google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri

23 de agosto de 2024

Comienza la campaña arqueológica en el poblado íbero de Santomera (Murcia)

Este año, los trabajos se están centrando en descubrir más hallazgos del poblado íbero. Durante la campaña se está ofreciendo un curso de “Arqueología de Campo” para una decena de estudiantes, a través del Colegio Oficial de Doctores y Licenciados en Letras y Ciencias de la Región de Murcia


Esta semana ha comenzado en el Poblado Íbero de la Sierra del Balumba – Cobatillas la Vieja- una nueva campaña de excavación organizada por la Asociación Patrimonio Santomera y el Consistorio santomerano, que se extenderá hasta el próximo 28 de agosto.

El alcalde de Santomera, Víctor Martínez, ha declarado que “continuamos trabajando de la mano de la Asociación Patrimonio para que el resto de los ciudadanos conozcan nuestro pasado y realzar este importante enclave íbero que se encuentra en la intersección del Valle del Segura con Rambla Salada”. Asimismo, ha agradecido la labor que realiza la asociación “para poner en valor el patrimonio y la historia de nuestro municipio”.

Este año, los trabajos se están centrando en descubrir más hallazgos del poblado íbero. Esta excavación se encuentra dentro del proyecto “Santomera Milenaria: puesta en valor del patrimonio arqueológico y etnográfico”, en el que se acomete el estudio de los restos y bienes del territorio del municipio a través de la investigación, protección y divulgación de su patrimonio.

Durante la campaña se está ofreciendo un curso de “Arqueología de Campo” para una decena de estudiantes, en colaboración con el Colegio Oficial de Doctores y Licenciados en Letras y Ciencias de la Región de Murcia, donde se está dando a conocer el método arqueológico, las distintas formas de registro, así como las técnicas de estudio, publicación y divulgación una vez realizado el trabajo de campo.

Patrimonio Santomera es una asociación sin ánimo de lucro de carácter cultural, integrada por profesionales de diferentes ramas científicas vinculadas al patrimonio, que pretende generar una entidad capaz de aglutinar el estudio del patrimonio del municipio desde una perspectiva científica y divulgativa.

22 de agosto de 2024

La UCO identifica 20km de nuevos tramos de la vía romana Córdoba-Mérida

Una investigación de la Unidad Patricia y el Proyecto Ager Mellariensis de la Universidad de Córdoba (UCO) revela el trazado a lo largo de Fuente Obejuna, Belmez, Peñarroya e Hinojosa del Duque.

Durante los tiempos de Augusto toda la Península se encontraba conectada con una amplia red de carreteras, que permitían el rápido movimiento de las legiones en las zonas conflictivas, el transporte de los importantes recursos hispanos y el movimiento de los habitantes de las diferentes ciudades. Esta tupida red estaría compuesta por grandes caminos principales, como hoy son las autopistas, caminos secundarios y caminos terciarios, por ejemplo, aquellos que daban acceso a las minas.De entre esas vías hay una que unía directamente dos capitales de provincia: la vía Corduba-Emerita, de gran importancia. Antes incluso de la fundación de Mérida ya unía Corduba con Metellinum (Medellín), o lo que es lo mismo, el valle del Guadiana con el del Guadalquivir, con todo el vientre metalífero que hay en esas sierras. De esta región Roma se interesó, especialmente, por los metales, tales como el plomo, la plata o el oro, y esta vía sirvió de cauce de salida de toda esa riqueza.

Ahora, gracias al empleo de la información del Plan PNOA-LiDAR, del Instituto Geográfico Nacional, desde la Universidad de Córdoba se han podido detectar nuevos tramos seguros de esta vía Corduba-Emerita. Concretamente, se ha ampliado la sección del camino que se conocía en Puente Nuevo y se han descubierto nuevos restos al norte de la provincia de Córdoba en El Bujardillo (Belmez), Los Tejares (Peñarroya-Pueblonuevo) y en el Cascajoso (Hinojosa del Duque). De esta forma se ha pasado de conocer únicamente seis kilómetros de la vía a disponer de veinte nuevos kilómetros de esta calzada romana.

