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21 de febrero de 2019

La obras de un parque eólico afloran restos de la Edad de Bronce en Tordesillas

El futuro parque eólico, en el que se invertirán nueve millones de euros, se levantará así sobre un yacimiento de hace tres mil años que fue descubierto en los años setenta, pero en el que «apenas se han realizados intervenciones arqueológicas serias»
La excavadora junto a los viales abiertos para el futuro parque eólico. J.S.
El altozano que divide los términos municipales de Tordesillas y Velilla (Valladolid), conocido como el cerro de Carricastro o Carrecastro, comenzó a escupir retazos de historia a medida que una enorme excavadora de cincuenta toneladas dibujaba sobre el terreno los viales del futuro parque eólico que una empresa está levantando allí. Restos de cerámicas y piezas de granito labradas salieron a relucir prácticamente a cada dentellada de la máquina. Vestigios de un pasado muy lejano, que los expertos sitúan en el entorno de la Edad de Bronce (hace unos tres mil años), cuando los arqueólogos creen que pudo florecer en este cerro una metrópoli prerromana aún por descubrir. «El yacimiento ya era conocido y en cuanto han comenzado los trabajos de desbroce y los movimientos de tierra han comenzado a salir los restos esperados», explica el arqueólogo Ángel Palomino, responsable de supervisar unas obras que, según quiso dejar claro, y así lo confirma el alcalde de Tordesillas, José Antonio González Poncela, «cuentan con todos los permisos de Patrimonio y medioambientales para instalar cuatro aerogeneradores bajo un riguroso control arqueológico de las obras».

El futuro parque eólico, en el que se invertirán nueve millones de euros, se levantará así sobre un yacimiento de hace tres mil años que fue descubierto en los años setenta, pero en el que «apenas se han realizados intervenciones arqueológicas serias» y que se asienta sobre una tierras de cultivo de las que sí se han recogido en los últimos lustros una serie de «vestigios de la Edad de Bronce» al paso de los arados, como piezas de granito labradas para la molienda del cereal, puntas de bronce o moldes para trabajar el metal que se conservan actualmente en el Museo Arqueológico de Valladolid (Palacio de Fabio Nelli). Piezas similares, como las que se muestran en las fotografías tomadas ayer, han salido ahora a relucir durante los primeros trabajos de construcción del parque eólico. «Comenzamos la semana pasada, informamos a Patrimonio y el viernes ya vino un arqueólogo a examinar los trabajos», resume Ángel Palomino antes de incidir en que ahora «toca concretar los puntos en los que se realizarán las correspondientes catas en función de la ubicación de los viales y de las bases de los aerogeneradores para examinar el terreno y catalogar los vestigios que surjan».

El alto del cerro de Carricastro, por ahora, deja entrever «estructuras excavadas en el suelo, que pudieron ser hoyos para cabañas o escombreras de una incipiente industria del metal», añade el experto.

Pero los restos de cerámicas, incluidas algunas bocas identificables de vasijas, que están diseminados por el terreno a raíz de los primeros movimientos de tierras desataron las alarmas entre los vecinos que habitualmente pasean por el cerro. «Queremos dejar claro que los trabajos cuentan con todos los permisos y que, además, queremos aprovecharlos para que se lleve a cabo por vez primera un trabajo arqueológico para sacar y datar los restos de este yacimiento con el fin de ponerlos en valor», anticipa el alcalde de Tordesillas, quien anuncia que este viernes, a las 19:30 horas, se ofrecerá una charla en el Auditorio a cargo del citado arqueólogo sobre los trabajos a realizar y las futuras catas.

VISITAS ESCOLARES
«Nunca se ha examinado el cerro en condiciones ni se ha promovido su puesta en valor por parte de la Junta, que es la que tiene las competencias en la materia, a pesar de conocerse el enorme valor histórico de este yacimiento y ahora, por fin, podemos ponerlo en valor», reitera José Antonio González Poncela, quien anticipa que tienen intención de «realizar visitas de escolares durante las labores arqueológicas para que conozcan su trabajo».

