google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri: Cádiz
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1 de mayo de 2012

Andalucía deberá indemnizar a los descubridores de una necrópolis en Cádiz

La sentencia del Tribunal Supremo (TS) obliga a la administración regional que sólo quería pagarles el importe de los huesos y cerámica que encontraron y que condujeron a las tumbas
Estructura funeraria de una de los enterramientos.
El Tribunal Supremo (TS) ha condenado a la Junta de Andalucía a indemnizar con el valor metálico por el que se tase la totalidad de la Necrópolis del Paraje de Monte Bajo a las personas que descubrieron por azar los restos óseos y fragmentos de cerámica que llevaron al hallazgo del yacimiento.

La administración andaluza reclamaba pagar a las personas que localizaron los restos en la presa del río Barbate, en el término municipal gaditano de Alcalá de los Gazules, sólo el importe equivalente a la valoración de los huesos y trozos de vasija.

No obstante, el alto tribunal rechaza el recurso de casación planteado por la Junta andaluza y da la razón a la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), que ya acordó que la valoración debía referirse a la necrópolis al completo, tanto en sus elementos muebles como inmuebles.

Después de que los dos descubridores encontraran los restos óseos, la zona fue visitaba por personal técnico que comprobó la existencia de estructuras excavadas en el terreno natural, así como ostostratos que podrían configurar dólmenes de pequeño y mediano tamaño y por tanto estructuras funerarias artificiales.

El descubrimiento desencadenó una intervención arqueológica que dio lugar a la localización de varias sepulturas en lo que se conoce como la Necrópolis del Paraje de Monte Bajo.

El Supremo considera que "el hallazgo inicial fue la causa desencadenante de la localización del todo" y menciona el precedente establecido por la villa romana de Carranque que, a pesar de sus notables proporciones, partió del descubrimiento de un único mosaico.

(Fuente: Europa Press)

20 de abril de 2012

Excavaciones en Cádiz sacan a la luz 68 enterramientos fenicios y romanos

Se han documentado restos de época feno-púnica y romana, algunos de ellos expoliados.
 Los arqueólogos enseñan uno de los enterramientos
al teniente de alcalde de Cádiz.
Los trabajos de excavación arqueológica que se vienen realizando en el solar del antiguo Pabellón Portillo han sacado a la luz 68 enterramientos, 10 de ellos infantiles, de los cuales 52 son inhumaciones y 16 son incineraciones y cremaciones. Dichos trabajos, que comenzaron en enero de este año, continúan ejecutándose en la actualidad, y ya han completado un 30% del solar. El presidente de Emasa y teniente de alcaldesa de Patrimonio en el Ayuntamiento de Cádiz, José Blas Fernández, visitó ayer los trabajos arqueológicos acompañado por las arqueólogas de la obra.

La excavación tiene como objetivo documentar la existencia de necrópolis de época antigua (fenicia, púnica y romana), fechadas a partir de los conjuntos de sepulturas fenicio-púnicas del siglo V a.C. hasta niveles Bajoimperiales adscribibles, así como a la existencia de restos de centros industriales antiguos.
En este punto de los trabajos, según el informe del equipo de arqueólogos, se han documentado tres momentos históricos bien diferenciados: La época feno-púnica, en el que destaca una gran tumba de sillares, expoliada de antiguo, adscribible al siglo V a.C.; La época romana altoimperial, con la excavación de la necrópolis, con una amplia tipología de tumbas y ajuares, que nos aportan unas cronologías de cambio de era a mediados-finales del siglo I d.C. y la época romana bajoimperial, representada por una pileta muy arrasada que amortiza materiales constructivos altoimperiales, fechada en el siglo V d.C.
Según explicaron los arqueólogos, «es la necrópolis romana altoimperial la que está ofreciendo los mayores resultados».
(Fuente: Europa Press )

6 de marzo de 2012

Las obras del puerto de Cádiz sacan a la luz dos pecios con tres lingotes de platas y monedas

Se amplían a tres las zonas arqueológicas del Puerto de Cádiz.
De los siglos XVI o XVII y procedente de México. Esas son las primeras hipótesis a cerca de los dos pecios encontrados durante las obras de construcción de la nueva terminal de contenedores del muelle de Cádiz. No son pocos datos teniendo en cuenta la fecha de los primeros hallazgos, hace menos de un mes, y sobre todo, a tenor de las dificultades técnicas que conlleva realizar las investigaciones arqueológicas a 12 metros de profundidad.
Uno de los lingotes encontrados. Foto: Eulogio García.
 La delegada de Cultura, Yolanda Peinado, el presidente de la Autoridad Portuaria, Rafael Barra, y la directora del Centro Arqueología Subacuática, Carmen García Rivera, han presentado esta mañana los detalles de este yacimiento, delimitado por la zona de uno de los dos diques que estarán a los lados del futuro muelle. Así, hay tres elementos muy diferenciados dentro de este yacimiento: la llamada zona 1, donde a principios de febrero, la draga sacó un lingote de plata y varias monedas que podrían ser de ocho reales y datadas en tiempos de Carlos II. Poco después se hallaron otro par de lingotes en el mismo lugar, lo que da indicios suficientes para que ahí este enterrado un pecio. A mediados del mes pasado se delimitó la zona 2. En ella se constató la presencia de otro barco, al tocar la cabeza de la draga, la estructura de madera del mismo. Por último, se ha establecido una Zona 3, donde únicamente se ha extraído un armazón, un peto de hierro del que aún se desconoce su fecha y su origen. Además, y según ha confirmado Carmen Rivera, se están analizando 2 planchas de cobre de más de siete kilos cada una y varios troncos de madera de un árbol mexicano.
Poco a poco se va conociendo más sobre estos importantes hallazgos. Las hipótesis del CAS a cerca de las planchas es que éstas eran utilizadas para acuñar monedas como las halladas, porcedentes de la Ceca de México. Tanto el peto como los barcos podrían ser de los siglos XVI y XVII y los lingotes, de 11, 22 y 26 kg respectivamente, tienen una pureza de más del 99%.
Este pasado sábado los buzos del CAS y de la empresa de tecnología encargada por la Autoridad Portuaria hicieron una inmersión para estudiar unas anomalías magnéticas halladas anteriormente.
(Fuente: La Voz Digital)

23 de enero de 2012

Aprueban nuevas excavaciones en la ciudad hispano-romana de Baelo Claudia (Cádiz)

