google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri

12 de agosto de 2024

Aparecen nuevos espacios en la villa romana de Las Gavias (Granada)

La Junta de Andalucía ha realizado excavaciones arqueológicas en la Villa Romana de Las Gabias, en la galería subterránea comúnmente conocida como "baptisterio paleocristiano"
Trabajos en la Villa Romana de Las Gabias

La Junta de Andalucía, a través de la Delegación Territorial de Turismo, Cultura y Deportes en Granada, ha realizado excavaciones arqueológicas en la Villa Romana de Las Gabias, en concreto en la galería subterránea comúnmente conocida como "baptisterio paleocristiano", donde han aparecido nuevos espacios y elementos similares a los de este tipo de espacios históricos en época imperial.

Así, se ha localizado el acceso original a la galería, una escalinata monumental de la que se conservan cinco peldaños en mármol y que era desconocida; también se ha excavado la parte exterior de la bóveda de la galería, localizando un pavimento que indica la existencia de, al menos, un espacio abierto y transitable sobre la misma, también inédito y que cambia la imagen del edificio, según ha detallado la Junta en una nota de prensa este viernes.

La Delegación Territorial de Turismo, Cultura y Deporte trabaja en la redacción del proyecto para la conservación y musealización que permita la visita pública al monumento. Asimismo, ha preparado un programa de visitas guiadas al yacimiento, que se desarrollarán a lo largo de la segunda mitad del año.

Como explica Antonio Manuel Montufo, inspector del yacimiento, las excavaciones han sido limitadas ya que su objetivo era la toma de datos de apoyo para el proyecto de musealización que se está redactando, a pesar de lo cual han aportado resultados espectaculares.

Los trabajos han sido dirigidos por el arqueólogo Manuel Moreno Alcaide, y han recuperado gran número de piezas que formaban parte de la decoración del edificio, como teselas y placas de mármol provenientes de todo el Mediterráneo, algunas de ellas con forma de animales, que formaban parte de la rica decoración de opus sectile que adornaba el interior de la estancia.

El delegado de Turismo Cultura y Deporte de la Junta en Granada, Fernando Egea, ha explicado que estas investigaciones subrayan la singularidad de este lugar, en el que el criptopórtico debió formar parte de un gran conjunto de edificios, aún por descubrir, articulado por patios porticados y jardines.

El conjunto de la galería, con su escalera monumental de acceso y sus ventanales laterales de iluminación, y la sala final, cubierta con la bóveda, con una fuente y una escalera de caracol, todo ello profusamente decorado, la hacen una construcción única en el sur de Hispania, con paralelos en las grandes villas imperiales en las proximidades de Roma o Pompeya.

En 1972, Manuel Sotomayor realiza una pequeña intervención arqueológica y promueve la expropiación de parte del yacimiento por el Estado, aunque no se pudo materializar la de la parcela de la familia Serrano Rojas, donde se sitúa el acceso al criptopórtico. Estas circunstancias han impedido la realización de investigaciones sistemáticas en la galería y sus inmediaciones, así como labores de restauración o conservación, languideciendo el yacimiento en manos de los beneficiarios de su descubridor.

En 1995, la Universidad de Granada realizó otra pequeña excavación en los terrenos de la Junta de Andalucía, descubriendo una almazara y restos de habitaciones, datos que contribuyeron a la reinterpretación del sitio como una gran villa romana, descartando así la primera explicación de la galería como un baptisterio.

La titularidad del yacimiento del que es titular la Junta de Andalucía de tres de las cuatro parcelas en las que se ubica el área central, incluyendo gran parte del criptopórtico, mientras que la última, en la que se ubica la entrada, está en manos del Estado tras el fallecimiento sin herederos de su última dueña, aunque está en trámites de adquisición por la Junta de Andalucía.

La Villa Romana de Las Gabias fue descubierta de manera fortuita por Francisco Serrano en 1920, cuando las lluvias provocaron un derrumbe parcial en sus tierras. El elemento más destacado es el ahora conocido como criptopórtico, una monumental construcción subterránea que consistente en una larga galería abovedada de más de 30 metros de longitud que culmina en una estancia cuadrangular cubierta por una cúpula. La construcción estuvo ricamente decorada y contenía una fuente en mármol.