El parque eólico, cuya construcción se paralizó ayer al «averiarse la excavadora», se levantará en el cerro de Carricastro condicionado por los resultados de las prospecciones arqueológicas. Los cuatro aerogeneradores, con una altura de 93 metros, estarán rodeados de tierras de cultivo que continuarán labrándose como hasta ahora sobre un yacimiento que aún está por descubrir y que ni siquiera está señalizado como tal. A él se accede por un sendero que parte de la carretera provincial VA-515, situado a medio camino entre Tordesillas y Velilla. El acceso, eso sí, se restringirá durante las obras para evitar posibles expolios y por cuestiones de seguridad.

13 de febrero de 2019

El ADN de restos humanos en la Cueva del Ángel desvela la primera migración prehistórica desde África a la península

Se trata del primer testimonio prehistórico en Europa procedente del continente africano, y que ha aparecido en el ADN de un individuo que habitó la sima lucentina
Trabajos de investigación en la Cueva del Ángel. 
La Cueva del Ángel de Lucena sigue desvelando sorpresas para la comunidad científica internacional. La última, el hallazgo del primer testimonio prehistórico en Europa procedente del continente africano, y que ha aparecido en el ADN de un individuo que habitó la sima lucentina hace 3.600 años. Este descubrimiento permite concluir que ya hubo un proceso migratorio desde la África subsahariana a la Península Ibérica hace más de tres milenios.

El resultado de este trabajo de investigación ha sido presentado esta mañana en el Ayuntamiento de Lucena por el director de la excavación arqueológica de la Cueva del Ángel, Cecilio Barroso, y un miembro de su equipo, y el antropólogo Francisco Bermúdez. El hallazgo revela el primer testimonio de origen africano subsahariano en el ADN de un individuo europeo de la Prehistoria. Hasta estos momentos, había constancia que esa interacción entre los habitantes de África Central y Oriental y los de la Península Ibérica, y por ende de Europa, se remontaba a la época de dominación islámica (siglo VII d.C).

Sin embargo las conclusiones del estudio de los restos humanos hallados en la Cueva del Ángel permiten adelantar esa datación cronológica hasta la Edad del Bronce, hacia el 1.600 antes de cristo, aproximadamente, según un estudio hecho a partir de muestras de huesos humanos localizados en el norte y el sur de la Península Ibérica, dirigido por la profesora Gloria González-Fortes, de la Universidad de Ferrara, con el objetivo de analizar las dinámicas de las poblaciones prehistóricas en unos periodos históricos tan críticos en los hubo muchos movimientos de humanos.

El descubrimiento se ha dado a conocer hace unos días a la comunidad científica a través de la revista de biología Proceedings of the Royal Society, editada en Londres, con un artículo traducido del inglés titulado Una ruta occidental de migración humana prehistórica desde África a la Península Ibérica, firmado entre otros, por los dos investigadores que trabajan desde hace años en la Cueva del Ángel.

“UN POTENCIAL IMPRESIONANTE"
En este sentido, el director de la excavaciones arqueológicas, Cecilio Barroso, ha defendido el trabajo “de excelencia, serio y riguroso” que se viene desarrollando en el yacimiento ubicado en la Sierra de Aras. “El 90% de los huesos humanos estudiados hasta ahora tiene presencia de ADN y de buen calidad informativa, por lo que la Cueva del Ángel tienen un potencial científico impresionante”, ha asegurado.

Barroso ha recordado que, hasta el momento, la Cueva del Ángel ha dejado testimonios de dos culturas bien diferenciadas, como son el Neolítico, documentado a través de restos cerámicos datados en el milenio VI antes de cristo, y el Calcolítico con restos de poblaciones de prospectores de metales fechados hacia el 3.000-2.500 de la era antigua. El director confía en que próximos estudios del ADN humano de ambos periodos cronológicos confirmen la relación de los habitantes del entorno de la Cueva del Ángel con los movimientos migratorios procedentes desde África.