La Comisión Provincial de Patrimonio ha informado favorablemente de un proyecto de investigación arqueológica que se llevará a cabo en la ciudad hispano-romana de Baelo Claudia (Bolonia, Tarifa) a partir de este año, gracias al que se podrá excavar en una zona en la que hasta ahora solo se habían hecho sondeos para retirar la pista militar construida a mediados del siglo pasado.
Columnas del Palacio de Justicia de Baelo Claudia.
Según han detallado  fuentes de la Delegación Provincial de Cultura, dicha pista se encontraba sobre el edificio objeto de esta investigación, en el sector sureste del conjunto monumental, situado al norte del decumanus maximus.
Un profesor de la Universidad francesa de Burdeos, Bertrand Goffaux, es el arqueólogo investigador que dirigirá el proyecto junto al personal técnico del propio Conjunto Arqueológico. Dicho proyecto forma parte de las actividades de colaboración que realizan de forma conjunta la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía y la Casa Velázquez, fruto de un convenio suscrito entre ambas partes en 2009 con el objetivo de desarrollar actividades científicas en Baelo Claudia.
Esta investigación es de "gran importancia" para la ciudad hispanorromana, ya que este extremo sureste del área del foro es el único que queda sin excavar. Como explica el autor del proyecto, su objetivo es doble, siendo el primero el de detallar las diferentes fases de construcción, ocupación, restauración, reforma, reutilización y abandono para obtener una visión dinámica de esta zona, desde los años de fundación de la ciudad hasta su abandono definitivo.
Asimismo, tras los trabajos de excavación se desvelará una visión diacrónica que permitirá comprender mejor la articulación de los espacios públicos y privados durante las diferentes fases de la evolución urbana.
En este sentido, las conclusiones del proyecto servirán para conocer la circulación urbana en la ciudad, relacionada con los edificios --religiosos, políticos, comerciales, artesanos-- y con la naturaleza de las vías de comunicación --calles, callejones, plazas, aceras--. Es decir, que se podrá conocer en profundidad el tipo de circulación y tráfico que se practicaba en la ciudad, así como las relaciones sociales y culturales establecidas en torno a la composición física de la misma.
Vista aérea de la ciudad hispano-romana de Baelo Claudia.
Hasta 2017
Para ello, el proyecto se desarrollará en seis anualidades, entre 2012 y 2017. Este año se pretende comenzar la excavación arqueológica en la zona del edificio del sureste, concretamente en los niveles tardoantiguos. En años sucesivos se excavarán los niveles altoimperiales y fundacionales, se estudiarán los materiales muebles y biofactos encontrados y, finalmente, con todos los datos obtenidos se intentará reconstruir la planta y el alzado de los edificios y espacios abiertos.
Este proyecto cuenta con el asesoramiento del investigador francés Pierre Silleres, un arqueólogo que estuvo trabajando en la ciudad hispanorromana hasta finales de la década de los ochenta. En cuanto al equipo de investigación, está compuesto por expertos de las universidades de Burdeos, Lille, Sevilla, y por personal técnico propio de Baelo.
La delegada provincial de Cultura, Yolanda Peinado, ha subrayado que este documento es el principio de un proceso que llevará a conocer mejor el Conjunto Arqueológico, ya que se excavará en un "sector estratégico" que completará los datos recopilados en anteriores investigaciones.
(Fuente: El Economista)

4 de noviembre de 2011

El templo escondido de Hércules en Sancti Petri (Cádiz)

El arquitecto madrileño José Sancho Roda recuerda el ofrecimiento que le hicieron hace 40 años para descubrir el Templo de Hércules y plantea hacer sondeos en Sancti Petri (Cádiz).
Estatuilla de bronce de Hércules Gaditano.
Lleva en la mano las manzanas de las Hespérides.
Hace casi 40 años que José Menéndez-Pidal Álvarez, entonces arquitecto jefe en Andalucía de la Dirección General de Bellas Artes planteó al también arquitecto José Sancho Roda, destinado en la central de Madrid, que se ocupara de dirigir prospecciones submarinas en torno al islote de Sancti Petri para tratar de localizar la ubicación y los posibles restos arqueológicos del Templo de Hércules construido en la zona por los fenicios. José Sancho declinó el ofrecimiento por motivos laborales, y aquella primera intención, que tuvo su origen en los militares de la época, ni siquiera alcanzó el calificativo de proyecto. La conversación entre Sancho Roda y Menéndez-Pidal se quedó entre las paredes de los despachos oficiales y de la historia no quedó constancia alguna más que en la memoria de sus protagonistas. Sin embargo, el primero de ellos, José Sancho Roda, no pudo olvidar nunca aquel nonato proyecto de 1973 y desde entonces ha leído cualquier texto relacionado con el mítico templo y no ha podido dejar de pensar que las administraciones públicas, en los tiempos que corren, podrían dar el paso que en su día ni él ni los que le rodeaban pudieron iniciar. 

"Creo que sería posible -dice José Sancho- afrontar un programa conjunto entre varias instituciones. Si cada una de ellas aporta las personas y los medios para llevar adelante el proyecto, éste llegaría a hacerse realidad y sería un motivo de satisfacción para todos porque estamos hablando de la 'cuna' de la civilización europea y haría mucho más interesante la zona para el turismo". 

  • Sancho despierta así su memoria para alentar a los poderes públicos a formar un equipo pluridisciplinar capaz de llevar a cabo una serie de sondeos y prospecciones submarinas que, a su juicio, tendría "un bajo coste" y sería factible porque la profundidad del agua alrededor del islote se sitúa "entre los 12 y los 20 metros". 
De todos los estudios e investigaciones que de manera particular ha llevado a cabo este arquitecto madrileño sobre la historia del Templo de Hércules y su destrucción o desaparición bajo las aguas de la costa gaditana, José Sancho destaca que la que debió ser una imponente construcción pereció a causa de un destructivo maremoto que la historia sitúa en torno al año 382 de nuestra era, un tsunami que sumió bajo el océano decenas de ciudades en la zona y toda una civilización de envidiable historia cultural y riqueza patrimonial. Sancho Roda cree que fue un maremoto el que acabó con el templo porque si hubiera sido por una guerra o una invasión, habrían quedado "restos o alguna noticia histórica", y si la causa fuera un seísmo, también habrían sobrevivido algunos vestigios. Igualmente descarta la posibilidad de que la invasión de los bárbaros acabara con el templo, "porque no llegaron a la zona de Cádiz antes del año 410". 

