio de Patrimonio Histórico de la Comunidad Autónoma, ha desarrollado la operación ´Gladiator´ una investigación dirigida a la localización de numerosos objetos arqueológicos, puestos a la venta a través de Internet, que se ha saldado con la recuperación de 187 piezas declaradas como integrantes del Patrimonio Histórico Español.

La investigación se inició el pasado mes de marzo, cuando especialistas del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil se hallaban tras la pista del comercio ilegal, en páginas de venta de objetos de interés cultural a través de Internet.

COMERCIO ILEGAL ANUNCIADO EN INTERNET
Tras uno de estos anuncios localizaron a un particular que ofrecía, por precios nada desdeñables, piezas y objetos con una amplía cronología en diferentes épocas y culturas, como la ibérica, romana, bizantina y egipcia.

Las numerosas indagaciones realizadas por el SEPRONA han resultado positivas con la localización del domicilio del vendedor, un inmueble en Murcia, donde supuestamente acumulaba los objetos a la espera de ser vendidos.

En ese punto de la investigación, los guardias civiles se han desplazado al domicilio identificado para verificar la existencia de tales piezas, antes de que fueran enajenadas a terceras personas.

Han sido halladas y decomisadas monedas de diferentes épocas, bifaces –herramientas líticas prehistóricas reconocidas como las primeras utilizadas por el hombre–, piezas de cerámica, puntas de flecha, conteras medievales –adornos de diferentes armaduras–, abundantes fíbulas –pieza metálica utilizada en la antigüedad para unir o sujetar alguna de las prendas que componían el vestido–, partes de ungüentarios o lacrimatorios, colgantes romanos, escarabeo egipcio, collar y hebillas romanas, y hojas de cuchillo bizantino, entre otros.

PERJUICIOS PARA EL PATRIMONIO
También, piezas de paleontología entre las que se encuentran un ammonite gigante, una caracola, dos trilobites, dientes de tiburón y de mono saurio. Los objetos recuperados se hallaban en buen estado de conservación pese a los deterioros propios generados por el paso del tiempo.

El saqueo de este tipo de bienes culturales, consistente en la aprehensión de dicho patrimonio con fines lucrativos, suele finalizar con su venta a coleccionistas o aficionados, lo que ocasiona un perjuicio irreparable en el Patrimonio Histórico Español.

El poseedor de las citadas piezas ha sido denunciado a la Ley 4/2007 de Patrimonio Cultural de la Región de Murcia, pudiendo enfrentarse, atendiendo a la gravedad de las conductas, a la categoría de los Bienes, y a la producción o no de daños, a una sanción de hasta 100.000 euros.

Una vez constatada la representatividad de diferentes épocas en los objetos recuperados, han sido depositados en el Museo Arqueológico de la Región de Murcia ha disposición del Servicio de Patrimonio Histórico de la Región.

La operación está enmarcada en el ´Plan de Defensa del Patrimonio Histórico Español´, puesto en marcha por la Guardia Civil y que ha llevado consigo la realización de dispositivos específicos de servicio al objeto de incrementar la seguridad del Patrimonio Histórico Español y reducir la actividad delictiva en este sector.

(Fuente: La Opinión de Murcia)

26 de octubre de 2022

Sorprendidos mientras realizaban prospecciones arqueológicas ilegales en Segovia

Agentes del Seprona incautaron a los infractores un total de 35 piezas, entre las que destacan 14 monedas de diferentes épocas. La intervención se realizó en la localidad segoviana de Navas de Oro y fueron cuatro las personas denunciadas.
La Guardia Civil desarrolla en toda España la Operación "Pandora VII".

En el marco de la Operación nacional Pandora, agentes del Seprona de la Comandancia de Segovia, con base en la localidad de Coca, sorprendieron en el interior de un pinar del término municipal de Navas de Oro a cuatro vecinos de Madrid que se encontraban realizando prospecciones arqueológicas ilegalmente. Se les incautó un total de 35 piezas metálicas de interés arqueológico, tales como monedas, botones y sortijas.

Para esta actividad ilegal, empleaban cuatro detectores de metales (pinnpointer), así como piquetas, palas y otros útiles para extraer las piezas enterradas en el paraje. Tras un registro de estas personas y de su vehículo todoterreno. Estos objetos fueron intervenidos a los expoliadores y posteriormente entregados en el Servicio Territorial de Cultura de la Junta de Castilla y León de Segovia.

Tras un estudio preliminar, se determinó que las 14 monedas incautadas constituían un conjunto heterogéneo de diversas épocas históricas. Así había desde un as del Imperio Romano, hasta monedas más recientes del siglo XX, pasando por acuñaciones tanto de los Austrias como de los Borbones. Del resto de las piezas aprehendidas destacan por su singularidad un par de gemelos con el escudo de la Casa Real de Borbón en relieve.

Por estos hechos, se extendieron denuncias administrativas por supuestas infracciones en materia de protección del patrimonio histórico, al carecer todas esas personas de autorización para efectuar prospecciones arqueológicas y por no haber parado la búsqueda para comunicar inmediatamente el hallazgo de las piezas.

Durante el periodo de desarrollo de la presente edición de la operación Pandora, las diferentes Unidades del Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil de Segovia, han llevado a cabo un total de 409 vigilancias en los diferentes yacimientos arqueológicos de la provincia, especialmente en aquellos declarados como sensibles, singulares o que han sido objeto de expolios en los últimos años.