Desde su descubrimiento en 1920 hasta 1921, cuando el arqueólogo Juan Cabré realiza la primera excavación sistemática, el yacimiento fue intensamente expoliado, como denunció en varias ocasiones 'El Defensor de Granada'. Lamentablemente, se perdieron elementos tan singulares como una fuente octogonal de mármol blanco, de la que sólo se conserva el negativo y un pequeño fragmento, así como la mayor parte de los zócalos y piezas de sectile en mármol y mosaicos que decoraban la construcción.

La labor de Cabré en octubre de 1921 supuso poner en el mapa este importante yacimiento, que por sus características fue interpretado como un baptisterio paleocristiano, nombre con el que sigue siendo comúnmente conocido.

Tras la excavación, se sucedieron nuevos expolios hasta que en 1929 Leopoldo Torres Balbás ejecuta el vallado y la restauración de la galería, actuaciones que se complementaron con la declaración como Monumento Histórico Artístico en 1931. Tras este momento, y hasta la década de 1970, el yacimiento cae en el olvido.

9 de agosto de 2024

Sacan a la luz un asentamiento de la Edad de Bronce en Tafalla (Navarra)

Entre los hallazgos destacan restos de dos inhumaciones, un conjunto de vasos cerámicos y 6 kilos de lingotes de cobre que permiten documentar actividades rituales y económicas de la época.
Conjunto de lingotes de cobre con un peso cercano a los 6 kilos

La explotación de una gravera en el término de Ceda –La Celada en Tafalla para dar servicio a la construcción de la línea de Tren de Altas Prestaciones entre Zaragoza y Pamplona ha sacado a la luz un asentamiento temporal de la Edad de Bronce que ha permitido documentar actividades rituales y económicas de la población prehistórica navarra.

Los trabajos de excavación, que se realizan en colaboración con la Dirección General de Cultura – Institución Príncipe de Viana, se han llevado a cabo entre 2020 y 2023 por Adif en una zona de préstamos de gravas y han permitido descubrir en una superficie de 2 hectáreas un conjunto de 130 estructuras. Éstas consisten en sencillos rebajes en el terreno de morfología diversa, donde se han encontrado distintos elementos: agujeros de poste de dos cabañas, silos, hogares, fuegos, etc. El yacimiento, que se fecha en la Edad del Bronce a mediados del IIº milenio a.C., fue un pequeño hábitat temporal de corta existencia, un tipo muy habitual durante la Prehistoria reciente en la Comunidad Foral.

Esta clase de yacimientos, conocidos como “campos de hoyos”, se erigieron con estructuras perecederas, por lo que no se han llegado a conservar sus restos constructivos (viviendas, suelos, cercados, etc.) debido a su fragilidad y al efecto de la roturación. Sin embargo, han permitido documentar los restos de los enseres y datos significativos sobre los modos de subsistencia, condiciones ambientales, tecnología, etc. de sus habitantes. Sin embargo, la excavación en extensión permite que afloren numerosa información y en ocasiones descubrimientos inesperados.

Finalizados los trabajos arqueológicos en el yacimiento, los restos descubiertos han pasado a conservarse en los Fondos de Arqueología del Gobierno de Navarra, donde están siendo objeto de restauración. Al mismo tiempo, se está llevando a cabo un estudio científico a través de la colaboración entre la Dirección General de Cultura-Institución Príncipe de Viana y Adif. En el mismo, están participando técnicos del Servicio de Patrimonio Histórico, de Olcairum, S.L. y de diversos centros de investigación (Universidades de Valladolid y Autónoma de Madrid, CSIC, etc.). Los trabajos incluyen la datación radiocarbónica, análisis de metales y de su procedencia, tecnología de elaboración de cerámica, residuos orgánicos, arqueofauna, antropología, etc.

Hallazgos
Entre los hallazgos efectuados, destacan los restos de dos inhumaciones de la Edad del Bronce, las más antiguas conocidas de la localidad.

Además, se ha encontrado el grupo de vasos cerámicos más completo de Navarra de la Edad del Bronce. Gran parte de estas cerámicas se han hallado íntegras, fueron depositadas simultáneamente y finalmente selladas, lo que probablemente represente un acto de carácter ritual del que aún se desconoce su significado ya que no existen paralelos. Los estudios sobre tecnología y residuos permitirán aportar luz para su comprensión.

También se ha descubierto un conjunto de lingotes de cobre con un peso cercano a los 6 kilos, que constituía una pequeña fortuna para la época. Este hallazgo, que supone un caso único en la Comunidad Foral y en el noroeste de España, se comparará con otros descubrimientos realizados al norte de los Pirineos para conocer las circunstancias del abandono de esta fortuna.