Hasta la fecha, por lo tanto, se desconocía la mayor parte de su trazado. Solo eran seguros algunos pequeños tramos, como la famosa Loma de los Escalones, entre Córdoba y Cerro Muriano, donde se conserva parte de la vía excavada en la piedra. Recientemente desde la Universidad de Córdoba se habían producido avances, con el descubrimiento por parte de la Unidad Patricia de un tramo de la calzada perfectamente conservado bajo las aguas del embalse de Puente Nuevo (Espiel), y salido a la luz tras la bajada del nivel del agua.

Este nuevo descubrimiento ha permitido ahora detectar con claridad desde el aire no solo gran cantidad de kilómetros de los terraplenes de la vía difícilmente identificables, ya que fuera de las ciudades la capa de rodadura de los caminos se hacía de gravas apisonadas que con el paso del tiempo acaban disgregadas y desaparecen; si no que también ha sacado a la luz parte de las cunetas de la calzada. El hallazgo, en definitiva, permitirá empezar a reconstruir de una forma más segura el trazado de esa gran “autopista” romana que estructuraba el norte de la provincia de Córdoba, unía dos grandes capitales y sirvió para acercar a los romanos a las riquezas metálicas de Sierra Morena.

La investigación ha sido publicada en el marci del proyecto Ager Mellarie el artículo “Sensing the Corduba-Emerita Road: New transects of the route identified in the north of Córdoba”, publicado recientemente por José Luis Domínguez Jiménez y Antonio Monterroso Checa en la revista científica Journal of Archaeological Science.

Una columna y un par de hacha militares, entre los hallazgos de la última campaña en la Villa Romana de Salar (Granada)

Columna hallada en la última campaña de excavación.
Los trabajos se han centrado en una esquina del yacimiento como paso previo a la construcción del proyecto arquitectónico para enriquecer las visitas que se va a construir con fondos europeos.

La campaña arqueológica que, por noveno año, se ha desarrollado este mes de agosto en la Villa Romana de Salar, finaliza estos días tras la aparición de nuevos restos en la zona del edificio monumental tardío, entre ellos una columna de fuste completo de tres metros, y un par de hachas, una de ellas de las conocidas como 'dolabras' romanas, que formaban parte de la panoplia militar de la etapa en que se data esta construcción, entre mediados de los siglos V y VI.

En declaraciones a Europa Press, el director de los trabajos, Julio Román, de la Universidad de Granada, ha explicado que este año se han centrado en una esquina de la zona C del yacimiento como paso previo a la construcción del proyecto arquitectónico para enriquecer las visitas que se va a construir con financiación de fondos europeos, y que conllevará que en principio no se planifiquen excavaciones en el recinto de la Villa Romana los dos próximos veranos sino otros trabajos asociados.

En este edificio con patio de columnas se trabaja desde el inicio de esta década, y entre los restos que aparecieron en la campaña de 2023 hubo basas, fustes y algunos capiteles decorados. Este verano, según los resultados que está previsto se presenten este viernes a las 20,30 horas en la sala de usos múltiples de Salar, se confirma lo que se sabía de él, con una torre central con crujía meridional que le daba acceso.

Con evidencias de reutilizaciones de pavimento, el hallazgo "quizá más interesante" para Román ha sido la columna de fuste completo de tres metros, que parecía estar acopiada para utilizarla de alguna manera que el equipo de expertos que dirige desconoce, si bien sí apunta a que procedería de la residencia original, más lujosa, del siglo IV, en el mismo yacimiento de la Villa Romana.

Uso no solo residencial
Pero más allá de las claves que para los arqueólogos puede tener lo que se adivina a través de los restos de una fachada con torre tipo mirador central, junto con el patio, las columnas y los capiteles decorados, la aparición de la 'dolabra' romana vendría a confirmar el uso no sólo residencial de esta residencia en cuyo natural menos lujoso ya se observa la asunción del cristianismo como fe religiosa por parte de la clase dirigente.

Es decir, es una arquitectura de estilo bajoimperial en que la casa se organiza no tanto en torno a patios, sino a grandes pasillos, que empiezan a configurarse como "espacios principales" donde se desarrollan funciones protocolarias del propietario, que pueden ir desde la recepción de personas que acuden para hablar de asuntos sociales o económicos e incluso a pedir justicia.

Son momentos en que los dueños de estas casas dominicales (del latín 'dominus', esto es, propietario), explica Román, incluso empiezan a organizar sus propias milicias, siendo en cierto modo los precursores de lo que serán los señores que organizarán sus territorios conforme avance la Edad Media.

