google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri

9 de octubre de 2018

Hallan un capitel "icono del Prerrománico asturiano" en el castillo de Gauzón

La fortaleza se está convirtiendo en un yacimiento clave para estudiar los orígenes de la Edad Media y del Reino de Asturias.
Iván Muñiz, Alejandro García, Mar González, Yasmina Triguero, y Noelia Fernández junto al capitel.
Las excavaciones arqueológicas en el yacimiento del castillo de Gauzón han vuelto a dar la sorpresa. Esta vez se trata de un capitel Prerrománico, datado a finales del siglo IX o principios del X, el primero que se encuentra en el contexto arqueológico de una fortaleza, por lo que supone un "hallazgo excepcional", según los directores de las excavaciones, los arqueólogos Iván Muñiz y Alejandro García. "Es un icono del Prerrománico asturiano", valoraron.

"Es un capitel troncopiramidal labrado en piedra arenisca, con decoración de sogueado en el collarino y que conserva el inicio del fuste. Es una pieza característica del Prerrománico asturiano que conocíamos muy bien, especialmente en edificios religiosos, pero en esta ocasión hablamos de un castillo, algo único en el panorama arqueológico hasta la fecha. Por sus características puede situarse en un momento tardío del arte Prerrománico", señalaron Muñiz y García durante la presentación del hallazgo, ayer en el monasterio de la merced de Raíces Viejo con la asistencia de la alcaldesa de Castrillón, Yasmina Triguero y la concejala de Turismo, Mar González.

El lugar del descubrimiento es muy significativo para los expertos. "El capitel apareció entre los derrumbes inmediatos a una de las dos torres que defendían la puerta de entrada. Por ello, cabe suponer que en su día formó parte de los elementos arquitectónicos de aquella gran entrada monumental. Esto es esencial porque vuelve a ratificar la enorme trascendencia simbólica de esta zona de la fortaleza, que se consideró como emblema del prestigio real. Por primera vez en la investigación del Reino de Asturias podemos conocer cómo eran aquellas puertas dotadas de todo esplendor", explicaron los directores de la excavación.

La alcaldesa de Castrillón, por su parte, señaló que el hallazgo del capitel "contribuye aún más a confirmar la importancia del castillo de Gauzón para la historia de Asturias". "El Ayuntamiento lleva once años poniendo mucho dinero para sacar adelante las excavaciones. Hemos pedido apoyos al Principado y al Gobierno central a través del 1,5% cultural pero para acceder es necesario que el castillo de Gauzón sea declarado Bien de Interés Cultural (BIC) y ello depende del Principado", dijo la Regidora.

El hallazgo, según los arqueólogos, es una muestra más de que el entorno no tienen parangón y que están haciendo del castillo de Gauzón un yacimiento clave para estudiar los orígenes de la Edad Media y del Reino de Asturias. "Para entender en toda su magnitud la trascendencia del capitel hay que recordar que en el yacimiento también se han identificado habitaciones palatinas dotadas de baño, las dos grandes torres de la entrada, la muralla, materiales de lujo... No es sorprendente que Alfonso III y Jimena, cuyo patrocinio en las obras parece importante, decidiesen mencionar el castillo en el reverso de la Cruz de la Victoria y que ésta se hiciese allí. Hay más castillos del Reino, pero Gauzón fue para los monarcas su fortaleza por antonomasia", concluyeron Muñiz y García.

8 de octubre de 2018

Sale a la luz un carro ibérico en Montemayor (Córdoba)

El equipo de arqueólogos que sigue los pasos de Julio César en la provincia de Córdoba descubre un enorme dispositivo militar cuyo origen aún es un misterio
Además del carro, también se ha encontrado munición (glandes de plomo) y restos de lo que pudo ser un campamento romano. 
Cuando los arqueólogos detectaron que había algo muy grande en el subsuelo del Cerro de la Horca de Montemayor jamás pensaron lo que podían encontrar bajo tierra. Poco a poco, con paciencia infinita, se fue desenterrando uno de esos hallazgos impresionantes que arroja la provincia de Córdoba muy de vez en cuando, pero que deja con la boca abierta a los arqueólogos.

Montemayor acoge desde hace un par de semanas a un equipo multidisciplinar, comandado por Javier Moralejo, de la Universidad Autónoma de Madrid, y coordinado por el director del Departamento de Prehistoria y Arqueología, Fernando Quesada. Financiada por el Ayuntamiento, la campaña de prospección tiene hasta un nombre literario: Buscando a Julio César. Y lo que se han encontrado, desde luego, es algo más que al general romano que anduvo por la zona hace un par de milenios haciéndole la guerra civil (y ganándosela) a los hijos de Pompeyo.