Une estas tesis el arquitecto madrileño con los escritos del historiador Ceán Bermúdez, que sostiene que en 1730 hubo una gran bajamar en la zona del islote de Sancti Petri y junto a él se descubrieron "cimientos y paredones del templo". También después del maremoto de Lisboa, en 1755, hubo otra gran bajamar y "en torno al islote había restos de columnas y grandes sillares". Así, cree que fue un maremoto el que hundió definitivamente el templo y el que modificó sustancialmente la línea de costa, una idea que reafirma después de ver los efectos de los últimos tsunamis en Indonesia o Japón. 

José Sancho, autor del libro El atlas de las fortificaciones de la isla de San Fernando, de Carlos Vargas Machuca, piensa que ha llegado la hora de profundizar en la historia de aquel mítico templo que pudo ser visitado por Julio César o Aníbal, de manera que las administraciones se unan y se impliquen en la búsqueda de unos restos con los que reescribir toda una civilización: "Por las referencias de historiadores griegos y romanos con la descripción del templo, sabemos que ocupaba casi toda la superficie de la isla y que estaría rodeado, a semejanza de los templos de Jerusalén o Tiro, de otras construcciones importantes". 

La sugerencia de este arquitecto madrileño coincide, en el tiempo y quizás en las formas, con la puesta en marcha de la segunda campaña de prospecciones arqueológicas en el frente costero de la provincia de Cádiz, desde la desembocadura del Guadalquivir hasta Tarifa, un proyecto multidisciplinar en el que intervienen el Ministerio de Defensa, el Ministerio de Cultura y la Junta de Andalucía a través de su Centro de Arqueología Subacuática en Cádiz. Ellos buscan y localizan pecios, que se sepa, pero igual también se han sentido subyugados por aquel templo consagrado al dios Melkart.

(Fuente: Diario de Cádiz)

26 de octubre de 2011

Los expolios dejan a Jerez sin una parte de su legado histórico

El yacimiento de Mesas de Asta sigue siendo víctima de los expolios.
El yacimiento arqueológico de Mesas de Asta encierra buena parte de la historia de la comarca de Jerez. Sin embargo, el olvido de las administraciones permite que los restos sean objeto de expolio y sufran además los daños propios de las labores agrícolas que se desarrollan en la superficie.


Asta Regia conoció periodos de civilización desde tartésicos, romanos, visigodos y musulmanes. Hasta que fué abandonada en el S. XI en favor de Jerez de la Frontera.

El Ateneo de Jerez inaugura este miércoles unas jornadas que tratan de reivindicar la importancia de este yacimiento, en el que no se interviene desde el año 1956 a pesar de haber sido declarado Bien de Interés Cultural (BIC) por la Junta, lo que en teoría debía garantizar su protección.

La realidad es bien distinta. El presidente de esta entidad cultural, José Rodríguez, lamenta que los restos arqueológicos sigan siendo objeto de expolio a pesar de que los propietarios de la finca “ponen medios para tratar de evitarlo”.

Pero no sólo es la acción de los desaprensivos la que pone en peligro la conservación de este importante patrimonio. “Aquella es tierra de labranza, de manera que la propia herramienta agrícola provoca daños en el yacimiento. Además, a eso hay que unirle la lluvia, que arrastra los sedimentos. Se han llegado a dar casos de vecinos de Mesas de Asta que han encontrado en la calle objetos de valor después de las lluvias, como huesos, platos, monedas e incluso espadas”, asegura José Rodríguez.

El Ateneo plantea por tanto la necesidad de “poner en valor” a este patrimonio, llegando a un acuerdo con los propietarios de la finca e iniciando los trabajos necesarios para recuperar ese importante legado.

En opinión de Rodríguez, la prioridad es que las administraciones públicas adopten la “decisión” de poner en marcha un proyecto de recuperación que, incluso, podría a medio plazo convertirse en fuente de riqueza, tal y como ocurre en otros lugares que cuentan con yacimientos de características similares.

Desde el Ateneo de Jerez existe el convencimiento de que los vecinos de la barriada rural de Mesas de Asta “podrían vivir” de los restos arqueológicos con los que conviven.

(Fuente: Andalucía Información)

2 de octubre de 2011

Aparecen restos romanos en unas obras en Cádiz

Imagen de los restos hallados en la zanja abierta en la Alameda
del Marqués de Comillas.
Restos arqueológicos en cada obra. La práctica habitual en la inmensa mayoría de actuaciones que se realizan en el subsuelo de la ciudad de Cádiz ha tenido un nuevo episodio en la Alameda Marqués de Comillas. Los trabajos que se iniciaron hace unos días para instalar el nuevo cableado eléctrico que aumentará la potencia en el casco histórico y que es fundamental para la puesta en funcionamiento del nuevo Hotel Atlántico se han visto afectados por la aparición de estos restos. 

Concretamente, el lugar donde se han localizado los hallazgos es en el tramo de obra comprendido entre las calles Fernán Caballero y Bendición de Dios. En la zanja de alrededor de un metro de ancho que se ha abierto en varios tramos de la Alameda (desde Argüelles hasta la fachada de la Escuela de Hostelería hasta el momento, salvando el tramo que ya se realizó en su momento entre Santiago Terry y Buenos Aires y el que separa Buenos Aires y Fernán Caballero, que es el que plantea mayores problemas de tráfico por la estrechez de la calzada) para introducir el nuevo cableado es donde se han localizado estos restos que datan de la época romana. 

El arqueólogo que sigue la obra presentó ayer ante la Delegación Provincial de Cultura el informe sobre los restos localizados, así como las posibles soluciones que pueden existir para llevar a cabo la actuación prevista sin afectar a la arqueología. En este sentido, desde la delegación provincial se comunicaba ayer a este periódico que los técnicos iban a estudiar ahora ese proyecto y buscar las alternativas posibles. 

En cualquier caso, Cultura quiso señalar que la localización de estos hallazgos arqueológicos no tiene por qué perjudicar el normal desarrollo de las obras, comentando que la resolución dependerá de lo que tarden los trámites burocráticos que ya se han iniciado. Y este punto es importante, teniendo en cuenta que las obras deben estar finalizadas antes de marzo de 2012, fecha prevista para la apertura del nuevo Parador (que depende del cableado que aumente la potencia eléctrica para comenzar a funcionar).

