google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri

3 de marzo de 2011

El Servicio Municipal de Arqueología de Burriana halla restos anteriores a la construcción de la actual ermita de Sant Blai de finales del siglo XIX

Durante los trabajos de vigilancia arqueológica llevados a cabo por el Servicio Municipal de Arqueología de Burriana en el derribo del antiguo Hospital de Sant Blai, han aparecido las paredes de una estructura de forma cuadrangular, que por la técnica constructiva y su disposición (los muros de la ermita reconstruida en 1882 se apoyan sobre esta estructura) se puede comprobar claramente que es mas antiguo que el edificio decimonónico, por lo podrían corresponder a algún resto del anterior inmueble religioso.


Lamentablemente, afirmaba el arqueólogo municipal, José Manuel Melchor, los restos conservados están bastante afectados por las obras de los últimos años, cuando se abrieron puertas y ventanas y se alteró bastante su superficie con desagües y cableados, ya que se encontraban reaprovechados dentro de la estructura del antiguo hospital derribado.

A falta de una posterior excavación arqueológica, ha informado el arqueólogo, es difícil fechar de forma concreta la estructura y poder saber cual era exactamente su función, pero hay que recordar que hace veinticinco años ya se descubrió un enterramiento de época medieval en esta misma localización.

Este descubrimiento, afirmó Melchor, viene a aumentar el valor histórico-artístico de la ermita y su entorno, que además de estar incluida en el Bien de Interés Cultural del Centro Histórico de Burriana, ya es de por si un Bien de Relevancia Local según la Ley 5/2007 de Patrimonio de la Generalitat Valenciana. A la vista de este hallazgo, añadió, los servicios municipales se han puesto en marcha y están preparando un  anteproyecto  para la rehabilitación e integración de los restos históricos y arqueológicos del entorno de la ermita.

Según la información aportada por el Historiador del Arte, Josep Lluis Gil Cabrera, el centro hospitalario derribado recientemente, era un inmueble de fines del siglo XIX, junto con la actual iglesia hospitalaria de 1882. Ambas construcciones fueron obra del maestro de obras Salvador Fors que ejercía como arquitecto diocesano de Tortosa. La obra se realizó con la aportación de todos los vecinos en una época en la que el comercio naranjero estaba convirtiendo a Burriana en la principal potencia económica de la comarca.

No obstante, antes de construirse estas edificaciones a finales del siglo XIX, ya había otras, pues de hecho este fue el primer centro hospitalario de la Plana y del nuevo reino de Valencia fundado por Jaume I. Tras la conquista de Burriana en julio de 1233, y poco después de concederle la primera Carta Puebla en noviembre de ese mismo año, Jaime I fundó junto al paso del Caminàs – antiguo camino real, y que actualmente camí Santa Pau – por el río Seco, un hospital para pobres. Dicho hospital aparece ya documentado en 1238 como beneficiario en el Llibre del Repartiment.

El cronista y notario real, Rafael Martí de Viciana, da también testimonio al señalar en la Tercera parte de su Crónica de 1564 que “…otro si tienen arrabal una yglesia y hospital so título de Sant Blas: esta yglesia fue fundada en tiempo de la conquista, y en ella ay fundada cofradía con muchas bullas y privilegios…”.

28 de febrero de 2011

Alertan del saqueo de material en un tramo del yacimiento de Deóbriga (Burgos)

