google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri: íberos
Mostrando entradas con la etiqueta íberos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta íberos. Mostrar todas las entradas

15 de enero de 2011

Las cabezas íberas de Maquiz protagonizan la primera conferencia de 2011 en el Museo de Jaén

  • Los arqueólogos creen que las cuatro cabezas de bronce halladas hace 150 años en Mengíbar (Jaén) son parte del carro funerario de un príncipe de Iliturgi.
 El pasado día 13 de Enero, el Museo de Jaén inició en este año 2011 el ciclo de conferencias conocido como "Los Jueves del Museo". Esta primera cita del año versó sobre los Bronces de Maquiz, protagonistas del último "Espacio Dedicado" del año 2010 y primero del 2011.

Abrió el acto la Directora del Museo de Jaén, Francisca Hornos, quien dio la bienvenida a los asistentes y anunció que la exposición de los Bronces había sido prorrogada hasta el Domingo 16 de Enero, por lo que se había considerado oportuno que esta primera sesión de "Los Jueves del Museo" de 2011 tratase sobre estas importantes piezas arqueológicas encontradas en Mengíbar hace 150 años.
D. Arturo Ruíz en un momento de su ponencia.
A continuación, tomó la palabra el Director del Centro Andaluz de Arqueología Ibérica, el Catedrático de Prehistoria D. Arturo Ruiz, quien presentó al conferenciante de la noche. En primer lugar señaló el importante trabajo realizado tanto por Emilio Plazas como por Alicia Nieto, cuya labor investigadora se encuentra estrechamente unida, no pudiendo hablar de uno sin tener presente la colaboración del otro. Señaló además que ambos arqueólogos, antiguos alumnos suyos, han sido de los primeros arqueológos que se formaron en la Universidad de Jaén y que se han dedicado profesionalmente a la Arqueología, compaginando los trabajos de campo con la investigación.

Finalmente, el arqueólogo mengibareño Emilio Plazas Beltrán inició la conferencia con un viaje en el tiempo al Mengíbar de hace 150 años, concretamente al lugar de Cerro Maquiz, donde en 1860 dos campesinos de Mengíbar encontraron 4 cabezas de bronce, 1 cinturón y numerosos objetos de hierro. Continuó relatando la trayectoria que estos importantes objetos arqueológicos tuvieron a lo largo de estos 150 años hasta llegar a la Real Academia de la Historia de Madrid y al Museo Arqueológico Nacional, analizando al mismo tiempo los estudios e investigaciones que a lo largo de todos estos años se han realizado acerca de estas piezas así como del yacimiento arqueológico en el que aparecieron (la ciudad ibérica de Iliturgi).
La exposición en el Museo de Jaén.

Además, Emilio Plazas hizo un repaso de los distintos actos realizados con motivo del 150 aniversario del hallazgo de Maquiz (conferencias, visitas guiadas al Museo de Jaén...), señalando además la repercusión que ha tenido la exposición del Museo de Jaén en los medios de comunicación (locales, provinciales y nacionales).  

Finalmente, tras casi 1 hora y media de charla y 170 imágenes después, el arqueólogo de Mengíbar finalizó la conferencia con la interpretación de las piezas (consideradas en la actualidad como elementos decorativos del carro funerario de un Príncipe de Iliturgi), terminando con unas reflexiones sobre el estado actual del yacimiento de Cerro Maquiz y aportando algunas sugerencias referentes al futuro de tan importantes piezas arqueológicas.

13 de noviembre de 2010

Las cuatro cabezas íberas de Mengíbar (Jaén) regresan a la tierra donde fueron descubiertas 150 años después de su descubrimiento

Se podrán contemplar desde el próximo miércoles y hasta enero en el Museo Provincial de Jaén
Ciento cincuenta años es una espera demasiado larga. Pero, tras siglo y medio, por fin, las cuatro Cabezas de Bronce del Cerro Maquiz se reencontrarán con la tierra donde fueron descubiertas. Una exposición conmemora el histórico hallazgo en el municipio.
Fueron descubiertas en 1860. 

La casualidad hizo que unos campesinos, durante la labranza del campo, encontrasen cuatro bellas cabezas de bronce, de un carro principesco, en el mengibareño Cerro Maquiz allá por noviembre de 1860. Fue un capricho del destino que dejó abierta una de las tumbas más importantes de la época ibérica. Las piezas históricas desfilaron por incontables foros para que miles de asistentes contemplaran su belleza. Incluso, estuvieron en la Expo de París de 1867 en representación de los tesoros de España. 

Ciento cincuenta años después, las cabezas vuelven a Jaén gracias a una exposición que se inaugurará, el próximo miércoles 17 de noviembre, en el Museo Provincial de Jaén. La muestra está organizada por la Concejalía de Cultura, el Grupo de Amigos de la Historia de Mengíbar y por la propia sala, dependiente de la Consejería de Cultura.
Las cuatro cabezas de Cerro Maquiz.

