google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri

27 de enero de 2023

Se lanza al mercado el primer videojuego educativo sobre arqueología e historia

Archaeologist ofrece la oportunidad de introducir a los jóvenes a partir de 12 años y a los adultos en el apasionante mundo de la arqueología y la historia de una forma lúdica. Este juego cuenta con 8 excavaciones localizadas en yacimientos reales ubicados en 5 países diferentes.

Los videojuegos son un medio de difusión cultural y entretenimiento, aunque también tienen un gran potencial educativo.

De hecho, los juegos llamados serious games sirven para dinamizar la educación, facilitando la asimilación y retención de contenidos. Estos diseños también incrementan la motivación e interés de los alumnos por aprender y facilitan la práctica.

Además, los videojuegos educativos contribuyen a formar a los estudiantes en materias concretas. En este sentido, Archaeologist ofrece la oportunidad de introducir a los jóvenes a partir de 12 años y a los adultos en el apasionante mundo de la arqueología y la historia de una forma lúdica.

Este juego cuenta con 8 excavaciones localizadas en yacimientos reales ubicados en 5 países diferentes. A través de cada uno de estos escenarios los ‘gamers’ pueden conocer las claves de diferentes etapas de la historia, desde la Prehistoria hasta la Edad Moderna, excavando como los arqueólogos y analizando los restos en cuatro laboratorios sorprendentes.

Una aventura arqueológica educativa
Quien juega a este videojuego educativo tiene la posibilidad de convertirse en arqueólogo y descubrir las culturas y formas de vida de distintas civilizaciones.

La propuesta del juego consiste en trabajar en escenarios virtuales reproduciendo acciones reales para mejorar el aprendizaje y la retención de conceptos de forma divertida. Y siempre acompañados por un profesional de la arqueología que guía al jugador durante toda la aventura. Por eso es una herramienta ideal para conocer y desarrollar diferentes contenidos, tanto en las aulas como en casa, a través de la gamificación.

Puesto que la arqueología genera conocimientos a partir del descubrimiento, con esta herramienta los alumnos se ven alentados a plantear preguntas, buscar respuestas, delinear hipótesis y encontrar distintas soluciones a los problemas que van surgiendo.

Archaeologist está disponible en español, inglés y catalán, y se puede disfrutar tanto en casa como en las clases de ciencias sociales, historia, geografía, cultura clásica y tecnología, entre otras asignaturas, ya que para jugar tan solo hace falta un ordenador con internet. Y además, en el caso de los centros docentes, permite a los profesores organizar actividades grupales y realizar una evaluación sobre lo aprendido por los alumnos.
Aprender en cualquier momento y lugar con videojuegos educativos

Archaeologist permite establecer comparaciones entre distintos períodos de la historia y acerca a los usuarios las respuestas que los seres humanos han tenido ante diversas circunstancias y desafíos. Y todo ello sin barreras espacio-temporales, ya que permite continuar reproduciendo las experiencias de un arqueólogo desde casa y en cualquier momento.

Mientras un niño, un joven o un adulto juegan a Archaeologist desarrolla habilidades que le permiten activar el pensamiento crítico, porque durante las actividades que se proponen es necesario trabajar como un científico, comprobando hechos y llegando a conclusiones. Y además, este videojuego sirve para comprender la importancia del patrimonio histórico como un bien que se debe conservar.

Así que con el uso de videojuegos educativos como Archaeologist es posible facilitar la asimilación y el aprendizaje de distintos contenidos de una manera dinámica, ágil y divertida para los alumnos.
(Fuente: El Confidencial)

26 de enero de 2023

Cartagena garantiza la excavación en El Molinete con dos millones de euros

La protección de los restos arqueológicos que pueda contener la zona será una prioridad
El Ayuntamiento asegura  garantizar la conservación y puesta en valor del yacimiento y de los restos arqueológicos que se encuentren.
El Ayuntamiento de Cartagena tiene reservados 1,8 millones de euros para iniciar las excavaciones en la ladera oeste del Molinete, concretamente, de las parcelas situadas en las calles Morería Baja, Alta y Canterías, así como la parcela de la ladera este.

