google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri

1 de noviembre de 2011

Los recintos arqueológicos de la alcazaba de Badajoz deberán esperar a futuras intervenciones

La dirección técnica pide a Fomento una ampliación del presupuesto para consolidar algunos elementos. Arquitectos y arqueólogo defienden su trabajo de las críticas de la plataforma y dicen que todo se documenta


La rehabilitación que se lleva a cabo en la alcazaba ha sacado a la luz tres recintos arqueológicos que la empresa Cabero Construcciones entregará para una intervención arqueológica posterior.
"Estos espacios precisan de proyectos puntuales muy especializados que necesitan una documentación previa a una excavación muy seria y luego un proyecto arquitectónico de consolidación y musealización", según explicó el director técnico de esta obra, Julián Prieto, quien recordó que estos yacimientos deben convertirse en un museo abierto con sus respectivas explicaciones en cartelería, iluminación y mantenimiento.
Un tramo rehabilitado con la escalera almohade al fondo.
El presupuesto de 3,5 millones destinado a esta primera fase, que incluye el tramo comprendido entre la puerta de Carros y la del Alpéndiz, se está empleando para el objeto principal de esta actuación: eliminar las patologías de la muralla (especialmente la humedad) y definir recintos arqueológicos.
Una vez definidos, la intervención en estos requiere un presupuesto adicional para su posterior estudio y excavación, que podría dar lugar, incluso, "a la creación del incipiente Instituto Municipal de Investigación de la alcazaba", según Jorge López, uno de los arquitectos de la obra.
Los tres recintos delimitados hasta ahora son el entorno de la primera escalera almohade; el de la puerta del río, conocida como la puerta de la Coracha; y el entorno de El Metido. En todos ellos se han hallado estructuras y elementos singulares, no sólo de la época almohade sino posteriores.
Los trabajos se centran en estos momentos en la zona de la Torre de las Siete Ventanas hasta El Metido. Ya se ha ejecutado más del 70% de la obra y si el tiempo acompaña y no hay grandes sorpresas, la dirección técnica calcula que podría concluir en enero esta primera fase, dos meses antes del plazo previsto.
ELEMENTOS SINGULARES Con lo descubierto hasta ahora, según Julián Prieto, se puede hacer "una lectura bastante completa de la historia de la alcazaba y, por lo tanto, de la ciudad".
El vaciado de tierra de la zona interior para tratar las patologías de la muralla ha descubierto las cotas originales del lienzo, del siglo XII, dejando a la luz la verdadera dimensión del recinto amurallado en toda su altura y con sus edificaciones coetáneas.
La escalera almohade, que era conocida, pero estaba enterrada en gran parte, ha sido un hallazgo de interés porque "ha estado ligada al proceso constructivo del monumento, en ella se aprecian las marcas del proceso", según Jorge López.
Un grupo de operarios trabajan en un tramo de la muralla.
Otros elementos singulares son los peldaños que daban acceso a una muralla perpendicular que conectaba con una torre donde había un pozo para coger agua; o la tenaza, una pieza que se construyó en el siglo XVIII al desplomarse una parte de la muralla almohade debido a las lluvias. "Con técnicas reversibles hemos liberado el lienzo para que la tenaza se vea en su esplendor. Se ha reconstruido como todo el baluarte de Badajoz".
También se ha descubierto el blanqueado de las almenas en algunos puntos, donde la coronación del peto de la muralla estaba blanqueado en sus orígenes con estuco.
Otra estructura interesante es la puerta hallada en los lienzos almohades en la zona de El Metido, que se ha rescatado en su totalidad pero no se llegará al fondo porque, según Jorge López, "es muy complejo, aparecerían restos anteriores que hay que conservar. Esta obra es objeto de otra intervención", añadió.
También se ha dejado a la vista un caserío o barrio intramuros de época medieval, "que no sabíamos que tenía esa entidad", según José Manuel Márquez, arqueólogo de la obra, quien explicó que está por determinar si fue de ocupación almohade o posterior, ya que no se han excavado los espacios intramuros del caserío. "Sabemos que se abandonó y que la alcazaba se quedó como un solar para pastoreo".
MAS DINERO La dirección técnica está a la espera de la aprobación del reformado del proyecto inicial, que según aclaró Julián Prieto "no conlleva ningún aumento de presupuesto", es sólo un proceso administrativo por el cambio de finalidad de algunas partidas que se destinaron a arqueología.
No obstante, tiene previsto solicitar una ampliación de presupuesto para rematar los yacimientos arqueológicos.
POLEMICA Respecto a las críticas vertidas por la Plataforma por la Rehabilitación Integral de la alcazaba que denunció la ausencia de arqueólogos, la técnica y los materiales empleados en la rehabilitación, Jorge López aseguró que se produjo en la obra un "parón" de un mes en el verano, coincidiendo con las vacaciones del arqueólogo José Manuel Márquez, pero el resto del tiempo ha estado presente.
Respecto a la eliminación de inscripciones y grafitos, explicó que algunos revestimientos posteriores del tapiado se encuentran en un estado de deterioro tan grande que al tocar se caen porque el soporte es muy malo. Muchas de las reparaciones que se hicieron en el pasado se emplearon "materiales malos". Entre los siglos XVIII y XIX se utilizó ladrillo poco cocido "que luego se convierte en polvo", por ello aclaró que si alguna inscripción no se puede mantener porque no hay manera de conservarla "todo se documenta para su estudio".
Los arquitectos aseguraron que, en contra de lo dicho por la plataforma, "no se ha hecho ningún daño irreparable al monumento".