Gracias al trabajo realizado por el arqueólogo mengibareño Emilio Plazas y por la directora del Museo Provincial, Francisca Hornos, los jiennenses y demás visitantes podrán contemplar, hasta el próximo mes de enero, las Cabezas de Maquiz que, ordinariamente, se conservan repartidas entre el Museo Arqueológico Nacional y la sede de la Real Academia de la Historia, ubicadas en Madrid. 

Además de la muestra histórica, durante las próximas semanas se realizarán numerosas actividades paralelas, dirigidas a todos los mengibareños, especialmente a los estudiantes. En los centros locales se organizarán clases monográficas sobre el hallazgo, visitas al museo y al Cerro Maquiz o un taller didáctico. 

Fuente: Diario Jaén/Jesús Vicioso/Mengíbar

10 de noviembre de 2010

La "Caja de los Guerreros" centra en Arjona (Jaén) las XIII Jornadas Iberas

La necrópolis de Piquía y el carro en la antigua Iberia son los temas centrales sobre los que giran las XIII Jornadas Iberas, que se celebrarán del 11 de noviembre al 9 de diciembre en Arjona, y que contarán, en cinco conferencias, con algunos de los más destacados investigadores del mundo ibero.  De todos los hallazgos que se sacaron  a la luz en esta necrópolis destaca por su interés la llamada “Caja de los guerreros”


La "Caja de los Guerreos" hallada en Arjona.
La necrópolis de Piquía, en Arjona, es la más reciente intervención arqueológica en el patrimonio ibero realizada en la provincia de Jaén. Se trata de una necrópolis del siglo I antes de Cristo, de gran importancia por la variedad de tipos de enterramientos, como cámaras sepulcrales, cistas o columbarios, con el nexo común del rito de la incineración. De todos los hallazgos que se sacaron  a la luz en esta necrópolis destaca por su interés la llamada “Caja de los guerreros”, una urna de piedra con bajorrelieves de luchas entre guerreros, que ya fue objeto de unas jornadas el pasado mes de junio, y el ajuar de una cámara principesca con una escultura de bronce que remataba la lanza de un carro, que representa a un lobo devorando la cabeza de un hombre. También se hallaron siete cráteras o vasijas de cerámica, cuatro de ellas completas. 

Estos elementos de la necrópolis de Piquía serán analizados en las XIII Jornadas Iberas que organizan la Consejería de Cultura de la Junta, la Diputación de Jaén, el Centro Andaluz de Arqueología Ibérica, la Asociación Amigos de los Iberos y el Ayuntamiento de Arjona.
La caja fue hallada de forma casual.

En la presentación de las jornadas, el director del Centro Andaluz de Arqueología Ibérica, Arturo Ruiz, explicó el contenido de las conferencias y quienes son los conferenciantes. También puso de manifiesto las dificultades que presenta el yacimiento para su conservación si no se lleva a cabo un proyecto de protección y restauración, ya que está expuesto a las escorrentías. En la presentación participaron también la delegada de Cultura, Mercedes Valenzuela; la diputada provincial de Cultura, Yolanda Caballero; la presidenta de la Asociación Amigos de los Iberos, Pilar Palazón, y el alcalde de Arjona, José Puentes. Los ponentes son prestigiosos doctores especialistas en ibero como Manuel Molinos y Francisco Gómez Cabeza que hablarán de la tumba principesca. Fernando Quesada, experto en temas de guerra y armas antiguas, comentará la importancia del carro en la antigua Iberia. Ricardo Olmos se referirá a la iconografía de la tumba principesca y a los vasos del varón. Carmen Rueda, por su parte, abordará el tema el repertorio femenino. Por último, Arturo Ruiz desvelará la singularidad de la Caja de los guerreros y hablará del proyecto turístico-cultural Viaje al Tiempo de los Iberos, al que podría sumarse la necrópolis de Piquía en caso de que sea conservada, consolidada y restaurada.
(Fuente: Diario Jaén)

29 de octubre de 2010

Las damas del arte íbero vuelven al Arqueológico

La Dama de Elche, la de Baza y la del cerro de los Santos, las más famosas piezas del arte ibérico, vuelven a estar a la vista del público junto a una exquisita selección de grandes obras de la antigüedad en el ala sur del edificio recientemente remodelada. Son 250 objetos instalados sobre una parte del nuevo emplazamiento, que sirve para dar una idea de cómo será el Museo Arqueológico del siglo XXI cuando abra totalmente sus puertas a finales del próximo año.
La Dama de Elche.
El arquitecto autor de la remodelación, Juan Pablo Rodríguez Frade, es también el responsable de esta versión del museo en formato reducido que ya se pudo ver hasta el pasado verano, antes de que el museo fuera cerrado totalmente al público por las obras. Permanecerá abierta hasta que ellifting concluya.
El recorrido abreviado arranca con un espacio dedicado a los sarcófagos y estatuillas de Egipto y Oriente Próximo y avanza con piezas únicas testigos de las culturas más antiguas, como las famosísimas damas ibéricas o el deslumbrante tesoro de Guarrazar. Monedas de la magnífica colección numismática del museo sirven de hilo conductor entre cada uno de los apartados de esta exposición de auténticos tesoros.
Fuente: El Pais

16 de septiembre de 2010

ARQUEOLOGÍA: Benicarló (Valencia) comienza la catalogación de los restos íberos hallados hace 30 años en el Puig de la Nao

El Ayuntamiento de Benicarló (Valencia) ha comenzado la restauración y catalogación de los restos arqueológicos procedentes del poblado íbero del Puig de la Nao hallados entre los años 70 y 80. 