Además recordaron que este tipo de acciones efectuadas de forma ilícita e independientemente de que el lugar se encuentre catalogado o no, pueden ocasionar la pérdida irreparable de parte de la información contenida en los estratos arqueológico del lugar, además de alterar sus contextos, junto con la sustracción de los vestigios históricos, de forma que imposibilita cualquier acción posterior que pueda reparar el daño provocado.

Prohibiciones
Está prohibido realizar actividades arqueológicas sin contar con autorización previa y expresa de la Consejería de Cultura. Para la obtención de estos permisos se exigirá la intervención de profesionales o equipos que cuenten con la titulación o acreditación reglamentariamente determinada. Previamente, estos deberán presentar un programa detallado que justifiquen su necesidad e interés científico de esos trabajos.

La Guardia Civil desarrolla en todo el territorio nacional la operación Pandora VII destinada a la protección del Patrimonio Histórico y combatir el tráfico ilícito de Bienes Culturales, con el apoyo y coordinación de Europol, Interpol, OMA y la participación de FRONTEX. Para cumplir esta finalidad, entre sus múltiples objetivos se encontraba intensificar la vigilancia y protección de cuantos bienes componen dicho patrimonio, especialmente de los yacimientos arqueológicos terrestres y subacuáticos.

1 de junio de 2017

Recuperan del expolio 50.000 piezas arqueológicas en Murcia

Entre las piezas más destacadas se encuentra una imagen de un Niño Jesús sustraído en los años 70 de la parroquia Santa Eulalia de Murcia. El hallazgo llevó a los investigadores hasta un domicilio particular donde encontraron una importante colección de piezas arqueológicas procedentes del expolio sistemático en yacimientos durante décadas.
La imagen es obra del imaginero alicantino Gregorio Molera, de finales del s. XIX-
La Guardia Civil de la Región de Murcia, en colaboración con Servicio de Patrimonio Histórico de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, ha desarrollado las operaciones ´Charpentier´ y ´Terreros´ que han culminado con la recuperación de cerca de 50.000 piezas de valor arqueológico y paleontológico en dos inmuebles de Torre Pacheco y Murcia.

TRES PERSONAS INVESTIGADAS POR RECEPTACIÓN
El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Benemérita inició las investigaciones el pasado mes de marzo cuando se hallaban tras la pista de una imagen sagrada de un Niño Jesús, sustraída en los años 70 de la Parroquia de Santa Eulalia de Murcia.

Las pesquisas practicadas condujeron a los investigadores hasta un anticuario de Murcia, donde fue localizada expuesta para su venta.

Agentes del Seprona, en colaboración con especialistas del Servicio de Patrimonio Histórico de la Comunidad Autónoma, examinaron la pieza y determinaron su origen y procedencia.

La imagen, obra del escultor e imaginero alicantino, Gregorio Molera Torá, data de finales del s. XIX y fue expuesta en la Parroquia de Santa Catalina (Murcia) formando, con la de San José, un conjunto escultórico destinado al culto y veneración por el Gremio de carpinteros murcianos.

50.000 PIEZAS ARQUEOLÓGICAS EN TORREPACHECO
Este hallazgo permitió obtener una valiosa información que llevó a los investigadores hasta un domicilio de Torre Pacheco, donde, un particular dedicado al coleccionismo durante décadas, poseía una importante colección de origen arqueológico y paleontológico.

La Benemérita, en colaboración con expertos arqueólogos del Servicio de Patrimonio Histórico de la Comunidad Autónoma, examinaron el inmueble donde hallaron grandes cantidades de fragmentos de recipientes de vidrio y miles de fragmentos cerámicos, en su mayoría pertenecientes a las culturas ibérica y romana, aunque también formaban parte de la misma algunos recipientes cerámicos completos pertenecientes al bronce final, figurillas de terracota, así como un ánfora denominada Lamboglia muy utilizada por los romanos en el transporte de vino por vía marítima.

Entre los fragmentos de origen arqueológico también fueron hallados cientos de restos óseos de origen humano y animal, muy fragmentados, así como decenas de fósiles.

Los objetos metálicos que integraban la colección eran, entre otros, numerosas fíbulas, alfileres y punzones, siendo la pieza más representativa una punta de lanza romana muy bien conservada.

La investigación posterior ha permitido averiguar que el propietario de los objetos, que actualmente no reside en el domicilio debido a su avanzada edad y a su salud, había dejado la colección en manos de su heredero, hasta el momento en paradero desconocido, quien, supuestamente, habría vendido parte de las piezas: más de cien monedas ibéricas y romanas y algunos de los recipientes cerámicos.

PIEZAS DE DISTINTAS PROCEDENCIAS 
Junto a los materiales intervenidos se hallaba un libro de registro con anotaciones pertenecientes a los lugares donde fueron expoliados los restos arqueológicos, muchos de ellos pertenecientes a la Región de Murcia aunque también a las provincias de Almería, Albacete, Alicante y Guadalajara.

Dichas anotaciones van a permitir la contextualización de algunos de los materiales recuperados y aportar una valiosa información sobre los yacimientos a los cuales pertenecieron.

La Guardia Civil, en coordinación con los Técnicos de Patrimonio Histórico de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, ha constado el valor histórico y cultural de las piezas, por lo que han sido decomisadas y depositadas, para su inventario, en el Museo Arqueológico de Cartagena.