31 de octubre de 2011

Málaga decide tapar cuatro hornos nazaríes pese a estar en buen estado

Horno nazarí encontrado en la calle Dos Aceras de la capital malagueña.
Se suponían que los restos de unos hornos musulmanes hallados en una parcela municipal de la calle Dos Aceras del centro de la capital tenían un considerable valor arqueológico. Al menos, según el informe que había realizado Nerea Arqueología, porque ni la Delegación Provincial de Cultura ni el Ayuntamiento de Málaga han considerado que deben ponerse en valor y que puedan ser visitados por los malagueños, sino simplemente que sean protegidos cubriéndolos para conservarlos hasta que vuelvan a ser descubiertos. 

La decisión adoptada por la Comisión de Patrimonio y consensuada con la Gerencia Municipal de Urbanismo es que los cuatro hornos de la época nazarí, que formaban parte de un importante centro alfarero de la época, quedará bajo una capa de geotextil y grava en el sótano del centro ciudadano que el Ayuntamiento proyecta en la parcela. 

Cultura obligó al Consistorio malagueño a modificar la cimentación de la planta subterránea donde estaban proyectados 13 aparcamientos y que ya no podrán ser construidos para proteger los hornos. Pero pese a que había una propuesta de algunos técnicos para trasladar parte del horno y exponerlo en la planta baja del nuevo inmueble, finalmente se desechó esa posibilidad. El delegado provincial de Cultura, Manuel García, justificó la decisión en que el complejo alfarero encontrado "estaba muy deteriorado" y que sólo una parte del núcleo central de los hornos "merecía ser conservado". Aunque también reconoció que el hecho de que se ha apostado por ponerlos en valor es porque "según el proyecto del Ayuntamiento no es compatible con el uso previsto". Es más, García señaló que, la decisión la tomó Cultura "atendiendo a las alegaciones del Consistorio porque el proyecto constructivo del edificio era incompatible con el traslado de los restos a otro punto". 

El concejal de Urbanismo, Diego Maldonado, sin embargo, aseguró que el Ayuntamiento "lo único que va a hacer en este caso es seguir las directrices de Cultura que ha considerado que la forma de conservación más oportuna es tapar los hornos". 

La postura de ambas administraciones de no querer dejar al descubierto los restos nazaríes está en contraposición con el informe realizado por los arqueólogos durante la excavación y que resaltaba que "los cuatro hornos se han localizado en buen estado de conservación pese a haber sido construidos con adobe". De hecho, el más grande conserva toda la parte de barras, la cámara de cocción con los arranques de arco para las bóvedas que han desaparecido y la cámara de fuego completa, además de otras estructuras asociadas a este complejo alfarero que tuvo una continua actividad entre finales del siglo XIV y principios del siglo XIX. 

De momento, la empresa Corsán-Corviám adjudicataria de la obra entregará en dos días al ayuntamiento la modificación que ha realizado en el proyecto inicial relativa a la cimentación y los pilotes del sótano que desaparece, además de haber cambiado la escalera y el ascensor de sitio. Pero si nada lo remedia los hornos volverán bajo tierra.

