google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri

29 de octubre de 2024

Balance satisfactorio del XIII Encuentro de Arqueología del Suroeste Peninsular

El encuentro ha propiciado la asistencia de alrededor de 200 personas, se estructuró como un congreso de tres días de duración en sesiones de mañana y tarde y estuvo organizado por los grupos de investigación PAIDI HUM-812 y PAIDI HUM-831 de la Universidad de Cádiz.

El municipio gaditano de Benalup-Casas Viejas acogió el XIII Encuentro de Arqueología del Suroeste Peninsular durante el pasado fin de semana. Unos días intensos, con más de 50 ponencias sobre diferentes temas de interés, incluida la proyección del documental ‘Tholos Peñarroyo I’ de Moro Films, que se han abordado en el Centro Cultural Jerome Mintz y en el Centro Cultural 20 de marzo (Teatro Municipal).

El XIII Encuentro de Arqueología del Suroeste Peninsular ha propiciado la visita de alrededor de 200 personas durante el pasado fin de semana, teniendo un importante impacto económico en el sector hotelero, así como en los bares y restaurantes del municipio.

El encuentro, que se estructura como un congreso de tres días de duración en sesiones de mañana y tarde, ha estado organizado por los grupos de investigación PAIDI HUM-812 y PAIDI HUM-831 de la Universidad de Cádiz, junto con la colaboración de diversas entidades, entre ellas el Ayuntamiento de Benalup-Casas Viejas.

Además de la presentación oral de comunicaciones, debates, conclusiones y presentación de pósteres científicos, el encuentro ha incluido visitas de interés arqueológico, tales como los yacimientos de Gadir, la necrópolis de Los Algarbes y Baelo Claudia.

El alcalde Antonio Cepero quiere agradecer públicamente el trabajo desempañado por la organización del encuentro, los colaboradores, los estudiantes del municipio que han asistido, así como a la Delegación Municipal de Turismo encabezada por la concejala María José Marchán.

Universitarios europeos participan en el Curso Internacional de Arqueología de Burriana (Castellón)

A través de convenios con otras instituciones nacionales y europeas, este taller ha atraído hasta la capital de la Plana Baixa a estudiantes y profesores de la Università di Macerata (Italia), la Universidad de Potsdam (Alemania) y la Universidad Jaume I de Castellón.

Durante esta semana, el Museo Arqueológico de Burriana ha celebrado la tercera edición del Curso Internacional de Arqueología y Culturas del Mediterráneo Antiguo. Estos estudios están promovidos por el Aula de Arqueología Mediterránea, con el objetivo de que estudiantes extranjeros puedan conocer nuestro patrimonio arqueológico a través del Museo y las excavaciones.

Esta 'Aula' fue creada mediante un convenio entre el Ayuntamiento de Burriana y la Universitat Jaume I (UJI), con el fin de llevar a cabo una mayor implantación de la universidad en la ciudad de Burriana, en su entorno, y dar pie a un marco de actividades de investigación, formación y promoción del patrimonio cultural y arqueológico del municipio.

Así pues, a través de convenios con otras instituciones nacionales y europeas, este taller ha atraído hasta la capital de la Plana Baixa a estudiantes y profesores de la Università di Macerata (Italia), la Universidad de Potsdam (Alemania) y la Universidad Jaume I de Castellón, para potenciar el traspaso de conocimiento a través de la internacionalización y formar a los alumnos en la protección y difusión del patrimonio arqueológico en una dimensión trasmediterránea, a través de sesiones de excavación y extracción arqueológica en la zona de Sant Gregori.

A su vez, también se están realizando los laboratorios del Museo de Arqueología de Burriana, en la que los estudiantes conocen estos materiales extraídos, hasta el momento previo a su restauración y exposición, como cerámica, huesos, y metales, entre otros; para su posterior documentación y registro de los datos de la excavación, todo ello bajo la supervisión del equipo de restauradoras del museo.