(Fuente: Cordópolis)

12 de febrero de 2019

Hallado en Gijón un mensaje grabado en una botella hace 1.600 años

Un equipo de arqueólogos de la Universidad Autónoma de Madrid ha descubierto un singular objeto. Se trata de un fragmento de vidrio de una botella que fue regalada en el siglo V d.C. al señor de la villa romana de Veranes en Gijón, con el mensaje “Bebe y vive muchos años, buen hombre”.
Izquierda: Vidrio localizado en la villa romana de Veranes (Gijón). Derecha: Botella completa del mismo tipo (Isings 103) de la colección del Museo del Louvre. / Arveiller-Dulong y Nenna [nota 22], pág. 335, nº 948, lámina 73.
Un pequeño vidrio, al que hasta ahora apenas se le había dado importancia, ha resultado ser el fragmento de una botella que contenía un mensaje hedonista, destinada a la aristocracia de hace 1.600 años.

La pieza fue localizada en la villa romana de Veranes (Gijón), excavada desde 1997 por Carmen Fernández Ochoa, catedrática emérita de Arqueología de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), y Fernando Gil Sendino, de la Fundación UAM.

El vidrio, destinado al propietario de la villa, acaba de ser datado y puesto en valor gracias al pormenorizado análisis realizado por el profesor de Arqueología de la UAM, Javier Salido Domínguez, y por la arqueóloga Belén Madariaga, miembros del Equipo Arqueológico Veranes.

Los autores demuestran que quien grabó la botella pretendía enviar al señor de Veranes “un deseo hedonista de deleite y disfrute de la vida”. Y esta conclusión es fruto del mensaje escrito en su cuerpo: “Bebe y vive muchos años, buen hombre”.

Según el trabajo, publicado en la revista Journal of Glass Studies, hasta la fecha no se había documentado una inscripción que reuniese en una sola inscripción grabada las siguientes tres expresiones de buen deseo: dos en latín (Mvltis Annis; Homo Bone) y una tercera en griego (Pie Zeses), que están perfectamente constatadas de manera separada en recipientes vítreos similares. Eso les permite pensar que han dado con el mensaje que un día llevó grabado la botella.

Buena muestra de la excepcionalidad de la pieza, aseguran los autores, es “la escasez de piezas de este tipo halladas en territorio de la antigua Hispania. Además, las laboriosas técnicas de trabajo convertían estos recipientes en objetos únicos y en ocasiones personalizados, lo que los distinguen de otras producciones seriadas como los contenedores soplados en molde, lo que hace de ellos objetos raros y exclusivos solo accesibles a una élite económica y social”.

SIN IMPUREZAS
El vidrio procede de una unidad estratigráfica que contiene materiales fechados en el siglo V d. C. (varios ejemplares de terra sigillata hispánica tardía y una moneda datada en el año 383 d. C.). Según Javier Salido Domínguez, se trata de un fragmento en vidrio incoloro, de 4 cm de alto por 3 cm de ancho y un grosor de pared de 0,33 a 0,125 cm, sin impurezas, pero con presencia de algunas pequeñas burbujas. Este análisis se ha podido realizar gracias al SECYR (Servicio de Conservación, Restauración y Estudios Científicos del Patrimonio Arqueológico) de la UAM.

"Corresponde a una pieza soplada al aire libre y la cualidad que la distingue es precisamente la inscripción grabada que recorre horizontalmente su superficie. Tanto el perfil del fragmento, como la disposición de la inscripción y las líneas que la delimitan, inducen a pensar que correspondería a la parte superior de una botella de cuerpo globular", agrega el profesor de la UAM.

Estas piezas se fabricaban mediante soplado con caña al aire para definir el cuerpo y mediante el modelado del cuello y del borde, mientras el vidrio permanecía aún maleable. Por otro lado, la procedencia del vidrio, hallado en el interior de la logia abierta al sur, permite pensar en un uso doméstico, quizá como servicio de mesa o para la conservación de productos cosméticos, como se ha documentado en piezas similares.

Sin embargo, su excepcionalidad, la riqueza de su grabado y el alto valor de su producción hace inclinar la balanza hacia el convencimiento de que se trata de un presente realizado al propietario de la villa o hacienda romana.