Un programa de fomento del empleo auspiciado por el Servef ha permitido sacar adelante este proyecto que subvenciona la Conselleria de Economía y que permitirá restaurar los hallazgos del poblado íbero recuperado por los arqueólogos. 



Las piezas, de diferente tipología, tienen un importante valor histórico. Las primeras en ser catalogadas son las cerámicas, en las que los expertos trabajan en Benicarló durante este mes de septiembre para recuperar las formas geométricas que decoran las urnas fúnebres.



El catálogo también incluirá las fíbulas (hebillas que servían de imperdible para la ropa), un casco romano procedente del yacimiento submarino de las Rocas de la Barbada, una hoja de cuchillo, así como clavos y herramientas de bronce. 



Para todo ello, tanto durante la primera fase de restauración de los elementos, como en la catalogación, los expertos asumen las pautas de la arqueología actual. Es decir, el objetivo pasa por conservar cualquier vestigio material capaz de ofrecer datos históricos relevantes para los estudioso. Mientras, los técnicos deben respetar la pieza original, intervenir lo menos posible y diferenciar la parte original de la reconstruida en la actualidad.



Este proceso estará supervisado por un técnico especialista en restauración contratado por el Ayuntamiento de Benicarló durante tres meses a través del Servef. No en vano, esta entidad ha impulsado el proyecto previsto por el consistorio para conservar, restaurados, los restos arqueológicos hallados hace más de 30 años en el término municipal. La iniciativa también comprende la documentación de los hallazgos de uno de los patrimonios históricos y culturales más significativos de Benicarló para que el legado no se pierda.


Cabe recordar que el poblado íbero del Puig de la Nao está abierto al público los miércoles, viernes y sábados y es de fácil acceso. Entre los restos que los arqueólogos sacaron a la luz destaca: el palacio del jerarca, la casa del horno y la panadería, un edificio para el culto, la bodega del vino de Ibiza, la plaza de Armas, la muralla y lo que en su día fueron unos almacenes de alimentos. 

11 de septiembre de 2010

ARQUEOLOGÍA-HALLAZGO: Un aficionado descubre la escultura ibérica de un felino en Fabara (Zaragoza)

Un arqueólogo aficionado ha encontrado de manera casual, en el municipio de Fabara (Zaragoza), restos de una escultura ibérica de un felino, del siglo V antes de Cristo, una pieza 'excepcional' porque retrae a unos siglos antes la implantación de la cultura íbera en el valle del Ebro.


Aunque la datación está pendiente de un estudio definitivo, la pieza, al parecer de una leona, de 83 centímetros de longitud y unos 90 kilos de peso, es un hallazgo 'muy importante', porque no es frecuente encontrar restos de esculturas ibéricas tan antiguos en el valle del Ebro, ha informado hoy el director general de Patrimonio del Gobierno de Aragón, Jaime Vicente.
Los restos de esta escultura de arenisca, localizada hace apenas unos días cerca del río Matarraña, no eran identificables porque habían sufrido un proceso erosivo muy fuerte al haber permanecido largo tiempo a la intemperie, pero al realizar unas obras para un camino hacia una granja le dieron la vuelta, ha explicado Vicente durante su presentación.

Un arqueólogo aficionado pensó que podía constituir un ejemplo de escultura ibérica y avisó al Departamento de Cultura del Gobierno de Aragón, que envió sus técnicos para analizar y evaluar los restos que, según Vicente, consideraron como un 'objeto original, auténtico, de esa cultura', aunque las condiciones de su hallazgo, en superficie, impiden por el momento conocer el contexto.
Foto: Torre-ermita de Fabara (Zaragoza).

La pieza, a la que le falta la cabeza, las patas delanteras y la parte inferior de los cuartos traseros, posiblemente formaba parte de un monumento, quizás de carácter funerario u honorífico, ha agregado.