Los profesionales -además de múltiple munición y restos de lo que parece a buen seguro fue uno de los campamentos militares que tuvo Julio César en la provincia mientras preparaba el asalto a Ategua o a Corduba- han descubierto una pieza única: un carro íbero, cuyo origen y antigüedad aún no están claros pero que podría llegar a tener 2.500 años de historia.

El hallazgo, conocido entre bromas por algunos arqueólogos como el Land Rover de Julio César, ya está documentado. La Guardia Civil y la Policía Autonómica, y los propios descubridores, custodian noche y día el lugar en el que ha aparecido mientras siguen los trabajos de extracción, para evitar la llegada de posibles expoliadores. Y ahora será sometido a todas las pruebas pertinentes para asegurar bien su antigüedad y su origen.

CARBONO 14

El equipo de arqueólogos quiere hacerle la prueba del Carbono 14 a los restos orgánicos hallados en la zona para resolver una duda: ¿Es un carro de guerra de las tropas auxiliares de origen íbero usadas por Julio César como apoyo a sus legiones o se trata por el contrario de un carro aún más antiguo, usado por los pobladores previos a la llegada a la Península de los romanos? La prueba del Carbono 14 determinará su antigüedad exacta.

Mientras, aunque este hallazgo ha concentrado todos los esfuerzos, el equipo multidisciplinar trabaja en la zona y está recuperando y documentando muchísimas piezas. Así, se han hallado restos de proyectiles, de hondas, tachuelas de sandalias romanas, monedas… Restos de lo que parece que fue un campamento militar o un lugar en el que se produjo una batalla. Ahora, está por ver si más abajo aún de este cerro aparecen cadáveres. Y de quiénes son: si de legionarios romanos o de soldados íberos.

Todavía, la excavación en Montemayor, una de las más interesantes por las preguntas que despierta en la provincia, aportará más sorpresas. El subsuelo cordobés sigue escondiendo una multitud de secretos.

(Fuente: Cordópolis)

7 de octubre de 2018

Premios Vaccea 2018

El pasado 5 de octubre tuvo lugar la entrega de los premios VACCEA 2018, que de forma bienal otorga el Centro de Estudios Vacceos Federico Wattemberg de la Universidad de Valladolid y en los que el Jurado, por unanimidad, honró a este blog concediendo el Premio de Comunicación a su administrador. 

El acto tuvo lugar en el Aula Lope de Rueda de la Facultad de Fiolosofía y Letras de la Universidad de Valladolid y estuvo precedida de una jornada técnica sobre "Decoración en Excisión", en la que participaron los profesores Javier Abarquero Moras, Carlos Sanz Mínguez, Juan Francisco Blanco García, Fernando Romero Carnicero, Roberto de Pablo Martínez, Consolación González Casarrubios, Eugenio Cid Cebrián y José Ramón Cid Cebrián.


Entrega del Premio Vaccea 2018 en la categoría de Investigación y Divulgación Científicas a D. Martín Almagro Gorbea, por su decisiva contribución al conocimiento y difusión de las culturas célticas de la península Ibérica en Europa, así como por el ingente esfuerzo editorial desde su puesto de anticuario perpetuo de la Real Academia de la Historia. Entrega el premio D. Antonio Largo Cabrerizo, Rector Magfco. de la Universidad de Valladolid.


Entrega del Premio Vaccea 2018 en la categoría de Protección y Conservación del Patrimonio a D. Francisco Burillo Mozota, por su intensa labor en la protección del patrimonio arqueológico de la serranía Celtibérica y por su permanente compromiso intelectual en el reconocimiento de la identidad interregional de la serranía Celtibérica, en el marco de la Europa de las Regiones. Entrega el Premio Dª. Pilar Garcés, Directora General de Universidades de la Junta de Castilla y León.