En la época en que se puede datar esta vivienda tardía, Roma ha caído y ha abandonado los gobiernos de las provincias, que empiezan a organizarse en estos términos, como se explicará entre otras cuestiones en la exposición de este viernes, que se encuadra también en las numerosas actividades sociales y culturales que se han venido realizando en Salar en agosto con motivo de esta novena fase de las excavaciones de la Villa Romana.

A los vecinos se les encuadrarán estos hallazgos en la estrategia del municipio, de unos 2.600 habitantes, para consolidar su atractivo como destino que alberga la Villa Romana, que contará en este mismo espacio, y es por lo que se han centrado las excavaciones este año en cerrar en lo posible el conocimiento de la zona C, con un edificio de interpretación con base en el anteproyecto seleccionado en un concurso convocado a tal efecto, y que habría de estar terminado en el último tramo de 2026.

Con estos "últimos datos" que los arqueólogos, con unos trabajos este verano ya fuera del Proyecto General de Invetigación que marcó las directrices de las excavaciones en los últimos años, ponen a disposición de proyecto arquitectónico se contribuye a un espacio que, según detalla Román, mejorará la visita albergando "todos los restos" así como los espacios de trabajo, laboratorios o talleres. La idea en resumen es la "musealización" de la Villa Romana con base a una subvención de unos tres millones de euros.

Bien de Interés Cultural desde 2021
El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía acordó en mayo de 2021 inscribir en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural con la tipología de Zona Arqueológica, la Villa Romana de Salar, en el Poniente de Granada, una de las más importantes y singulares villas romanas documentadas, y las venus allí aparecidas.

Fundada en época altoimperial (principios del siglo I después de Cristo), fue remodelada y monumentalizada en el primer tercio del siglo IV y, finalmente, abandonada durante en el siglo VI. La Villa Romana de Salar representa así un importante testimonio material sobre la evolución histórica del municipio, además de la transición del enclave desde su fundación hasta su abandono.

Constituye uno de los máximos exponentes para el estudio de la arquitectura doméstica de ámbito rural hispano gracias a la observación de sus mosaicos, pinturas murales, columnas y esculturas femeninas.

Una veintena de jóvenes participan en el VII Campo de Voluntariado de Arqueología del Castillo de Bedmar (Jaén)

Una veintena de arqueólogos voluntarios procedentes de distintos puntos de España, México, Argentina, Colombia y China participan en estos trabajos que se desarrollarán hasta el próximo 28 de agosto. Las excavaciones se acometen este año en la zona de tránsito entre la entrada principal y el patio de armas de la fortaleza.
Una veintena de jóvenes participan en el VII Campo de Voluntariado de Arqueología del Castillo de Bedmar.

El presidente de la Diputación de Jaén, Paco Reyes, ha visitado esta mañana junto al alcalde de Bedmar, Enrique Carreras, y al director de Paleomágina, Marco Antonio Bernal, las excavaciones que se acometen en las inmediaciones de la fortaleza bedmarense a través del VII Campo de Voluntariado Internacional de Arqueología en el Castillo Nuevo de Bedmar, con el que colabora la Administración provincial y la Caja Rural de Jaén. Una veintena de arqueólogos voluntarios procedentes de distintos puntos de España, México, Argentina, Colombia y China participan en estos trabajos que se desarrollarán hasta el próximo 28 de agosto.

“Este campo de arqueología atrae cada año a jóvenes estudiantes de Arqueología, Historia, y carreras afines, con el objetivo de avanzar en la recuperación del Castillo Nuevo, una fortaleza que es propiedad municipal y que es un emblema para el municipio”, señala Reyes, que destaca el esfuerzo del ayuntamiento para su puesta en valor. “En anteriores ediciones de este campo de voluntariado se han excavado el acceso principal a la fortaleza, el Alcazarejo o la entrada original desde la plazoleta de Vaciajarros, mientras que este año se acometen en la zona de tránsito entre la entrada principal y el patio de armas”, detalla el presidente de la Diputación.