Así lo ha confirmado la concejal de Turismo, Cristina Pérez, tras reunirse con la Coordinadora del Molinete, a la que ha explicado los planes municipales para proseguir las excavaciones en el cerro, y cuyo proyecto de excavación presentó el Gobierno a la convocatoria de los planes de sostenibilidad turística en destino, dotados de 5 millones de euros, y que fueron rechazados.

“A esa convocatoria europea, el Ayuntamiento presentó un proyecto basado en las sugerencias de la Coordinadora del Molinete pero fue rechazado. En cualquier caso, desde el Ayuntamiento garantizamos la excavación de las laderas este y oeste del cerro con casi 2 millones de euros”, ha asegurado la concejal.

“Las bases de la convocatoria actual exigen finalizar los trabajos de musealización en 2026, lo que hace inviable la presentación del proyecto, que requiere la excavación de unos restos muy delicados, el estudio de los mismos y su consolidación, el proyecto de musealización y su construcción en el plazo de tres años”, ha dicho la concejal.

Cristina Pérez ha asegurado que los planes arqueológicos del Gobierno pasan por completar las excavaciones en El Molinete, para lo que se cuenta con la supervisión de expertos independientes, que ya dieron el visto bueno a los proyectos de excavación propuestos por el Ayuntamiento.

“Desde el Ayuntamiento de Cartagena tenemos muy claro que la protección de los restos arqueológicos que pueda contener el Molinete es una prioridad, y con la excavación garantizamos la conservación y puesta en valor del yacimiento y de los restos arqueológicos que se encuentren, a la vez que contribuiremos a revitalizar la zona”, según Pérez.

La concejal ha recordado que el Gobierno no ha dejado de trabajar en este yacimiento emblemático, que abrió en 2021 el Museo del Barrio del Foro, que ya es uno de los más visitados de nuestra oferta turística, además de proseguir con las excavaciones arqueológicas en el Templo de Isis.

Un videojuego de paleografía estudia la vida del campesinado en la Edad Media

La investigadora de la Universidad de Salamanca Ainoa Castro se adentra en manuscritos medievales y con casi un millón de euros elabora el primer catálogo de fuentes diplomáticas gallegas con acceso abierto, el videojuego de aprendizaje 'Scribe of Ages' y la plataforma digital de escritura visigótica 'VisigothicPal
Ainoa Castro lider del Grupo de Investigación Antigüedad Tardía y Alta Edad Media. USAL

La científica de la Universidad de Salamanca Ainoa Castro, líder del grupo de investigación en Antigüedad Tardía y Alta Edad Media en Hispania de la institución académica salmantina, se adentró en manuscritos medievales con el objetivo de descifrar el papel del campesinado durante la Edad Media, merced a un innovador proyecto de investigación sobre la escritura medieval en la Península Ibérica entre los años 900 y 1.200.

Dotado con una financiación de 995.040 euros de los fondos europeos de la convocatoria ERC Starting Grants del Consejo Europeo de Investigación, el proyecto de la Usal incluye el desarrollo del “pionero” videojuego ‘Scribe of Ages’, que sumerge a todos aquellos interesados al mundo de la paleografía a través de una aventura gráfica por reconocidos códices peninsulares. Además, según avanzó la investigadora, logró la elaboración del ‘Catálogo de fuentes diplomáticas gallegas’, “primero tanto en formato digital como en formato impreso que reúne todos los documentos conservados para Galicia de entre los años 900 y 1199, en acceso abierto”, y por último, la plataforma ‘VisigothicPal’, “un novedoso recurso en línea para el estudio de la escritura visigótica y sus fuentes manuscritas”.

La iniciativa de investigación, cuyo objetivo principal es explorar el rol del campesino en el mundo de la escritura y las implicaciones del uso de la escritura en la modelización de la sociedad, se prolongará hasta 2025 estructurada en torno a un “análisis crítico y contextualizado de la trilogía formada entre escribas, firmantes y lectores” Con ese objetivo en mente, los investigadores de la Usal se acercan en su trabajo a las comunidades rurales medievales del noroeste ibérico desarrollando “una nueva metodología para agregar la propia voz de la clase media y los campesinos a la discusión sobre la escritura”, según destacó el vicerrector de Investigación y Tranferencia, José Miguel Mateos Roco.