Entrega del Premio Vaccea 2018 en la categoría de Comunicación a D. Enrique Garcés Hecht por su aplicación rigurosa de criterio periodístico con información de la actualidad arqueológica en el entorno digital, gracias a la publicación periódica en su Bitácora de la actividad generada por los yacimientos españoles desde 2010. Entrega el premio D. Javier Castán Lanaspa, Decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Valladolid 


Con estos premios que en 2018 cumplieron su sexta edición, el Centro de Estudios Vacceos Federico Wattemberg quiere destacar la labor de personas, colectivos o entidades e instituciones en la salvaguarda, promoción y conocimiento del Patrimonio Arqueológico

2 de octubre de 2018

Nuevo expolio en Soria: Roban dos capiteles románicos de la ermita de Boós

Hace apenas unas semanas desapareció un pórtico del siglo XI en otra ermita de Rioseco de Soria, a pocos kilómetros
La ermita de San Lorenzo de Bóos Expoliada.
Un nuevo expolio al patrimonio artístico y nuevamente en Soria. Apenas unas semanas después de que unos ladrones se llevaran un pórtico del siglo XI de la ermita de La Mercadera, en Rioseco de Soria, dos capiteles románicos de finales del siglo XII y principios del XIII han sido robados junto a sus respectivas columnas de la ermita de San Lorenzo en Boós, un pueblo de apenas una veintena de habitantes situado a solo 7 kilómetros de la anterior.

En ruinas desde hace tres décadas, el templo aún conserva parte de los muros y el arco triunfal sobre capiteles de hojas. La ermita se encuentra a poco más de un kilómetro al suroeste de Boós y perteneció al despoblado de Boíllos. Mantuvo el culto hasta hace treinta años y hasta ella acudían los fieles, principalmente, el martes antes de la solemnidad de la Ascensión y al finalizar la recogida de la cosecha para celebrar la festividad de San Lorenzo.

En el Catastro de la Ensenada (s. XVIII) se recoge que, por aquel entonces, no quedaban en Boíllos más edificaciones que doce tainas o corrales de tapia y barda para parideras y, según escribe el P. Gonzalo Martínez, la que fuera parroquial del lugar, dedicada a San Lorenzo, después convertida en ermita.

El alcalde pedáneo de Boós y el párroco de la localidad han presentado la correspondiente denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de El Burgo de Osma por el robo de los capiteles, según han informado fuentes de la Diócesis de Osma-Soria.

Durante las últimas seis semanas, el patrimonio religioso en esta diócesis ha sufrido otros dos ataques más: además del expolio en la ermita de La Mercadera, en Rioseco de Soria, donde los ladrones sustrajeron piedras de gran tamaño, la cruz de piedra de la espadaña y la sillería de la portada del templo, en Castilruiz robaron objetos litúrgicos y donativos en la ermita de la Virgen de Ulagares.

(Fuente: ABC)

1 de octubre de 2018

Una investigación de la UAM localiza en Montemayor vestigios de las batallas de Julio César

La Universidad Autónoma de Madrid (UAM) ha puesto en marcha un proyecto de investigación arqueológica en el entorno de Montemayor con el objetivo de localizar algún vestigio de las batallas que se registraron en la zona con motivo de la Guerra Civil entre Julio César y Pompeyo el Grande a mediados del siglo I. a.C. Para ello, un grupo de investigadores liderado por el doctor Javier Moralejo Ordax ha iniciado una prospección en las inmediaciones de este antiguo municipio romano de Vlia, donde ya se han localizado las primeras huellas de estos enfrentamientos.
El equipo de trabajo en el primer día de trabajo del Proyecto de I+D+i de Excelencia "Ciudades y complejos aristocráticos ibéricos en la Alta Andalucía".
La investigación, que se desarrolla con el apoyo del Ayuntamiento de Montemayor a través de su Museo Local, permitirá realizar un estudio sistemático de la arqueología romana del municipio y, en particular, de los enfrentamientos librados por Julio César y sus legiones en la zona, como la lucha del gobernador cesariano Quinto Casio Longino en el año 48 a.C. contra Marcelo, así como la batalla de Julio César contra los hijos de Pompeyo años después.

"El municipio de Montemayor, como los circundantes, ha sido objeto de numerosos saqueos por parte de excavadores furtivos cuyas depredaciones han dañado seriamente el patrimonio histórico local. Sin embargo, hay noticias suficientes sobre diversos hallazgos (armas, proyectiles de honda, monedas) como para pensar que en torno a la ciudad se asentaron campamentos militares y se libraron fuertes batallas", destaca el coordinador del proyecto, Fernando Quesada, que es director del Departamento de Prehistoria y Arqueología de la UAM.