Las diligencias y la imagen del Niño Jesús, sustraído hace cincuenta años, han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción número 5 de Murcia.

Las operaciones ´Charpentier´ y ´Terreras´ continúan abiertas, por lo que se descarta que existan otras personas relacionadas con los hechos investigados.

27 de marzo de 2017

Destruyen los restos de la ciudad romana de Iliturgi, en Mengíbar (Jaén)

El Seprona investiga la denuncia de la UJA en Cerro Maquiz en lo que puede ser uno de los mayores atentados contra el Patrimonio jienense
Mapa que acompaña a la denuncia con la situación
de las zanjas en el recinto amurallado.
Catorce kilómetros de zanjas para instalar un riego en un olivar han arrasado los restos arqueológicos de la antigua ciudad romana de Iliturgi, en Cerro Maquiz (Mengíbar). Fue en su tiempo una de las más importantes de la Alta Andalucía. Un yacimiento conocido desde hace más de un siglo, y en el que se han hecho varias excavaciones. Según la denuncia que ha puesto ante la Justicia la Universidad de Jaén, UJA, y que ya investiga el Seprona de la Guardia Civil, podría haber sufrido una de las mayores agresiones al Patrimonio Histórico de Jaén, si se confirma la magnitud de los daños.

LAS CIFRAS
  • 15% de la superficie total del yacimiento, de la vieja ciudad romana, ha quedado afectada.
  • 32.000 metros cuadrados de terreno ocupan las zanjas excavadas recientemente.

«La estimación de la superficie afectada se ha realizado con un Sistema de Información Geográfica, el cual muestra 14 kilómetros lineales de tubería. Considerando una mínima afección de más de 32.000 metros cuadrados, es decir, que la obra ejecutada sin ningún tipo de control o vigilancia arqueológica y destruyendo el interior de una ciudad romana supera el 15% del total de su superficie fortificada. Valorar los daños causados al conocimiento y al patrimonio es incalculable. Valorar el coste de una intervención que documente lo afectado y restituya y consolide los restos es la mínima responsabilidad exigible», asegura el arqueólogo de la UJA Juan Pedro Bellón, que iba a iniciar una excavación con todos los permisos en Cerro Maquiz cuando se descubrieron los destrozos.

El Cerro Maquiz y su yacimiento arqueológico están inscritos en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, por lo que goza de «de una singular protección y tutela».

PÉRDIDAS MONUMENTALES

  • El único templo romano que se había excavado en la provincia se ha visto afectado
  • El tamaño de los sillares levantados al remover la tierra da idea de los edificios enterrados
PROPIETARIOS
La ley andaluza establece que «las personas propietarias, titulares de derechos o simples poseedoras de bienes integrantes del Patrimonio Histórico Andaluz, se hallen o no catalogados, tienen el deber de conservarlos, mantenerlos y custodiarlos de manera que se garantice la salvaguarda de sus valores. A estos efectos, la Consejería competente en materia de patrimonio histórico podrá asesorar sobre aquellas obras y actuaciones precisas para el cumplimiento del deber de conservación».

«Nos sorprende que la propiedad del terreno, conocedora del potencial arqueológico del sitio, haya afectado y destruido de esta manera uno de los sitios arqueológicos más emblemáticos de la Alta Andalucía, conocido desde finales del siglo XIX y cuyos materiales se exponen en la Real Academia de la Historia o el propio Museo Arqueológico Nacional de Madrid», añade el científico.

En un primer examen tras comprobar que se habían hecho obras para instalar un sistema de regadío, los científicos de la UJA estiman que se han abierto zanjas sin autorización alguna en más de 20 hectáreas, «destrozando a lo largo de su trazado numerosos sillares, materiales cerámicos y evidentemente estratigrafía arqueológica de la ciudad romana. En determinados puntos los sillares extraídos del subsuelo son de tal envergadura que no han podido ser cubiertos quedando en la superficie actual de la parcela».

Bellón considera «especialmente hiriente la afección de estas zanjas en el entorno de las grandes termas romanas, cuyos restos aún emergen en la zona central de Cerro Maquiz, en la que se ha destrozado parte de su estructura, arrancando grandes sillares de piedra arenisca que formaban parte de esta estructura monumental. Del mismo modo, el trazado de estas zanjas ha afectado a los restos de un templo romano y una plaza pública o foro, excavados por el Instituto Arqueológico Alemán a finales de los años 80 del siglo XX. En esta zona, la destrucción de la estratigrafía arqueológica de época romana ha favorecido la aparición de expoliadores con detector de metales que han sustraído los materiales metálicos procedentes de los depósitos arqueológicos destruidos».

El arqueológico reclama «una actividad de urgencia que valore los daños causados al único ejemplar de templo (sacellum) romano visible en nuestra provincia».

El informe preeliminar sobre los daños que obra en poder de la Justicia estima que «en la zona de la puerta norte de la ciudad, cerca de la ermita actual, se constatan remociones de tierra, sillares desplazados, y con seguridad pueden haber alterado la fortificación de la misma. En la zona de la puerta norte de la ciudad, o puerta de Aurgi, sobre la ladera de Cerro Maquiz que da a la vega del río Guadalbullón, se observa la destrucción de parte de la estructura de la posible puerta de la ciudad. En la zona oeste de la fortificación, en su entorno central y próximo a la propia fortificación, aparecen desplazados sillares de enorme tamaño (de 1.20 metros de lado), así como losas de dimensiones considerables, las cuales podrían constituir la cubierta de alguna cisterna o conducción hidráulica monumental. Por toda la finca han quedado esparcidos restos de estructuras monumentales, los cuales pertenecen a edificios de notable envergadura, posiblemente edificios públicos tales como templos, termas, estructuras de hábitat etc».