La mayoría de los manuscritos medievales conservados son “aquellos que interesaban a los poderosos, pero existen otros que también han sobrevivido y que muestran otra faceta de la sociedad medieval”, explicó. Así, el proyecto ‘PeopleAndWriting’, que además estrena web para almacenar los contenidos, propone explorar esta combinación de manuscritos y gente común para descubrir “qué implicó la escritura para las comunidades laicas y cómo modeló su cotidianidad”.

El trabajo interdisciplinar emplea un “método nuevo” que combina estudios de ciencias y técnicas historiográficas, historia, antropología y otras ramas de la ciencia para descubrir “la intrahistoria” de aquellos que escribieron, firmaron, leyeron y conservaron estos textos. En comparación con otras áreas europeas, las fuentes de la Península Ibérica son “menos abundantes, más escasas en datos personales”. Además, instituciones y élites ejercían “un control total sobre la producción escrita, decidiendo no solo qué se producía sino también qué se conservaba”, explicó la investigadora principal.

Por ello, el método tradicionalmente aplicado en el estudio de fuentes documentales no es viable para su objetivo de investigación, por lo que la nueva metodología desarrollada por los investigadores de la Usal propone “ir al revés” y se centra en “los individuos, sus interacciones sociales y su vínculo con la escritura para comprender mejor la producción escrita de ese periodo de la Historia, abordando, además, el corpus no registrado de manuscritos de la Península Ibérica”.

El videojuego y la plataforma paleográfica
Entre los recursos elaborados por el proyecto destaca el ‘Catálogo de fuentes diplomáticas gallegas, años 900-1200’, que se convierte en el primero, ya sea digital o en formato impreso, que reúne todos los documentos conservados para Galicia de entre los años 900 y 1199. En total reúne más de 3.500 referencias a las que el usuario puede acceder a través del buscador incorporado en la web. De cada registro se incluye una ficha descargable con toda la información básica. Este recurso se revela como una “herramienta fundamental” para realizar cualquier tipo de investigación de carácter histórico del noroeste peninsular y “supone un gran logro”, según Castro, dado que es el primero en conseguir reunir toda esta información y ponerla al servicio del público.

Por otro lado, a través de la práctica paleográfica centrada en manuscritos clave de producción peninsular de los siglos VI al XIII, el videojuego Scribe of Ages revive la evolución de la cultura escrita “repasando los modelos gráficos replicados por los escribas profesionales y las temáticas de producción escrita más características”.

Se trata de un videojuego desarrollado por un equipo interdisciplinar de profesores e investigadores de la Usal con la intención de acercar “de forma amena” los manuscritos medievales a estudiantes, y a todo aquel interesado en este tipo de fuentes, animando a iniciarse en el estudio de la rica cultura manuscrita peninsular. Odoario, un monje robot enviado al pasado por sus hermanos cenobitas para recuperar el saber perdido medieval, es el personaje principal del juego. Junto con el peregrino Gabriel, acompañan al jugador en un viaje directo a través de nuestro pasado desde el siglo VI hasta el siglo XIII por Córdoba, Toledo, Silos, Cogolla o Ripoll y las distintas escrituras visigótica, carolina o gótica, entre otras.

El jugador deberá superar ocho niveles llenos de práctica paleográfica y contexto histórico en el que los secretos escondidos en los códices irán siendo desvelados. Titivillus, un monje caído en desgracia contemporáneo de Odoario y enloquecido por los secretos ocultos en los textos, añadirá obstáculos al mismo tiempo que se descubre la ardua tarea del maestro copista.

Por último, VisigothicPal es un recurso online para el estudio de la escritura visigótica y sus fuentes manuscritas. El objetivo de esta plataforma es “facilitar y perfeccionar” el estudio de este tipo de escritura, además de “concienciar a la comunidad científica” sobre las necesidades y posibilidades de realizar investigaciones basadas en fuentes primarias y difundir la investigación ya realizada, o en curso, en el campo de estudio.

Arranca la restauración del Castillo de Aguilar de la Frontera

Los trabajos consisten en la recuperación de dos torres y de un lienzo de muralla de la fortaleza cordobesa.
Inicio de las obras en el Castillo de Aguilar de la Frontera. / EL DÍA

El año 2023 arranca en el yacimiento arqueológico del Castillo de Aguilar de la Frontera de la mejor manera. El concejal de Cultura, Antonio Cosano (IU), ha dado el pistoletazo de salida al comienzo de las obras de restauración del frente oeste de la fortaleza aguilarense, junto a la empresa y dirección responsable de la misma, adjudicada a la empresa local Mitronar.