(Fuente: Diario de Cádiz)

1 de octubre de 2011

La búsqueda de pecios entre Sanlúcar y Tarifa llega a su segunda fase


El Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico continúa la elaboración de la Carta Arqueológica Subacuática

El área comprendida entre la desembocadura del Guadalquivir y Tarifa es, a partir de este momento, objeto de la segunda fase de la campaña de protección del patrimonio arqueológico subacuático que desde hace más de un año desarrollan conjuntamente los ministerios de Cultura y Defensa y la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía.

Esta área aglutina 800 de los 3.000 pecio de interés, que se estiman,
hay en el litoral español.


El Centro de Arqueología Subacuática (CAS) de Cádiz ha acogido este viernes la reunión que se considera el punto de partida de esta segunda fase, que centrará los trabajos en cuatro subáreas concretas: Bahía de Cádiz, desembocadura del Guadalquivir, área frente a Zahara de los Atunes y el entorno de la Isla de Tarifa, donde "hay mucha información sobre pecios púnicos y romanos". En la elección de estas áreas se ha tenido en cuenta la información con la que cuenta el Instituto Hidrográfico de la Marina sobre obstáculos para la navegación y con la información arqueológica documental u oral que posee el CAS sobre posibles yacimientos en la zona.


Además de responsables y técnicos del CAS y de la Armada, la reunión ha contado con la asistencia de la directora general de Bellas Artes y Bienes Culturales del Ministerio de Cultura, Ángeles Albert, y la directora general de Bienes Culturales de la Junta, Margarita Sánchez. Ambas han destacado que el fin último de estos trabajos es la investigación, la puesta en valor y protección del patrimonio subacuático, así como evitar su expolio. Aseguran que la primera campaña ha sido "exitosa desde el punto de vista arqueológico y científico", tras haberse detectado 134 contactos, considerando que 84 de esas anomalías podrían tener interés arqueológico.


En 22 casos se ha descartado el interés arqueológico, mientras que se han detectado "dos pecios arqueológicos singulares". Sobre estos dos pecios, significan que lo que se ha hecho es un "primer acercamiento", estando pendientes "trabajos futuros de investigación más exhaustiva para tratar de ponerle nombre y cronología". En cualquier caso, las primeras hipótesis apuntan a que se trata de dos pecios "modernos", uno de aproximadamente el siglo XVIII y el otro del XX. Ambos han sido localizados próximos a la costa en la Bahía de Cádiz.
De los pecios detectados, dos tienen la consideración de "singulares".


La segunda campaña se desarrollará gracias a una aportación de 60.000 euros por parte del Ministerio de Cultura, mientras que la Junta y la Armada aportan medios técnicos y humanos valorados en similar cuantía. Entre otras novedades, la Armada pretende incorporar nuevos equipos al trabajo, previendo la adquisición de perfiladores, magnetómetros, y sónar de barrido lateral.


El área comprendida entre la desembocadura del Guadalquivir y Tarifa es considerada como una de las de mayor interés del mundo desde el punto de vista de la arqueología submarina, estimándose que aglutina alrededor de 800 de los 3.000 restos de interés que se cree que reúne el litoral español. En este punto, la Junta ha detallado que el Golfo de Cádiz cuenta con 56 zonas protegidas como Bien de Interés Cultural (BIC) y con 42 zonas de servidumbre.


Esta actuación programada es la continuación de las labores que viene realizando desde 2010 el CAS del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico para la ejecución de la Carta Arqueológica Subacuática. Los trabajos se enmarcan dentro del Plan Nacional de Protección del Patrimonio Cultural Subacuático elaborado por el Ministerio de Cultura.
(Fuente: La Vanguardia)

6 de septiembre de 2011

Andalucía autoriza excavaciones en la ciudad romana de Turaniana (Almería)


Desde la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía se ha mostrado disposición a autorizar excavaciones en el yacimiento arqueológico de Turaniana, en Roquetas de Mar, lo que ha sido largamente reivindicado por los defensores del yacimiento, y que pretende la puesta en valor de este espacio, declarado Bien de Interés Cultural en 1991.
Localización de la ciudad romana de Turaniana.
Con anterioridad a este anuncio, Cultura ha realizado un estudio de georrádar destinado a detectar los lugares en los que se concentraban los restos, y una vez conocidas las conclusiones, se está en condiciones de autorizar excavaciones en la zona con mayor acumulación de restos.
Por el momento, la Consejería de Cultura mantiene abierto hasta el día 31 de octubre el plazo para que universidades o grupos de investigación interesados en este tipo de actuaciones puedan presentar sus solicitudes de subvención para la este tipo de actuaciones.
Unas 13 hectáreas
El yacimiento es uno de los restos arqueológicos más importantes de la provincia cuenta con una superficie aproximada de 13 hectáreas, que la zona era una antigua ciudad romana que incluiría una necrópolis, viviendas, y piletas de salazones, además de un puerto.
Destacar en todo este proceso el trabajo que viene realizando la plataforma, 'Unidos por Turaniana', en la que participan numerosas asociaciones, y que ha vuelto a poner de manifiesto su importancia, gracias a las jornadas de difusión organizadas en el mismo y a sus continuas reivindicaciones.
Inversión de cinco millones de euros en yacimientos romanos
La Consejería de Cultura prevé acometer actuaciones en los yacimientos romanos andaluces por un valor de 4.930.207,64 euros hasta 2013. En respuesta a una pregunta parlamentaria formulada por el grupo popular, la consejería ha informado de que los trabajos se centran especialmente en las provincias de Cádiz, Málaga, Córdoba y Sevilla. Dentro de los actos previstos para la conmemoración del bicentenario de la Constitución de 1812, la consejería restaura el Teatro Romano de Cádiz. Tras el estudio estructural de las viviendas del barrio del Pópulo, directamente construidas sobre los restos del teatro, se está asegurando la estructura de los edificios a la vez que se completa la excavación del teatro, unas obras cuyo presupuesto total asciende a 1.445.000 euros, y que se prevé finalizarán a primeros de 2012. Además, se concreta en estos días el contenido del proyecto que pondrá en relación con el teatro con su Centro de Recepción e Interpretación. Los trabajos contenidos en dicho proyecto están 
valorados en 230.000,00 euros y se ejecutarían a primeros de 2012.

El teatro romano de Itálica también será objeto de inversión.