La zona ha sido escrutada con detectores de metales y han desaparecido piedras de los muros sacados a la luz 
Sólo son piedras. Es verdad, al menos sacadas de su contexto, pero no son únicamente eso si se encuentran en un yacimiento arqueológico romano como el de Arce-Mirapérez, próximo a Miranda de Ebro (Burgos) de donde han desaparecido ya unas cuantas. 
Las últimas excavaciones se han centrado en una área
 de 3.800 metros cuadrados. :: A. GÓMEZ
No es lo único que ha desaparecido. Algunos ciudadanos también han observado a gente inspeccionando la zona con detectores de metales. El problema no está en que se pase por encima de los 3.800 metros excavados hace unos meses por la empresa Ondare-Babesa a petición de la Junta, para saber cómo afectaría la construcción del vial a los restos arqueológicos. De allí se sacó prácticamente todo el material sensible y una vez procesado e inventariado se depositará en el Museo de Burgos.
Lo peor en este caso es que son evidentes los signos de que se han hecho agujeros en el resto de la finca. «Eso es un delito contra el patrimonio, está perseguido y la Guardia Civil les puede detener», aseguraron expertos en la materia. Durante el proceso de excavación el equipo responsable del mismo ya dio parte al Seprona de algunos movimientos no autorizados ni permitidos que se habían dado durante los fines de semana, cuando no había nadie en la zona. De hecho, se reforzó la vigilancia.
Lo que se pretende no es preservar piezas de un cierto valor económico, si no de gran peso histórico. A historiadores y arqueólogos, las piezas por sí mismas nos dicen pocas cosas. Necesitan un contexto y eso es lo que se destruye cuando entran», explicaron. La información estratigráfica del lugar en el que se encontraba la pieza desaparece y ese es «una daño irreparable» que, evidentemente no tiene nada que ver con el dinero, si no con la comprensión del entorno donde se está excavando.
  • El expolio de restos también se ha detectado en el entorno del castillo de La Picota
Deóbriga no es el único sitio por donde han pasado. Al parecer, el entorno del castillo de La Picota también ha sido recorrido palmo a palmo con detectores de metales. Y es que por tener un aparato de esos sólo requiere hacer una inversión económica que puede rondar los 1.800 euros si se adquiere uno de los más modernos que son capaces de discriminar la búsqueda del metal que se le indique.
En principio, el simple hecho de 'buscar' y que cuando se encuentre algo la máquina emita un pitido no supone ningún problema. La ilegalidad no aparece hasta que se remueve la tierra del lugar señalado. «No se puede entrar a un yacimiento arqueológico inventariado pasar el detector, levantar la tierra y llevarse lo que hay debajo», aclararon. En el momento que se altera el subsuelo necesitas una autorización y una formación que te permita hacer ese trabajo.
Pese a que hace muchos años que se habla de la existencia de restos históricos en el entorno de Arce-Mirapérez, la zona se había librado de los saqueos hasta ahora. Hasta que no se han hecho las excavaciones no han empezado a suceder. Pero tener la zona vigilada permanentemente es imposible, por lo que lo único que se puede hacer es pedir la colaboración ciudadana para que si ve a alguien llevándose material de la alerta.
(Fuente: El Correo)

27 de febrero de 2011

El monasterio de San Miguel de Escalada (León) celebra 125 años como Monumento Nacional