Estos trabajos pretenden restaurar, consolidar y poner en valor dos torres y un lienzo de muralla que datan de los siglos XIII y XIV y que corresponden a la zona más antigua del monumento.

Con esta intervención, el Ayuntamiento de Aguilar de la Frontera pretende continuar con su "apuesta por la recuperación del patrimonio histórico y dar un paso más en la protección, conservación y difusión de uno de nuestros monumentos más emblemáticos".

Esta intervención se lleva a cabo a través de la línea de subvenciones de Bienes Inmuebles de la Diputación de Córdoba y la aportación del propio ayuntamiento de Aguilar de la Frontera.

25 de enero de 2023

Hallados fósiles de la Edad de Hielo en una cueva de Santomera (Murcia)

No se han encontrado restos humanos pero sí han aparecido piezas líticas que se usaban para cazar y que podrían indicar que la zona fuera un asentamiento neandertal
Excavación arqueológica en la Cueva de La Capilla (Santomera, Región de Murcia) / Asociación Patrimonio Santomera

Las excavaciones arqueológicas que la Asociación Patrimonio de Santomera está desarrollando en la cueva de La Capilla, situado en el monte de Los Ásperos, han permitido hallar fósiles de grandes mamíferos como el caballo (Equus ferus) o ciervo (Cervus Elaphus) consumidos por humanos hace 20.000 años, en la Edad de Hielo.

En declaraciones a EFE, el arqueólogo y director del proyecto, Miguel Pallarés, ha explicado que todavía no se han encontrado restos humanos pero que sí han aparecido piezas líticas, derivadas del trabajo de la piedra, que se usaban para cazar y que podrían indicar que la zona fuera un asentamiento neandertal.

Así, ha señalado que los trabajos actuales son "muy superficiales" y que espera "poder dar la sorpresa" en futuras campañas, con la aparición de alguna galería "con huesos humanos o pinturas rupestres".

El yacimiento se descubrió en 2018, documentándose entonces varias fases cronológicas en relación a los materiales que aparecieron en superficie, con periodos que alcanzan el Paleolítico Medio (100.000-40.000 años antes del presente) con la presencia de neandertales .
Se trata de una zona orientada al sur que controla visualmente varias vías de comunicación (Rambla Salada, la Cañada Perdida o el corredor por el que pasa la autovía A7) que fueron transitadas desde épocas remotas, tanto por la fauna salvaje como por pastores trashumantes en épocas más recientes.

A estas condiciones se le suma la riqueza biológica del área por su proximidad a la Rambla Salada, fuente de aprovisionamiento de materias primas, como el mineral sílex.

Por el yacimiento han pasado especialistas como el profesor de Prehistoria de la Universidad de Murcia (UMU) Ignacio Martín Lerma, el paeloantropólogo de la Universidad de Barcelona y especialista en Neandertales João Zilhão y el profesor emérito Michael Walker catedrático de Paleoantropología de la UMU.
(Fuente: EFE // M. Sánchez)

El yacimiento romano donde se encontró el Baco de Aldaia es hoy un vertedero

Denuncian el «grave deterioro» de la zona que supone los primeros vestigios de civilización encontrado en el término municipal
Jesús Molins, en la zona donde está el yacimiento. PP

El lugar en el que a finales del siglo XIX y a principios del XX se encontró el famoso Baco de Aldaia, una pieza que custodia el Museo Arqueológico Nacional, en Madrid, es actualmente un espacio degradado y rodeado de vertederos. Así lo ha denunciado el Partido Popular de la población, tras una visita a la zona que alberga el yacimiento Ereta del Moros, realizada por su candidato a las elecciones municipales de 2023, Jesús Molins, así como algunos ediles. «Es lamentable el estado de abandono del propio yacimiento y de su entorno. 

No puede presumir el gobierno local de abanderar la cultura cuando el origen de la época romana de Aldaia es actualmente una zona abandonada, que tiene el yacimiento arqueológico sin proteger, ni poner en valor y su entorno salpicado de vertederos ilegales que claramente son una degradación medioambiental inaceptable», ha criticado Jesús Molins.