La excavación y estudio de Ceda-La Celada constituye un caso único para conocer cómo vivía una comunidad del IIº milenio a.C. en Navarra ya que se han documentado actividades rituales y económicas hasta la fecha insospechadas.
(Fuente: Cultura Navarra)

Nuevos hallazgos en la cueva de Castillejo del Bonete

Desde fragmentos de cerámicas a restos humanos, pasando por cuentas de collar a huesos de animales, la gran cantidad de objetos recuperados durante el trabajo de triado permitirá conocer mejor la población humana asentada en el Campo del Montiel durante la Edad del Bronce
Jóvenes participantes en los trabajos arqueológicos

La localidad de Terrinches (Ciudad Real) acomete su nueva campaña arqueológica durante todo el mes de agosto, en la que se está llevando a cabo la recuperación de materiales arqueológicos procedentes del yacimiento del Castillejo del Bonete, un gran túmulo de la Edad del Bronce con funciones cultuales y funerarias, y Bien de Interés Cultural (BIC) de Castilla-La Mancha, construido sobre una cueva con las mismas funciones, hace más de 4.000 años, informa el Ayuntamiento en nota de prensa.

Gracias a la cofinanciación de la Junta de Castilla-La Mancha y del Ayuntamiento de Terrinches, han sido contratados siete jóvenes de la localidad, de entre 17 y 21 años, para que realicen estos trabajos bajo la dirección y supervisión de un arqueólogo especialista en microfauna, Josep Bisbal Chinesta. Para esta campaña la Junta aporta 15.376,99 euros, que complementan los 8.649,45 euros de financiación municipal al proyecto, que se desarrollará por un total de 24.026,44 euros.

La alcaldesa de Terrinches, Ana García, explica que “el esfuerzo que hace el Ayuntamiento es muy importante. Nuevamente hemos apostado por la contratación de personal del pueblo, especialmente entre los más jóvenes, el segmento de población que mayores dificultades tiene de inserción laboral. En la mayoría de casos, estos contratos en el laboratorio arqueológico de Castillejo del Bonete suponen su primer contrato y su entrada al mundo laboral”.

El director científico de los trabajos, el profesor de la Universidad Complutense de Madrid Luis Benítez de Lugo, informa que “las labores se centran, sobre todo, en la recuperación de restos arqueológicos que todavía aguardan para ser recuperados del sedimento procedente de la excavación de la cueva. En concreto, se realiza la selección manual, con pinzas y pieza a pieza, de los restos prehistóricos, separándolos de las pequeñas piedras y terruños.

Desde fragmentos de cerámicas a restos humanos, pasando por cuentas de collar a huesos de animales, la gran cantidad de objetos recuperados durante el trabajo de triado permitirá conocer mejor la población humana asentada en el Campo del Montiel durante la Edad del Bronce: su modo de vida, sus redes de intercambios, así como el paisaje y el clima en el que vivieron en esta comarca del sur de La Mancha”.

Como fruto de las investigaciones desarrolladas en la pasada campaña se ha detectado en la cueva de Castillejo del Bonete un nuevo tipo de micromamífero; concretamente, una musaraña que hasta ahora era muy poco conocida (Crocidura iculisma). El hallazgo ha sido publicado en la prestigiosa revista Mammal Review.

Gracias a los estudios financiados por el Ayuntamiento de Terrinches, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y la empresa E2IN2, Castillejo del Bonete se ha convertido en uno de los yacimientos arqueopaleontológicos más destacados para el estudio de los pequeños mamíferos del Holoceno en la Península Ibérica.

La expedición al pecio del galeón "San José" descubre nuevas piezas arqueológicas

La expedición arqueológica realizada hace dos meses por el Gobierno colombiano al área en la que está el galeón español San José, hundido por corsarios ingleses en el siglo XVIII frente a las costas de Cartagena de Indias, descubrió componentes estructurales del barco como un ancla y recipientes como botellas de vidrio y botijas.
Entre otros elementos, la expedición documentó numerosos recipientes.

«Los resultados de la exploración revelaron un mapa de evidencias arqueológicas inédito, ampliando significativamente lo conocido hasta ahora», informó este jueves el Gobierno colombiano en un comunicado en el que precisó que la investigación se llevó a cabo entre el 23 de mayo y el 1 de junio de este año.

