Las excavaciones en el yacimiento arqueológico de Torreparedones siguen dando frutos. El último hallazgo han sido los restos de varias estatuas, que a falta de un estudio, serían hasta cuatro diferentes representando a divinidades sedentes o emperadores deificados en sus tronos, según el profesor de la Universidad de Córdoba Ángel Ventura.
Las esculturas , a la espera de ser extraídas para su estudio. |
El catedrático Carlos Márquez indicó que «muy probablemente las cabezas de Claudio y de Augusto puedan tener un anclaje con algunas de ellas». Aún se desconocen a quién representan, ya que todavía se tiene que documentar «cómo están aquí las piezas puestas, si proceden de un derrumbe, un cúmulo o de un depósito», comentaba el profesor Ventura, algo que no se sabrá «hasta que no acabe la excavación».
Para el catedrático de la Universidad de Córdoba, saber a quién pertenecerían estas esculturas ayudará a «poder entender el contexto de una ciudad romana del siglo I después de Cristo y a poder ver los detalles del interior de los edificios». Los restos de estas estatuas se han hallado «en la misma zona y dentro de la misma estancia», según indicaba el arqueólogo municipal, José Antonio Morena, en la que a principios del mes de diciembre se hallaba la cabeza del emperador Augusto, en la zona conocida como curia, que se está descubriendo «muy bien conservada y que va a tener muchas posibilidades».
Aunque estos nuevos restos escultóricos se han hallado en la curia, según indicaba Carlos Marquez, «no se sabe exactamente si todas proceden de la curia o alguna de ellas puede venir del templo». Para el profesor Ventura, «casi tan importante o más que los hallazgos escultóricos es el grado de conservación de la curia», ya que considera que «no hay una curia como esta, tan canónica».
Momento en el que es desenterrada la cabeza de la estatua de Augusto en Torreparedones a principios de diciembre. |
Según han avanzado las excavaciones en esta zona, los investigadores han podido identificar que «en el vestíbulo de entrada se encontraba el aerarium o tesoro local», afirmó Ventura, quien indicó también que «en la habitación donde se guardaban los fondos públicos está el hueco donde estaba la caja fuerte y enfrente del aerarium hay un nicho muy bien impermeabilizado con baldosas de barro con mortero y restos de madera carbonizada que es donde estaba el tabularium, el armario donde se guardaban los documentos públicos, el archivo de la ciudad».
Suelo de mármol íntegro
Del edificio de la curia, el profesor señalaba que «alcanzaría los quince metros de altura y tiene los mejores muros, la mejor obra arquitectónica para sostener el alzado y que, por lo que se ve en los pequeños sondeos en los que hemos llegado al suelo, conserva el pavimento de mármol íntegro».
Este edificio «era la pieza que faltaba para tener el foro completo», afirmó Ángel Ventura. Según el profesor, como el foro de Torreparedones «no hay en ningún sitio, completamente identificado en cada una de sus estancias». Para Carlos Márquez, «lo verdaderamente extraordinario del yacimiento de Torreparedones es la diversidad de esculturas, el número de ellas y la variedad de la tipología». Márquez señaló que «un descubrimiento de este número de piezas y de su variedad no se da en España desde el siglo XIX, cuando comenzó a salir a la luz la serie de esculturas de época adrianéa en Itálica».
(Fuente: ABC / Sandra Núñez)
Me encanta su blogs, es como estar al día en todo lo relacionado con nuestra historia, aquí en mi pueblo Baños de la Encina tenemos un legado prehistórico envidiable nuestro poblado de Peñalosa, nuestro castillo Milenario...
ResponderEliminarFeliz 2012
Hola Encarna. Tienes un pueblo precioso. He estado varias veces en Baños de la Encina y visitado su magnífica alcazaba árabe, tengo pendiente volver para visitar el poblado de Peñalosa. Gracias por tu comentario que me anima a seguir divulgando la profesionalidad de los arqueólogos en este país tan rico de legados.
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