INVESTIGACIÓN
Los científicos consideran que «la acción ha sido ejecutada en pocos días, de forma apresurada, que las zanjas más amplias y los pozos o arquetas han sido removidos y tapados sistemáticamente pero manifestando superficialmente la evidencia del daño patrimonial».

Juan Pedro Bellón explica que el proyecto de investigación que el equipo del que forma parte iba a emprender «se ve afectado también por esta destrucción sin precedentes, obligándonos a replantear nuestros objetivos».

«Manifestamos la necesidad de garantizar la protección patrimonial del sitio a través de su declaración como Bien de Interés Cultural para evitar, en lo posible, afecciones como la aquí presentada y nos ponemos a disposición de las autoridades competentes», asegura Bellón.

16 de enero de 2024

Un agricultor destruye parte del yacimiento vacceo de Pintia (Valladolid)

El informe preliminar elaborado por los arqueólogos apunta que la zanja de riego ejecutada por el agricultor se extiende a lo largo de 230 de los 260 metros de longitud que median entre el arroyo de La Vega o Pajares (donde se encuentra un hidrante) y el camino de Las Quintanas. Tiene un metro cuarenta de profundidad y medio metro de anchura, y rompe la muralla de la barriada suroccidental de la ciudad de Pintia
La Junta de Castilla y León se personará contra él por causar «muchísimo daño» y destruir «en una mañana el trabajo realizado por los arqueólogos en los últimos doce años», subraya el consejero de Cultura, Gonzalo Santonja
Zanja para riego que ha afectado de forma irreversible a parte del yacimiento de Pintia en Padilla de Duero (ICAL).

Mal comienzo de año para el patrimonio cultural de Valladolid. Un agricultor ha destrozado 200 metros lineales del yacimiento arqueológico de Pintia en Padilla de Duero, al lado de Peñafiel. Son los restos de una ciudad vaccea, y por tanto milenaria, que a partir de ahora podrá contar con menos detalle el pasado de los hombres a orillas del Duero. El Centro de Estudios Vacceos Federico Wattenberg de la Universidad de Valladolid, coordinadora de las excavaciones y estudios realizados en el lugar, denunció el acto vandálico el pasado sábado, con un comunicado en su página web: «Abrimos el año de la peor forma posible, con un nuevo atentado contra la Zona Arqueológica Pintia (ZAP), recordemos, Bien de Interés Cultural desde 1993», apuntó el centro. «En esta ocasión, se trata de una zanja (otra más, cuánto picador desaprensivo suelto), realizada los pasados días 11 y 12, que ha venido a partir en dos el poblado de Las Quintanas».

La destrucción en el yacimiento «ha sido realizada a conciencia: 1,40 metros de profundidad x 0,5 metros de ancho x 230 metros lineales», detalló la entidad, dedicada al estudio de la civilización vaccea y con sede en Padilla de Duero. Los responsables del yacimiento avisaron al agricultor, explican en su comunicado, de que las rejas del arado «no pueden bajar en la ZAP más allá de 30 centímetros para no afectar a los niveles arqueológicos», a lo que el agricultor respondió que no lo sabía.

«El estrago se traduce en unos 1.200 metros cúbicos de terreno afectados, donde el patrimonio arqueológico ya ha sido alterado y carece por tanto de un contexto específico que permita su correcta interpretación», señalan desde la Universidad. El volumen de información destruida «supera en un tercio al volumen de excavaciones con metodología arqueológica (900 metros cúbicos) realizado a lo largo de doce años de investigaciones en Las Quintanas, en la zanja de excavación situada a tan sólo 120 metros del expolio realizado».

A la vista de los destrozos el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Gonzalo Santonja, y el director general de Patrimonio de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Prieto, visitaron en la mañana de este lunes el yacimiento, para conocer su estado después de que el agricultor ejecutara con dos máquinas y «sin ningún tipo de permisos», apuntó Santonja, la zanja, que iba a destinarse a riego, a lo largo de 230 metros de una tierra de cultivo situada en pleno yacimiento, provocando daños irreparables.

Agentes del Seprona paralizaron las obras tras la denuncia realizada por el director del yacimiento y del Centro de Estudios Vacceos Federico Wattenberg, Carlos Sanz, y este lunes Santonja confirmó que la Junta se personará en la causa contra el responsable de esta «fechoría» que ha causado «muchísimo daño», destruyendo «en una mañana el trabajo realizado por los arqueólogos en los últimos doce años». apuntó en declaraciones que recogió Ical. «Hay que respetar las leyes y, si alguien las infringe, el estado de derecho tiene mecanismos para defenderse. En este caso ha intervenido el Seprona, la denuncia está cursada y nosotros vamos a hacer un informe exhaustivo y vamos a reclamar los daños que se hayan producido», explicó.