El Monasterio de San Miguel de Escalada, un monumento mozárabe "único y excepcional", enclavado en pleno paraje leonés y cuyos elementos arquitectónicos recuerdan a la Mezquita de Córdoba, se ha vestido hoy de gala para conmemorar el 125 aniversario de su declaración como Monumento Nacional.
Atrio porticado de estilo cordobés en San Miguel de Escalada.
La "singularidad" de este monumento, situado en el municipio de Gradefes, "no sólo dentro de la arquitectura española de la alta Edad Media, sino de toda Europa", la ha destacado hoy el presidente de la Comisión de Monumentos y Patrimonio Histórico de la Real Academia de San Fernando, Pedro Navascués, quien ha participado en los actos organizados para conmemorar esta efeméride.
Fue un 28 de febrero, hace 125 años, cuando este monasterio fue declarado Monumento Nacional, un distintivo que sin duda le salvó de la ruina al que estaba abocado, según Navascués, que ha recordado que esta declaración hizo que el Estado prestara atención a un edificio singular, pero también frágil, modesto y alejado de las urbes.
Hoy, en un día soleado que invitaba a acercarse hasta el lugar, varios cientos de personas han festejado esta distinción, celebración a la que se han sumado más de una veintena de pendones llegados de todas las partes de la provincia de León.
Navascués ha destacado, en declaraciones a EFE, la importancia de este cenobio, con un atrio porticado, de origen cordobés, que no existe en otro lugar, al igual que el encerramiento de iconostasio, que hay en la iglesia, también único, según ha dicho.
El monumento data del siglo X, cuando Córdoba estaba viviendo la época califal, un periodo en el que la población cristiana abandonó esas tierras, por razones políticas y religiosas y decidió vivir más libremente hacia el norte, sin el yugo del mundo islámico.
Esto hizo que al irse llevaran consigo las formas que habían visto en su ciudad y las trasplantaran en otros lugares de España.
Edificado sobre una iglesia visigótica preexistente, el Monasterio de San Miguel fue construido en el 914 por una serie de monjes, que marcaron en el entorno de León la impronta de la brillante cultura arquitectónica que se desarrollaba en aquella capital de la España árabe.
Decaído con la Desamortización, del conjunto monacal resta la iglesia mozárabe y una torre y una capilla de estilo románico.
Sobre este Monasterio, Navascués ha dicho que "se pueden encontrar catedrales como las de León o la de Burgos, pero como San Miguel de Escalada, habría que coger una lupa y buscar por todas las partes y no lo encontraríamos".
Sobre su estado de conservación actual, ha afirmado que el monumento goza de salud, no corre peligro de que se vaya a caer, pero es cierto que hay que mantener la guardia y continuar con sus labores de mantenimiento y conservación.
Pedro Navascués es catedrático de Historia del Arte y de la Arquitectura en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad Politécnica de Madrid y autor de numerosos libros de arquitectura española.
Esta celebración de hoy ha estado organizada por el Ayuntamiento de Gradefes, con la colaboración de la Asociación de Pendones Reino de León.
Más de una veintena de pendones llegados de distintas partes de la provincia han participado en un desfile que ha tenido lugar desde el pueblo de Gradefes, hasta el monasterio, donde se ha celebrado una misa.
Además de la intervención de Navascúes, quien ha contado los avatares para que San Miguel de Escalada consiguiera la declaración de Monumento Nacional, ha habido un concierto a cargo de la coral Escarcha.
(Fuente: EFE)

El Consell de Ibiza limpia el yacimiento romano de Can Servent una vez al año


El Consell limpia las hierbas que invaden el yacimiento arqueológico de Can Servent, en Sant Jordi (una cámara subterránea que servía para calentar las habitaciones o bañeras de una villa en la época romana y que se denomina hipocausto) una vez al año «cuando acaba la temporada de lluvias». Un portavoz de la institución explica que dentro de algo más de un mes, cuando se dé por terminada la época de lluvias, se retirará la maleza.
La maleza invade las instalaciones (Foto: Vicent Marí).

El hipocausto, que se encuentra entre el hipódromo y la autovía del aeropuerto, presenta un aspecto de abandono pese a estar protegido con la figura de Bien Catalogado (BC) y ser hasta hace poco el único que se conservaba en la isla. Fue descubierto durante las obras de la autovía. La excavación arqueológica del solar donde se construirá el nuevo colegio de sa Bodega, en la zona de es Clot, ha desenterrado ahora otro hipocausto, mucho mayor que el de Can Servent. En este caso, el Consell aún no ha decidido si se debe conservar también in situ. El proyecto del nuevo centro educativo afecta a este yacimiento.

Aparte del estado de abandono por las malas hierbas, la puerta de la verja de protección del yacimiento está abierta pese a tener un candado. Cualquier persona puede acceder al interior del hipocausto, aunque resulta bastante complicado llegar hasta el yacimiento. La valla de seguridad de la autovía que circunda la zona del hipódromo impide llegar hasta la verja que protege el hipocausto. Existe una puerta cerrada con un candado en el camino de sa Gamba Roja, paralelo al hipódromo, justo en el punto donde quedó cortado por la autovía. Para llegar hasta el yacimiento, se debe ir hasta el enlace de acceso a ses Salines o el aeropuerto. De allí, pasar por el lateral de la autovía en dirección hacia Vila: por la zona más próxima al asfalto sobre un drenaje de hormigón en forma de ´V´ y luego remontar un talud de tierra de pendiente muy pronunciada o bien ir pegado a la valla de protección por el cauce de otra canalización recubierta de vegetación que sirve también para drenar el agua de las lluvias.