Teatro de Itálica
Sobre el yacimiento cordobés de Cercadilla, se intervendrá en las infraestructuras básicas: agua, electricidad, iluminación, accesibilidad. En Málaga, se ejecutarán dos proyectos en el Aditus Sur del Teatro Romano: el cierre de los cortes realizados en la zona en los últimos meses y la finalización del muro de contención de la ladera. Igualmente, será restauradas las gradas del Teatro Romano de Acinipo, en Ronda (Málaga), con un presupuesto de 250.000 euros.

En Sevilla, con la colaboración de la Diputación, se rehabilitará las infraestructuras escénicas en el Teatro Romano de Itálica, situado en Santiponce, la actuación "más significativa" del ejercicio 2011. La Junta y la Diputación quieren recuperar el teatro para programar espectáculos al aire libre, el uso para lo que fue concebido hace siglos.
(Fuente: Ideal / El País)



22 de julio de 2011

Los sondeos confirman que el teatro romano de Cádiz se construyó en el S. I a.C.

Las excavaciones arqueológicas que se vienen desarrollando desde hace casi un año en el Teatro Romano de Cádiz por parte de la Junta de Andalucía en colaboración con el área de Arqueología de la Universidad de Cádiz (UCA), han permitido situar la fecha de construcción del mismo a finales del siglo I antes de Cristo.
Vista aérea del teatro romano de Cádiz.

   Según han explicado en rueda de prensa el delegado del Gobierno de la Junta en Cádiz, Manuel Jiménez Barrios, la delegada provincial de Cultura, Yolanda Peinado, y responsables de las excavaciones de la UCA, hasta que estos sondeos arqueológicos han venido a constatarlo, sólo se tenía constancia de la fecha de construcción del teatro a través de referencias literarias.

   Otros aspectos destacados de estos trabajos son, entre otros, que el Teatro Romano de Cádiz estuvo unos 200 años "a pleno rendimiento" y que se ha encontrado la grada de los nobles.

   Detallan que gracias a los sondeos se han documentado íntegramente siete gradas de la 'ima cavea', de las cuales sólo se conserva la cimentación en sillería del graderío. También se ha documentado un pasillo y el asiendo de una barandilla de separación entre el graderío propiamente dicho y los asientos más nobles del teatro.

   La cimentación se conserva prácticamente completa tanto al este como al oeste del área de excavación, permitiendo la total restauración de las zonas vacantes en el futuro.

   Durante el desarrollo de la intervención se han exhumado unos 500 sacos de materiales muebles con miles de artefactos cerámicos y biofactos, entre los que se destacan abundantes cerámicas medievales almohades de diversa procedencia y factura.

   Aunque de época romana ha aparecido un menor número de materiales, destacan la cantidad y variedad de placas marmóreas que dan prueba de la riqueza que el monumento tuvo que atesorar en su programa decorativo, así como del intenso expolio que el monumento vivió desde su abandono. Destacan tres columnas de ónice africano, un casetón, una cornisa de mármol blanco italiano y una veintena de fragmentos de inscripciones funerarias.

   La intervención arqueológica, una vez ultimada, dejará al descubierto un 30 por ciento más de la parte actualmente visible del Teatro Romano.
(Fuente: Europa Press)

17 de julio de 2011

Joya visigoda abandonada en Barbate (Cádiz)



Tras ser sometida a un riguroso proceso de recuperación, la ermita de San Ambrosio fue dejada a su suerte en 2004

Enclavado en pleno pinar de la Breña, un paraje de singular belleza a medio camino entre la carretera que lleva de los Caños de Meca a Barbate, se levanta una de las joyas del visigodo del sur peninsular: la ermita de San Ambrosio.

 Una minuciosa obra de rehabilitación llevada a cabo en dos fases -del 98 al 2000 y de 2002 a 2004- logró sacarle todo el brillo arqueológico y constructivo, de cara a su inmediata puesta en valor. Pero, incomprensiblemente, hoy día está abandonada a su suerte y al designio de las vacas que, literalmente, pastan allí a sus anchas. Y es que en la actualidad esta propiedad del Obispado de Cádiz y Ceuta está arrendada y es objeto de pastoreo.

Así lo lamenta la arqueóloga que dirigió la excavación, Paloma Bueno, quien asegura que se le parte el alma cuando regresa por el que fue el centro neurálgico de su trabajo durante estos cuatro años que duró la intervención, junto a las dos escuelas taller que se pusieron en marcha para su recuperación.

"Lo dejamos perfecto, hicimos la obra de consolidación a través de una gran estructura enorme de metal, se limpió, se hizo el vallado, un camino de acceso y se excavó. Solo faltó techarlo". Incluso se arreglaron las naves anexas de cara a la construcción del futuro centro de visitantes. Pero la falta de entendimiento entre administraciones o la propia desidia y falta de interés que este tipo de iniciativas culturales despiertan en este país, y en esta provincia, hicieron el resto. Y eso que fue en época de bonanza económica.

¿El resultado? Puede verse en las fotos. Un bien patrimonial -fue declarado BIC en 2004- dejado a su suerte, inmerso en la vegetación que salvajemente aflora sobre el terreno y cuyo máximo fin es servir de alimento a los bóvidos. Animales que, por cierto, pisotean los restos romanos que encuentran a su paso, ya que bajo a la ermita yace una villa romana y detrás, la necrópolis.

Y no queda aquí la cosa. Según asevera la arqueóloga, una enamorada de este bello rincón al que regresa cada vez que puede, "hay restos que dejamos en el terreno porque no pudieron ser depositados en el Museo de Cádiz que han desaparecido. Aquello quedó vallado y cerrado". Pero los candados están rotos, entregando este bien a la total desprotección.

 Haciendo recuento, la coqueta ermita fue sometida a dos intervenciones de rehabilitación y de consolidación con la puesta en marcha de la Escuela Taller de San Ambrosio I y II, en una actuación que promovió la Mancomunidad de la Janda con la colaboración del Obispado de Cádiz como propietario, el Ayuntamiento de Barbate y el INEM, que subvencionó el proyecto. Este trabajo fue concebido como un proyecto multidisciplinar integrado por diferentes grupos de albañilería, carpintería, recursos forestales, turismo rural y el módulo de auxiliar de arqueología que lideró la propia Paloma Bueno.

El fin era rehabilitar la ermita y su entorno, para lo que se realizó el Proyecto de Intervención Arqueológica de Urgencia que fue aprobado por la Delegación de Cultura en abril del 99 con el fin de realizar las investigaciones arqueológicas previas a los trabajos de restauración. "Fue un trabajo muy gratificante y en el que colaboró mucha gente", rememora.