La exploración de la Armada Nacional sobre el lecho marino cubrió un área de 461.307 metros cuadrados, equivalente a más de 40 canchas de fútbol, y reveló que el área del naufragio tiene más concentraciones de material arqueológico.

La información añadió que en 2022 se detectaron concentraciones de vestigios arqueológicos en la zona pero la expedición de este año «permitió caracterizar estas acumulaciones con mayor detalle y descubrir nuevos elementos aislados».

«Entre los hallazgos se encuentran componentes estructurales del barco (un ancla, anillas, un posible clavo) y objetos de uso cotidiano (botijas, botellas de vidrio y un bacín)», aseguró el comunicado del Instituto Colombiano de Antropología e Historia (Icanh).

El Gobierno declaró 'Área Arqueológica Protegida de la Nación' la zona donde está el galeón, hallado en 2015 a una profundidad de más de 600 metros, para dar inicio a la investigación.

«El hallazgo de nuevas concentraciones de material arqueológico en el naufragio del galeón San José revela la complejidad de analizar este evento histórico desde su hundimiento», dijo el director General Marítimo, vicealmirante Fabio Giraldo Gallo.

El oficial destacó que la localización, registro y documentación de estas evidencias «son fundamentales para comprender la distribución de los materiales que constituyen el galeón y, también, la dispersión de sus restos en el Área Arqueológica Protegida».

Giraldo agregó que para entender «integralmente» al San José se estudian «todos los elementos del buque, desde la popa hasta los más mínimos detalles».

Ampliar el conocimiento



La directora general del Icanh, Alhena Caicedo, aseguró que la identificación de estas nuevas acumulaciones y artefactos amplía el conocimiento sobre la distribución espacial del pecio.

«Creemos que hay posibilidades de encontrar nuevos vestigios que amplíen la información que habíamos tenido hasta el momento, obtenida en 2022», sostuvo la antropóloga.

Caicedo señaló que con la información obtenida se podrán identificar aspectos importantes de lo que hubo dentro del galeón y además revelará «aspectos fundamentales sobre la vida a bordo, la manera como se disponía la tripulación, el tipo de artefactos que se utilizaban en la embarcación y cómo las mercancías estaban siendo llevadas de un lugar a otro».

Disputas entre Colombia y España
El San José, que pertenecía a la Armada española, fue hundido por una flota de corsarios ingleses el 8 de junio de 1708 cuando se dirigía a Cartagena de Indias cargado, según crónicas de la época, con cerca de 11 millones de monedas de ocho escudos en oro y plata que había recogido en la feria de Portobelo (Panamá).

Luego del anuncio del hallazgo del pecio surgieron disputas entre Colombia y España, ya que ese país aduce que por tratarse de «un barco de Estado», con su bandera, le amparan las normas de la Unesco para reclamar su titularidad.

El Gobierno colombiano, que declaró el San José «bien de interés cultural sumergido», no descarta la colaboración con España para tratar el pecio como patrimonio compartido.

¿Un nuevo capítulo para la historia?
Según el comunicado del ICANH, el 8 de junio de 1708 la flota de Tierra Firme, cuya nave capitana era el Galeón San José, luchó contra un escuadrón inglés en cabeza del comodoro Charles Wager en las cercanías de la costa Caribe colombiana, en lo que se conoce como la Batalla de Barú.

El objetivo inglés era capturar algunas de las naves de la flota española, entre ellas el galeón, para hacerse con la carga de las mismas. Sin embargo, debido a la batalla, el Galeón San José se hundió y sus restos quedaron a 600 metros de profundidad. Ante el hecho, en Inglaterra fueron llamados a juicio los comandantes que habían asaltado el San José y en España se interrogaron a algunos de los sobrevivientes de la batalla que navegaban en las distintas embarcaciones de la flota.

Estos testimonios son, precisamente, los documentos con los que se cuenta hasta ahora para conocer las verdaderas causas del hundimiento de la nave capitana de la flota de Tierra Firme en 1708. Los comandantes ingleses fueron insistentes en reforzar una versión conjunta que apuntaba a una explosión interna del Galeón San José, lo que les quitaría toda responsabilidad directa en el hundimiento del preciado botín que buscaban obtener.