Reyes ha recordado que en 2023 se ejecutaron las obras de rehabilitación y consolidación del Castillo de Bedmar con una inversión superior a los 440.000 euros, cofinanciadas con el programa 1,5% Cultural del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, para la mejora del Patrimonio Histórico. Estos trabajos permitieron la restauración de los muros, para una vez consolidados, obtener un remate homogéneo de sus alzados, así como la creación de un espacio o centro para la interpretación de los hallazgos extraídos en la intervención arqueológica previa. En esta línea, el Ayuntamiento de Bedmar y Garcíez ha presentado un nuevo proyecto para ser financiado a través del 2% Cultural, con el objetivo de consolidar el patio de armas.

El presidente de la Diputación de Jaén ha puesto en valor el interés cultural e histórico de este Campo de Voluntariado en el Castillo de Bedmar, que se suma al VI Campus Internacional de Arqueología del Cuaternario de Bedmar, organizado por el Ayuntamiento de Bedmar, la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) y el Instituto de Investigaciones Prehistóricas de Sierra Mágina (Paleomágina) con la colaboración de la Administración provincial, que se ha celebrado durante el pasado mes de julio. “Más de 120 personas se han dado cita este verano en este municipio de Sierra Mágina para participar en estos campos de arqueología que están permitiendo descubrir el rico pasado de esta zona de la provincia de Jaén y que evidencian la apuesta de Bedmar por recuperar su patrimonio y ponerlo en valor, así como por descubrir sus orígenes a través de los primeros habitantes de este enclave”.

12 de agosto de 2024

Extremadura facilita los trámites para realizar prospecciones arqueológicas

La Consejería de Cultura, Turismo, Jóvenes y Deportes de la Junta de Extremadura ha aprobado un nuevo modelo normalizado de declaración responsable para las intervenciones de prospecciones arqueológicas. Esta medida, publicada en el Diario Oficial de Extremadura, entró en vigor el pasado 10 de agosto de 2024.

El nuevo modelo de declaración responsable está dirigido a aquellas prospecciones arqueológicas de carácter preventivo que no afecten a bienes de interés cultural.

Con esta medida, las promotoras de dichas intervenciones podrán sustituir la autorización previa requerida hasta ahora por una declaración responsable que deberán presentar antes de iniciar los trabajos.

Este documento deberá incluir una descripción detallada de la intervención, así como la certificación de que la dirección de la actividad arqueológica cumple con todos los requisitos legales y reglamentarios vigentes.

Este cambio normativo se enmarca en las medidas de simplificación administrativa del Ejecutivo regional, con las que se buscan reducir los trámites burocráticos y agilizar la respuesta a la ciudadanía.

"Queremos simplificar los procesos administrativos sin dejar de garantizar la protección del patrimonio cultural y arqueológico", ha explicado la directora general de Bibliotecas, Archivos y Patrimonio Cultural, Adela Rueda Márquez de la Plata, quien ha subrayado que esta declaración la han realizado, por primera vez, técnicos expertos en arqueología y patrimonio de la consejería en colaboración con el servicio jurídico.

La aplicación de la declaración responsable permite a la Administración regional agilizar la tramitación de ciertas actividades, reduciendo la burocracia para intervenciones que, por su naturaleza, no ponen en riesgo significativo el patrimonio.

La presentación de esta declaración responsable no exime del cumplimiento de otros deberes y obligaciones establecidos por la Ley de Patrimonio Histórico y Cultural de Extremadura, ni por el decreto que regula la actividad arqueológica en la región.

Este avance normativo reafirma el compromiso de la Junta de Extremadura con la protección y promoción del patrimonio histórico y cultural de la región, facilitando a su vez a los ciudadanos y a las empresas la realización de trámites administrativos de manera más ágil y eficiente.

La Consejería de Cultura, Turismo, Jóvenes y Deportes de la Junta de Extremadura ha aprobado un nuevo modelo normalizado de declaración responsable para las intervenciones de prospecciones arqueológicas. Esta medida, publicada en el Diario Oficial de Extremadura, entra en vigor el día 10 de agosto de 2024.

El nuevo modelo de declaración responsable está dirigido a aquellas prospecciones arqueológicas de carácter preventivo que no afecten a bienes de interés cultural.

Con esta medida, las promotoras de dichas intervenciones podrán sustituir la autorización previa requerida hasta ahora por una declaración responsable que deberán presentar antes de iniciar los trabajos.

Este documento deberá incluir una descripción detallada de la intervención, así como la certificación de que la dirección de la actividad arqueológica cumple con todos los requisitos legales y reglamentarios vigentes.