El yacimiento de Ereta del Moros data de los siglos I y II, cuando en ese punto hubo una importante villa romana (que desaparecería en el siglo III), dedicada fundamentalmente a la agricultura y a la producción de vino, y es el vestigio más antiguo de un núcleo poblacional en el término municipal, más allá de la alquería musulmana que siglos después dio lugar al actual casco urbano.

Las excavaciones realizadas allí se realizaron en diversas campañas y, de hecho, el propio Baco se encontró en dos piezas, con varias décadas entre cada hallazgo (entre 1884 y 1924). La primera fue localizada por casualidad por Pascual Simón en 1884 cuando trabajaba en un campo de su propiedad y, a partir de ahí, se realizaron las prospecciones arqueológicas que permitieron, años después, encontrar el resto del cuerpo. No obstante, solo se ha estudiado y excavado una pequeña parte de este yacimiento «cuya extensión debe ser mucho mayor», valora el PP, que también señala la importancia de toda la zona, como han manifestado en sus trabajos destacadas arqueólogas como Rosa Albiach y Carmen Aranegui.

El Baco está representado en esa escultura con corona de flores, desnudo a excepción de una piel de ciervo y calzando sandalias. Llegó al Museo Arqueológico Nacional en 1931 y allí está junto al llamado Apolo de Pinedo. Existen diversas réplicas, una de ellas situada en el recibidor del Teatro Autitorio Municipal de Aldaia (TAMA) y otra en el Museo de la Beneficencia de València.

Desconocida en Aldaia
El Partido Popular ha puesto de manifiesto que el yacimiento y el propio Baco son un patrimonio desconocido en la población y para la comunidad escolar. «Los alumnos de los colegios de Aldaia deberían conocer el origen y la historia de nuestro municipio y poder visitar un yacimiento en condiciones. Actualmente, si alguien visita la zona, lo que se encuentra son vertederos ilegales, con escombros, restos de uralita altamente contaminante por amianto, neveras destrozadas a la intemperie, y mucha suciedad. Es un espectáculo lamentable en una zona que en su día fue una explotación agrícola fértil y prospera», critica Jesús Molins.

Propiedad privada
Por su parte, fuentes del gobierno local socialista de Aldaia han manifestado que la «dificultad» para actuar en este terreno es que es «de titularidad privada» lo que dificulta cualquier actuación «sin obtener previamente el permiso», incluso la limpieza cuando no está en condiciones. «A día de hoy, el ayuntamiento debe contar inexcusablemente con la autorización del propietario», añaden. En este sentido, al conocer por este diario el estado en el que se encuentra la zona que alberga el yacimiento, «de la misma manera que se actúa en otros terrenos particulares en los que se producen vertidos, el ayuntamiento procederá a notificar a los propietarios su obligación de mantener sus propiedades en buen estado», explican.

Respecto a las acciones del consistorio en los últimos años en la zona, las mismas fuentes explican que se ejecutaron catas en el punto donde se excavó a finales del siglo XIX y principios del XX, pero a la hora de intentar comprobar si el yacimiento tiene mayores dimensiones y plantearse una expropiación, los terrenos del entorno también son privados y la propiedad no ha permitido pasar un georadar por encima.

Concluye la reconstrucción de la puerta Norte del poblado de Santa Trega en A Guarda (Pontevedra)

La puerta Norte del castro de Sta. Trega destaca dentro de la arqueología castrexa por su excepcional conservación. Una larga escalera de piedra, flanqueada entre muros, asciende la ladera hasta la puerta que franquea el paso al interior del poblado.
La actuación se enmarca en el proyecto Trega 2000+5, liderado por el CSIC a través del Instituto de Historia, en colaboración con el Concello de A Guarda (Pontevedra).

La empresa Terra Arqueos ha concluido los trabajos arqueológicos realizados desde diciembre en la entrada Norte del poblado de Sta. Trega que han derivado en la reconstrucción de dicha zona.

“Son los primeros trabajos en los que se lleva a cabo la reconstrucción completa de la puerta de un poblado castrexo. Desde ahora el visitante dispone de una imagen muy aproximada de cómo era el acceso a los castros durante la Edad del Hierro”, explica Brais X. Currás, investigador del Instituto de Historia del CSIC.

La puerta fue excavada entre los años 1910 y 1920 por la Sociedad Pro Monte guardesa con el asesoramiento del arqueólogo Ignacio Calvo. Años más tarde, Cayetano de Mergelina registró planimétricamente aquellos trabajos.