Además, este novedoso proyecto cuenta con la implementación de las últimas tecnologías gracias al proyecto con el que colabora el museo de Burriana y esta liderado por la UJI, la Universidad Politécnica de Valencia y universidades de Italia, Hungría y de Francia. El museo arqueológico municipal es uno de los puntos de desarrollo de un proyecto didáctico europeo relacionado con el patrimonio, donde se digitalizan algunas de las piezas arqueológicas de la capital de la Plana Baixa, y gracias a la realidad aumentada, se crea un área virtual ambientada en el museo burrianense, donde los alumnos pueden excavar virtualmente estos restos arqueológicos, siendo los alumnos de este curso quienes prueben por primera vez ese tipo de recurso.

Estudian proteger como BIC el tramo de muralla hallado en el Casco Histórico de Villena (Alicante)

La singularidad de esta obra monumental, vinculada a la historia y la identidad de la ciudad de Villena, tiene suficiente valor e importancia que la hacen merecedora de su catalogación como Bien de Interés Cultural (BIC).
Técnicos municipales y de la Conselleria abordan las medidas de protección de la infraestructura de protección de la vieja ciudad de Villena

El alcalde de Villena, Fulgencio Cerdán, y la edil de Cultura, María Server, han anunciado su interés de catalogar como Bien de Interés Cultural (BIC) el tramo de muralla hallado en el Casco Histórico durante las obras de reurbanización del barrio. La delegación municipal, acompañada por la responsable del Servicio Municipal de Arqueología y Patrimonio (SEMAP), Luz Pérez, y los técnicos de Patrimonio Arqueológico de la Conselleria de Cultura, han realizado una visita a la calle José Zapater, donde se encuentra este tramo de muralla y donde se están realizando las tareas necesarias para su preservación.

Los técnicos de la Conselleria y el equipo municipal han explicado al alcalde y a la edil que la singularidad de esta obra monumental, vinculada a la historia y la identidad de la ciudad de Villena, tiene suficiente valor e importancia que la hacen merecedora de su catalogación como Bien de Interés Cultural (BIC).

El objetivo del equipo de gobierno municipal y de los técnicos es proceder a su conservación tras la excavación, tomando las medidas oportunas de protección previas a la pavimentación de la calle. Además, está prevista la señalización del recinto amurallado sobre el nuevo pavimento. La concejal de Cultura considera que de este modo se logra su preservación, además de “enriquecer los recursos turísticos del núcleo medieval, a la vez que se protege la muralla frente a nuevos proyectos de obras”.

Server ha avanzado que se pretende programar unas jornadas para divulgar los resultados de los trabajos, dar a conocer el valor cultural del recinto fortificado y la relevancia de su promotor, el Príncipe Don Juan Manuel.

Muralla histórica
La muralla de la villa fue construida en el siglo XIV, por mandato del noble Don Juan Manuel, a instancias del rey Jaime II. Villena en aquel momento pertenecía al Reino de Valencia y se erigía en una de las principales villas de la frontera meridional. La documentación constata que en 1308, Don Juan Manuel solicitó al monarca, que era su suegro, un maestro de obras que dirigiese los trabajos.

Aunque ya se había testimoniado de forma puntual su presencia en anteriores trabajos, en esta ocasión la muralla se ha dejado ver en toda su magnitud, ya que se han localizado restos murarios por todo el vial, desde la actual calle Maestro Moltó -antigua calle del Castillo- hasta el inmueble n.º 20 de la Calle Juan Chaumel. A partir de aquí, continua por debajo de las viviendas pares de dicho vial, hasta encontrarse con el tramo de muralla localizado en 2010 en la Puerta de Almansa.