Este cambio normativo se enmarca en las medidas de simplificación administrativa del Ejecutivo regional, con las que se buscan reducir los trámites burocráticos y agilizar la respuesta a la ciudadanía.

"Queremos simplificar los procesos administrativos sin dejar de garantizar la protección del patrimonio cultural y arqueológico", ha explicado la directora general de Bibliotecas, Archivos y Patrimonio Cultural, Adela Rueda Márquez de la Plata, quien ha subrayado que esta declaración la han realizado, por primera vez, técnicos expertos en arqueología y patrimonio de la consejería en colaboración con el servicio jurídico.

La aplicación de la declaración responsable permite a la Administración regional agilizar la tramitación de ciertas actividades, reduciendo la burocracia para intervenciones que, por su naturaleza, no ponen en riesgo significativo el patrimonio.

La presentación de esta declaración responsable no exime del cumplimiento de otros deberes y obligaciones establecidos por la Ley de Patrimonio Histórico y Cultural de Extremadura, ni por el decreto que regula la actividad arqueológica en la región.

Este avance normativo reafirma el compromiso de la Junta de Extremadura con la protección y promoción del patrimonio histórico y cultural de la región, facilitando a su vez a los ciudadanos y a las empresas la realización de trámites administrativos de manera más ágil y eficiente.

Localizado un barco pirata berberisco en aguas del Estrecho de Gibraltar

El pecio, que se encuentra a 830 metros de profundidad, fue descubierto por el cazatesoros Greg Stemm durante la búsqueda del HMS Sussex en 2005.  En la tartana hundida tan sólo han sido localizados utensilios domésticos, como ollas y sartenes, tazas, cuencos, jarras o lámparas de aceites.

El cazatesoros Greg Stemm, director de Seascape Artifact Exhibits Inc. Así como uno de los impulsores de la empresa Odissey Marine Exploration, afirma haber localizado un pequeño barco pirada del siglo XVII, sumergido en el Estrecho de Gibraltar, a 830 metros de profundidad.

En un artículo publicado en la revista Wreckwatch, una publicación monográfica sobre piratería, Stemm asegura que se trata de una tartana berberisca de 14 metros de eslora, localizada entre Marruecos y España, en aguas del Estrecho.

Su descubrimiento se produjo en 2005, en los trabajos de rastreo del HMS Sussex, localizado finalmente por Odyssey Marine Exploration (OME), la empresa con sede en Florida, que años después perdería el pleito con el Gobierno español por el pecio de “Nuestra Señora de las Mercedes”, ante un tribunal de Tampa, en Florida.

El barco, presumiblemente, era tripulado por corsarios berberiscos que se dirigirían a asaltar la costa española, como era frecuente en la época, de ahí la profusión de torres vigías que aún se conservan a lo largo del litoral andaluz.

Lejos de los valiosos tesoros de otros barcos de la época, en la tartana hundida tan sólo han sido localizados utensilios domésticos, como ollas y sartenes, tazas, cuencos, jarras o lámparas de aceites.

Restos localizados por el ROV de Odyssey Marine

«La amenaza de los corsarios de Argel era un terror cotidiano para Occidente. El naufragio encontrado en aguas profundas es un eco precioso de uno de los grandes horrores marítimos del Mediterráneo occidental», declaró Stemm a la revista Newsweek.El cazatesoros se refiere al comercio de esclavos, a la compraventa de prisioneros y al saqueo.

Para explorar la tartana, como también ocurriera con el Sussex, se utilizó un vehículo de operación a distancia (ROV), un robot submarino operado a distancia. Su exploración reveló también que la embarcación iba equipada con cuatro cañones grandes, diez pedreros –de menor calibre– y abundantes mosquetes.

Aparecen nuevos espacios en la villa romana de Las Gavias (Granada)

La Junta de Andalucía ha realizado excavaciones arqueológicas en la Villa Romana de Las Gabias, en la galería subterránea comúnmente conocida como "baptisterio paleocristiano"
Trabajos en la Villa Romana de Las Gabias

La Junta de Andalucía, a través de la Delegación Territorial de Turismo, Cultura y Deportes en Granada, ha realizado excavaciones arqueológicas en la Villa Romana de Las Gabias, en concreto en la galería subterránea comúnmente conocida como "baptisterio paleocristiano", donde han aparecido nuevos espacios y elementos similares a los de este tipo de espacios históricos en época imperial.