De esta forma, durante los dos primeros días de trabajo, el equipo de investigación ha localizado con precisión dos docenas de glandes de honda en plomo, puntas de flecha, monedas romanas e indígenas de la zona y otros cientos de objetos, "lo que no solo puede considerarse prometedor, sino que ya es un verdadero éxito que aporta datos nuevos a las campañas de César en Andalucía".

Esta prospección arqueológica, que empleará "las más modernas y detalladas tecnologías de detección" como es la cartografía digital combinada con la localización mediante GPS con Sistemas de Información Geográfica, se enmarca dentro de un Proyecto de Investigación de Excelencia de I+D+i del Ministerio de Ciencia e Innovación dedicado al estudio de la violenta implantación romana en la Andalucía ibérica.

(Fuente: Montemayor Digital / I. Téllez)

28 de septiembre de 2018

Descubren muestras de orfebrería sobre moluscos en el yacimiento canario de Gáldar

El hallazgo evidencia el conocimiento de los antiguos canarios en el manejo de pintura sobre conchas de moluscos. Exigiría la misma precisión que cuando un médico usa un bisturí. Se trata de ocho burgaos  decorados con precisión quirúrgica.
La campaña de excavación arqueológica de 2018 en el Museo y Parque Arqueológico Cueva Pintada en Gáldar fue llevada a cabo en la estructura 61.
El Cabildo de Gran Canaria ha anunciado este jueves el hallazgo en la última excavación arqueológica llevada a cabo en la Cueva Pintada de Gáldar la existencia de ocho burgaos decorados de características realmente singulares.

Estas muestras ponen de relieve un género de piezas que desvela una concepción estética que va más allá de lo hasta ahora conocido en el mundo prehispánico insular y que destaca por implicar un trabajo artesano de una sutileza inédita.

Y es que alcalnzar la decoración de estos burgaos exige una destreza técnica que desposee a la pieza de su superficie para mostrar el nácar, dejando al descubierto una delicada estética que podría ser calificado de filigrana.

El presidente de los grancanarios, Antonio Morales (NC), apunta que tanta es la precisión que se exige, que los expertos que han abordado en el presente la tarea de imitar la técnica utilizada por los antepasados de la isla tan sólo lo han logrado con la ayuda de un bisturí.

Esta decoración diferencia claramente estos burgaos de los encontrados en este centro del Cabildo en campañas anteriores, caracterizados por incisiones que van trazando motivos lineales y geométricos en la superficie de la última espira o vuelta que muestran variadas composiciones, algunas muy simples y otras de mayor complejidad.

En estas ocho piezas la decoración realizada demanda gran precisión para eliminar las capas superficiales del molusco para dejar visible el nácar en la mayor parte de la concha.

A medida que se trabaja la superficie, también se va dejando una línea de esa capa externa, la que recorre la sutura entre dos espiras o vueltas, dando la impresión de un pequeño cordón que recorre la pieza de forma sutil.

El ejemplar más llamativo es, sin duda, uno de forma cónica, de dureza y tamaño considerable, que fue trabajado de forma concienzuda y posee un intenso pulido. Al día siguiente del impactante hallazgo se recuperó un ejemplar casi «gemelo», de menor tamaño pero de idéntica ejecución. Un mismo diseño, una misma factura que habla, con toda probabilidad, de una misma mano artesana.


Morales recalca junto al consejero de Cultura, Carlos Ruiz, que estos descubrimientos confirman la importancia del legado prehispánico y ayudan a comprender las dinámicas sociales que tenían lugar en el antiguo poblado de Agáldar. En esta línea, expone la necesidad de seguir apoyando la investigación para ahondar en el conocimiento y la difusión de este saber entre la ciudadanía.

187 NUEVOS REGISTROS
En cuanto al registro completo del material recuperado, ascienden a 187 nuevos registros clasificados en función del tipo de material: cerámica (principalmente prehispánica aunque también hay fragmentos de cerámica colonial) y entre la cual destaca una pintadera triangular, así como restos de fauna terrestre, marina y malacofauna, además de elementos variados de industria lítica (tallada y pulimentada) y algunos elementos metálicos.

La campaña de excavación arqueológica de 2018 en el Museo y Parque Arqueológico Cueva Pintada en Gáldar fue llevada a cabo en la estructura 61 y dio continuidad a los trabajos realizados durante las campañas emprendidas desde 2013 en este yacimiento arqueológico.

El trabajo de campo se realizó del 16 al 28 de julio, a lo que habría que sumar las dos primeras semanas de agosto, dedicadas exclusivamente al estudio y procesado de material recuperado, en el que participaron una decena de estudiantes de seis universidades españolas, incluidas las dos canarias.