“El dintel apareció caído in situ, al pie de la puerta. Ahí ha permanecido durante casi un siglo, esperando a su restitución al lugar original. Las jambas de la puerta, en cambio, están desaparecidas, pero la solera conserva las marcas donde iban asentadas. La reconstrucción, ahora, de la puerta Norte del poblado ha implicado una gran complejidad técnica. Los trabajos consistieron en la reconstrucción parcial de la muralla y la restitución del dintel. Para ello, se emplearon exclusivamente medios manuales, con la ayuda de cinchas de amarre y poleas, evitando utilizar maquinaria. Las jambas, que están perdidas, se sustituyeron por reproducciones y se colocaron en el lugar original”, dice Brais X. Currás.

Durante la Edad del Hierro y hasta la llegada de Roma, el paisaje estaba formado por una sucesión de aldeas fortificadas, opuestas y enfrentadas entre sí: los castros. Todos estos poblados estaban cercados por una muralla que simbolizaba ese enfrentamiento, representando la identidad de cada comunidad castrexa frente a las demás y garantizando además la seguridad del grupo. Por eso las murallas, los fosos y las estructuras de acceso, son los elementos más visibles de los castros y aquellos en los que se invirtió más trabajo y se puso más cuidado.

La puerta Norte del castro de Sta. Trega destaca dentro de la arqueología castrexa por su excepcional conservación. Una larga escalera de piedra, flanqueada entre muros, asciende la ladera hasta la puerta que franquea el paso al interior del poblado. Todo un complejo diseño arquitectónico pensado para que quien entrase tuviese que atravesar este pasadizo y no pudiese ver el interior del poblado. El sistema de acceso al castro tiene así un importante componente escénico y ejerce un control físico sobre las personas que acceden al poblado. La muralla y la puerta son un símbolo de poder. Son la principal expresión de la comunidad que habita el castro y el modo en que se presentan hacia el exterior, hacia los otros castros.

La importancia de los trabajos realizados en la puerta radica en que, por primera vez, el visitante dispone de una imagen muy aproximada de cómo era el acceso a los castros durante la Edad del Hierro.

La actuación fue llevada a cabo por la empresa Terra Arqueos bajo la dirección de Miguel Ángel López Marcos, restaurador con amplia experiencia en este tipo de actuaciones. Se enmarca en el proyecto Trega 2000+5, que se basa en la colaboración entre el grupo de investigación Estructura Social y Territorio – Arqueología del Paisaje (EST-AP) del Instituto de Historia del CSIC y el Concello de A Guarda, y tiene como objetivo desarrollar el potencial patrimonial, social, cultural y científico del castro del Trega a través de una actuación integral.

Este proyecto se desarrolla en torno a tres ejes: recuperar y consolidar los sectores del castro excavados entre 1910 y 1930; mantener de forma sostenida en el tiempo el conjunto de las estructuras excavadas y expuestas al público; e investigar y profundizar en conocimiento arqueológico del Trega con la finalidad de crear nuevos contenidos destinados a la divulgación y al incremento de la valorización del patrimonio.

Promovido por el Concello de A Guarda, ha contado con el respaldo financiero del Padroado do Monte Trega y la colaboración de las Comunidades de Montes da Guarda y Camposancos. Esta primera campaña dispone de una financiación de 23.691 € aportada exclusivamente por el Padroado.

“Esta actuación contribuirá a la valorización patrimonial del castro de Santa Trega como parte de una estrategia que apuesta por potenciar su valor como recurso cultural y turístico, y también por su relevancia científica en el estudio de las sociedades de los castros”, destacan desde el Concello de A Guarda.
(Fuente: CSIC)

24 de enero de 2023

Brazatortas recupera su historia más antigua

La acción que financia el Ayuntamiento en el yacimiento de Cruz de Mayo data el enclave entre los años 101 y 89 a. C. El alcalde felicita al equipo de arqueólogos por su “denuedo” en las prospecciones
Zona enlosada que ha dado la cara en las prospecciones de 2022 / Lanza

El alcalde de Brazatortas (Ciudad Real), Pablo Toledano, valora “enormemente los resultados que se están obteniendo en nuestro yacimiento arqueológico de Cruz de Mayo, desde que comenzaron unas prospecciones que se están llevando a cabo exclusivamente con recursos municipales”.