«Hay muy pocos yacimientos de esta entidad en todo el país, que abarquen desde la Edad del Bronce hasta los visigodos, que atesoren una ciudad vaccea, una ciudad-estado con su propia necrópolis y un barrio alfarero, como la ciudad de Pintia. Es un yacimiento importantísimo que está siendo muy bien estudiado en la Universidad de Valladolid», señaló Santonja. El consejero denunció que «no se puede entender» que un yacimiento como Pintia, que cuenta con la declaración como Bien de Interés Cultural desde 1993, hace más de treinta años, sufra un ataque así. «Estamos esperando los informes, pero la imagen es absolutamente desoladora», censuró antes de denunciar que «esto no es admisible». Según defendió, «la arqueología y yacimientos arqueológicos que son BIC son como las iglesias, como las catedrales, tienen exactamente la misma entidad. Son absolutamente sagrados, hay que respetarlos y es inadmisible que se atente contra ellos».

El informe preliminar elaborado por los arqueólogos apunta que la zanja ejecutada se extiende a lo largo de 230 de los 260 metros de longitud que median entre el arroyo de La Vega o Pajares (donde se encuentra un hidrante) y el camino de Las Quintanas. Tiene un metro cuarenta de profundidad y medio metro de anchura, y rompe la muralla de la barriada suroccidental de la ciudad de Pintia.

Se trata, apuntan, de una de las zonas más densamente pobladas, que pudo haber sido el punto de origen de la ciudad, por su trazado de orientación diferente, donde se acumulan más de cuatro metros de estratigrafía y una secuencia de 1.200 años de historia. La destrucción afecta a una superficie de 322 metros cuadrados y 1.610 metros cúbicos, y el volumen de información arrasada supera en un tercio al volumen de excavaciones realizadas con metodología arqueológica (900 metros cúbicos) a lo largo de 12 años de investigaciones en Las Quintanas, en la zanja de excavaciones situada a tan solo 120 metros del expolio realizado.

Gran tristeza y un mensaje claro
Por su parte, Carlos Sanz aseguró que «la riqueza del yacimiento es apabullante» y que en estos momentos se encuentran catalogando alrededor de 30.000 piezas. «Son muchos años de trabajo minucioso, intentando recuperar el contexto de las cosas, porque ese es el que nos sirve para reconstruir la historia. Los objetos en sí mismos tienen un valor relativo, pero lo importante es cómo se articulan», afirmó en alusión a «la esencia de la acción arqueológica».

A su juicio, «se ha destruido una parte sustancial del yacimiento, que puede parecer muy pequeña porque el yacimiento es muy grande». «Que en apenas dos días se pueda haber eliminado una información tan preciosa, en un yacimiento tan excepcional, solo deja una sensación de gran tristeza», valoró. Al mismo tiempo, Sanz aplaudió la «determinación» y la rápida reacción del consejero de Cultura, algo que «no se había producido en otros casos en legislaturas anteriores» y defendió que es fundamental transmitir la idea de que «el patrimonio hay que respetarlo en su integridad». «Frente a una tropelía como esta una acción inmediata es la forma más clara de mostrar a quien no quiere entenderlo después de 30 años de declaración de BIC que esto es un lugar estratégico», explicó.

«Poner puertas al campo y controlar los 23.000 yacimientos que hay catalogados en Castilla y León es muy difícil, pero hay que cuidar especialmente los que son realmente estratégicos y cuentan con la declaración BIC. Hay que lanzar un mensaje claro de que los bienes patrimoniales deben respetarse en su integridad», concluyó. Sobre los mecanismos de protección frente a otro tipo de expolios, Santonja recalcó que «no se puede entrar en un yacimiento con detectores de metales, ni se pueden hacer agujeros en esos terrenos de la misma manera que no se pueden robar carteras ni saltar semáforos. Es absolutamente ilegal. Es un delito y la ley hay que cumplirla. Si cualquier persona pasea por un yacimiento y ve a otro haciendo una zanja tiene la obligación de denunciarlo. El patrimonio es de todos, y quien tolera esto se está causando un año a sí mismo, a sus padres, a sus hijos y a sus nietos», remachó.

9 de julio de 2024

Investigan a un 'pitero' por daños y expolio en una necrópolis catalogada de Burgos

Realizaba prospecciones arqueológicas sin autorización en un yacimiento catalogado en Burgos. En un registro al vehículo, el Seprona halló un detector de metales y una azada. Los agentes han incautado diversas piezas con valor histórico


La Guardia Civil ha investigado a D.R.M., de 39 años, como presunto autor de un delito sobre el Patrimonio Histórico en Burgos por daños en una necrópolis catalogada y expolio de piezas arqueológicas, ayudado de un detector de metales y de una azada, utensilios usados para localizar los objetos y hoyar el terreno, respectivamente.

Los hechos ocurrieron semanas atrás, tras la comunicación de un particular a la Central de Servicios de la Guardia Civil de Burgos, en relación a la presencia sospechosa de una persona que se encontraba en un paraje de la Merindad de Río Ubierna, 'barriendo' el suelo con una especie de detector de metales.

Una patrulla era comisionada al lugar y verificaba que el referido punto se hallaba catalogado como necrópolis; en los alrededores encontraron una furgoneta y también a una persona, que fue identificada. El individuo, vecino de otra provincia de Castilla y León, negó que se encontrara practicando remociones de terreno valiéndose de una azada ni buscando nada con un detector de metales.