En definitiva, se trata de una obra de excepcional envergadura y singularidad que pone de manifiesto la importancia del urbanismo defensivo medieval que adquirió Villena a partir del siglo XIV. Resulta también de gran interés arqueológico el descubrimiento de un muro de una vivienda musulmana, junto a un nivel de relleno con materiales cerámicos, por debajo del nivel de cimentación de la muralla cristiana. Esto corrobora varias hipótesis, una de ellas es la existencia de poblamiento islámico previo a la conquista cristiana; la segunda es que tras el sometimiento y posible expulsión de la población musulmana, se produce una reestructuración urbanística que romperá con el pasado islámico, configurando la villa en gran medida a semejanza de las fortificaciones urbanas europeas.

En cuanto a las características constructivas, la muralla se construye sobre un zócalo de mampostería de cal, o, en algunos puntos, sobre la costra caliza del terreno, mediante encofrado de tapial con tongadas alternativas de arena y cal, con un acabado exterior de mortero de cal. Como ya observó en su día José María Soler, en la subida de Santa Bárbara y la Plaza de Santa María, el trazado es zigzagueante en varios puntos de la calle José Zapater, con el objetivo de ampliar el ángulo de visión de la cerca.

Finalmente, también se han localizado restos arquitectónicos -muros, pavimentos, enlosado de hogar, etc.- de época contemporánea, paralelos a las fachadas actuales de números pares, que corroboran la antigua alineación de las viviendas documentada en planos del Archivo Municipal datados a finales del siglo XIX.

28 de octubre de 2024

Descubren en Ribadeo un escandallo que podría datar del siglo XVI

La sonda de plomo que se usaba para medir la profundidad y el tipo de fondo marino se encuentra en el fondeadero histórico, a la vista y en riesgo relativo de expolio
Podría ser el primer escandallo de esta época aparecido en Galicia.

Un nuevo elemento náutico hallado hace unos días en la ría de Ribadeo viene a sumarse al catálogo de piezas arqueológicas que acreditan el enorme valor del patrimonio subacuático del estuario ribadense. Se trata de un escandallo, una sonda que se usaba para medir la profundidad y el tipo de fondo marino. El hallazgo se realizó durante la inmersión previa a la presentación oficial de la exposición y el documental «Memoria y patrimonio bajo la ría» en el Club Náutico de Ribadeo, por miembros del Proyecto Argos, iniciativa dedicada al estudio, difusión y valorización del patrimonio cultural marítimo de la ría de Ribadeo. Iban a ver los huesos de ballena descubiertos recientemente y se encontraron con este nuevo hallazgo.

En un primer análisis visual se estima que el escandallo podría ser de los siglos XVI o XVII. Era un útil especialmente importante a la hora de fondear o al aproximarse a aguas someras. Junto a la sondaleza (cabo), se echaba por la borda y se sumergía hasta llegar al fondo, para averiguar la profundidad. También solía llevar en su base un trozo de sebo, al que se adherían restos que indicaban cómo era el fondo. 

Se trata de una pieza cónica, probablemente de plomo, un escandallo de mano para su uso en aguas poco profundas y con un peso estimado inferior a 5 kilogramos. Está perforado en su parte superior, para amarrar el cabo, y presenta una oquedad en su base para alojar el sebo. Ha sido localizado en el fondeadero histórico, apuntó el arqueólogo subacuático David Fernández Abella, una zona protegida y de alta potencialidad arqueológica, rodeado de abundantes restos de fauna, cerámica y lastre de embarcaciones.

El hallazgo ha sido notificado a la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural, para que tome las medidas oportunas, toda vez que al encontrarse a la vista hay riesgo potencial de expolio. Por eso no se descarta que en los próximos días se realice una inmersión para extraerlo. De ser así se podrá estudiar en detalle. Y es que aunque los escandallos tienen un uso muy dilatado en época moderna y contemporánea, este tiene parecido a dos piezas expuestas en el Museo Naval de Madrid y en el ArQua de Cartagena, de los siglos XVI y XVII, y podría ser el primer escandallo de esta época aparecido en aguas de Galicia. Para David Fernández es otra evidencia más de la riqueza arqueológica de la ría.