Vicente ha destacado que es la primera vez que se encuentra en el valle del Ebro un elemento monumental que refleja la existencia de una sociedad avanzada, jerarquizada, con muchos recursos, que utiliza símbolos similares a los de la zona de Andalucía, donde está la gran escultura ibérica, en un periodo de tiempo muy similar a la de este descubrimiento.
(Fuente: EFE)

9 de septiembre de 2010

El 'Viaje al tiempo de los iberos' en Castellar (Jaén) toma forma con un museo sobre exvotos

Los exvotos eran ofrendas en forma de figuras que usaban los íberos para comunicarse con los dioses. Uno de los santuarios más importantes sobre esa manifestación de la cultura ibérica ha abierto sus puertas este verano en Castellar (Jaén) y recoge más de 3.000 piezas arqueológicas o exvotos procedentes del yacimiento de la Cueva de la Lobera.
 Con este museo sobre la religiosidad de los íberos empieza a coger forma el Viaje al tiempo de los íberos, un ambicioso proyecto turístico-cultural con el que la Diputación de Jaén quiere poner en valor el excepcional patrimonio íbero de la provincia, con más de 500 yacimientos.
La relación de los íberos con los dioses, la forma de construir los exvotos, su visión del más allá o información sobre la evolución del territorio del municipio a lo largo de la historia son algunos de los contenidos del museo, dividido en cinco zonas y que cuenta con innovadores recursos basados en las nuevas tecnologías, como una mesa táctil, quioscos interactivos o vitrinas semicirculares. Además, el centro muestra al visitante las relaciones entre esta ancestral religiosidad y los diversos cultos existentes en el mundo. Junto al museo, también se está acondicionando en Castellar el yacimiento de la Cueva de la Lobera, el que fuera entre los siglos IV y III un santuario rupestre donde los antiguos pobladores rendían culto a los dioses. Este lugar reúne tres elementos importantes para los santuarios ibéricos, como el estar cerca de una vía de comunicación (Vía Heráclea), su posición estratégica y la cercanía de un manantial.
El de Castellar ha sido el primero de los museos y centros de interpretación de la cultura ibérica que se abrirán dentro del proyecto Viaje al tiempo de los iberos. Este peculiar itinerario cultural tendrá su epicentro en el futuro Museo Internacional de Arte Ibero de la capital jiennense, actualmente en obras y que podría estar listo para el primer semestre de 2012. Pero para este mes de septiembre se espera también que abra sus puertas el centro de interpretación sobre el yacimiento de Cerrillo Blanco de Porcuna, una necrópolis dinástica en la que se hallaron más de 30 esculturas de un gran valor patrimonial. Próxima también está la apertura del museo del yacimiento de Cástulo, en Linares.
La intención de la Diputación es que el Viaje al tiempo de los íberos comience en el Collado de los Jardines de Santa Elena, para seguir por el santuario de la Cueva de la Lobera (Castellar) y continuar en Vilches para ver un ejemplo de ciudad íbera. La ruta sigue con la visita a la cámara sepulcral de Toya, en Peal de Becerro, la plaza de armas del Puente Tablas de la capital jiennense, la necrópolis de Cerrillo Blanco en Porcuna, el citado yacimiento de Cástulo y culminar con el Museo de la capital.

El Museo del Santuario Ibérico de Castellar, ubicado en el rehabilitado Palacio de Medinaceli, está considerado el único del mundo dedicado a la religiosidad de la cultura ibérica. Pone en valor el patrimonio encontrado en la Cueva de la Lobera, un yacimiento situado a un kilómetro de Castellar que debió tener importancia a partir del siglo IV antes de Cristo. De entre todos los exvotos de su legado, hay una figura que se cree que estaba dedicado a una divinidad femenina. El director del Centro Andaluz de Arqueología Ibérica, Arturo Ruiz, cree que "podría ser la propia diosa representada con dos ánades en los laterales, muy relacionada con la fertilidad".

(Fuente: elpais.es)

2 de agosto de 2010

El hallazgo de armas de hace 2.400 años confirma a La Bastida (Valencia) como el poblado peninsular íbero "de referencia"

 El hallazgo de un conjunto de armas y útiles de guerreros de hace 2.400 años en La Bastida de les Alcusses situada en Moixent (Valencia) ha confirmado esta excavación como "el poblado peninsular de referencia para estudiar el periodo ibero".

Así lo han asegurado el delegado del área de Cultura de la Diputación de Valencia, Salvador Enguix, la directora del Museu de Prehistòria de València y codirectora de la campaña de excavación, Helena Bonet, y el arqueólogo y codirector de la excavación en La Bastida de les Alcusses, Jaime Vives-Ferrándiz, que han presentado en rueda de prensa los detalles del hallazgo anunciado ayer por la corporación provincial.

Las excavaciones han permitido recuperar más de 60 objetos de hierro en un pequeño espacio de la entrada oeste al Poblado de La Bastida, entre armas y pletinas y clavos pertenecientes a los batientes de la puerta, han explicado los expertos.

Las excavaciones arqueológicas en el poblado ibérico de la Bastida de les Alcusses de Moixent se han desarrollado, este año, en la Puerta Oeste. Esta entrada al poblado ya había sido excavada en 1998 pero las evidencias acerca de la existencia de una entrada más antigua en este punto han motivado la excavación de la misma durante este año.