Un somero registro al interior del vehículo destapó la presencia de uno de estos aparatos electrónicos tipo muleta y una azada de mano con restos de tierra fresca, con claros indicios de haber sido recientemente usada.

Un segundo registro, en esta ocasión más profundo y exhaustivo, permitió encontrar, ocultos en varios compartimentos, varios objetos de apariencia metálica y notable antigüedad, aún con restos de tierra del lugar; su apariencia hacía entrever que no eran el resultado de un hallazgo casual o descubiertas en superficie, sino que habían sido extraídas deliberadamente del interior del subsuelo.

Efectivos del SEPRONA de la Guardia Civil practicaban una inspección ocular en el lugar, lo que permitió descubrir la presencia de cerca de 60 hoyos de similares dimensiones, aunque de distinta profundidad, con evidencias de haber sido recientemente excavados, todos ellos ubicados en un importante yacimiento arqueológico declarado como necrópolis, según las indagaciones llevadas a cabo.

Las pesquisas han aclarado que carecía de las autorizaciones necesarias para llevar a cabo esta excavación arqueológica y tampoco había parado la prospección para comunicar inmediatamente el primer hallazgo a Patrimonio, sino que continuó con la búsqueda practicando más extracciones.

Las herramientas fueron intervenidas y los objetos -1 moneda, 3 clavos, 1 proyectil de un cartucho, 1 gancho y 5 pletinas metálicas- incautados para su estudio.

Se han instruido diligencias -por un delito sobre Patrimonio Histórico por daños y expolio de bienes con valor histórico sin haber comunicado los hallazgos- que han sido presentadas en los juzgados de la capital y en la Fiscalía de Medio Ambiente y Urbanismo de Burgos.

1 de marzo de 2016

La Guardia Civil requisa 77 piezas arqueológicas durante un expolio en Valencia del Ventoso (Badajoz)

Entre las piezas incautadas hay monedas romanas y medievales, alguna de plata, anillos, denarios, fíbulas, botones y otros elementos de plomo, de distintas épocas.
La Guardia Civil andaba tras la pista de los detenidos cuando fueron sorprendidos. FOTO: SEPRONA.
La Guardia Civil intervino 77 piezas arqueológicas en Valencia del Ventoso, cuando eran expoliadas por tres vecinos de Sevilla, que, provistos de un detector de metales, se habían hecho con monedas romanas y medievales, entre otros restos. La operación la llevó a cabo el Seprona de Fuente de Cantos, en colaboración con el puesto de Valencia del Ventoso y de Medio Ambiente de Fregenal de la Sierra.

La Guardia Civil venía investigando posibles expolios en lugares de interés arqueológico en Valencia del Ventoso, cuando sorprendió a los hombres, dos de los cuales se dieron a la fuga, que fueron identificados poco después.

A los presuntos infractores se les intervinieron 77 piezas entre las que había monedas romanas y medievales, alguna de plata, anillos, denarios, fíbulas, botones y otros elementos de plomo, de distintas épocas.

A la zona se desplazaron técnicos de Cultura de la Junta de Extremadura para evaluar los daños en el yacimiento arqueológico. Las piezas, el detector y dos azadas utilizadas para la extracción de las piezas fueron entregadas en la Dirección General de Cultura de la Junta de Extremadura, que abrirá un expediente sancionador por vulneración de la Ley de Patrimonio Histórico de Extremadura.

La Guardia Civil continúa con la investigación y elaboración de informes, en espera de conocer la valoración de piezas y daños en el yacimiento, por si los hechos fueron constitutivos de delito, lo que sería comunicado a la autoridad judicial.

(Fuente: El Periódico de Extremadura


EL EXPOLIO NOS PERJUDICA A TODOS

La extracción arqueológica es una actividad que, cuando se hace sin la metodología adecuada, daña los estratos del terreno, los altera e impide el estudio científico. Por otra parte, los hallazgos arqueológicos son de propiedad pública y forman parte del Patrimonio Cultural..

11 de agosto de 2010

Los expoliadores se ceban con la necrópolis visigótica de Morón de la Frontera (Sevilla)

Hace seis meses fue descubierta una necrópolis visigótica en una finca dentro del término municipal de Morón de la Frontera, en concreto muy cerca de la carretera A-8125 que une esta población con la vecina Arahal. Se trata de restos arqueológicos que fueron encontrados por el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) cuando estaban siendo expoliados por dos vecinos de Arahal.



Tras el primen examen, los arqueólogos de la Delegación Provincial de Cultura apuntaron que, posiblemente, "se estaba ante una importante y desconocida necrópolis de época paleocristiana o visigótica". En el informe posterior, los expertos señalaron además que en este yacimiento arqueológico existen muchos vestigios cerámicos de origen romano, por lo que concluyeron que sería necesaria una intervención de urgencia en el lugar y sus alrededores, dada la singularidad e importancia del mismo.

El hallazgo se produjo hace seis meses escasos.


Sin embargo, los meses han pasado y la excavación arqueológica de urgencia sigue sin tener fecha medio año después del hallazgo. Pese a que en un principio, se apuntó como fecha para empezar los trabajos el pasado mes de marzo, cuando se ejecutasen los presupuestos del año 2010, éstos se han ido demorando hasta tal punto que la necrópolis ha vuelto a ser expoliada en diferentes ocasiones durante los últimos meses.