(Fuente: SYNC)

8 de febrero de 2019

El georradar desvelará los secretos de la villa romana de Fuente Álamo

El Instituto de Estudios Giennenses, con colaboración de la Universidad Complutense, llevará a cabo una prospección geofísica con esta técnica innovadora y no invasiva en el yacimiento de Alcalá la Real (Jaén)
Vista aérea de la Zona Arqueológica de Fuente Álamo.
El Ayuntamiento de Alcalá la Real ha acogido la presentación del estudio arqueológico que se va a desarrollar sobre las ruinas de la villa romana ubicada en la pedanía alcalaína de Fuente Álamo, una iniciativa en la que colabora el Instituto de Estudios Giennenses a través de su convocatoria de subvenciones a proyectos de investigación.

El diputado de Cultura y Deportes, Juan Ángel Pérez, ha presentado junto al alcalde de Alcalá la Real, Carlos Hinojosa,el arqueólogo municipal, Carlos Calvo, y David Expósito,el autor de este proyecto, centrado en los asentamientos rurales de época romana en el sur de la provincia de Jaén.

El primer edil, Carlos Hinojosa ha adelantado que se trata de una nueva intervención sobre los recursos patrimoniales de Alcalá la Real, “para ponerlos en valor y conocer mejor nuestra historia, lo que conlleva generación de empleo y desarrollo económico en la zona”.

“Esta actuación consistirá en la elaboración de un georradar en la villa romana de Fuente Álamo. Desde el Ayuntamiento se aportarán los medios humanos y materiales necesarios con compromiso para financiar la continuidad del proyecto y seguir avanzando en el conocimiento de recursos potentes. La recuperación del patrimonio integral debe seguir por la misma senda y es también una apuesta por el desarrollo económico a través del turismo. Creemos que este trabajo también dará sus frutos a nivel comarcal”.

PROYECTO DE INVESTIGACIÓN
Juan Ángel Pérez ha explicado que el IEG conmemoró el año pasado sus 25 años de la puesta en marcha de proyectos de investigación y con ese motivo quiso convocar todas las áreas de conocimiento, triplicando su presupuesto para ello. Se presentaron 38 proyectos de investigación con apoyo de la Diputación Provincial de Jaén y en este marco nace este proyecto de investigación “Asentamientos rurales de época romana en el sur de la provincia de Jaén”.

“Un proyecto que va a permitir conocer mejor una parte muy importante de nuestro patrimonio, la villa romana de Fuente Álamo, y por otro, nos va a posibilitar conocer en profundidad un amplio territorio de la Sierra Sur. A tenor de los restos que se conservan, tiene mucha potencia arqueológica y parece muy oportuno que este magnífico equipo haya querido profundizar a través de la metodología de georradar, no invasiva”.

Por último, el diputado y edil alcalaíno de Patrimonio ha mostrado su satisfacción “ya que desde el IEG generamos nuevos espacios de conocimiento, una institución que pretende ser el mayor centro de conocimiento de la provincia de Jaén”.

Para el arqueólogo David Expósito, “se trata de un proyecto de investigación que en una primera fase va a desarrollar una técnica no invasiva, reciente, con un análisis con el que podemos conseguir un mapeado del suelo para el que contamos con la colaboración de la Universidad Complutense de Madrid”. La técnica de georradar trata de proyectar impulsos eléctricos sobre el terreno, lo que permite poder visualizar si debajo del terreno, hasta una profundidad de unos 4 metros, existen huellas de origen humano, como estructuras, fosos, rellenos, etc. “Es una herramienta que nos brinda una radiografía del terreno y así poder seleccionar zonas para hacer una intervención en más profundidad, ahorrando costes y tiempo”.

Por último, Carlos Calvo, técnico municipal, ha señalado que el equipo se completará con Esperanza Martín, Isidoro García e investigadores alcalaínos que van a aportar su conocimiento sobre el terreno. “El proyecto se va a acometer en varias fases, y se pretende seguir sobre yacimientos arqueológicos dispersos por todo el término municipal y su entorno”. Calvo Aguilar ha recordado que Alcalá cuenta con casi 90 yacimientos catalogados que se remontan incluso a la Prehistoria.