En este conjunto destacan las panoplias --conjunto de armas y útiles-- de guerreros localizadas en el poblado. Se trata, ha explicado Helena Bonet, de cinco conjuntos de armas, pertenecientes a otros tantos guerreros iberos de hace 2.400 años, que constituyen la parte "más espectacular" del hallazgo y permiten documentar "un ritual único en la arqueología ibérica consistente en la deposición intencionada de cinco conjuntos completos de armas de hierro, ofrendas alimenticias y vasos cerámicos, todo ello quemado junto a las estructuras de madera y hierro de la puerta y sellado bajo una capa de tierra".

En concreto, se han encontrado cinco falcatas, que son espadas cortas de un solo filo punzante, asociadas a varias manillas de escudos, lanzas y soliferrea, que son lanzas a modo de jabalinas hechas totalmente de hierro. Se trata de un conjunto de armamento propio de la primera mitad del siglo IV a.C. y que debemos asociar a las elites guerreras de la sociedad ibérica.

Es muy interesante constatar que estas armas no son restos de una batalla acaecida en la puerta sino de depósitos rituales. De hecho, todas las falcatas y las jabalinas están dobladas o rotas intencionalmente, lo que indica que fueron inutilizadas con un sentido ritual, y depositadas junto a los escudos y otras ofrendas alimenticias. Este hecho es frecuente en las tumbas, donde las armas se inutilizan para acompañar al difunto al Más Allá, como objetos personales e intransferibles.

 "Lo que hace único el hallazgo de la Bastida de les Alcusses es que este ritual se ha documentado en un poblado, y en concreto en la entrada principal, y en el que se ha llevado a cabo deposiciones votivas siguiendo las normas de los rituales funerarios aunque no son tumbas", ha destacado Bonet.
   
En su intervención, Jaime Vives ha comentado que "una interpretación preliminar a estos hallazgos apuntaría al hecho de que se trata de cenotafios, o monumentos para guardar la memoria de personajes destacados --identificados por sus armas-- o para recordar algún hecho en un espacio público importante como es la puerta principal del poblado: la Puerta Oeste".

Las excavaciones han permitido recuperar en total más de 60 objetos de hierro en este pequeño espacio de la entrada oeste, entre armas y pletinas y clavos pertenecientes a los batientes de la puerta. Una concentración inusual que se explica en relación al hecho ritual del conjunto depositado.

Asimismo, se han documentado 45 troncos, vigas y tablones de la estructura de las puertas, quemadas también con un sentido ritual junto a estos conjuntos de armas, así como conjuntos de cereales y aceitunas carbonizados que se depositaron también como ofrendas votivas.  

Un equipo interdisciplinar compuesto por 10 investigadores y restauradores del Servicio de Investigación Prehistórica de la Diputación de Valencia y de otras instituciones como la Universitat de València y el CSIC, coordinados desde el propio Museu de Prehistòria de Valencia, se encargará del estudio completo de este conjunto único, sacado a la luz unos 2.400 años después de ser depositado.

27 de julio de 2010

Abre sus puertas el Museo del Santuario Íbero de Castellar (Jaén)

El Museo del Santuario Ibérico de Castellar (Jaén) ha abierto sus puertas para dar a conocer la religiosidad de la cultura íbera a través de sus exvotos, un espacio que pone en valor el patrimonio encontrado en la Cueva de la Lobera, el yacimiento situado a las afueras del municipio castellariego en cuyo legado destaca la presencia de más de 3.000 de este tipo de piezas arqueológicas, ofrendas en forma de figuras que utilizaban los íberos para comunicarse con los dioses.





El Museo del Santuario Ibérico de Castellar está ubicado en el Palacio de Medinaceli del municipio castellariego, rehabilitado para tal efecto, y está dividido en cinco zonas en las que se enseñarán a través de innovadores recursos basados en las nuevas tecnologías, como una mesa táctil, quioscos interactivos o vitrinas semicirculares, aspectos como la relación de los íberos con los dioses, la forma de construir los exvotos, su visión del más allá o información sobre la evolución del territorio del municipio a lo largo de la historia. Además, el centro muestra al usuario relaciones entre esta ancestral religiosidad y los diversos cultos existentes en el mundo.
Además de este espacio, se está acondicionando en Castellar el yacimiento de la Cueva de la Lobera, el que fuera entre los siglos IV y III un santuario rupestre donde los habitantes de la zona iban a rendir culto a los dioses. Este espacio, situado a un kilómetro del museo, está siendo sometido a las últimas adecuaciones que permitirán que sea visitado. Las actuaciones incluyen la construcción de una playa de aparcamiento y la adaptación del espacio para que pueda ser visitado, que además dispondrá de información explicativa a través de diversos paneles.

En el marco de esta iniciativa se están realizando actuaciones en Linares, Peal de Becerro, Porcuna, Jaén, Ibros, Castellar, Huelma y Santa Elena para la recuperación y habilitación de espacios vinculados a este pueblo presente en la Península Ibérica entre los siglos VII y I antes de Cristo. Los próximos "hitos" del plan serán la próxima apertura de los centros de Cerrillo Blanco, en Porcuna, y el de la ciudad ibero-romana de Cástulo, o el Centro de Interpretación Íbero de Peal de Becerro, entre otros atractivos, a los que se sumará el Museo Íbero de Jaén.