Concretamente, durante los dos primeros años se llevó a cabo la eliminación de construcciones anexas derruidas, se excavó parte de la necrópolis y la villa romana -tanto en el atrio de la ermita como en la trasera- y se localizaron importantes restos constructivos como columnas, mosaicos, pintura mural, cerámica, vidrio y numismática. La segunda escuela taller trabajó en el apuntalamiento de los arcos, el estudio paramental, ejecución del cerramiento, recuperación del acceso, mejora del entorno e instalación de paneles.

Fue tal el fervor que despertó en su momento, que el Ayuntamiento de Barbate le otorgó el nivel de protección integral, propio de los yacimientos que deben ser conservados para su estudio y disfrute cultural público. Pero de nada sirvió, ya que ni Obispado, ni Junta, ni Ayuntamiento de Barbate ni Mancomunidad de Municipios de la Janda velan hoy por su salvaguarda. La de una joya visigoda abandonada.
Foto: Imagen actual de la ermita de San Ambrosio, totalmente desprotegida y rodeada de vegetación, tras su abandono en 2004, cuando concluyó la segunda Escuela Taller encargada de su rehabilitación.

(Fuente: Diario de Jerez)

14 de febrero de 2011

Los 16 cañones hallados en Cádiz pudieron estar asociados a las murallas que rodearon la ciudad hasta principios del S. XIX

La Consejería de Cultura ya ha trasladado a las instalaciones de Navantia en Puerto Real los dieciséis cañones hallados durante las obras de construcción de un aparcamiento, para emprender allí los trabajos de restauración de estas piezas. Los cañones de hierro miden entre dos y tres metros, pertenecen a distintas fechas de entre los siglos XVIII y XIX y supuestamente están asociados a las murallas que rodearon Cádiz hasta principios del siglo XIX, según ha informado la Delegación Provincial de Cultura.
Las piezas, de tres calibres distintos,  se encuentran en buen estado aunque a algunas les faltan partes como cascabeles o muñones.
Un operario trabaja en la desconcreción de los cañones.
Los 16 cañones hallados en las obras de Canalejas y que ahora se someten al proceso de consolidación que dirige desde las instalaciones de Navantia el arqueólogo, historiador e Ingeniero Naval, Antonio Ramos Gil, son de tres calibres diferentes. "De a doce, a dieciocho y a treinta y cuatro libras" puntualiza antes de explicarlo. "El calibre se nombra en función al peso de la bala que se dispara", comenta este experto en este pesado material de artillería. No en vano dedicó varios años de su trayectoria a la investigación de cañones, para afrontar la tesis que realizó sobre cañones y esquinales de hierro fundido.

Aparte del calibre, apunta que el peso de cada uno oscila entre 1.800 y 2.200 kilos y la longitud, entre 2.10 y 3.20 metros. Son las características técnicas de las que a priori habla el arqueólogo, ya que aún no se ha procedido a un estudio en profundidad. Lo que sí han comenzado son las labores de limpieza. "Ahora estamos en la fase de desconcreción de los cañones". Un sistema que se está realizando acorde al tipo de pieza que es. "Se trata de un producto industrial y por tanto hay que tratarlo dentro del ámbito de la arqueología industrial", dice. 

Desconcreción
Concretamente, se está realizando la desconcreción de toda una serie de cantos rodados, trozos de ladrillo, arena y cal. "Han estado dos años a la intemperie y se ha producido un proceso de oxidación posterior a la exhumación del yacimiento", señala. "Esto nos va a complicar la tarea, pero se consigue con una serie de medios mecánicos para que se produzca el descascarillado". Después se utilizan técnicas de aire a presión. "Se hace mediante chorreo de arena o de granalla". Eso sí, comenta, "se trata de un granallado suave que no deteriora el material".

Una vez limpio de lo adherido se llevará a cabo la imprimación antioxidante, que permite "transformar el posible óxido en una especie de pavonado negro". Posteriormente llevará una mano de imprimación en negro y, por último, se le dará una impermeabilización con un barniz de poliuretano, "aunque aún tenemos que hacer pruebas". Un proceso que se llevará a cabo tanto en el exterior como en el interior, el ánima, donde se estudiará la posible existencia de vestigios de la época como cerámica o monedas. 

Son los pasos necesarios, explica el experto, para protegerlos de las inclemencias meteorológicas, una vez que vuelvan a lucir al aire libre. Y aunque todavía se desconoce en qué fortaleza, baluarte o espacio se harán hueco, sí que aconseja dotarlos de la cureña o el carro de cuatro ruedas en que originariamente se apoyaban estos cañones.

19 de diciembre de 2010

REPORTAJE: La Basílica de Baelo Claudia (Cádiz)

La ciudad romana de Belo, que alcanzó rango de municipio con el emperador Claudio, es una buena muestra de la evolución experimentada por la ciudad hispana de tipo medio a lo largo del siglo I d.C. Las investigaciones arqueológicas han permitido precisar la cronología de un programa monumental en constante evolución durante más de medio siglo. Esta evolución hizo que esta ciudad costera, cuya importancia radicaba en el comercio de salazones, transformara su fisonomía mediante la construcción de un foro que puso fin a edificaciones anteriores.
El Foro en Baelo Claudia.


La organización general de este conjunto arquitectónico, limitado al sur por el decumanus máximus, consta de los componentes básicos que definen un modelo canónico de foro, es decir, un sector religioso y una basílica ocupando una situación extrema, enfrentados entre sí y separados por una plaza enlosada, limitada lateralmente por sendos pórticos. El área sagrada estaba ocupada por tres templos que se abrían a la plaza ofreciendo una amplia sensación de dominio sobre todo el espacio del foro.


La basílica

Vamos a analizar en este breve artículo el edificio de la basílica, sede de la función judicial a escala local; los magistrados locales, losduoviri, eran competentes en causas menores de asuntos civiles y mercantiles, siendo juzgados por el gobernador y sus legados los casos de mayor relevancia. El edificio se debió construir entre las décadas de los años cincuenta y sesenta del siglo I de nuestra era. En su lugar parece que existía otro gran edificio, también de carácter público.


