Los terrenos de Bañeras del Penedés que esconden un poblado ibérico de gran importancia. |
El principal escollo es el desacuerdo entre los dos hermanos que ostentan la titularidad de las tierras para negociar la cesión municipal. Uno de ellos, según el edil de la localidad, “quiere renegociar los términos del acuerdo de cesión, cuando el acuerdo ya estaba cerrado después de mucho tiempo negociando”. El máximo responsable del gobierno local apunta que el Consistorio siempre ha mantenido el mismo importe y que tiene fondos para costearlo. Añade que el acuerdo con los propietarios se basaba en la adquisición de sólo una parte de todos los terrenos, gracias a una segregación autorizada por la Generalitat, con el objetivo de excluir de la compra final parte de los terrenos de una extensión de 10.000 metros cuadrados. De este modo, el Consistorio tenía previsto adquirir los 27.000 metros cuadrados restantes de la zona por un importe de 80.000 euros, según confirma el alcalde.
“Hasta el último momento hemos tenido la esperanza de poder resolver está situación por otro camino”, apuntaba Benach que prefiere no revelar quienes son los propietarios para preservar su anonimato. El 31 de diciembre finalizaba el plazo de tiempo que el Ayuntamiento había puesto sobre la mesa para cerrar el acuerdo, mientras añadía que las negociaciones con los propietarios de los terrenos “han implicado hasta tres ayuntamientos distintos para intentar llegar a un acuerdo”.
Ante esta situación, el Consistorio local está dispuesto a iniciar proceso para expropiar los terrenos, una gestión que debe comenzar con el trámite de solicitud de los permisos correspondientes a la Generalitat de Catalunya. Según el responsable del gobierno municipal, el próximo 18 de enero está previsto un encuentro con responsables de la Generalitat para iniciar los trámites que concluirán con del proceso tasación conjunta de los terrenos en los que se ubica el poblado, un protocolo de trabajo que, según Benach, puede alargarse “durante 11 o 12 meses”.
El alcalde de Banyeres reitera que la voluntad municipal siempre ha sido la de resolver el conflicto “de la manera más civilizada posible”. Avanza que el próximo martes se ha programado una reunión del Consistorio con los representantes legales de los dos propietarios de los terrenos. “Siempre esperamos poder llegar a un acuerdo que pueda facilitar los trámites por ambas partes”, añade.
LA ZONA ESPERA SU MOMENTO PARA DIGNIFICARSE
Para poder iniciar las actuaciones de expropiación, el Consistorio de Banyeres se apoya en el hecho de que el poblado íbero conocido como Les Masies de Sant Miquel fue catalogado Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN) y se incluye en el catálogo del Patrimoni Cultural Català. Esto supone que la Generalitat tiene la responsabilidad de proteger la zona, ya sea de titularidad pública o privada.
“Se sabe desde hace más de 30 años que estos terrenos albergan una zona de gran interés histórico y creemos que no debemos tardar más para poder mostrar la importancia de estos restos”, apunta Amadeu Benach, que destaca que el poblado íbero supondrá “una aportación cultural y turística para el territorio”.
Asimismo, el edil pone de manifiesto que prolongar el período de conversaciones sin llegar a un acuerdo equivale a aumentar el riesgo de que “se pierdan ayudas y subvenciones que pueden ser muy importantes, como la aportación del 1% Cultural destinada a Patrimonio Histórico o los Fondos FEDER”.
(Fuente: La Vanguardia)