Hasta la conclusión de esta campaña se desconocía la relación existente entre los dos espacios principales de la estructura 61. Uno de los frutos del trabajo de este año ha sido precisamente la confirmación de que sí fueron ámbitos conectados, lo cual ha permitido delimitar el espacio total conservado de esta estructura.

En la línea de alimentar la dimensión pública y volcada de manera decidida en la ciudadanía, los registros de esta última campaña también se incorporarán al Sistema de Información Arqueológica y Patrimonial, que dotará al Museo y Parque Arqueológico de un completo sistema documental y, además, de un portal web al que podrá acceder la comunidad científica y por el conjunto de la población.

(Fuente: ABC)

27 de septiembre de 2018

El Ayuntamiento de Murcia cubrirá los restos arqueológicos de Santa Clara

Técnicos municipales extraerán el horno datado en los siglos XV y XVI para que forme parte de los fondos del Museo de la Ciudad
Imagen tomada ayer de los restos arqueológicos hallados en la calle Santa Clara; a la derecha, el horno de ladrillos y barro donde se trabajaba el metal. /  NACHO GARCÍA / AGM
Ya está decidido qué va a hacer el Ayuntamiento de Murcia con los restos arqueológicos aparecidos en la calle Santa Clara durante las obras de peatonalización de Alfonso X. Después de los estudios previos realizados por la arqueóloga municipal y del informe emitido por el director general de Bienes Culturales, Juan Antonio Lorca Sánchez, con quien se ha reunido la concejal de Infraestructuras, Rebeca Pérez, «vamos a cubrirlos y a protegerlos con geotextil, previa extracción del horno hecho de ladrillos y tierra en el que se trabajaba el metal, y que va a ser trasladado al Museo de la Ciudad para que esté a la vista del público», indica la edil.

Los restos aparecieron a primeros de junio, cuando se llevaban a cabo las obras de excavación junto al colegio Cierva Peñafiel para colocar contenedores soterrados, como parte del proyecto de remodelación del paseo de Alfonso X. Pese a que, en un principio, se pensó que podían pertenecer al alcázar islámico que hubo en esta zona, finalmente los expertos concluyeron que formaban parte de un espacio del antiguo convento de Santo Domingo, ya que datan de los siglos XV y XVI.

La decisión de conservar los restos ha sido unánime por parte del Ayuntamiento y la Dirección General de Bienes Culturales, dependiente de la Consejería de Turismo y Cultura de la Comunidad Autónoma. El quid de la cuestión era decidir si se conservaban haciéndolos visibles o cubriéndolos.


DOCUMENTAR LOS RESTOS
Tras el informe de la Dirección General de Bienes Culturales y la última reunión, mantenida esta misma semana, los responsables han determinado que se documenten debidamente los restos hallados y que se extraiga el horno encontrado para su traslado al Museo de la Ciudad, para lo cual el Servicio Municipal de Arqueología supervisará la redacción del proyecto de extracción y traslado.
Proyecto de musealización

La resolución del director general de Bienes Culturales ordena la conservación de los restos arqueológicos documentados en la calle Santa Clara, «debiendo estudiar el Ayuntamiento la opción de cerrar al tráfico rodado dicha calle en el tramo afectado y, en caso de ser actualmente viable, abordar la ampliación del área excavada hasta la acequia Caravija». Además, el dictamen establece que «el Consistorio deberá presentar para su aprobación un proyecto de musealización y conservación de los restos arqueológicos del convento de Santo Domingo y sus estructuras subyacentes». Añade la resolución que, en caso de resultar inviable esta opción, «deberán conservarse los restos cubiertos y protegidos con geotextil extrayéndose y consolidándose para su traslado al Museo de Murcia el horno encontrado. A tal fin, deberán presentarse para su aprobación los pertinentes proyectos de protección de los restos, por un lado, y de extracción y restauración del horno».

La concejal Rebeca Pérez explica que «debido al sacrificio de determinadas estructuras que requeriría la ampliación de la excavación, con objeto de ejecutar los muros de consolidación de taludes y, sobre todo, por su afección al tráfico rodado, que se vería seriamente imposibilitado, se ha considerado técnicamente más adecuado la documentación y conservación 'in situ', para lo cual deberán ser los restos cubiertos y protegidos con geotextil (previa extracción del horno), a fin de que un futuro proyecto de peatonalización del espacio permita la mayor excavación y musealización de los restos, todo en cumplimiento de la resolución de la Dirección General de Bienes Culturales y de los servicios municipales y autonómicos en materia de patrimonio histórico».