En este sentido, en los meses de invierno se retrasó la intervención debido a las lluvias. Pero una vez que éstas han cesado, la respuesta desde Junta de Andalucía siempre es la misma. "Se empezará de un día para otro, pero de esto ya hace varios meses, con tumbas abiertas y al descubierto", se lamenta Francisco José Coronado, concejal de Cultura en el Ayuntamiento de Morón de la Frontera.



Por ello, el edil del PP denuncia "la pasividad de la Delegación Provincial de Cultura y de su responsable con todos los asuntos patrimoniales de Morón de la Frontera y, en particular, con esta excavación arqueológica ya que siguen pasando los meses y no se producen avances".



Por razones de seguridad y dada la importancia que a primera vista tiene el hallazgo, este yacimiento arqueológico cuenta con constante vigilancia. Sin embargo, los efectivos del Seprona no permanecen en el lugar del hallazgo las 24 horas del día y alguna que otra lápida de gran importancia ha desaparecido de este antiguo cementerio debido al interés de los expoliadores por estas reliquias. Entre tanto, el Ayuntamiento de Morón de la Frontera pretende seguir con su lucha por protegerlos de la visita de unos turistas nada deseados.

31 de marzo de 2017

El Ayuntamiento de Mengíbar solicita la declaración BIC para el yacimiento arqueológico de Cerro Maquiz

El Consistorio quiere dotar de la mayor protección posible al lugar que alberga la ciudad romana de Iliturgi frente al deterioro del patrimonio existente, sobre todo después de conocer los destrozos acometidos recientemente por obras de instalación de regadío en un olivar.
En el yacimiento que alberga la ciudad romana de Iliturgi se han realizado 14 kilómetros de zanjas.
El Ayuntamiento de Mengíbar (Jaén) trabaja en la solicitud formal a la Junta de Andalucía para que declare Bien de Interés Cultural (BIC) al yacimiento arqueológico de Cerro Maquiz por la vía de urgencia después de los recientes "destrozos" registrados en el mismo con la apertura de 14 kilómetros de zanjas para regadío sobre la antigua ciudad romana de Iliturgi.

TEMPLO ROMANO ÚNICO
El yacimiento, descubierto a finales del siglo XIX, recoge los restos de termas romanas, un templo --el único romano excavado en la provincia--, tramos de calzada y una plaza pública o foro. Una primera estimación, y a falta de datos definitivos, apunta a que podrían haberse visto afectadas en torno a un 15 por ciento de la superficie total del yacimiento.

En el Cerro Maquiz existe un yacimiento arqueológico inscrito en la Base de Datos del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico, por lo que goza de "una singular protección y tutela". A partir de esta catalogación, cualquier actuación sobre estos terrenos requiere la solicitud de una autorización para realizar obras de diversa índole en los mismos.

El comunicado recoge que el pasado 17 de marzo, la Alcaldía del Ayuntamiento de Mengíbar "se entera, por medio del arqueólogo local Emilio Plazas, de que se ha instalado el riego en terrenos de Cerro Maquiz". A partir de ahí se comprueba que la intervención "carece de los permisos pertinentes y que esta se ha hecho sin un proyecto de arqueología y sin la supervisión de un técnico competente en este asunto."

Es por ello por lo que en el equipo de gobierno local llamó a los propietarios de los terrenos para hacerles llegar las obligaciones que tienen al respecto. "Los dueños indicaron que se pondrían en contacto con el arqueólogo citado para determinar la manera de obrar", relata el comunicado municipal.

Posteriormente, el arqueólogo informó al Ayuntamiento de que los propietarios iban a presentar un escrito de los trabajos que han realizado, y que una vez recibido, el Ayuntamiento lo remita a la Delegación de Cultura para que valore la situación.

FUTURAS PROSPECCIONES
Continúa el comunicado señalando que el 22 de marzo, la Universidad de Jaén (UJA) acude al Ayuntamiento de Mengíbar con motivo del convenio suscrito entre ambas instituciones relativo a las futuras prospecciones y sondeos en Cerro Maquiz. Los responsables académicos visitaron el lugar y descubren los daños causados, momento en el que informaron al Ayuntamiento e indicaron que dieron cuenta al Seprona de la Guardia Civil.

Además presentaron la correspondiente denuncia por lo que desde el Seprona se está investigando el alcance de los destrozos. El comunicado sostiene que "desde este Ayuntamiento se ha actuado con la máxima diligencia", aunque no se habían pronunciado al respecto para "no servir como atenuante o agravante en los resultados a determinar".

El escrito del Ayuntamiento de Mengíbar finaliza "lamentando profundamente la situación que ha conllevado la pérdida irrecuperable de un patrimonio histórico" y reitera que "desde el mismo momento en el que tuvo conocimiento del asunto, trabaja en el esclarecimiento del alcance de los destrozos realizados en Cerro Maquiz y en la reclamación de las responsabilidades pertinentes a los autores del deterioro provocado".

11 de noviembre de 2024

Intervienen en el aeropuerto de Palma gran cantidad de piezas arqueológicas expoliadas de «valor incalculable»

La investigación del SEPRONA de la Guardia Civil se saldó con la recuperación de más 1.000 piezas históricas, entre las que se encuentran numerosas monedas, ánforas, ungüentarios, lámparas, vasijas, joyas, figuras y espadas, entre otras.
Las piezas son de alto valor arqueológico.