(Fuente: Málaga Hoy)

30 de octubre de 2011

Un tesoro dormido en La Puebla de Arganzón (Burgos)


Una serie de excavaciones han descubierto en la Puebla de Arganzón un asentamiento erigido entre los siglos IX y X de enorme valor arqueológico • La Torre de La Concha guardaría estrecha relación con el castillo de Treviño.

Torre de la Concha en La Puebla de Arganzón.


En ocasiones los arqueólogos encuentran lo que buscan mientras que en otras las ruinas pueden hablar tan fuerte que delatan auténticos tesoros adormecidos por el paso del tiempo. Eso han descubierto los integrantes del equipo de arqueología de la Universidad del País Vasco (UPV) en el corazón de la torre de La Concha ubicada en un promontorio de roca natural sobre el desfiladero que discurre junto al río Zadorra en La Puebla de Arganzón.
A la espera de los últimos estudios que han comenzado a efectuarse en el propio laboratorio de la UPV, es posible asegurar que existe una fase de ocupación muy antigua cuyo inicio (a falta de determinar la fecha exacta) podría ubicarse entre el siglo IX y el X. Los textos ya mostraban una iglesia en la zona y también reflejaban que durante el mes de Ramadam, el hermano del emir Al-Hakam con sus ejércitos llega a la zona de Álava (cuyos límites discurrían tanto por Vitoria, Vizcaya y el propio enclave burgalés) pero sale derrotado a manos de los cristianos en el desfiladero llamado por aquel entonces de Arganzum.

Antecedentes
En Condado de Treviño ya se produjo el hallazgo de un castillo del siglo X, muy relevante pero, a diferencia de otros, no se trataba de una construcción en lo alto sino de una residencia señorial de gente poderosa que se reúne en un poblado y vive entorno a los nobles. «Ya sabíamos lo de Treviño y nos imaginábamos su valor arqueológico, pero lo de La Puebla de Arganzón fue una sorpresa completa», admite el director del proyecto y responsable del área de arqueología de la UPV, Juan Antonio Quirós.
A la espera de poder estudiar con detalle los materiales arqueológicos recuperados y realizar algunos análisis de laboratorio, se ha podido constatar que el lugar fue ocupado en la época alto medieval, que ya en plena edad media fue construida una primera torre y otro potente edificio que fueron desmantelados con posterioridad para construir la torre actualmente visible y su aljibe.
Se estima que sobre el año 1.000 se funda un verdadero centro de poder con una gran torre de más de tres metros, «y además aparece una casa señorial muy bien conservada y un poblado», especifica Quirós, al tiempo que relaciona la construcción con una familia probablemente laica vinculada a los condes alaveses más que a la monarquía navarra de la época. A finales del siglo XIII o a inicios del XIV, el poblado se abandona y se produce una transformación de todo el yacimiento, se desmonta la vieja torre y se levanta otra junto a una cisterna. Entrado el siglo XIV se construye el castillo que empieza a funcionar como una estructura de control del paso, hasta que nueve siglos más tarde, en el XIX, la torre fue ocupada durante las guerras carlistas.

Indicios e investigación
En cualquier caso, se sabía que ese paso adquiría relevancia histórica aunque lo único con lo que se contaba era con una torre y los restos de una cisterna. Fue entonces cuando el equipo arqueológico decidió contactar con la Junta de Castilla y León para poder efectuar una intervención valorativa de las ruinas. Se llevaron a cabo una serie de trabajos previos como recorrer el territorio a pie o sobrevolar en varias ocasiones la torre para fotografiar su entorno y comprobar que, efectivamente, estaba dispuesta sobre una plataforma y que había un recinto o muralla relativamente grande.
Tras estas primeras apreciaciones, los arqueólogos emplearon el método LIDAR (Light Detection And Ranging). Técnica que permite determinar la distancia desde un emisor láser a un objeto o superficie utilizando un haz láser pulsado; eso da la posibilidad de aclarar el panorama. Gracias al LIDAR se pudo hallar la cisterna, un profundo foso tallado en la roca, dos torres y una serie de irregularidades que corresponden a unos edificios. «A partir de este primer análisis, entendimos que se trataba de una estructura muy compleja y que era algo más grande e importante de lo que pensábamos inicialmente», destaca.
Durante seis semanas y media un total de ocho expertos en la materia efectuaron excavaciones, recogieron muestras y analizaron en unos cinco sectores de las ruinas. Quirós prefiere no hablar de castillo, porque como tal es apenas una parte de lo que se ha encontrado.
Las excavaciones se llevaron a cabo dentro de la torre, en el centro de la plataforma, en una segunda torre que demostró ser más antigua, en el poblado y en otros puntos de valoración más pequeños. «Si esto fuera así no solo se trataría del lugar fortificado más antiguo de todo el territorio de Treviño sino que, hasta el momento, de todo el entorno y no porque no los hubiera antes, puesto que hay registros tanto en municipio como Pancorbo o Lantarón o Miranda, lo que ocurre es que aún no hemos dado con ellas», describe. 