Los testimonios españoles, por el contrario, no son contundentes en señalar como causa del desastre a una explosión interna. Muchos testigos oculares de los hechos no confirman haber oído una explosión y su narración de la batalla apunta a otras posibles causas del hundimiento en el fragor de la batalla, como la carga de la artillería inglesa. Por supuesto, los testigos españoles también buscaban defenderse de posibles acusaciones de cobardía o incompetencia.

Todos estos testimonios se resguardan aún en los archivos de Inglaterra y España. Queda el reto de coordinar de manera conjunta entre especialistas de la historia y la arqueología para que, ya identificada la zona arqueológica del naufragio del galeón San José, se puedan contrastar las diferentes versiones con los restos materiales con el fin de determinar, con más elementos de juicio, la causa más probable del hundimiento.

"A partir de una nueva observación este año, tomaremos las decisiones con las cuales continuaremos la misión en 2025 y 2026", aseguró Juan David Correa, ministro de las Culturas, las Artes y los Saberes de Colombia. "En octubre anunciaremos cuáles serán los próximos pasos en 2025 de este viaje Hacia el corazón del Galeón San José".
(Fuente: Vivir Ediciones // ICANH)

8 de agosto de 2024

Aragón protegerá como BIC el yacimiento de La Codera

Los restos arqueológicos conocidos hasta el momento en el yacimiento oscense de La Codera abarcan desde la Edad del Bronce a la época ibérica cubriendo un intervalo de tiempo que abarca casi un milenio.
El equipo de Félix Montón trabaja en las excavaciones de La Codera. José Luis Pano.

La Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón ha iniciado el expediente para la declaración como Bien de Interés Cultural, en la categoría de Conjunto de Interés Cultural, Zona Arqueológica para el yacimiento arqueológico de La Codera, en Alcolea de Cinca, en la provincia de Huesca. Los restos conocidos hasta el momento abarcan desde la Edad del Bronce a la época ibérica cubriendo un intervalo de tiempo que abarca casi un milenio.

El yacimiento muestra varios lugares con distinta cronología y funcionalidad que abarcan un periodo de tiempo que va desde el Bronce Final hasta la época ibérica. Las numerosas campañas de excavación en varios puntos del conjunto, realizadas desde el año 1990 hasta la actualidad, han permitido investigar, catalogar, estudiar y dar a conocer, con mayor o menor grado de profundidad, algunos de los espacios que forman este conjunto.

El yacimiento de La Codera es el lugar donde más campañas de excavación se han realizado y corresponde con un poblado de la Edad del Hierro que tiene una cronología que va del s. VII-V a C. El espacio se ubica en la punta de un espolón y tiene una longitud de unos 110 m. y una anchura máxima de unos 47 m. en la zona que corresponde con la zona de la muralla.

El espacio interior del poblado es plano y se halla protegido del resto de la plataforma por una muralla que cierra el espacio. La muralla que protege la zona de habitación tiene tres torreones defensivos, dos semicirculares en los extremos y uno cuadrangular en el centro. El resto del poblado quedaba protegido por las pronunciadas laderas que lo rodean y seguramente por las paredes traseras de todas las casas.

En el espacio interior se hallan distribuidas las casas de forma organizada mediante un plan urbanístico planeado en torno a dos calles, una transversal y otra longitudinal que recorren el poblado y permiten el acceso a las casas. Estas tienen planta rectangular y se ubican a ambos lados de las calles.

En muchas de estas casas todavía se conservan los restos de las entradas y restos de compartimentaciones interiores que dividirán el espacio para realizar diferentes actividades Su parte trasera, debido a la erosión natural de las laderas, ha desaparecido. En la parte sur del poblado se ubican dos cisternas de planta ovalada que permitían el almacenaje de agua para el consumo de las personas y animales que vivían en el poblado.

A lo largo de cerca de 30 campañas se han excavado unos 3.000 metros cuadrados pertenecientes a más de treinta estancias o casas con sus muros que las delimitan. Las excavaciones han permitido recuperar importantes materiales relacionados con la cultura material de primera Edad del Hierro (cerámicas, canas, moldes de fundición, molinos etc.), así mismo, en alguna en alguna estancia se han encontrado hornos para cocer pan o alguna estructura para guardar cereales.

Es de destacar, como en otros poblados de la Edad del Hierro, la presencia de enterramientos de neonatos bajo el suelo de las casas. En el caso de La Codera han aparecido tres hasta este momento.