La responsable de Infraestructuras asegura que, en cualquier caso, los hallazgos arqueológicos de Santa Clara no van a retrasar la finalización de las obras de la primera parte del paseo de Alfonso X, previstas para finales de octubre. «Las obras -indica- se van a solapar con el inicio de los trabajos previos de la segunda fase de la peatonalización -desde Jaime I el Conquistador a la Redonda-, que van a ser adjudicadas en una próxima Junta de Gobierno. Previamente -añade-, Emuasa llevará a cabo las obras de sustitución de tuberías, como ya se hizo en el primer tramo del paseo de Alfonso X el Sabio».

26 de septiembre de 2018

La arqueología molecular revela cómo era la dieta de una aldea visigoda

Una investigación de la Universidad del País Vasco constata que la arqueología biomolecular es una herramienta válida para conocer cuál era la alimentación de las sociedades rurales en la Alta Edad Media. El estudio se centra en los restos humanos hallados en el yacimiento visigodo de Boadilla, en Illescas (Toledo).
El consumo de carne, huevos, lácteos y otros productos derivados se incrementaba a partir de los 8 años.
La Universidad del País Vasco (UPV/EHU) ha dado hoy a conocer este estudio que forma parte de la tesis doctoral de la estudiante de Arqueología Maite Iris García Collado, que se ha centrado en analizar la alimentación de quienes habitaban en la aldea de Boadilla, un asentamiento de campesinos de época visigoda (siglos VI-VIII d.C.) situado a las afueras del actual municipio de Illescas, en Toledo.

En primer lugar la investigación se centró en hacer un estudio antropológico tradicional para determinar el tamaño de la población enterrada en Boadilla y su perfil demográfico (edad y sexo), lo que determinó que se trataba de una población estable en la que estaban representadas todas las categorías de edad.

Por otro lado, se llevaron a cabo los análisis de isótopos estables de carbono nitrógeno, técnica que parte de la premisa de que la composición química de los alimentos queda reflejada en la composición de los tejidos del organismo.

Así se pudo constatar que los habitantes enterrados en Boadilla basaban su dieta en «cereales de invierno» como el trigo, la cebada, el centeno y la avena.

No obstante, los cereales de ciclo corto, que eran entonces el mijo y el panizo, también formaban parte importante de la dieta de esa comunidad. «Esto es relevante porque este y otros estudios anteriores apuntan a que la producción y el consumo de esos cereales menores podría ser un rasgo característico de grupos de campesinos con cierta autonomía y control sobre su producción», detalla Maite Iris García.
La carne, de forma ocasional

DESCARTADO EL CONSUMO DE PESCADO

En cuanto a las proteínas de origen animal como carne, huevos, leche y lácteos, su consumo sería limitado y ocasional, y se ha descartado el consumo de pescado.

El estudio no detectó ninguna diferencia en cuanto al consumo de cereales en los individuos de distintas edades, algo que sí ocurre con las proteínas de origen animal, a las que según esta investigación no tenían acceso los niños de 2 a 8 años.

El consumo de carne, huevos, lácteos y otros productos derivados se incrementaba ligeramente entre los 8 y los 14 años, para ponerse a la misma altura que los adultos durante la adolescencia, a partir de los 14 años.

«Eso quiere decir que el acceso a ese tipo de productos estaba condicionado por la edad y que los individuos más jóvenes tenían un acceso muy restringido a ellos», puntualiza.

Otra conclusión del estudio es que no se han apreciado diferencias en la alimentación entre quienes fueron enterrados con objetos de adorno personal o herramientas de uso cotidiano –que podrían indicar un mayor estatus social– y quienes fueron sepultados sin nada de esto.

También se constata que la dieta de individuos enterrados dentro de la misma tumba tendía a ser similar, un argumento a favor de la hipótesis de que esas estructuras funerarias se usasen como panteones de grupos familiares extensos.

Por último, se analizaron esqueletos de animales domésticos y se observó que las vacas, las ovejas y las cabras probablemente pastaban en tierras cercanas a la aldea, lo cual contribuía al abonado de los campos de cultivo. En cambio, los caballos eran enviados a pastos abiertos más alejados del asentamiento, concluye la investigación.
(Fuente: ABC / EFE)