Las ruinas del convento franciscano de San Andrés de Muga se convertirán este año en el nuevo atractivo cultural de la localidad de Labastida. El Ayuntamiento iniciará este mes la rehabilitación de este histórico monasterio con el objetivo de poner en valor su patrimonio arqueológico y cultural.
Las ruinas según dibujo hecho en 1918 por Francisco Armentia Mitarte |
«Lo que queremos es rescatar del olvido este convento, del que sólo quedan ruinas y en estos momentos parece un vertedero. La idea es desarrollar un proyecto para dinamizarlo y recuperar también su entorno natural», explicó el alcalde de la localidad, Ignacio Gil.
Las ruEl Ayunrinas de este convento se encuentran a un kilómetro hacia el Sur de Labastida, en dirección a Gimeleo. Los trabajos en este monasterio se desarrollarán hasta el mes de abril y consistirán en la excavación de los restos arqueológicos del convento y de su iglesia. Al mismo tiempo, también se abordará la recuperación medioambiental del entorno.
El proyecto, que tendrá un presupuesto de 72.000 euros, se completará con la creación de un punto didáctico de información interpretativo del fenómeno de la vida monástica de la época moderna.
El Ayuntamiento de Labastida tiene previsto impulsar este nuevo enclave cultural mediante un ciclo de visitas guiadas y la organización de coloquios y conferencias sobre la historia del pueblo y la del convento de San Andrés de Muga. Además, y en relación directa con la reforma de este monasterio, se pondrán en marcha una serie de actividades y talleres que servirán para dar a conocer el patrimonio de Labastida.
Naturaleza
En concreto, se realizarán talleres de arqueología y arquitectura, de historia -para analizar entre otros asuntos la realidad cultural de la Rioja Alavesa-, de naturaleza, de arte o de tecnología. También se impartirán cursos para promover hábitos ecológicos y talleres olfativos y táctiles dirigidos a los invidentes, que aprenderán a distinguir los árboles y matorrales de la Rioja Alavesa. Además, el Ayuntamiento celebrará anualmente una romería en las campas del convento y desarrollará jornadas enológicas en las que fusionará la cultura del vino con diferentes artes.
(Fuente: El Correo)