23 de julio de 2010

Tras las pistas de los íberos en El Puig (Alicante)

Reinterpretar la vida de hace 2.500 años a través de las ruinas. Este es el objetivo del equipo de arqueólogos que trabaja desde hace seis años en el yacimiento íbero de El Puig, sobre el Barranco de la Batalla en Alcoy, y la campaña de este año arroja nuevos datos sobre cómo vivían y se relacionaban las familias que habitaron la zona en la Edad del Hierro. La excavación actual se centra sobre una barriada de 400 metros cuadrados en la que residieron unas seis familias, que se vieron obligadas a abandonar el poblado de forma repentina, según las primeras hipótesis, por una rivalidad vecinal. Las cerámicas halladas constatan que a partir del año 325 a.C., El Puig quedó desierto.

El proyecto de investigación en El Puig se inició en el año 2004, y está dirigido por el profesor titular de Arqueología en la Universidad de Alicante, Ignasi Grau, y el director del Museu Arqueològic Municipal de Alcoy, Josep María Segura. El pasado 28 de junio se inició una nueva campaña de trabajos, en la que colaboran catorce alumnos de forma altruista, que se prolongará hasta el próximo domingo. Para este día, según anuncia Segura, «se celebrará una jornada de puertas abiertas para dar a conocer la tarea llevada a cabo, desde las 10.30 hasta las 12 horas, y se pondrá a disposición de los interesados un servicio de autobús gratuito que partirá desde la Tourist Info».
El Puig, que se localiza en un extremo de la urbanización del Estepar, sobre el Barranco de la Batalla, se convirtió en un asentamiento humano durante gran parte del primer milenio antes de la Era. Los restos más visibles son los de su último momento de ocupación en época ibérica clásica, en el siglo IV a.C. Una comunidad de alrededor de trescientas personas escogió este monte, que satisfacía las necesidades estratégicas y defensivas, para construir un poblado de casas cuadrangulares de piedra, articuladas en torno a calles rectas, así como sólidas fortificaciones en el único camino de acceso. El Ayuntamiento de Alcoy concluyó hace dos años la restauración de un torreón de forma cuadrangular.
Según informa Ignasi Grau, «este año estamos trabajando sobre una barriada que ocuparía unos 400 metros cuadrados, en la que vivirían unas seis familias, de las cerca de 90 que llegaron a habitar en todo El Puig, y hemos encontrado documentación de primer orden para poder interpretarla y saber cómo era la actividad diaria del siglo IV antes de Cristo».
A diferencia de campañas anteriores, en las que los arqueólogos detectaron en pequeños cuadros toda la historia del yacimiento desde sus orígenes, en el siglo VIII hasta finales del IV, ahora están obteniendo una imagen del último momento del asentamiento.
«Estamos dando color a una imagen que antes teníamos en blanco y negro, y es que ahora empezamos a conocer con detalle las formas de economía, de la vida doméstica, familiar, de agregación social y de estrategias para relacionarse entre ellos». En este sentido, Grau detalla que el hallazgo de una serie de vestigios han permitido recomponer dietas, pautas de consumo y saber los productos que cultivaban las familias de la Edad del Hierro. «Comían ovejas y cabras principalmente, después cerdos y alguna vaca en tiempos de fiesta. También consumían de forma habitual bellotas y cerveza, y vino en las fiestas. En una habitación también hemos encontrado copas áticas, lo que demuestra que bebían de forma extraordinaria y no ordinaria».
Por otra parte, el grupo de arqueólogos ha detectado niveles de abandono repentino en la zona, que quedó deshabitada partir del año 325 a.C. Grau explica que «las familias dejaron aquí todo lo que tenían, y hay evidencias de que en algunas casas se produjeron incendios, por lo que todo apunta a que les obligaron a marcharse». Asimismo, indica que «hay varias hipótesis a investigar, pero más que una invasión de gente venida de fuera, como cartagineses u otros grupos, puede que hubiese una rivalidad vecinal, y el candidato es La Serreta, que sí mantuvo su vida y vio incrementada su población, posiblemente porque las familias de El Puig fueron obligadas a trasladarse allí». (Fuente: lasprovincias.es)

17 de junio de 2010

La cámara de Arjona (Jaén) facilita nuevos datos sobre la relación íbero.romana

Cráteras áticas, recipientes de cerámica tardía, un carro funerario con adornos en bronce e inscripciones íberas forman parte del rico ajuar hallado en la cámara funeraria del Príncipe Íbero de Arjona, del siglo I a.C., que aporta nuevos datos sobre la pervivencia de la cultura íbera en época romana.