Primer hallazgo de canibalismo infantil ritual del Neolítico en la Comunidad Valenciana

El descubrimiento se remonta a comunidades de pastores de hace 6.400 años y posiciona a la Cova del Randero de Pedreguer como un referente internacional

Las excavaciones realizadas en la Cova del Randero de Pedreguer han confirmado el primer hallazgo de canibalismo ritual del Levante Peninsular en el contexto del Neolítico. Así lo anunció el presidente de la Diputación de Alicante, Toni Pérez, tras presentar las conclusiones de los trabajos de investigación desarrollados en el marco del Plan de Excavaciones e Investigaciones arqueológicas del MARQ.

Arqueólogos del MARQ y especialistas en tafonomía del Institut Valencià de Conservació, Restauració i Investigació (IVCR+i) han dado a conocer este descubrimiento, que se remonta a comunidades de pastores, agricultores y artesanos de hace 6.400 años. Como ha manifestado Toni Pérez, que ha estado acompañado por el diputado de Cultura, Juan de Dios Navarro, y el alcalde de Pedreguer, Sergi Ferrús, “la Diputación mantiene firme su compromiso por la investigación a través del plan anual de excavaciones del MARQ y, en este caso, hemos tenido la oportunidad de crear alianzas para ir de la mano del Ayuntamiento de Pedreguer durante años de trabajo y poner en valor el rico patrimonio histórico y cultural que tiene la Cova del Randero”.

Un equipo interdisciplinar en arqueología, antropología y arqueozoología dirigido por Jorge A. Soler, prehistoriador y director del MUBAG, Consuelo Roca de Togores, arqueóloga de la Diputación, Mª Pilar Iborra y Rafael Martínez Valle, del IVCR+i, ha dado a conocer las conclusiones de este trabajo basado en la determinación en huesos humanos de señales de desarticulación, descarnación o marcas de diente humano. Los resultados también se presentaron el pasado mes de septiembre en dos foros científicos internacionales: el VIII Congreso Internacional del Neolítico en la Península Ibérica de la Universidad de Alcalá de Henares y el XVII Congreso Nacional e Internacional de Paleopatología del Museo de Segovia.

Soler ha explicado que el canibalismo era una actividad relativamente común durante el Neolítico, prácticamente en toda Europa, y en la Península Ibérica se concentra sobre todo en zonas de Andalucía. Las causas, según distintos autores, podían ser gastronómicas, por violencia o por ritual. “En Randero la falta de señales de violencia en ninguno de los huesos conservados, sumado a que aquellos que presentan marcas se corresponden con sujetos infantiles, hace suponer su ingesta como un acto ritual selectivo vinculado al duelo funerario, en un contexto familiar, consumidos en lo que pudiera formar parte de un ritual funerario, en un pensamiento circular donde la muerte se proyecta en la vida, haciendo propio el recuerdo de un ser vivo y querido”, ha puntualizado Roca de Togores.

Hace 6.400 años un grupo de la comunidad de pastores que frecuentó o residió en la Cova del Randero para acoger ganado doméstico y su procesado cárnico, arrojó a una galería interna usada como basurero, desechos domésticos que incluían una gran cantidad de huesos de animales procesados (fundamentalmente ovejas y cabras), junto a fragmentos de huesos pertenecientes a un mínimo de ocho esqueletos humanos, entre adultos y niños. Dos huesos, un fragmento de mandíbula de un niño de unos seis años y un cúbito de un perinatal de unas 40 semanas de gestación, que presentan claras evidencias de manipulación antrópica peri mortem, es decir, cuando el hueso todavía estaba fresco, que confirman un canibalismo selectivo.

Las investigaciones permitieron identificar en 2023 varios tipos de marcas antrópicas: cortes realizados con instrumental de piedra para desarticular y para descarnar, fracturas por flexión para acceder a la médula y mordeduras humanas, en algunos casos provocando la destrucción de algunas partes del hueso.