Hallan piezas romanas de los siglos I y II en el yacimiento vacceo de Intercatia (Palencia)

Las excavaciones arqueológicas en el yacimiento palentino de Paredes de Nava están dirigidas por Noelia Hoyos, Jaime Gutiérrez y Francisco Javier Pérez. Comenzaron en el año 2015 y, en este ejercicio, la Junta ha destinado 11.000 euros.
Imagen de las excavaciones del pasado año en el yacimiento vacceo Intercatia. Foto: Óscar Navarro

Este verano se volvió a excavar en el centro de la ciudad Intercatia, el yacimiento arqueológico que se encuentra en Paredes de Nava, reabriendo la intervención del edificio principal de época romana, que se comenzó a excavar en el año 2015, con la finalidad de conocer su estratigrafía y de la zona más alta, destacada y singular de la ciudad. En este espacio se recuperaron piezas muy interesantes de los siglos I y II. Todo esto se están relacionando los datos de la calle documentada con los registrados en la cuadrícula excavada en la parcela aledaña.

Además, la Junta de Castilla y León destina más de 11.000 euros a una nueva edición del campo de voluntariado Excavando La Ciudad. En busca de Intercatia en la provincia. Esta actividad de voluntariado está financiada por el Instituto de la Juventud y es parte del conjunto de campos de este tipo que se desarrollan anualmente por todo el país. De su organización se encarga la Asociación Cultural En busca de Intercatia, de Paredes de Nava, y su equipo de profesionales es el responsable técnico de las labores arqueológicas de la excavación.

Para la puesta en marcha de esta actividad se cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Paredes de Nava que, junto con la Diputación, financian las actuaciones arqueológicas de cada campaña, ascendiendo este año su aportación a 4.000 euros por parte de cada institución.

Fue el pasado domingo 28 cuando llegaron a la localidad para participar en el campo de voluntariado 22 jóvenes procedentes de Alicante, Barcelona, Burgos, Cantabria, La Coruña, Jaén, Madrid, Salamanca, Sevilla, Toledo, Valencia y Valladolid. Se trata de una actividad convertida en un clásico en la localidad terracampina, ya que se celebra desde 2015 a excepción de los dos años afectados por la pandemia.

«Los voluntarios comparten dos semanas de agosto con los habitantes de Paredes de Nava y ayudan dedicando su esfuerzo y trabajo a desentrañar el pasado vacceo y romano del importante yacimiento arqueológico que se ubica en el pago con el significativo nombre de La Ciudad», explicó el delegado de la Junta en Palencia, José Antonio Rubio Mielgo, durante su vista ayer al campo de voluntariado.

La campaña de excavaciones de este año, que estará dirigida por los arqueólogos Noelia Hoyos, Jaime Gutiérrez y Francisco Javier Pérez, se centrará en el estudio de tres zonas del yacimiento. Asimismo, se continuarán los trabajos en el estudio de la construcción de la muralla exterior, en la zona junto a la monumental puerta oriental de la ciudad, excavando los distintos lechos de tierra y ceniza empleados en los que aparecen objetos arqueológicos que ayudarán a datar la construcción de la infraestructura defensiva.

Por último, se comenzó la excavación de variados sondeos en una zona al exterior de la muralla, junto al camino de acceso oriental, con la intención de evaluar la existencia de posibles barrios periféricos, zonas de infraestructuras artesanales extramuros o áreas dedicadas a otro tipo de actividades rituales.

Yacimiento arqueológico.
La Asociación En Busca de Intercatia tiene como objetivo principal el conocimiento, investigación y puesta en valor del yacimiento arqueológico de La Ciudad, un enclave arqueológico conocido desde finales del siglo XIX, que ha proporcionado elementos singulares y muy importantes para el estudio del pasado vacceo y romano de esta zona.

Esta ubicación se corresponde con la mítica ciudad prerromana de Intercatia, ciudad citada por Plinio como una de las más importantes del pueblo vacceo y en la que, junto a sus murallas, tuvo lugar en el 151 a.C. el combate singular entre el gran Escipión, que años después asedió Numancia, y un guerrero intercatiense.

Las diferentes campañas previas de prospecciones aéreas y geofísicas, así como la de excavación arqueológica, iniciadas en el año 2015, han proporcionado un conocimiento general del oppidum vacceo y de la ciudad romana mucho más interesante del que se suponía previamente.