7 de febrero de 2019

Gandia trasladará 1.900 cajas de restos arqueológicos tras décadas en un sótano

El Área de Patrimonio saca de un local con humedades las piezas milenarias y crea un centro de estudio para investigadores
Decenas de cajas con restos arqueológicos. FOTO: Ó De la Dueña
El área de Gestión Responsable del Patrimonio de Gandia (Valencia) ha dado un paso de gigante para conservar el ingente volumen arqueológico que atesora la ciudad. Lápidas romanas, restos óseos de diferentes etapas de la Prehistoria, capiteles, columnas de villas de hace dos mil años, ánforas, urnas funerarias y, por supuesto, miles y miles de piezas de cerámica procedentes de más de 70 yacimientos de la Safor y algunas poblaciones de la Vall d'Albaida, son algunos de los ejemplos de la gran colección.

Todos estos materiales se derivarán a un Centro de Estudios Arqueológico que se está ultimando en el antiguo retén de la Policía Local, en la vieja carretera de Almoines. Este espacio acogerá decenas de salas, tanto para la conservación y el tratamiento, como para el estudio de los diferentes yacimientos de los que Gandia custodia los materiales.

A este centro podrán acudir investigadores, ver y analizar todos los elementos, como indicó el edil de Patrimonio, Xavi Ròdenas. El concejal recordó que Gandia, como ciudad de referencia, es la población encargada de almacenar estas reliquias. En estos momentos hay más de 1.900 cajas con materiales.

Todo ello suma la friolera de 25.000 kilos de elementos y se guardan en un almacén que no llega a reunir las condiciones que es esperaría. Todas estas joyas de la historia de la Safor están en un local de la avenida de Alicante. Este almacén, en la planta baja, alberga centenares de cajas inventariadas, pero no catalogadas, por lo que hay mucho trabajo por delante.

Pero también hay un sótano con humedades donde hay otros centenares de cajas. Esta planta carece de luz eléctrica y cuando hay fuertes tormentas el agua anega el espacio, ya que está por debajo del nivel del alcantarillado. Todo esto ha hecho que el área de Gestión del Patrimonio haya buscado una solución durante esta legislatura. El edil Xavi Ròdenas indicó que llevan años trabajando en este tema aunque no se ha querido «contar nada».


Edificio seguro
«Optamos por el viejo retén ya que es el mejor recinto posible para estos usos». Cuenta con muros gruesos, ventanas pequeñas y seguras, así como con puertas blindadas. Las celdas que antes ocupaban los presos serán ahora salas de trabajo. Las miles de cajas se guardarán en dependencias del retén y cuando «haya que limpiarlas o estudiarlas» tendrán una de las celdas asignadas.

«Estos habitáculos cuentan con gua y un banco para el estudio, son ideales», dijo el arqueólogo Carles Juan que está dirigiendo todos estos trabajos. Por otro lado, se instalará una gran sala con mesas amplias e iluminación profesional para los expertos que acudan allí a investigar. Ròdenas comentó que toda esta colección «requiere un espacio digno», tanto para el estudio como para su conservación.

Los materiales que hay en estos momentos en el almacén de la avenida de Alicante serían suficientes para crear una exposición permanente de arte antiguo y medieval, algo que de momento no se contempla. Gandia guarda elementos de 70 yacimientos y todo ello está en 1.900 cajas de plástico, como las que se utilizan para recolectar naranjas.

Los periodos van desde la Prehistoria hasta la Edad Media y necrópolis más recientes. Todo ello pasando por el gran volumen de piezas halladas en villas romanas. Juan comentó que Gandia conserva una decena de lápidas funerarias de enterramientos romanos, elementos de villas estructuras medievales de los «polígonos de la antigüedad», como el que existió sobre la calles Baix o Pellers, donde había fábricas de cerámica o peletería.

Por poner ejemplos, Juan habló de los yacimientos de los que se conservan piezas. Hay distintos de la Vall d'Albaida, como la excavación romana de l'Ofra, en Castelló de Rugat o los elementos hallados en el castillo de Llutxent.

Pero, sin duda, los que más abundan son de la Safor, desde Rajolars, donde se halló una villa romana; arquitecturas industriales o la excavación de Pardines en Beniarjó, donde aparecieron ánfora y cerámica de terrasigilatta, un material de lujo muy empleado en la época.