Así, se ha localizado el acceso original a la galería, una escalinata monumental de la que se conservan cinco peldaños en mármol y que era desconocida; también se ha excavado la parte exterior de la bóveda de la galería, localizando un pavimento que indica la existencia de, al menos, un espacio abierto y transitable sobre la misma, también inédito y que cambia la imagen del edificio, según ha detallado la Junta en una nota de prensa este viernes.

La Delegación Territorial de Turismo, Cultura y Deporte trabaja en la redacción del proyecto para la conservación y musealización que permita la visita pública al monumento. Asimismo, ha preparado un programa de visitas guiadas al yacimiento, que se desarrollarán a lo largo de la segunda mitad del año.

Como explica Antonio Manuel Montufo, inspector del yacimiento, las excavaciones han sido limitadas ya que su objetivo era la toma de datos de apoyo para el proyecto de musealización que se está redactando, a pesar de lo cual han aportado resultados espectaculares.

Los trabajos han sido dirigidos por el arqueólogo Manuel Moreno Alcaide, y han recuperado gran número de piezas que formaban parte de la decoración del edificio, como teselas y placas de mármol provenientes de todo el Mediterráneo, algunas de ellas con forma de animales, que formaban parte de la rica decoración de opus sectile que adornaba el interior de la estancia.

El delegado de Turismo Cultura y Deporte de la Junta en Granada, Fernando Egea, ha explicado que estas investigaciones subrayan la singularidad de este lugar, en el que el criptopórtico debió formar parte de un gran conjunto de edificios, aún por descubrir, articulado por patios porticados y jardines.

El conjunto de la galería, con su escalera monumental de acceso y sus ventanales laterales de iluminación, y la sala final, cubierta con la bóveda, con una fuente y una escalera de caracol, todo ello profusamente decorado, la hacen una construcción única en el sur de Hispania, con paralelos en las grandes villas imperiales en las proximidades de Roma o Pompeya.

En 1972, Manuel Sotomayor realiza una pequeña intervención arqueológica y promueve la expropiación de parte del yacimiento por el Estado, aunque no se pudo materializar la de la parcela de la familia Serrano Rojas, donde se sitúa el acceso al criptopórtico. Estas circunstancias han impedido la realización de investigaciones sistemáticas en la galería y sus inmediaciones, así como labores de restauración o conservación, languideciendo el yacimiento en manos de los beneficiarios de su descubridor.

En 1995, la Universidad de Granada realizó otra pequeña excavación en los terrenos de la Junta de Andalucía, descubriendo una almazara y restos de habitaciones, datos que contribuyeron a la reinterpretación del sitio como una gran villa romana, descartando así la primera explicación de la galería como un baptisterio.

La titularidad del yacimiento del que es titular la Junta de Andalucía de tres de las cuatro parcelas en las que se ubica el área central, incluyendo gran parte del criptopórtico, mientras que la última, en la que se ubica la entrada, está en manos del Estado tras el fallecimiento sin herederos de su última dueña, aunque está en trámites de adquisición por la Junta de Andalucía.

La Villa Romana de Las Gabias fue descubierta de manera fortuita por Francisco Serrano en 1920, cuando las lluvias provocaron un derrumbe parcial en sus tierras. El elemento más destacado es el ahora conocido como criptopórtico, una monumental construcción subterránea que consistente en una larga galería abovedada de más de 30 metros de longitud que culmina en una estancia cuadrangular cubierta por una cúpula. La construcción estuvo ricamente decorada y contenía una fuente en mármol.

Desde su descubrimiento en 1920 hasta 1921, cuando el arqueólogo Juan Cabré realiza la primera excavación sistemática, el yacimiento fue intensamente expoliado, como denunció en varias ocasiones 'El Defensor de Granada'. Lamentablemente, se perdieron elementos tan singulares como una fuente octogonal de mármol blanco, de la que sólo se conserva el negativo y un pequeño fragmento, así como la mayor parte de los zócalos y piezas de sectile en mármol y mosaicos que decoraban la construcción.

La labor de Cabré en octubre de 1921 supuso poner en el mapa este importante yacimiento, que por sus características fue interpretado como un baptisterio paleocristiano, nombre con el que sigue siendo comúnmente conocido.

