Un nuevo sistema de georadar permite obtener más datos del desarrollo urbanístico en dos yacimientos arqueológicos catalanes, el ibérico del Molí de l'Espígol (Tornabous, Lleida) y el grecorromano de Empúries (Girona).
Yacimiento greco-romano de Empuries (Gerona). |
Según el Museo Nacional de Arqueología, que ha presentado hoy los resultados de las prospecciones, "ambos sistemas aplicados son métodos de exploración no destructivos, es decir, que no implican ninguna excavación, y por tanto no generan ni residuos ni erosión".
Estos resultados se utilizan como herramienta de planificación y prevención, para obtener una imagen del contenido del subsuelo (edificios, conducciones, pavimentos) e intervenir de manera más efectiva, seleccionando los objetivos de las excavaciones con información previa.
Empúries es el único yacimiento arqueológico de la península Ibérica donde conviven los restos de una ciudad griega con los restos de una ciudad romana, creada a inicios del siglo I aC.
El test de aplicación de uno de los sistemas de georadar más avanzados del mundo ha permitido visualizar los restos que se esconden en la zona de la ciudad romana de Empúries.
En Empúries se han escogido dos sectores de una hectárea cada uno, el del ángulo suroeste, y el de la parte norte de la ciudad.
En el primero, el georadar aporta datos de gran interés para ver cómo se articula uno de los principales accesos a la ciudad, con los tramos sur y oeste de la muralla y con la trama urbana interna, y ha permitido leer con mucho detalle las estructuras de las ínsulas (ámbitos, peristilos y pavimentos de las casas), tanto en extensión como en profundidad.
En cuanto al segundo sector, identifica diversas estructuras urbanas de una parte muy desconocida hasta ahora por los arqueólogos: la trama urbana del centro y el sur de la ciudad romana.
En el poblado ibérico del Molí d'Espígol, el ejemplo de urbanismo más desarrollado entre las poblaciones de los ilergetas en Cataluña, las prospecciones con georadar se realizaron en el área urbana del yacimiento, de la que ya se ha excavado cerca de un 40%, mientras que en la parte suburbana, de la que sólo se tenía noticia a partir de sondeos puntuales, se utilizó la magnetometría.
Los resultados de la prospección con georadar en el Molí d'Espígol han permitido describir buena parte de la trama urbana aún inexplorada (partes central y este) en una extensión de cerca de 6.500 metros cuadrados, con la definición de diversos ejes viarios, barrios de casas y buena parte del trazado de la muralla más exterior que rodeaba la ciudad.
Estos trabajos han confirmado las hipótesis sobre el urbanismo del yacimiento, así como el conocimiento de nuevos datos que abren perspectivas a la interpretación de manera extensa y casi completa de la organización interna del yacimiento, que no habrían podido obtener por los trabajos arqueológicos convencionales.
Gracias a estos resultados, los especialistas a cargo de los yacimientos podrán planificar futuras excavaciones de forma selectiva, a la vez que supone un ahorro en recursos económicos.
El nuevo sistema de radar STREAM-X, desarrollado por la empresa italiana IDS, incorpora innovaciones que permiten explorar grandes extensiones en poco tiempo (hasta 4 hectáreas diarias) con una precisión y un precio imposibles hace tan sólo cinco años.
(Fuente: EFE)
No hay comentarios:
Publicar un comentario