(Fuente: Diario de Burgos)

29 de octubre de 2011

Visita a las excavaciones de Puente Tablas y Cástulo (Jaén)

Con motivo de la celebración de las Jornadas Europeas de Patrimonio, que este año la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía ha dedicado a la "Arqueología y el Paisaje", hemos tenido la oportunidad de participar en una visita guiada a las excavaciones de la ciudad íbera de Puente Tablas y a la ciudad íbero-romana de Cástulo.
En Puente Tablas hemos sido el primer grupo en visitar el palacio del príncipe íbero que los arqueólogos han desexcavado este verano y los primeros en cruzar el umbral de la puerta de acceso a la ciudad que han encontrado hace pocas semanas. En Cástulo hemos admirado los mosaicos recientemente descubiertos, que indican al equipo de arqueólogos que van por buen camino en su búsqueda del foro de la ciudad. Por la tarde hemos visitado el Museo Arqueológico de Linares que alberga una excelente exposición fotográfica de las excavaciones y una impresionante colección de hallazgos durante las excavaciones. Os dejo una presentación con enlace a las fotografías de esta jornada intensa y memorable.

28 de octubre de 2011

Declarado BIC el yacimiento argárico de Barranco del Asno (Murcia)


El yacimiento Barranco del Asno se corresponde con un asentamiento de la Edad de Bronce, perteneciente a la Cultura Argárica y encuadrado cronológicamente entre el 2.200-1.500 A.C. Son ya más de 15 los yacimientos arqueológicos catalogados como Bienes de Interés Cultural en la localidad durante los últimos meses. 
Vista del yacimiento de Barranco del Asno
El yacimiento arqueológico Barranco del Asno en Puerto Lumbreras ha sido declarado Bien de Interés Cultural por la dirección general de Bienes Culturales de la Región de Murcia. Concretamente, el yacimiento se corresponde con un asentamiento en llano de la Edad de Bronce, perteneciente a la Cultura Argárica y encuadrado cronológicamente entre el 2.200-1.500 A.C.
La finalidad de la catalogación del yacimiento 'Barranco del Asno' es proteger y conservar el patrimonio arqueológico de la localidad. Según la concejala de Cultura y Turismo, Maribel Martínez, "este tipo de yacimientos ayudan a trasmitir la historia de la localidad en diversas épocas, y con este son ya más de 15 los yacimientos declarados Bienes de Interés Cultural en la localidad durante el último año".
De este modo, el yacimiento arqueológico se emplaza en el piedemonte de un relieve montañoso perteneciente al límite de la vertiente oriental de la sierra de las Estancias, 4 kilómetros al suroeste del núcleo de población de Puerto Lumbreras.
En el año 1999 queda recogida la delimitación del área arqueológica en el catálogo de yacimientos de la Carta Arqueológica de Puerto Lumbreras. En estos trabajos de prospección se documentaron fragmentos cerámicos, así como restos de una estructura que podría formar parte de una muralla.
Posteriormente, en el año 2006, el yacimiento fue estudiado nuevamente dentro de un trabajo global sobre la prehistoria de Puerto Lumbreras. Destacan el hallazgo de dos tumbas de clara filiación argárica: la primera, en unas parcelas de cultivos, junto a las casas localizadas al suroeste del yacimiento, se trataba de un enterramiento en cista, en cuyo interior se localizaron restos óseos y tres vasos cerámicos. La segunda constaba de una urna con tapadera en cuyo interior se hallaron también restos óseos.
En cuanto a los restos materiales, las cerámicas están representadas por producciones de factura tosca y la superficie exterior alisada. Tras la catalogación de este yacimiento, la dirección general de Bienes Culturales en colaboración con el Ayuntamiento de Puerto Lumbreras continúa trabajado en otros expedientes para proteger diversos yacimientos arqueológicos prehistóricos en la localidad.
En este sentido, el concejala de Cultura y Turismo, Maribel Martínez, ha señalado que "durante los últimos meses son ya más de 15 los yacimientos declarados Bienes de Interés Cultural en la localidad". Entre los yacimientos recientemente protegidos destacan Peña Blanca, la Cueva del Rayo, o el Aljibe de Poveda que pertenece a época romana.
(Fuente: Murcia.com)