Tanto por su volumen como por su ejecución, puede considerarse uno de los edificios más importantes de Baelo Claudia. Se alzaba en dos plantas, de sólida construcción, a base de sillares y muros de hormigón con caras vistas de mampostería recubiertas de estucos, muy probablemente pintados hacia el interior. El orden en el que se ejecutó era el jónico.
La basílica de Baelo Claudia.

La planta es rectangular, de 35,5 por 19,5 metros. Su interior se organiza en una columnata de veinte unidades, que estructura y diferencia el espacio en una gran nave central y otras dos más estrechas a ambos lados. Serían éstas en las que habría doble piso, quedando para la central el habitáculo de mayor altura.

El acceso se realiza a través de tres puertas desde el foro y tan sólo una desde la pequeña plaza que se abre al decumano máximo. El ingreso al piso superior debió realizarse por una escalera adosada interiormente al muro que cierra el edificio por el oeste, bajo la cual se abren tres pequeñas dependencias, comunicadas entre sí y con una sola puerta de acceso desde el exterior del edificio, a través del callejón situado entre el mercado y la basílica.

En los muros interiores del edificio se encuentran unos bancos, construidos a base de rebajar el espesor del propio muro y revestidos con asientos de placas de mármol. La tribuna desde la que los magistrados impartían justicia, estaba situada a un extremo distal del edificio, y, ocupando un destacadísimo lugar, se alzaba un podiumde piedra revestida de mármol, sobre el cual se alzaba la monumental escultura del emperador Trajano, ataviado con vestimenta de magistrado, tributo de la población de la ciudad al mandatario nacido en Itálica.
(Fuente: Mediterráneo Antiguo/Eduardo Barragán y Mario Agudo Villanueva)

30 de noviembre de 2010

Técnicos de la Universidad de Cádiz documentan diez nuevos hallazgos arqueológicos en Ceuta

Recientes prospecciones arqueológicas desarrolladas por un equipo de arqueólogos de la Universidad de Cádiz han permitido la localización de diez nuevos yacimientos arqueológicos y un total de ocho hallazgos aislados en la zona occidental de la Ciudad Autónoma de Ceuta. La presente campaña, codirigida por los profesores José Ramos Muñoz y Darío Bernal, así como por el arqueólogo Eduardo Vijande, ha sido posible gracias al convenio firmado entre la Universidad de Cádiz y la Ciudad Autónoma de Ceuta.
Miembros de la Universidad de Cádiz en los terrenos de Benzú
Junto a los codirectores, las labores de campo han sido acometidas por Juan Jesús Cantillo, becario predoctoral del Instituto de Estudios Ceutíes; Antonio Cabral, Macarena Lara y Jesús Toledo, arqueólogos-doctorandos de la UCA; Delia Escalón, arqueóloga; los estudiantes, Luigi Lafasciano, África Bustamante y Antonio Barrena; así como el técnico Ángel García, además de voluntariado de la ciudad de Ceuta.
En esta campaña se han documentado una decena de nuevos yacimientos arqueológicos, de los que tan sólo uno corresponde a época medieval (Loma del Tío Díaz V) y los restantes a la Prehistoria. De estos últimos, la mayor parte se adscriben al Paleolítico Medio (Calamocarro, Altabacal, Punta de la Cabeza, Casa de Zapatero III, IV y V y Topete). Igualmente, se ha localizado un yacimiento adscribible a la Prehistoria Reciente y un yacimiento con industria lítica de tipo Ateriense, lo que constituye una gran novedad al confirmarse la ocupación humana de este territorio durante el Paleolítico Superior.
En total, se han recogido más de 70 productos arqueológicos, algunos de gran calidad como raederas simples, raederas convergentes, láminas de borde abatido, puntas aterienses, etc. Hay que destacar la localización de nuevas cavidades en la zona de Benzú, que presentan gran potencialidad de investigación para el futuro. En relación al Abrigo de Benzú, con cronologías entre 300 mil y 70 mil años, es importante la documentación de numerosos yacimientos del Paleolítico Medio, que ayudarán a comprender mejor la movilidad de estos grupos de cazadores-recolectores. La ubicación de la mayor parte de estos asentamientos en la zona litoral acentúa, más si cabe, la importancia que para estos grupos debió tener la explotación de los recursos marinos.

9 de noviembre de 2010

REPORTAJE: La expedición de un grupo de arqueólogos gaditanos que dieron con el hallazgo del Teatro romano

A los niños de Cádiz, desde tiempos pretéritos, se les ha explicado una leyenda según la cual el suelo, por debajo de la capital, está minado de galerías y pasadizos subterráneos y que por el nivel inferior también se puede recorrer toda la ciudad. En las leyendas populares se narra las historias de niños perdidos en esas cuevas, de moros que aún habitan bajo tierra, adueñados de unos pasadizos por los que se mueven libremente como si viviesen en un mundo paralelo al nuestro. Pero hay otras muchas historias que narran proezas acaecidas durante pasados asedios militares a la ciudad, de oscuros prostíbulos atendidos por turbias matronas a los que concurren enigmáticos personajes; se atribuye también al subsuelo un continuado tránsito de contrabando de los materiales y productos más insospechados

El barrio de El Pópulo asistió hace treinta años a uno de los momentos más revolucionarios de su historia. Uno de los pozos verticales del alcantarillado de la ciudad situado en la antigua fundición de Vigorito se convirtió en un improvisado túnel del tiempo que conectó vía directa con el teatro de Gades. El que Balbo proyectó sobre aquella -empezaba a intuirse- importante urbe.

De aquí partió la primera expedición que un grupo de jóvenes arqueólogos y colaboradores del Museo de Cádiz emprendió prácticamente a ciegas hasta esta otra dimensión del pasado histórico de la ciudad que, por aquel entonces, nadie sospechaba alcanzar. 
Inicio de la expedición, prácticamente a ciegas.

Francisco Ghersi, Antonio Sáez y Francisco Giles fueron los primeros testigos privilegiados de este hallazgo sin precedentes en la arqueología gaditana, nacional e internacional. El que constató el hallazgo del primer gran testimonio monumental del pasado de la ciudad. 

Juntos bajaron por aquel angosto y largo túnel mediante dos escaleras de madera atadas entre sí que les transportó a una galería abovedada prácticamente colmatada de relleno de los talleres Vigorito. Así lo rescata de su memoria Francisco Ghersi, entonces militar de artillería, cuyos conocimientos de topografía fueron cruciales a la hora de determinar la existencia de Teatro Romano. "Todavía se me pone la piel de gallina cuando recuerdo el momento en que bajamos a esta galería semicircular. Al principio no lo tuve claro, hasta que vi en una de las naves laterales una pequeña cantidad de Opus signinum. Se trataba del mortero que usaban los romanos y que podría corresponder a una de las lucernas del pasillo", explicaba, visiblemente emocionado, como si hubiera ocurrido ayer. 