Los trabajos en este enclave se han llevado a cabo a lo largo de catorce campañas (2007 – 2021) del Plan de Excavaciones del MARQ, con el apoyo del Ayuntamiento de Pedreguer, aunque los hallazgos tuvieron lugar concretamente en 2018 y la investigación en laboratorio sigue en curso en la actualidad. Hasta ahora la importancia de la cueva radicaba en haber sido excavada en los niveles del Neolítico Medio, ofreciendo muchos datos en cuanto a gestión y organización del espacio físico y temporal.

Además, Jorge Soler ha añadido que, también en la comarca de la Marina Alta se publicaron en 2017 otros huesos humanos con mordeduras humanas y marcas de corte procedentes de la Cova de Santa Maira en Castell de Castells, que remiten al Mesolítico -cazadores y recolectores-, “todo lo que contribuye a hacer de la provincia de Alicante un referente en el marco de la investigación prehistórica y paleoantropológica”.

Plan de urgencia para recuperar las termas romanas de La Alcudia (Elche)

Las actuaciones para acometer la consolidación y recuperación del histórico conjunto están incluidas en la Campaña de Excavaciones del MARQ 2024
Visita de las autoridades a la ciudad ibero-romana de La Alcudia.

Los trabajos arqueológicos de La Alcudia realizados durante la XIX Campaña de Excavaciones e Investigaciones del MARQ han dado un paso más para la recuperación y puesta en valor de las Termas Occidentales de Illici.

La Diputación y la Universidad de Alicante han impulsado este plan de urgencia para la documentación arqueológica y diagnóstico de los daños estructurales del frente exterior del histórico conjunto, que han visitado el diputado de Cultura, Juan de Dios Navarro, y la concejal de Cultura de Elche, Irene Ruiz, acompañados por el vicerrector de Investigación y rector en funciones de la UA, Juan Mora, y la directora del Instituto de Investigación en Arqueología y Patrimonio Histórico (INAPH), Carolina Doménech.

Los objetivos de este Plan de urgencia se han centrado en el análisis, evaluación y diagnóstico de las estructuras pertenecientes a un complejo termal monumental de época romana ubicado en el frente occidental del yacimiento, emplazamiento de la antigua Colonia Iulia Ilici Augusta, con el fin de redactar un documento técnico que permita acometer su posterior consolidación, restauración y puesta en valor integral.

El director del MARQ, Manuel Olcina, ha estado al frente de las labores junto al director de Arquitectura de la institución provincial, Rafael Pérez, así como Mercedes Tendero y Ana Mª Ronda, responsables, respectivamente, de las áreas de Arqueología y de Catalogación de la Fundación Universitaria La Alcudia. Los resultados de la intervención, que se ha prolongado durante cinco semanas, han confirmado la monumentalidad de estos baños romanos, que superan los 1.500 metros cuadrados, así como la erosión exponencial que sufren las estructuras que lo componen, en un continuo proceso de deterioro por pérdidas de elementos, fracturas y alteraciones que amenazan con el desplome definitivo de algunos muros y pavimentos.

Todos estos trabajos en su conjunto se han sumado a la documentación textual y gráfica recogida durante los últimos 25 años por la Fundación La Alcudia, información técnica que permite hacer un seguimiento y evaluación de las alteraciones, incidencias y patologías progresivas en el estado de conservación de este edificio ubicado junto al acceso principal del yacimiento.

Como ha explicado Olcina, las labores llevadas a cabo este año se han centrado en la limpieza manual de la cubierta vegetal y de tierra agrícola que cubrían la fábrica original. También se ha aliviado el peso de las tierras superficiales que afectaban a un buen trecho de un suelo de hormigón que pavimenta una palestra de grandes dimensiones.