Se ha confirmado que se trata de una de las ciudades vacceas más extensas, que llega a ocupar una extensión intramurallas de 54 hectáreas, que fue romanizada manteniendo su trazado urbano, pero con un desarrollo e importancia mucho menor. Se encuentra ubicada a dos kilómetros al este de la localidad de Paredes de Nava, en un punto estratégico, en lo alto del páramo que domina la amplia cuenca de la Nava, que se extiende por el oeste, y desde donde se controla visualmente el valle del río Carrión que se discurre por el este.

Una de las mayores novedades que han deparado estos estudios ha sido la documentación del complejo sistema defensivo vacceo que protegía la ciudad, basado en la construcción de un doble recinto de potente muralla de tierra, de más de un kilómetro de longitud. Esta construcción estaba precedida de una serie de fosos de diferentes tamaños y secciones que dificultaba el asedio de la maquinaria de guerra romana y servía, además, como signo de distinción y poder de la propia ciudad.

Un sistema inédito que no había sido excavado en ninguna otra ciudad prerromana y que ha protagonizado el último trabajo publicado sobre el yacimiento en las actas del Coloquio Celtíberos y vacceos. Origen y desarrollo de la ciudad en la Protohistoria en el Alto y Medio Duero celebrado en Segovia.


7 de agosto de 2024

La UCO documenta el potencial del subsuelo de la ciudad romana de Mellaria

La Universidad de Córdoba (UCO) y el Ayuntamiento de Fuente Obejuna han realizado tres excavaciones arqueológicas y han prospectado 23 hectáreas con métodos geofísicos entre 2022 y 2024 obteniendo un profundo conocimiento del potencial del subsuelo de la ciudad.

Con la culminación de la campaña de 2024, son ya tres las campañas de excavación arqueológica realizadas por un equipo a cargo de la Universidad de Córdoba (UCO) en España y del Ayuntamiento de Fuente Obejuna entre 2022 y 2024. Con métodos geofísicos, se han prospectado 23 hectáreas, obteniéndose un profundo conocimiento del potencial arqueológico del subsuelo del lugar.

El equipo está integrado, entre otros, por Antonio Monterroso Checa y Santiago Rodero Pérez.

El pasado jueves 1 de agosto tuvo lugar la presentación de los últimos hallazgos en Mellaria, resultado de las excavaciones realizadas entre 2022 y 2024 a cargo de la Universidad de Córdoba y el Ayuntamiento de Fuente Obejuna. 

Desde 2022, se han realizado tres excavaciones y prospectado 25 hectáreas con métodos geofísicos. La primera de ellas en 2022 supuso el hallazgo de la fuente monumental. Con posterioridad, se han realizado dos campañas de excavación más centradas en dos sectores principales de la ciudad.

La de 2023, tras el descubrimiento de ese lacus, se situó a los pies del Cerro de Masatrigo con la intención de localizar la casa de las aguas a donde vertía el acueducto de Mellaria y desde la que partiría la organización del ciclo urbano de la ciudad. Efectivamente, las excavaciones dieron el resultado previsto y se localizó el conocido como castellum divisorium. Se trata de un edificio de una fase anterior que fue remodelado para acoger dos piletas de decantación del agua y al menos una fuente más. Era el sitio terminal del acueducto, el lugar de potabilización y, por fin, la sede de la distribución mediante tuberías de plomo de esa agua que al final acababa llegando a las fuentes situadas en las calles como es el caso de la descubierta en 2022.

Mellaria, con estos resultados, puede decir que tiene el ciclo del agua más completo, es decir documentado con hallazgos, de toda la provincia de Córdoba y uno de los más completos igualmente de la Bética e Hispania. Se conocen los lugares de captación, la mayor parte – georreferenciada - del recorrido del canal principal y de los secundarios, los pozos de resalto y limpieza, el lugar de recepción del agua en la ciudad y por fin su uso en las fuentes públicas, de las que, al menos, hay una en su sitio y tres más documentadas fuera de su contexto. Incluso se conoce la inscripción del munícipe que lo financió.