El Centro Andaluz de Arqueología Ibérica (CCAI) de la Universidad de Jaén ha presentado hoy parte del ajuar encontrado en esa cámara funeraria, después de que se finalizase en abril la campaña de excavación realizada en la necrópolis de la Cuesta del Parral, en la localidad jiennense de Arjona, donde desde esta tarde y hasta mañana un grupo de expertos internacionales analizarán el hallazgo.
Alrededor de la cámara funeraria, que es de mampostería con grandes sillares, planta rectangular y estuvo semienterrada, se encuentran casi una treintena de tumbas separadas por la llamada zona de "respeto", según ha explicado a Efe el arqueólogo, Francisco Gómez.
Además se ha hallado una zona donde se realizaban los ritos funerarios y la cremación de los cuerpos, entre lo que se ha documentado un ritual de libación (ceremonia religiosa que consistía en derramar vino u otro licor después de probarlo), que pone de manifiesto, que a pesar de la presencia romana, eran íberos y pensaban como íberos, según el director del CCAI, Arturo Ruiz.
Al interior de la cámara funeraria se llegaba a través de unos escalones y enfrente se construyó una repisa sobre el suelo enlosado y dos nichos en un lateral a modo de cajas.


Foto: Francisco Gómez, arqueólogo de ICCAI
en la cámara mortuoria de Arjona (Foto: Diario Jaén).

Aunque lo más importante, además de la edificación de la cámara es el ajuar encontrado dentro de ella, todo revuelto, ya que fue profanada en una época reciente a su construcción, y que "caracteriza la riqueza propia de un príncipe y su familia", según Ruiz.

Otro de los hallazgos más sorprendentes es el de la inscripción en escritura íbera meridional, en una tapadera de una urna de plomo en la que aparece el que podría ser el nombre incompleto del Príncipe allí enterrado junto a su familia: ...ILTIR hijo de EKATERUTU, siendo ésta la primera vez que se documenta el nombre de un íbero.

Del conjunto de materiales encontrados destacan siete cráteras áticas (vasijas de gran capacidad para el vino o el agua) de figuras rojas del siglo V antes de Cristo, una de ellas con algo excepcional, una escena dedicada a temas de mujer.

Las cráteras conviven con un ánfora Dréssel, los restos de un gran vaso de vidrio, una espada corta, más de 148 tabas (huesos para juegos o apuestas) y un importante número de cerámica ibérica campanicense pintada.

También se han excavado los restos de un carro funerario de hierro y madera con apliques y adornos de bronce, del que destaca "un hallazgo excepcional": la cabeza de un guerrero ibero que está siendo devorada o vomitada por un animal, seguramente un lobo o un león, que recuerda a piezas existentes en el Museo Arqueológico Nacional procedentes de Cerro Maquiz en Mengíbar (Jaén), hallados en el siglo XIX. (fuente: www.elideal.es )

11 de junio de 2010

Arjona (Jaén): Jornadas internacionales de Arte Íbero los dias 17 y 18 de junio

La vicepresidenta de Turismo, Desarrollo Local, Sostenibilidad, Cultura y Deportes, María Angustias Velasco, ha conocido junto al alcalde de Arjona, José Puentes, el yacimiento arqueológico ibero que recientemente se ha descubierto en esta localidad jienense. Durante esta visita, la responsable turística de la Diputación ha podido comprobar la importancia de este hallazgo arqueológico, en el que destaca especialmente la pieza conocida como 'La caja de los guerreros', que ha suscitado un notable interés entre los investigadores en la cultura ibera.


Por este motivo, desde el Ayuntamiento de Arjona se ha propuesto la realización este mismo mes de un encuentro internacional en el que participen expertos mundiales en los iberos, y en el que se analice y debata la relevancia de este descubrimiento, que se suma a los importantes restos iberos ya documentados en otras comarcas de la provincia de Jaén.

En estas jornadas, que se desarrollarán los días 17 y 18 de junio y a partir de las cuáles se editará una obra que recoja los contenidos más interesantes que surjan de esta reunión, está prevista la colaboración del Centro Andaluz de Arqueología Ibérica y también de la Diputación, una vez que María Angustias Velasco se ha comprometido durante su visita a Arjona a que la Corporación Provincial también sume sus esfuerzos para la celebración de este encuentro internacional.

'La Caja de los Guerreros de Arjona' es un excepcional y reciente hallazgo, que engrosa el ya importante patrimonio ibero de Andalucía y particularmente de la provincia de Jaén. Es una urna cineraria encontrada en la necrópolis de la Cuesta del Parral del citado municipio, cuyas investigaciones están dando espléndidos resultados. Fechada en el siglo I antes de nuestra era, la urna es de tamaño reducido, tiene forma cúbica y está realizada en piedra arenisca. Debe su nombre a que en sus cuatro paredes laterales se representan escenas de luchas entre dos guerreros, que aparecen en distintas actitudes, a pie y con espada o a caballo y con lanza. (http://www.elideal.es/)