Los muros, pavimentos y restos de estructuras arquitectónicas de estas termas analizadas han sido tratados por los servicios de topografía y fotogrametría a partir de vuelos de dron, escáneres láser, nubes de puntos, etc., tareas que permiten informatizar toda la documentación recogida y vectorizarla para analizar sus componentes, su estado de conservación, diagnóstico, relaciones estratigráficas y ubicar puntos de referencia que permitan hacer un seguimiento futuro de posibles desplazamientos de los elementos constructivos existentes.

De igual modo, se han realizado fichas FRAC (Fichas de Restauración Arquitectónica y Conservación), que plasman la documentación descriptiva y las propuestas de intervención urgente para la estabilización y protección del conjunto de restos constructivos que, en definitiva, serán la base para la redacción de un informe sobre la viabilidad de recuperación del conjunto termal estudiado.

El enclave arqueológico, situado en las laderas del Parque Natural del Peñón de Ifach, está siendo objeto de esta campaña que ha tenido una duración de cinco semanas.

25 de octubre de 2024

"La conservación del patrimonio subacuático y marítimo constituye un reto social y cultural"

La investigadora Ana Crespo Solana explica el desarrollo de la arqueología subacuática en su último libro. En su trabajo analiza el vínculo entre historia y arqueología, las líneas de investigación más importantes relacionadas con el estudio del patrimonio subacuático y la memoria tangible e intangible de las sociedades marítimas. También describe los métodos empleados en una excavación subacuática y revisa en profundidad algunos de los más importantes hitos legislativos en relación al patrimonio sumergido.

Durante milenios, océanos y mares han sido medios para la transmisión cultural y tecnológica. En el libro Arqueología subacuática y patrimonio marítimo (CSIC-Catarata), la investigadora del CSIC Ana Crespo Solana aborda la relación entre el enorme patrimonio existente en mares y océanos de todo el mundo y la historia de la humanidad. El título, perteneciente a la colección ¿Qué sabemos de?, analiza el vínculo entre historia y arqueología, las líneas de investigación más importantes relacionadas con el estudio del patrimonio subacuático y la memoria tangible e intangible de las sociedades marítimas. También describe los métodos empleados en una excavación subacuática y revisa en profundidad algunos de los más importantes hitos legislativos en relación al patrimonio sumergido.

La Unesco y el Decenio del Océano
En 2021 Naciones Unidas lanzó oficialmente el Decenio del Océano (2021-2030), que tiene entre sus metas la necesidad de producir datos sobre la relación entre océano y sociedad. El patrimonio subacuático del planeta, de una enorme riqueza histórica y cultural, proporciona muchos de esos datos. Sin embargo, advierte la autora, afronta serios problemas de conservación y regulación jurídica comparables a los que sufre el propio océano.

La investigadora aclara que se trata de un patrimonio tangible, que alberga materialidades relacionadas con la interacción entre la sociedad humana y el mar, y también de un patrimonio intangible, que abarca los conocimientos derivados de la lucha del ser humano con el océano y de la creación de la tecnología que permita la vida en el mar. Esto incluye la construcción naval, la obra civil en costas y ríos, así como cualquier estrategia humana y cultural orientada al aprovechamiento de los recursos que proceden del mar.

Una disciplina derivada de la arqueología
La arqueología subacuática y marítima es una subdisciplina de la arqueología que estudia el pasado histórico a través de la recopilación de vestigios de cultura material y su investigación, pero con una metodología específica que implica la adaptación del arqueólogo, y sus métodos, al medio marino. Como disciplina científica, la arqueología subacuática extiende las técnicas de la arqueología clásica al mundo marino.

Según Ana Crespo Solana, la tecnología es solo un instrumento que debe utilizarse con un proyecto claro, por lo que es imprescindible tener en cuenta factores como la información ofrecida por la memoria histórica oral o escrita y el estudio de la documentación antes de recurrir a una tecnología determinada. “También es esencial conocer la relación que existe entre el clima y la geografía, así como los cambios geofísicos históricos en las zonas donde se producen naufragios para entender las propiedades de dichos entornos”, apunta.