27 de octubre de 2011

Logroño quiere conocer la carga arqueológica de los terrenos próximos a Monte Cantabria


Próximas excavaciones arqueológicas en el Monte Cantabria. Pero ¿qué ha sido de su plan director? ¿Y de su declaración de Bien de Interés Cultural? Por un lado, hay una zona de yacimiento arqueológico en la que ya se ha trabajado otras veces (yacimiento constatado) y otras tres áreas más (solo una de propiedad municipal), de 247.000 metros cuadrados, en las que se presume que podría haber restos de interés (áreas con carga arqueológica). Así, se trata de concretar, porque los resultados podrían condicionar el plan director y los pasos correspondientes para la declaración de Bien de Interés Cultural, indicó ayer la concejal de Cultura, Pilar Montes. Y de actualizar y ordenar lo que hay, y de calcular qué es yacimiento, qué es entorno del mismo y poder, de esta manera, tomar las decisiones adecuadas.
Vista de Monte Cantabria, en cuyo entorno se va a intervenir.
Por eso, ahora, de momento, se van a contratar varias actuaciones arqueológicas. Primero se ha rescatado una subvención que la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales del Ministerio de Cultura había concedido por un importe de 80.000 euros y que estaba sin gestionar. Y, después, se ha tramitado una petición de prórroga de diez meses para poder llevar a cabo estos trabajos previstos, que previsiblemente acabarán en mayo.
El paso siguiente tiene que darlo la Junta de Gobierno local y será la aprobación del pliego de condiciones para contratar la intervención. La actuación se desarrollará sobre todo en la gravera oriental del entorno de protección del yacimiento del Monte Cantabria, que es la parte, de los 247.000 metros cuadrados, que es de propiedad municipal.
 En las campañas arqueológicas de 1944 y 1945, los arqueólogos Blas Taracena y Augusto Fernández de Avilés descubrieron una parte importante de las murallas y torres que cerraban el recinto. La distancia que separa este poblado del asentamiento de La Custodia es de 4,5 km. Gracias a las campañas de excavación en el cerro (años 1977 y 1992), y de algunas prospecciones se han recuperado gran cantidad de fragmentos de cerámica manufacturada y torneada de tradición celtibérica con decoración pintada geométrica. También pesas de telar, una estela decorada, molinos circulares y otros elementos que prueban un asentamiento prerromano en su cumbre.


Por un lado, habrá una campaña de sondeos y caracterización arqueológica con un trabajo de campo, en el que, si se detectan restos arqueológicos en el subsuelo, estos serán exhumados. Se calcula que la excavación afectará, al menos, a 300 metros cúbicos de tierra. Después se limpiarán, catalogarán y almacenarán los hallazgos en el Museo de La Rioja.
Pero, además, en el yacimiento constatado, se realizará una documentación geométrica de los restos patrimoniales con el uso del sistema de coordinadas oficial, con levantamiento en planta de las estructuras arqueológicas descubiertas, con alzado mediante ortofotografía de la muralla... Y la última fase del proyecto recopilará y revisará toda la documentación existente sobre el yacimiento y su entorno de protección.
El concejal de Desarrollo Urbano, Pedro Sáez Rojo, dijo que se pretende «aportar rigor y seriedad contando con un mayor conocimiento del entorno». Montes apostilló que resulta «imprescindible para determinar la carga arqueológica de los espacios anexos al yacimiento y dará las pautas para el futuro».
(Fuente: La Rioja.com)

26 de octubre de 2011

Los expolios dejan a Jerez sin una parte de su legado histórico

El yacimiento de Mesas de Asta sigue siendo víctima de los expolios.
El yacimiento arqueológico de Mesas de Asta encierra buena parte de la historia de la comarca de Jerez. Sin embargo, el olvido de las administraciones permite que los restos sean objeto de expolio y sufran además los daños propios de las labores agrícolas que se desarrollan en la superficie.