Campaña de 2024
La campaña de 2024 se ha interesado por un edificio situado justo en el extremo oriental del extrarradio de la ciudad, muy cerca ya del trazado de la carretera N-432 a más de 700 metros del anterior. Las prospecciones aéreas y geofísicas han dado como resultado el conocimiento de 1160m aprox. del trazado de la Via Corduba-Emerita a su paso por Mellaria. Ese trazado entra por occidente viniendo de Córdoba y sale por oriente dirección Medellín. En sus salidas fuera de las murallas organiza la disposición de los monumentos funerarios como acaece por norma en las ciudades romanas. En el sector de la necrópolis oriental de Mellaria se cuenta con al menos 450m., de vía enmarcada por monumentos de este tipo y edificios con otras funciones. Uno de ellos es un recinto de 1000m2 aprox. que es donde se han desarrollado las últimas excavaciones de 2024.

La excavación de casi la mitad este edificio finalizó el 31 de julio y están previstas varias campañas más para recuperarlo por completo. Lo interesante, llamativo y distintivo de este recinto situado en una necrópolis es que se trata de un cenotafio honorífico a un personaje célebre no fallecido en la ciudad y que no recibió sepelio en ella. Se ha encontrado el lugar de la edícula (camarín) y fragmentos de su estatua “funeraria” marmórea (de tamaño mayor que el natural) sin rastro de cualquier urna, cámara o cualquier tipo de estructura relacionada con un enterramiento in situ en este lugar. Junto al basamento de la edícula, parte de la decoración y los fragmentos de estatua se han recuperado dos klinai, dos reclinatorios de un total de cuatro documentados por la geofísica, donde recostarse a celebrar banquetes en honor del célebre compatriota. Estos lugares de manjar contaron con estructuras de agua en su derredor que partían de la posición del homenajeado que daba vida y riqueza, de este modo, a todos cuantos iban a concelebrar su memoria.

Se trata de un recinto, de casi 30x30 m. de lado, de neta filiación respecto de las más clásicas costumbres funerarias mediterráneas merced a la documentación de estos lugares de banquete rectangulares en fachada, dos a dos al lado del monumento honorífico. Un recinto que tuvo un espacioso jardín trasero donde se han documentado fosas con ajuar relacionadas con los ritos en honor a los muertos además de algunas vacías que, quizás, debieron acoger vegetación.

No se puede demostrar el nombre del receptor de este extravagante monumento celebrativo a su gloria puesto que no se ha documentado epigrafía como prueba (aunque sólo hay un candidato posible). En cualquier caso, un monumento de memoria y honor así, en una necrópolis, es algo absolutamente excepcional por desconocido en Córdoba y por escaso en Hispania.

Murcia destina 85.000 euros al yacimiento de La Almoloya

La Almoloya, declarada bien de Interés Cultural, con categoría de Zona Arqueológica, es uno de los yacimientos prehistóricos más importante de la sociedad de El Argar, que habitó el sureste de la península ibérica a inicios de la Edad del Bronce.

El Consejo de Gobierno, a propuesta de la Consejería de Turismo, Cultura, Juventud y Deportes de la Región de Murcia, ha aprobado destinar 85.000 euros para el mantenimiento, conservación y seguridad del yacimiento arqueológico de La Almoloya, tras la solicitud de la misma por parte del Ayuntamiento de Pliego.

La Almoloya, declarada bien de Interés Cultural, con categoría de Zona Arqueológica, es uno de los yacimientos prehistóricos más importante de la sociedad de El Argar, que habitó el sureste de la península ibérica a inicios de la Edad del Bronce (entre los años 2.200 y 1.550 antes de nuestra era), y es conocido desde la década de 1940 a raíz de las excavaciones realizadas por Emeterio Cuadrado y Juan de la Cierva.

Las intervenciones arqueológicas recientes en La Almoloya han rescatado el yacimiento del olvido y han mostrado una riqueza patrimonial y científica de carácter excepcional. A lo largo de los años se han realizado sucesivas actuaciones de conservación y restauración de las estructuras exhumadas, pero la constante exposición a los agentes atmosféricos y a otros procesos de erosión produce un progresivo deterioro, por lo que resulta imprescindible aplicar medidas de mantenimiento y conservación preventiva.

Las actuaciones cuya financiación se ha aprobado se centran en la conservación para preservar la integridad de los restos arqueológicos excavados hasta ahora y en la seguridad, garantizando la del propio yacimiento y la de las personas que lo visitan, proponiendo las siguientes medidas: limpieza de la vegetación de carácter herbáceo y arbustivo, recolocación de clastos desprendidos de las estructuras arqueológicas, corrección de puntos y superficies de llagueado y mantenimiento de accesos y vías de tránsito al área arqueológica.