El desafío de las personas que se dedican a la arqueología subacuática consiste en adaptar su trabajo al entorno marítimo. “Hay muchos problemas relacionados con el océano, pero quizás el reto más interesante, y a la vez peligroso, es la profundidad”, comenta. Como disciplina científica, la arqueología subacuática ha evolucionado mucho y este libro proporciona una gran cantidad de casos de estudio en España y en toda Europa.

No es una búsqueda de tesoros
La arqueología subacuática se ha confundido tradicionalmente como la búsqueda de tesoros, una especie de aventura excitante como la de los grandes descubrimientos, igualables a la idea del hallazgo de la tumba de Tutankamón, pero bajo el mar. No obstante, “una considerable y loable labor de concienciación social está cambiando esta perspectiva”, aprecia Crespo. La investigadora del CSIC también hace hincapié en que la arqueología en cuerpos de agua es una ciencia. “El principio más importante es poder entender y crear un marco teórico y metodológico adecuado para poder estudiar los restos arqueológicos sin destrucción, con la mínima intrusión posible y establecer preguntas adecuadas de investigación”, observa.

El naufragio es el principal generador del yacimiento arqueológico relacionado con el océano. La autora explica que “el yacimiento relacionado con una catástrofe marina derivada en hundimiento de una embarcación es uno de los objetivos más extendidos de la arqueología histórica marítima y se aplica a contextos producidos por diversos eventos como el naufragio, el abandono, una catástrofe natural o restos de batallas en el mar”.

Conservación y divulgación para el futuro
La conservación del patrimonio subacuático y marítimo constituye un reto social y cultural que va de la mano de la propia concienciación y protección de los océanos. “Hasta el momento, no se han impulsado de forma suficiente las investigaciones sobre las implicaciones que para los ecosistemas marinos pueda tener la existencia de unos bienes culturales que yacen en el mar durante siglos”, reclama Ana Crespo. En estos casos, urge el desarrollo de proyectos interdisciplinares y un mayor compromiso por parte de los Estados y las instituciones y para lograrlo, “es fundamental la cooperación internacional, así como una mayor fluidez en los procesos burocráticos necesarios para la tramitación de permisos o la declaración de bienes de interés cultural en patrimonio protegido”, concluye.

Si nos fijamos en el territorio español, la arqueología marítima y subacuática sufre por la relativa falta de homogeneización, pues depende del modo en que cada comunidad autónoma protege y estudia el patrimonio histórico marítimo, costero, sumergido o intermareal. Tampoco existen centros oficiales de arqueología subacuática en todas las comunidades autónomas. Además, advierte Crespo, “se debe vigilar a toda costa que los bienes culturales (objetos y artefactos) derivados del patrimonio subacuático y marítimo se depositen, guarden y gestionen en instituciones científicas o en museos, con el fin de asegurar su preservación y estudio a largo plazo”. En este sentido, la experta resalta la importancia de que se fomenten planes de formación en patrimonio arqueológico subacuático desde la perspectiva de las leyes, pero en especial desde la arqueología científica propiamente dicha.

Sobre la autora: Ana Crespo Solana

Investigadora científica del CSIC, profesora honoraria en la Universidad de Gales Trinity Saint David (UWTSD) y miembro de diversas instituciones y organismos científicos, como la Academia Europea y la Red de Arqueología del CSIC (ArchaeologyHUB). Ha impartido conferencias y másteres especializados en Europa, América y Asia, y ha dedicado más de treinta años al estudio de las relaciones entre las sociedades humanas y el océano, la investigación interdisciplinar de las humanidades con las tecnologías de la información, la historia, la arqueología marítima y la defensa del patrimonio sumergido. Además, ha dirigido proyectos internacionales de investigación, como el programa internacional ForSEAdiscovery, así como otros dedicados al estudio de los pecios ibéricos en el marco de la Carrera de Indias de los siglos XVI al XVIII. Ha publicado ocho libros y más de 120 artículos en inglés y español.