Contradicción entre instituciones
El Consell explica que la mejora del acceso al yacimiento depende de una obra de la autovía que la conselleria balear de Obras Públicas debe ejecutar. Sin embargo, una portavoz de la conselleria asegura que no hay ninguna actuación prevista en esta zona ni la mejora del acceso al hipocausto. «Se han seguido las recomendaciones de Patrimonio y no se ha comunicado ningún cambio de criterio», apuntan las fuentes consultadas, que agregan que, en principio, se preveía que el acceso fuera solo para «arqueólogos o profesionales» y no del público en general. 

La conselleria balear de Obras Públicas asegura que ha cambiado varias veces los candados que se han roto de la puerta de la valla de seguridad situada junto al hipódromo, cuyas llaves están en manos del Consell.

La puerta está abierta
Pese a que el hipocausto está protegido por una verja de hierro, la puerta de entrada está abierta. Más complicado es llegar hasta el yacimiento después de sortear la valla de seguridad de la autovía y caminar por encima de los canales de drenaje situados en los laterales.
(Fuente: Diario de Ibiza)


26 de febrero de 2011

Cae al suelo parte de la torre del castillo de Torreparedones (Córdoba)

El derrumbe afecta a la fachada norte y a los accesos. 


Mes y medio después de abrirse al público el parque arqueológico de Torreparedones, uno de los referentes del yacimiento en el paisaje y en la historia, el castillo medieval, se ha venido abajo. Debido al mal estado en que se encontraba, se ha derrumbado la fachada septentrional, la fachada norte de la torre del Homenaje, que es la que da al interior del patio de armas. Ricardo Córdoba de la Llave, profesor de Historia Medieval de la Universidad de Córdoba, informa que el derrumbe ha afectado también a todo lo que es el ángulo noreste de la torre y "es muy importante porque se ha caído el lienzo completo hasta el nivel del suelo, y en la parte del muro norte se ha caído por debajo del nivel de los accesos de la torre".
Estado tras el derrumbe (Foto: Córdoba)
Ricardo Córdoba dirigió las excavaciones del 2007 y el 2008 en el castillo, financiadas por la Junta, y recuerda que ya entonces se vio el mal estado: "En el informe que entregamos a principios de verano del 2009 se señalaba que era urgente acometer la consolidación", afirma. Añade que la Comisión de Patrimonio hizo un suyas las propuestas del informe y sus recomendaciones "eran claras, que era urgente intervenir en la consolidación de las zonas excavadas y en los lienzos, que eran los más afectados".
El profesor Córdoba reconoce que lo que ha pasado era tan "previsible" que el año pasado, en el mes de abril, se hizo un escrito a la Delegación por parte del Ayuntamiento y él, como director de la excavaciones, "recordando la necesidad que había de acometer con urgencia la consolidación". Recuerda que la Delegación de Cultura se había comprometido a llevar a cabo la excavación, el estudio y la rehabilitación del castillo. Ahora es urgente la intervención, porque "todo lo que ha subsistido de la torre del Homenaje está más expuesto que antes a las inclemencias del tiempo y el resto de los muros sigue teniendo el mismo peligro".
La torre el día de la apertura al público (Foto: Córdoba)
El Ayuntamiento ya ha comunicado a Cultura que se ha caído parte de la torre y solicita "una colaboración plena" para poner en marcha un proyecto de actuación, alcanzando un consenso entre las dos administraciones para buscar los recursos necesarios.
El castillo forma parte del recorrido del parque arqueológico de Torreparedones.

25 de febrero de 2011

El monasterio de San Salvador de Oña celebra su milenario

Existe en la literatura castellana una licencia que nos permite «tomar la parte por el todo». Por eso podemos hablar ahora del «Milenario de Oña». No es la villa condal la que celebra sus mil años. Es el monasterio de San Salvador, que es, eso sí, el cogollo y la perla de Oña y que se ha plantado ya en ese honroso nivel cronológico.
Monasterio de San Salvador de Oña, Burgos.