Fue en este momento cuando vio la luz. Gracias, eso sí, a los equipos de espeleología que tanto él como su compañero de batalla Francisco Giles aportaron, como grandes aficionados a la materia, para hacerse hueco, "prácticamente a gatas", por aquel espacio relleno de escombros, restos y desechos.
Boca de acceso a las galerías.

"Cuando nos percatamos de qué se trataba, nos quedamos asombrados. Yo tenía una formación clásica, ya que venía de excavar en Ampurias, donde estuve seis años", comenta Giles. "Así que cuando pudimos ver los paramentos, sillares, la galería semicircular abovedada... nos dimos cuenta de que no se trataba de las contraminas de la época de los asedios", tal y como se sospechaba. 

Ni contraminas, ni cloacas medievales, ni cuevas de María Moco, como bien recogen los numerosos textos populares en referencia a estos recovecos subterráneos que subyacen en la ciudad. Era el Teatro Romano de Gades. 

Un monumento que salió a la palestra en medio de un proceso de expropiación en que estaba inmerso el barrio de El Pópulo con el fin de recuperar la Alcazaba medieval. Trámite que inició en 1972 la Dirección General de Bellas Artes del Ministerio de Educación y Ciencia y que perfila, al detalle, el entonces director del Museo de Cádiz, Ramón Corzo, que de nuevo se situó al frente de uno de los mayores retos arqueológicos a los que se enfrentaba Cádiz.
  • La expedición significó el hallazgo del teatro romano que ya presumía ser "el más antiguo y grande de Hispania", comenta Corzo. 
Y es que apenas habían concluido en el Museo las labores de vaciado de arena del sarcófago antropoide femenino hallado un mes antes, cuando, de repente, afloró este gran testigo del pasado monumental de Cádiz. Un teatro que ya presumía ser "el más antiguo y grande de Hispania", comenta Corzo. 
La galería les condujo hasta las graderías del teatro romano.

"El hallazgo no fue casual", comienza. "El decreto del Ministerio declaró de utilidad pública buena parte del cuadrante del sudeste del Pópulo, aunque en los 80 sólo se había ejecutado una pequeña zona", explica. Concretamente, un solar de la calle Silencio, 9 y una parte de la manzana que ocupaba el taller de Vigorito. Justo este año el Ministerio solicitó a Corzo la excavación del solar para comprobar si, efectivamente, "merecía la pena seguir la expropiación". 

Así que en agosto se pusieron manos a la obra con los primeros sondeos. Labores que comenzaron en el famoso solar de Silencio, 9, "una casa sin ningún interés porque estaba arruinada ", recuerda. 

Pero los primeros esfuerzos quedaron en saco roto. "No había nada, así que nos dedicamos a rastrear todos los edificios de alrededor que ya estaban expropiados y desalojados". Concretamente la Casa del Patio Mudéjar y del Dean Rajón, que comunicaba con el sótano de Silencio, 9. 
  • En cualquier caso, el hallazgo se hizo y fue tal su dimensión que volvió del revés los planes de la trama urbana de un barrio (el del Pópulo) que en 1980 andaba sumido en la más absoluta decadencia. 
"Reconocimos los muros de este sótano, que parecía un pozo negro por el que se bajaba a una gran galería abovedada rellena". Ante la dificultad de acceso, llamaron a los colaboradores del Museo y con ellos llegó la buena nueva.

Dicen los rumores que la primera voz de alarma de la existencia de aquel 'oportuno' pozo que les transportó al mismo Gades la alzó otro de los colaboradores esporádicos del Museo, Juan Antonio Gito, al que no se le resistía ninguno de estos recovecos, a los que bajaban numerosos drogadictos de la época para pincharse.

En cualquier caso, el hallazgo se hizo y fue tal su dimensión que volvió del revés los planes de la trama urbana de un barrio que en 1980 andaba sumido en la más absoluta decadencia. 

Ghersi trazó el primer plano de aquella galería en medio de unas pésimas condiciones de visibilidad y circulación y que, superpuesto al mapa catastral del barrio, corroboraba la existencia de otros muros radiales que ya hablaban en mayúsculas de Teatro. Se sucedieron entonces, aunque a trompicones, los sondeos y excavaciones que iban destapando otras caras del monumento. 
Gradería del teatro romano de Cádiz.

Aquello coincidió con el proyecto de rehabilitación del arquitecto Suárez Cantero, que se vio abocado a un complicado replanteo administrativo dada la falta de acuerdo entre las administraciones. "Un largo proceso que no terminó de arrancar hasta 1989 -tras el pase de las competencias sobre arqueología a la Junta-, que fue cuando llegó un proyecto más ambicioso con el que se logró avanzar más". Una complicada excavación repleta de trabas en la que también tuvo un gran papel el arqueólogo Francisco Sibón, 'el rubio'.

El resultado fue la revelación de un edificio de gran armonía construido a final del siglo I a. C., en el área comprendida entre el Arco de los Blancos y las escalinatas de la plaza Fray Félix. 

Hoy puede verse un tramo de la galería y del graderío, así como numerosa filas de gradas de la summa cavea y la media cavea. Una parte de aquel Gades al que tres décadas atrás se asomó aquel pozo. Un 'improvisado' túnel del tiempo que todavía hoy pretende desvelar nuevos secretos del esplendoroso pasado romano de la ciudad.
  • "Las cuevas de Hércules"
Los túneles más antiguos pertenecen a una red de origen romano, que unía los edificios más relevantes de la neapolis de Gades diseñada por la poderosa familia de los Balbos, cuya relación con Julio César fue muy cercana y provechosa. En esos momentos de cambio de era los patricios adquieren la ciudadanía romana y la ciudad recibe el título de “Municipium Civium Romanorum”. Muy pronto se comenzará el acondicionamiento y la habilitación turística de las entrañas de Cádiz con el nombre de Cuevas de Hércules. Los estudios realizados constatan la existencia de hasta seis kilómetros de galerías subterráneas bajo la ciudad con alturas entre 1,80 y 3,50 m,
(Fuentes: Diario de Cádiz y Exire)