La Guardia Civil ha intervenido en el aeropuerto de Palma una gran cantidad de piezas arqueológicas pertenecientes al Patrimonio Histórico Español cuando iban a ser sacados del país de manera ilícita y que podrían haber sido expoliadas en aguas de Mallorca.

Según ha informado la Benemérita en una nota de prensa, a raíz de este hallazgo, el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) dentro de las competencias que se le atribuyen en este tipo de delitos, inició una investigación que se saldó con la recuperación de más 1.000 piezas históricas, entre las que se encuentran numerosas monedas, ánforas, ungüentarios, lámparas, vasijas, joyas, figuras y espadas, entre otras.

Todo este patrimonio, a falta de un informe definitivo más detallado, se estima que tendría un valor incalculable.

Todo el material arqueológico, será entregado por la Guardia Civil al servicio de Patrimonio Histórico, para su estudio y catalogación, pero su destino final es la devolución a los ciudadanos de Baleares y para que queden expuestas en el Museo de Mallorca.

14 de octubre de 2024

Desvelada la trama urbana de la urbe vacceo-romana de Saldania (Palencia)

En las últimas semanas se ha desarrollado una prospección en aproximadamente 10 hectáreas de las 53 que comprende el yacimiento arqueológico, que ha permitido sacar a la luz parte de la trama urbana, así como varios edificios de época romana, entre los que destacan unas termas públicas.

La primera fase del estudio se centrará en las particularidades del asentamiento urbano y su desarrollo desde época prerromana.

Investigadores del Instituto de Arqueología de Mérida (IAM), centro de investigación mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Junta de Extremadura junto al arqueólogo Jaime Gutiérrez Pérez, han desvelado la trama urbana de la urbe vacceo-romana de Saldania.

Este yacimiento se localiza a pocos kilómetros de la villa romana de La Olmeda, en la localidad palentina de Saldaña, algo que los arqueólogos ven como una oportunidad única para relacionar la vida urbana y el desarrollo de las villas tardías en el medio rural en la época tardo-antigua a partir del siglo III d.C. Sin embargo, esta primera fase del estudio se centrará en las particularidades del asentamiento urbano y su desarrollo desde época prerromana.

En las últimas semanas, los arqueólogos Jaime Gutiérrez, Carlos Cáceres y Jesús García, investigador del Instituto de Arqueología de Mérida (IAM-CSIC), han trabajado en la urbe vacceo-romana de Saldania para sacar a la luz la trama urbana mediante la aplicación de la prospección geofísica con georradar.

Gracias a la colaboración de la Diputación de Palencia, el Ayuntamiento de Saldaña y el Laboratorio de Arqueología de Mínima Invasión del IAM-CSIC, se ha desarrollado una prospección, en aproximadamente 10 hectáreas de las 53 que comprende el yacimiento arqueológico, que ha permitido sacar a la luz parte de la trama urbana, así como varios edificios de época romana, entre los que destacan unas termas públicas.

Junto a los trabajos de prospección, realizados mediante un potente georradar de 32 antenas y 600 megahercios (mhz) de frecuencia, se ha desarrollado un proyecto de fotografía aérea con drones multiespectrales que permite confirmar algunas de las estructuras localizadas con el georradar. “Queremos ampliar la prospección geofísica a las laderas del yacimiento. Creemos que el patrimonio cultural es imprescindible para el desarrollo del pueblo”, señala Adolfo Palacios Rodríguez, alcalde de Saldaña.

Jesús García Sánchez, investigador del IAM, recalca la importancia de los métodos geofísicos para a ampliar el conocimiento sobre la arqueología romana: “la prospección geofísica es la mejor técnica para comprender la extensión de los yacimientos, nos permite formular nuevas hipótesis y garantizar el éxito de las futuras campañas de excavación en el yacimiento”.

Asimismo, la protección del yacimiento es fundamental para respetar la labor de investigación, es la razón por la que el enclave será vigilado por agentes del Seprona de la Guardia Civil: “Hemos detectado expolios en el yacimiento, y junto a la labor de investigación, avanzaremos en los trabajos de concienciación del valor de la arqueología entre la población local”, concluye el arqueólogo Jaime Gutiérrez.

Ubicado en el Alto de la Morterona, el yacimiento de Saldania, junto a la actual localidad de Saldaña (Palencia), sitúa sus orígenes en la Edad del Bronce, aunque no fue hasta la Segunda Edad del Hierro cuando se constata un importante núcleo celtíbero.

De hecho, el Ayuntamiento de Saldaña pretende poner en valor esta zona con un mirador sobre el Carrión y un monumento alusivo a los thieldones encontrados en este punto.

Ya en época romana, la ciudad tuvo un auge entre los siglos I y II d.C., para ir perdiendo, paulatinamente, importancia durante los siglos III y IV d.C., momento en el cual surgen las grandes villas, como la cercana Villa Romana La Olmeda.

En época visigoda el enclave perduró, siendo importante, como queda demostrado por la acuñación de monedas, con la leyenda SALDANIA PIVS, de cinco reyes visigodos, entre los que destacan Leovigildo (571-586) o Chindasvinto (642-653).

La vida en el enclave se mantuvo en época medieval, siendo asolada por Almanzor en el 995. Posteriormente, el núcleo urbano se trasladó a la zona del castillo, aunque no se abandonó definitivamente hasta el siglo XIII-XIV, manteniéndose una actividad alfarera de gran importancia.