Fue el 12 de febrero de 1011 cuando el conde don Sancho, nieto de Fernán González, dio en fundar en Oña (actual provincia de Burgos) un monasterio para que en él profesara su hija Tigridia. Fundación que ha llegado material e históricamente hasta nosotros con una vida tan brillante como azarosa. Tanto, que bien merece que a los mil años volvamos los ojos a su trayectoria y a sus tesoros espirituales, artísticos y culturales. Los muchos actos y celebraciones que llenarán el Milenario, ya se abrieron con una curiosa «Crónica de Oña» simulada en paneles ricos en dibujos, datos y comentarios. El Milenario de San Salvador nos obliga a retroceder al siglo XI, al corazón de la Edad Media.


Por aquellas calendas Oña fue una encrucijada en la historia de una Castilla casi en pañales. Por sus campos y sus calles cabalgaron condes y reyes. Algunos de ellos fijaron en Oña su sepultura. Lo más benéfico y saliente en la historia oniense vino a ser San Salvador, donde en 1035 era abad el monje Iñigo que, a su muerte, fue ya reconocido como santo. Iñigo pertenecía a la familia benedictina que ahondó en las mismas raíces de Castilla. Basta con decir que, en los años de Iñigo, vivieron aquí otros tres abades benedictinos que también fueron santos: García en Arlanza, Domingo en Silos y Sisebuto en Cardeña. Todo un cuadrilátero de espiritualidad, de cultura y de humanismo que explica la fecundidad de la Castilla del románico, de los códices miniados y del gregoriano litúrgico. A todo eso lo llamamos con ligereza Edad Media cuando, en los aspectos citados, fue una edad plena.

Con el fluir de la historia llegaron para Oña y San Salvador otros vientos. Por ejemplo, las desamortizaciones del siglo XIX que supusieron la expulsión de los monjes de su abadía, abandonada hasta que en 1880 la Compañía de Jesús la habitó y volvió a proporcionar a Oña días de gloria. Su Colegio Máximo, de alto nivel intelectual y de comunidad numerosa, dejó huella en la comarca por la fecunda labor pastoral de los jesuitas. Hasta 1967 San Salvador siguió haciendo historia. Su presente, hoy laical y asistencial, presta servicios sociales dignos de su vieja historia aunque diferentes de ella. Diríase que a esta altura de su Milenario, el pasado de San Salvador perdura en un presente modesto y se asoma a un futuro más bien incierto. Oña conservará siempre su paisaje grandioso y las bellezas de sus entornos. Y, sin duda, como lo demuestra el propio Milenario, el culto a sus tradiciones y el apego a su noble y milenaria historia. Por algo dijo recientemente Benedicto XVI que «sin memoria no hay futuro». 
(Fuente: Diario de Burgos)  

24 de febrero de 2011

El yacimiento de Atapuerca tiene siete nuevas entradas no excavadas

El trabajo, dirigido por el geólogo Alfredo Pérez González, "pretende dar un contexto geológico y morfológico a los yacimientos para conocer el paisaje que se encontraron los homínidos que poblaron este entorno", explica Ana Isabel Ortega, investigadora del Centro Nacional de Investigación sobre Evolución Humana (Cenieh) y coautora del estudio que publica la revista Archaeological Prospection.

Imagen de las nuevas entradas.Foto DiCYT
Hasta siete puntos se describen en el estudio como entradas desconocidas hasta ahora, la mayoría en el valle de Propiedad. Estas siete zonas son adecuadas "para posibles nuevas intervenciones", pero también ayudan a una labor fundamental en un yacimiento con tanta labor como Atapuerca: "Nos ayuda a planificar los lugares que pueden adquirir importancia en el yacimiento", señala la investigadora.

Desde hace dos décadas, el equipo que dirige Pérez González ha estudiado la evolución de Atapuerca edesde el Mioceno - hace 23 millones de años- y se ha centrado en el Pleistoceno (época geológica que ocupa el tiempo desde hace 2'59 millones de años a hace 12.000).

Los científicos han estudiado la evolución de la red fluvial y el efecto de erosión que ha producido en el paisaje, y han determinado "que los agentes que más cambios han producido en estas estribaciones de la sierra de Atapuerca han sido los ríos Arlanzón, Vena y Pico".