Además de la necrópolis de Almoines del sigo XVI, de la cual Juan está reconstruyendo una calavera. También hay restos de incalculable valor, desde los aparecidos en las excavaciones realizadas antes de la restauración de Escoles Pies o los hallados en la parte interior de la Colegiata, donde apareció un tramo de muro de la villa de Gandia, que se sospecha que es previo al primer tramo del que se tiene constancia.

5 de febrero de 2019

Venta de objetos arqueológicos por 'Wallapop'

'Tarifa 1812' ha denunciado los hechos y critica la falta de control arqueológico en unas promociones inmobiliarias de la ciudad

La Asociación Histórico-Cultural Tarifa 1812 ha criticado la falta de control arqueológico en las obras de las distintas promociones de viviendas que actualmente se siguen desarrollando en el sector S-4 El Olivar del municipio gaditano, “hasta el punto que desde el mes de noviembre de 2018 varios trabajadores de dichas obras han ofrecido vender al menos diez balas de cañón de hierro a un precio de 30 euros, halladas durante los trabajos de excavación”.

Se trata, según precisa el colectivo en un comunicado, de una venta similar de balas de cañón que ya se denunció al Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil en 2017 y que incluso se publicitaba por Internet “sin pudor ninguno”. “En noviembre de 2017 la Delegación Territorial de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía dio traslado al Ayuntamiento de Tarifa de la necesidad de establecer cautelas arqueológicas ante cualquier actuación que supusiera remociones del terreno, con la ubicación aproximada de las trincheras y baterías de sitio que las tropas francesas realizaron durante las navidades de 1811 en las zonas del Retiro y del Olivar, donde acamparon las fuerzas del general Leval en diciembre de 1811 en su intento por tomar la plaza de Tarifa durante la Guerra de la Independencia”, relata la asociación.

Las obras de urbanización previstas en esa zona de Tarifa afectaban a la denominada como batería número uno o de enfilada, con lo que la resolución de la Delegación Territorial de Cultura “parecía llegar justo a tiempo para que por parte del Ayuntamiento se exigieran las debidas cautelas arqueológicas a la empresa que entonces llevaba a cabo los trabajos de urbanización y apertura de un nuevo vial”.

“Lamentablemente para cuando la empresa de arqueología contratada por la promotora llegó a la parcela ya estaban los movimientos de tierra realizados. Allí no se veía nada, salvo una huella en un perfil que el propio arqueólogo ignoraba si podría vincularse con los acondicionamientos del terreno para las operaciones del sitio de Tarifa en el siglo XIX”, sostienen desde Tarifa 1812.

Un año después dicen que el problema “parece que vuelve a reproducirse”, incide, pues “pese a que la Delegación Territorial de Cultura requirió en su momento al Ayuntamiento que, dado que es posible que aún se conserven en esa zona de Tarifa huellas de las obras realizadas por las tropas napoleónicas, así como balas de cañón, hebillas, botones y otros elementos propios de este episodio del intento francés de ocupar Tarifa en 1811, el Ayuntamiento debía establecer la necesidad de un control arqueológico en cualquier actuación u obra que se proyectase en los terrenos afectados donde se presume la existencia de estos vestigios militares, nada se ha hecho una vez terminada la urbanización y apertura del vial”.

(La Voz del Sur)

24 de enero de 2019

Hallan una necrópolis musulmana y restos de la muralla de Almuñecar

El hallazgo se produjo durante la ejecución de una zanja para mejora del servicio eléctrico en el casco antiguo de la localidad, junto a la iglesia de la Encarnación
Las arqueólogas Julia García González y Sara Pérez López hallan restos humanos y un tramo de muralla en la Puerta de Granada, junto al templo parroquial de la Encarnación de Almuñécar.

El hallazgo ha ocurrido durante las obras de apertura de una zanja para la instalación de conducciones eléctricas que mejoren el servicio eléctrico, promovida por la compañía Endesa y realizadas por la empresa granadina, Construcciones Moya y Morales. “Dado que los trabajos transcurren por una zona tan importante del Conjunto Histórico de Almuñécar como la Puerta de Granada, donde se ubica la Iglesia de la Encarnación, requerían de un seguimiento arqueológico, que en este caso ha estado a cargo de las citadas arqueólogas, Julia García González, en quién recae la dirección arqueológica y Sara Pérez López, la técnica que está a pie de obra”, según ha informado la arqueóloga municipal Elena Navas.