Málaga reconoce con un premio al Instituto Arqueológico Alemán de Madrid

El I Premio "Mainake" concedido por la Diputación de Málaga al Instituto Arqueológico Alemán de Madrid es un reconocimiento a la larga trayectoria de esta institución, cuyas investigaciones arqueológicas han sido fundamentales para el conocimiento del pasado fenicio, romano y medieval de la provincia. El galardón se entregará durante la clausura del II Encuentro de Arqueología de Málaga, organizado por la institución provincial y que se celebrará del 28 al 30 de octubre

El Premio ‘Mainake’ de Arqueología, creado por la Diputación de Málaga, ha recaído en su primera edición en el Instituto Arqueológico Alemán de Madrid. El galardón se entregará el miércoles de la semana próxima durante la clausura del II Encuentro de Arqueología de Málaga, que se desarrollará del 28 al 30 de octubre.

Así lo ha anunciado hoy el vicepresidente y diputado de Cultura, Manuel López Mestanza, junto a la vicerrectora de Igualdad y Política Social de la UMA, María José Berlanga; el catedrático de la UMA y director de la revista Mainake, Pedro Rodríguez Oliva; y el coordinador del II Encuentro de Arqueología de Málaga, Manuel Corrales.

López Mestanza ha explicado que este premio toma el nombre de la histórica revista de arqueología ‘Mainake’, una publicación de la Diputación que, desde hace más de cuatro décadas, se ha convertido en un referente del sector y se ha encargado de divulgar el conocimiento sobre el patrimonio arqueológico de Málaga y su provincia.

Ha indicado que el galardón tiene como objetivo homenajear a aquellas instituciones y personas que han dedicado una parte relevante de su vida y carrera a la investigación, protección, conservación y difusión del patrimonio arqueológico de la provincia.

“Málaga -ha añadido- tiene un legado histórico único, y este reconocimiento pone en valor la importancia de seguir investigando, protegiendo, conservando y difundiendo nuestros yacimientos para las futuras generaciones”.

Paralelamente, ha precisado que el premio al Instituto Arqueológico Alemán de Madrid es un reconocimiento a la larga trayectoria de esta institución, cuyas investigaciones arqueológicas en Málaga han sido fundamentales para el conocimiento del pasado fenicio, romano y medieval de la provincia.

Desde 1964, el Instituto Arqueológico Alemán, bajo la dirección de renombrados arqueólogos como el profesor doctor Hans-Günter Schubart y, más recientemente, la profesora doctora Dice Marzoli, ha llevado a cabo excavaciones y estudios en importantes yacimientos como Toscanos, Trayamar, Cerro del Peñón y los Castillejos de Alcorrín. Estos trabajos han proporcionado descubrimientos de gran valor científico y han posicionado a Málaga como un referente en el estudio de la colonización fenicia en la Península Ibérica.

II Encuentro de Arqueología de Málaga
La entrega del premio -que recogerá el director del Instituto Arqueológico Alemán, el profesor doctor Paul Scheding- se desarrollará durante la clausura del II Encuentro de Arqueología de Málaga, que se celebrará del 28 al 30 de octubre de 2024 en Antequera y Málaga. Este evento reunirá a expertos de nuestra provincia y de otras ciudades de España, quienes debatirán sobre la importancia de la arqueología como recurso cultural y económico y expondrán las principales experiencias arqueológicas realizadas en la provincia y en ciudades como Cartagena, Mérida o Barcelona.

Expertos, académicos, estudiantes, responsables de ayuntamientos y entusiastas del patrimonio participarán en el encuentro, organizado por la Delegación de Cultura de la Diputación de Málaga en colaboración con las delegaciones territoriales de Cultura, Turismo y Deporte y la de Educación de la Junta de Andalucía, 19 ayuntamientos de la provincia y la Universidad de Málaga.

Las ponencias y las conclusiones del encuentro se recogerán en una publicación que editará el CEDMA.