Ana Isabel Ortega ha estudiado concretamente la formación de cavidades, espacios que luego fueron ocupados por homínidos. "Estos 'usaban las zonas de entrada de las cuevas' para refugiarse. La formación de cavidades en esta zona está relacionada directamente con la formación de la cuenca del Arlanzón", ", afirman los expertos del Cenieh.

"Datar las terrazas del Arlanzón no es difícil", añaden "ya que la formación de las cuevas interiores se sucedió por la ocupación de los homínidos". Se sabe que existen restos humanos en la Sima del Elefante de hasta 1'22 millones de años.

En un principio, se conoció parte del karst (paisaje de relieve accidentado ocasionado por la erosión química en terrenos calcáreos) de Atapuerca por las diferentes entradas que se han realizado a él y por la trichera que forman las vías del ferrocarril. "Se sabe que es grande, pero no se puede acceder a todo su conjunto por estar colmatado actualmente", apunta Ortega.

Con la tomografía eléctrica de resistividad (TER), se pudieron identificar las geometrías endokársticas en los yacimientos de la Sierra de Atapuerca. La tomografía "permite el reconocimiento de una zona de una manera similar a la que actúa un TAC", explica la experta.

En líneas rectas se insertan claves que ofrecen impulsos eléctricos. La electricidad circula por el terreno y regresa al punto de partida. Según la respuesta de resistencia al impulso eléctrico, se conoce la composición del interior. Así, se pudieron describir huecos que formaron las antiguas cuevas. "Los vacíos son muy resistivos a la electricidad", explica Ortega.

Esta técnica, "menos invasiva y más barata" que otras empleadas para la exploración del subsuelo, ha permitido conocer conductos internos, nuevas cavidades en la Dolina o posibles entradas de cuevas.

El equipo investigador, que ha validado el método de trabajo con el TER en este tipo de yacimientos al publicarlo en la prestigiosa Archaeological Prospection, pretende ahora recrear de forma tridimensional los espacios encontrados en el subsuelo para determinar las zonas más interesantes que pueden hallarse todavía bajo la sierra.

El trabajo se ha realizado en el marco del programa de Geoarqueología del Cenieh, junto con investigadores del Grupo Espeleológico Edelweiss y del Área de Ingeniería del Terreno de la Escuela Politécnica Superior de la Universidad de Burgos.

23 de febrero de 2011

Abre sus puertas el yacimiento íbero de la Cueva de la Lobera (Jaén)

El yacimiento arqueológico del Santuario Ibérico de la Cueva de la Lobera, del siglo IV antes de Cristo y que se cree que estaba dedicado a una divinidad femenina, ha abierto sus puertas tras su adecuación y musealizalización.
Cueva de la Lobera, en Castellar (Jaén)
La Diputación Provincial de Jaén y la Junta de Andalucía han realizado una inversión de 60.000 euros enmarcada en el plan turístico "Viaje al Tiempo de los Iberos" para que este yacimiento, situado a un kilómetro de la localidad jiennense de Castellar pueda ser visitado.
Del legado de este yacimiento destaca la presencia de más de 3.000 exvotos -ofrendas en forma de figuras que usaban los íberos para comunicarse con los dioses-, entre las que hay una figura femenina que podría ser la propia diosa representada con dos ánades en los laterales, y que están expuestos en el Museo situado en Castellar, único del mundo dedicado a esta particularidad de la religión ibérica.
La delegada provincial de Turismo, Comercio y Deporte de la Junta de Andalucía, Antonia Olivares, ha explicado hoy en su visita al yacimiento que el Centro Andaluz de Arqueología Ibérica ha trabajado en el estudio sobre el sitio y las piezas encontradas, "una herencia que se debe potenciar como generadora de empleo y riqueza".
Santuario íbero de La Lobera.

El espacio histórico ha sido adecuado para su visita mediante la creación de una senda por la que el visitante podrá conocer y aprender el significado de este lugar sagrado para los íberos mediante paneles interpretativos.
(Fuente: Ideal)