“Como resultado de estos trabajos se han podido documentar diversos restos de muros y varias sepulturas. Los restos humanos presentan las características propias del ritual de enterramiento musulmán, al estar los cuerpos dispuestos decúbito lateral, sobre el costado derecho, con la cabeza de forma que la cara esté mirando hacia la meca. Su cronología es bastante antigua, pues la cimentación de la iglesia afecta directamente a algunas de estas sepulturas, indicando que son anteriores a la construcción de la iglesia, cuyas obras de construcción acabaron en 1600”, explicó Elena Navas.

(Fuente: Almuñecar Digital)

21 de enero de 2019

Descubren una nueva entrada al graderío del teatro de Acinipo

Los trabajos también han confirmado que fue construido en un sola fase. Los datos obtenidos vienen a completar los elementos ya estudiados del teatro
El teatro romano de Acinipo. FOTO: JAVIER FLORES
Acinipo, uno de los grandes yacimientos romanos que permanece en el olvido, sigue dando descubrimientos en el momento que se realizan labores de investigación, como las acometidas recientemente por un equipo de expertos de cara a una actuación de consolidación en la cavea del teatro (graderío), uno de los elementos principales que en la actualidad puede ser visitado.

El trabajo, previo a la actuación que se quería realizar desde la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Ronda para la protección del graderío de las escorrentías de lluvia, deparó importantes datos, como la aparición de una calle de entrada al teatro, uno de los más importantes que existente en Andalucía.

Un acceso que los arqueólogos que han intervenido en este estudio han localizado en la zona alta del mismo. Además, también se han podido documentar puertas de acceso al mismo desde el exterior.

Estos elementos aportan nuevos datos contrastados sobre esta infraestructura histórica y los elementos que la componen.

Además, también se pudo comprobar que el teatro fue construido de una sola vez, sin ampliaciones o reformas posteriores, según las conclusiones de equipo dirigido por el arqueólogo granadino José Padial Pérez. Otro elemento que también viene a poner más luz sobre un yacimiento que está llamado en el futuro a ser uno de los grandes atractivos turísticos de la ciudad del Tajo.

Estos datos han sido recogidos gracias a los cinco sondeos que se han realizado a lo largo de un mes, entre octubre y noviembre del pasado año, en el que también se han podido ver los tipos de mortero utilizados para la construcción.

Este acceso se presume que estaba destinado a la entrada de las clases nobles al teatro y también a los músicos, que así tenían un acceso directo a la cavea, algo parecido a lo existente en los teatros de Baelo Claudia (Cádiz) y de Medellín (Badajoz).

El teatro de Acinipo es uno de los elementos más importantes que se conservan y que puede observarse en la actualidad, aunque en las pocas campañas de excavación que se han realizado también se habilitó la zona de las termas y un residencial, que son los únicos restos visibles en toda su dimensión. Eso sí, se aprecian pequeños restos de la muralla que rodeó.

La ciudad romana de Acinipo contaba con una gran importancia y tenía el privilegio de acuñar su propia moneda, como lo atestiguan diferentes hallazgos que han tenido lugar en el recinto arqueológico.

A LA ESPERA DEL PLAN DIRECTOR
De momento, el recinto arqueológico permanece a la espera de que se ponga en marcha el plan director del mismo, lo que dejaría establecido el proceso a seguir en este recinto de forma continuada, ya que supone que desde el Gobierno andaluz se asume el mismo y el cumplimiento de las diferentes fases y acciones que se establezcan en el documento. Mientras tanto, en estos meses se han realizado algunas acciones puntuales de mejora.
Los horarios de visita al yacimiento ya normalizados

En la actualidad los horarios de entrada al yacimiento se encuentran normalizados, tras momentos en los que las instalaciones estaban más días cerradas que abiertas a lo largo de un solo mes. Un asunto que provocó numerosas quejas y que hizo que la Consejería de Cultura, responsable del yacimiento, tomase la decisión de abrir solo en horario de mañana, aunque con la mayoría de los días de la semana accesibles para los visitantes.

(Fuente: Málaga Hoy)