Pablo Toledano agradece así al equipo de arqueólogos liderados que integran David Oliver, Alfonso Monsalve y Paula Chirosa, “el empeño que nos trasladaban cuando nos plantearon un proyecto cuyos descubrimientos se están sucediendo constantemente”.

El regidor alude así a los informes y memorias que están trasladando al Consistorio estos profesionales y que, en lo relativo a la campaña 2022, según reflejan, “pese las duras condiciones meteorológicas ha resultado un éxito a nivel científico”.

Y es que los nuevos hallazgos obtenidos durante la misma han permitido documentar materiales arqueológicos que datan el yacimiento entre los años 101 y 89 antes de Cristo, es decir que el enclave estuvo ocupado durante la República de Roma “y era contemporáneo a otros como Sisapo en pleno Valle de Alcudia”, refieren los estudiosos.

“Se trata de una gran noticia para nuestra localidad, no solo por lo que entraña apuntalar la historia más antigua de Brazatortas sino también porque, ahora sí, podemos plantearnos nuevas oportunidades a futuro que tengan que ver con el turismo arqueológico”, refiere Toledano.

Por su parte, Oliver, Monsalve y Chirosa adelantan que “este yacimiento es de pequeño tamaño pero está muy fortificado y parece guardar una relación directa con el control del territorio dado, que, desde este lugar, se pueden controlar visualmente las vías de comunicación romanas de la época y pasos tradicionales de ganado y mercancías”.

Un control estratégico, en este caso del valle del Ojailén, que “lleva a pensar que este yacimiento controla el paso al Valle de Alcudia, que era un lugar de suma importancia para la República dada la magnificencia de sus explotaciones mineras de plomo y plata en plenas guerras civiles”, apostillan.

“Estas guerras pueden guardar relación con el hallazgo de una gran cantidad de proyectiles de honda o glandes en la presente campaña”, señalan, apuntando que dichas “piezas son muy típicas del mundo romano pero su hallazgo contextualizado es escaso en las excavaciones realizadas en la Península Ibérica”.

En este momento los investigadores están analizando todos los restos materiales para saber si, en esta época de romanización, la población del yacimiento Cruz de Mayo “era eminente romana o si, por el contrario, era población nativa ya integrada en la sociedad romana del momento y el motivo por el cual edificaron este enclave arqueológico”.

Tras la nueva campaña del pasado año, se pone asimismo de relieve la importancia del emplazamiento arqueológico torteño, con el hallazgo de nuevas construcciones que, “de estar igual de preservadas que las encontradas en 2020 y 2021, se espera que hagan de este lugar un sitio idóneo para conocer las formas de vida de época romana en el mundo rural”, señalan Paula, Alfonso y David.

También, recalca el equipo de intervención, que “ha sido posible encontrar una gran cantidad de restos que pueden tener, aparte de una utilidad científica, provecho como material expositivo”.

Desde 2020
Desde hace dos años se han puesto al descubierto diversas estructuras en el yacimiento Cruz de Mayo de Brazatortas, por lo que Pablo Toledano valora “el especial denuedo e ilusión que el equipo de arqueólogos contratado está demostrando”.

Las construcciones que primeramente fueron localizadas daban a conocer un pequeño poblamiento de la Edad del Hierro que, “probablemente, ya tenía mucho que ver con el control del territorio y de los recursos mineros que durante este periodo se explotaban en el Valle de Alcudia a finales del I milenio a. C.”.

En este sentido el equipo de investigadores destaca la gran preservación de los restos y en especial de las construcciones que, en ocasiones, llegaron a alcanzar los 1,80 metros de alzada.

También se han descubrían diversos materiales arqueológicos, como “miles de cerámicas y entre ellas algunas ánforas, restos de metal y una espectacular industria lítica, esta última de gran importancia dado que informa a los investigadores de que debajo del yacimiento de la Edad del Hierro existe otro aún más antiguo con cronología calcolítica o de inicios de la Edad del Bronce”.

Este poblado más antiguo “es aún más grande que el de la Edad del Hierro”, dado que su extensión, por sondeos realizados en el año 2020, duplica, al menos, el yacimiento fechado a finales del primer milenio.
(Fuente: Lanza Digital)