Tras la excavación, se sucedieron nuevos expolios hasta que en 1929 Leopoldo Torres Balbás ejecuta el vallado y la restauración de la galería, actuaciones que se complementaron con la declaración como Monumento Histórico Artístico en 1931. Tras este momento, y hasta la década de 1970, el yacimiento cae en el olvido.

9 de agosto de 2024

Sacan a la luz un asentamiento de la Edad de Bronce en Tafalla (Navarra)

Entre los hallazgos destacan restos de dos inhumaciones, un conjunto de vasos cerámicos y 6 kilos de lingotes de cobre que permiten documentar actividades rituales y económicas de la época.
Conjunto de lingotes de cobre con un peso cercano a los 6 kilos

La explotación de una gravera en el término de Ceda –La Celada en Tafalla para dar servicio a la construcción de la línea de Tren de Altas Prestaciones entre Zaragoza y Pamplona ha sacado a la luz un asentamiento temporal de la Edad de Bronce que ha permitido documentar actividades rituales y económicas de la población prehistórica navarra.

Los trabajos de excavación, que se realizan en colaboración con la Dirección General de Cultura – Institución Príncipe de Viana, se han llevado a cabo entre 2020 y 2023 por Adif en una zona de préstamos de gravas y han permitido descubrir en una superficie de 2 hectáreas un conjunto de 130 estructuras. Éstas consisten en sencillos rebajes en el terreno de morfología diversa, donde se han encontrado distintos elementos: agujeros de poste de dos cabañas, silos, hogares, fuegos, etc. El yacimiento, que se fecha en la Edad del Bronce a mediados del IIº milenio a.C., fue un pequeño hábitat temporal de corta existencia, un tipo muy habitual durante la Prehistoria reciente en la Comunidad Foral.

Esta clase de yacimientos, conocidos como “campos de hoyos”, se erigieron con estructuras perecederas, por lo que no se han llegado a conservar sus restos constructivos (viviendas, suelos, cercados, etc.) debido a su fragilidad y al efecto de la roturación. Sin embargo, han permitido documentar los restos de los enseres y datos significativos sobre los modos de subsistencia, condiciones ambientales, tecnología, etc. de sus habitantes. Sin embargo, la excavación en extensión permite que afloren numerosa información y en ocasiones descubrimientos inesperados.

Finalizados los trabajos arqueológicos en el yacimiento, los restos descubiertos han pasado a conservarse en los Fondos de Arqueología del Gobierno de Navarra, donde están siendo objeto de restauración. Al mismo tiempo, se está llevando a cabo un estudio científico a través de la colaboración entre la Dirección General de Cultura-Institución Príncipe de Viana y Adif. En el mismo, están participando técnicos del Servicio de Patrimonio Histórico, de Olcairum, S.L. y de diversos centros de investigación (Universidades de Valladolid y Autónoma de Madrid, CSIC, etc.). Los trabajos incluyen la datación radiocarbónica, análisis de metales y de su procedencia, tecnología de elaboración de cerámica, residuos orgánicos, arqueofauna, antropología, etc.

Hallazgos
Entre los hallazgos efectuados, destacan los restos de dos inhumaciones de la Edad del Bronce, las más antiguas conocidas de la localidad.

Además, se ha encontrado el grupo de vasos cerámicos más completo de Navarra de la Edad del Bronce. Gran parte de estas cerámicas se han hallado íntegras, fueron depositadas simultáneamente y finalmente selladas, lo que probablemente represente un acto de carácter ritual del que aún se desconoce su significado ya que no existen paralelos. Los estudios sobre tecnología y residuos permitirán aportar luz para su comprensión.

También se ha descubierto un conjunto de lingotes de cobre con un peso cercano a los 6 kilos, que constituía una pequeña fortuna para la época. Este hallazgo, que supone un caso único en la Comunidad Foral y en el noroeste de España, se comparará con otros descubrimientos realizados al norte de los Pirineos para conocer las circunstancias del abandono de esta fortuna.

La excavación y estudio de Ceda-La Celada constituye un caso único para conocer cómo vivía una comunidad del IIº milenio a.C. en Navarra ya que se han documentado actividades rituales y económicas hasta la fecha insospechadas.
(Fuente: Cultura Navarra)