La confección de la Carta de Riesgo de Córdoba se inició en el último trimestre de 1996 en el marco del Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico, tras la firma de un protocolo de colaboración entre la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Córdoba. Para ello se creó un equipo pluridisciplinar compuesto por técnicos de la Gerencia Municipal de Urbanismo, la Delegación Provincial de la Consejería de Cultura y la Dirección General de Bienes Culturales, así como por investigadores del Área de Arqueología de la Universidad de Córdoba.
El catálogo está actualizado a fecha de 2009 y en la página web se pueden consultar todos los puntos con riesgo arqueológico y el expediente correspondiente, en el que se delimita la procedencia de los restos que hay en el subsuelo.
La carta contiene una serie de documentos de carácter informativo, analítico y de propuesta que tienen como objetivo el conocimiento y protección del patrimonio arqueológico de la ciudad. Además, al apoyarse en un modelo histórico para la ciudad y su territorio, la Carta de Riesgo marca determinadas líneas prioritarias de investigación necesarias para el avance en el conocimiento general del pasado urbano.
La carta contiene una serie de documentos de carácter informativo, analítico y de propuesta que tienen como objetivo el conocimiento y protección del patrimonio arqueológico de la ciudad. Además, al apoyarse en un modelo histórico para la ciudad y su territorio, la Carta de Riesgo marca determinadas líneas prioritarias de investigación necesarias para el avance en el conocimiento general del pasado urbano.