Asta Regia conoció periodos de civilización desde tartésicos, romanos, visigodos y musulmanes. Hasta que fué abandonada en el S. XI en favor de Jerez de la Frontera.

El Ateneo de Jerez inaugura este miércoles unas jornadas que tratan de reivindicar la importancia de este yacimiento, en el que no se interviene desde el año 1956 a pesar de haber sido declarado Bien de Interés Cultural (BIC) por la Junta, lo que en teoría debía garantizar su protección.

La realidad es bien distinta. El presidente de esta entidad cultural, José Rodríguez, lamenta que los restos arqueológicos sigan siendo objeto de expolio a pesar de que los propietarios de la finca “ponen medios para tratar de evitarlo”.

Pero no sólo es la acción de los desaprensivos la que pone en peligro la conservación de este importante patrimonio. “Aquella es tierra de labranza, de manera que la propia herramienta agrícola provoca daños en el yacimiento. Además, a eso hay que unirle la lluvia, que arrastra los sedimentos. Se han llegado a dar casos de vecinos de Mesas de Asta que han encontrado en la calle objetos de valor después de las lluvias, como huesos, platos, monedas e incluso espadas”, asegura José Rodríguez.

El Ateneo plantea por tanto la necesidad de “poner en valor” a este patrimonio, llegando a un acuerdo con los propietarios de la finca e iniciando los trabajos necesarios para recuperar ese importante legado.

En opinión de Rodríguez, la prioridad es que las administraciones públicas adopten la “decisión” de poner en marcha un proyecto de recuperación que, incluso, podría a medio plazo convertirse en fuente de riqueza, tal y como ocurre en otros lugares que cuentan con yacimientos de características similares.

Desde el Ateneo de Jerez existe el convencimiento de que los vecinos de la barriada rural de Mesas de Asta “podrían vivir” de los restos arqueológicos con los que conviven.

(Fuente: Andalucía Información)

25 de octubre de 2011

Descubren una parte de la "espina" que dividía en dos el circo romano de Toledo


La excavación arqueológica que se lleva a cabo desde el verano en el circo romano de Toledo, que es uno de los mayores del Imperio romano, ha permitido empezar a descubrir "buena parte" de la espina del circo, que dividía la arena en dos calles por las que corrían los carros.
Restos del circo romano de Toledo.
Así lo ha avanzado hoy, en una rueda de prensa sobre Ciudades Patrimonio de la Humanidad, el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, acompañado por la subsecretaria de Cultura del Ministerio, Mercedes del Palacio.
El alcalde ha explicado como avanzan las obras de recuperación del espacio que ocupó el circo romano de Toledo y que ha estado degradado durante décadas y se ha utilizado como aparcamiento irregular de vehículos.
Ha avanzado que en la excavación arqueológica que se lleva a cabo ha aparecido "buena parte" de la espina del circo, que era la separación que permitía formar dos calles sobre la arena por donde corrían los carros.
García-Page ha señalado que "es ahora cuando más se está recuperando el circo romano" de toda la etapa democrática y ha indicado que hacia el mes de diciembre comenzará la ordenación urbana de la zona y las obras concluirán hacia los meses de febrero o marzo.
Del circo romano de Toledo se desconocen muchos aspectos aunque ha sido objeto de numerosas intervenciones arqueológicas desde el siglo XVIII pero, sobre todo, durante el siglo XX.
Este edificio se sitúa entre los cuatro de mayor tamaño de la 'Hispania' romana, y por tanto del Imperio, lo que pone de manifiesto el interés de 'Toletum' por equipararse a las principales ciudades y evidencia la riqueza que tenía la élite local.
Sus 423,10 metros de longitud y sus 100,80 metros de anchura se aproximan en tamaño al circo de Mérida -que abarcaba 433 metros de longitud y 114 de anchura- pero con la diferencia de que 'Emerita Augusta', 'Corduba' y 'Tarraco' eran las tres capitales de provincia hispanas, y 'Toletum' no lo era.
El circo de Toledo fue de los primeros en construirse fuera de Roma, porque la mayor parte de los que hubo se erigieron a lo largo del siglo II, y celebró carreras hasta principios del siglo V.
El aforo del circo rondaba las 20.000 personas, según el estudio publicado por la profesora de Historia Antigua y Arqueología de la Universidad de Castilla-La Mancha Rebeca Rubio.
(Fuente: ABC)