20 de mayo de 2010

Sobre la "Caja de los Guerreros" de Arjona


Esta original caja de piedra arenisca, se corresponde con el periodo final de la cultura ibera y es de forma cúbica. En sus cuatro paredes laterales se representan en relieve diferentes escenas de luchas entre dos guerreros, tanto a caballo como a pie. Se cierra con una tapadera con botón. En su interior se encontraban intactas las cenizas de dos personas, que, según un estudio forense,  pertenecen a un hombre y una mujer, quemados segun la tradición ibera a menos de 800 grados. Estos restos habrían sido recogidos de forma muy minuciosa, como lo demuestra el que se hayan encontrado algunos trozos de huesos de la mano y el pie. El hombre era fuerte, de cuerpo atlético, con lesiones y enfermedades propias de las podría tener hoy un deportista, lo que da la idea de que pudo ser un guerrero, mientras que la mujer era más joven y de cuerpo grácil.
Para el director del Centro Andaluz de Arqueología Ibera, este hallazgo supone un cambio respecto a las esculturas funerarias aristocráticas de los yacimientos de Cerrillo Blanco de Porcuna o El Pajarillo de Huelma. "Se pone de manifiesto una democratización de la imagen en la que todo el mundo empieza a representarse".
"Lo importante", subrayó Arturo Ruiz, "es que los elementos romanos no se notan". "Todo el concepto de la muerte es todavía ibero y se siguen utilizando las inscripciones iberas y no en latín, a pesar de que la llegada de los romanos se produjo dos siglos antes
Los trabajos arqueológicos se presentarán en junio en una reunión internacional.
(Arquehistoria.com)

18 de mayo de 2010

NOTICIA: En el interior de la urna de Arjona, Jaén, (S.I a.C) se hallaron los restos cremados de un hombre y una mujer

El patrimonio ibero de Andalucía y, especialmente de la provincia de Jaén, se ve enriquecido con la 'Caja de los Guerreros' de Arjona, una urna cineraria encontrada en la necrópolis de la Cuesta del Parral de este municipio, cuyas investigaciones están dando "espléndidos resultados que redundan en la importancia" que tendrá el yacimiento en el marco de esta cultura.




Así se puso de manifiesto durante la entrega de la pieza al Museo Provincial de Jaén, en la que participaron la delegada de Cultura, Mercedes Valenzuela; el director del Centro Andaluz de Arqueología Ibérica (CAAI), Arturo Ruiz, y el alcalde de la localidad, José Puentes, quien explicó que el hallazgo se produjo hace unos meses como consecuencia de las riadas que provocaron las lluvias del pasado invierno y que sacaron a la luz los restos.


La urna, fechada en el siglo I antes de nuestra era, es de tamaño reducido, tiene forma cúbica y está realizada en piedra arenisca. Debe su nombre y originalidad a que en sus cuatro paredes laterales se representan escenas de luchas entre dos guerreros, que aparecen en distintas actitudes, a pie y con espada o a caballo y con lanza.

El hallazgo se produjo hace unos meses como consecuencia de las riadas que provocaron las lluvias del pasado invierno y que sacaron a la luz los restos.


En su interior, según los primeros resultados del estudio forense del doctor Trancho, de la Universidad Complutense de Madrid, había restos de un hombre y una mujer, que fueron cremados a una temperatura no superior a los 800 grados, algo habitual en la cultura ibera. Por algunos huesos que no se quemaron completamente, se sabe que la mujer era de aspecto "grácil", mientras que el varón era de complexión fuerte y tenía patologías típicas de una marcada actividad física.

La 'Caja de los Guerreros' de la antigua Urgavo, nombre ibero de Arjona, fue encontrada casualmente por dos vecinos que la entregaron al alcalde, al que informaron de que había más piezas que podían correr peligro por el efecto del agua. Por ello, el CAAI promovió una intervención de urgencia ante la Junta de Andalucía que se desarrolló entre los pasados meses de febrero y mayo y que contó con la colaboración económica del propio Centro, el Ayuntamiento y la Asociación 'Amigos de los Iberos'.

NUMEROSOS ENTERRAMIENTOS

Gracias a esta excavación, según destacó Ruiz, se ha recuperado en la Cuesta del Parral más de una veintena de enterramientos, en su mayor parte colectivos, que se fechan en el siglo I A.N.E. y que muestran ritos de cremación de clara tradición ibera. En este sentido, añadió que el valor de la urna depositada hoy en el Museo y del resto de tumbas es que pertenecen al iberotardío, periodo final de esta civilización del que apenas se conocían restos similares, ya que la mayoría de necrópolis aparecidas son del siglo IV A.N.E.

"Lo importante es que los elementos romanos no se notan. Todo el concepto de la muerte es todavía ibero y se sigue utilizando las inscripciones iberas y no en latín a pesar de que la llegada de los romanos se produjo dos siglos antes", subrayó el arqueólogo, quien insistió en que hallazgos como este reflejan que el peso de la cultura propia seguía siendo "muy fuerte", si bien también se dan cambios como la aparición de enterramientos conjuntos, familiares, frente a los fechados tres siglos antes, en los que se separaba al hombre y la mujer.

Además, matizó que ya no se trata de la gran escultura funeraria aristocrática, visible en los relevantes yacimientos de Cerrillo Blanco de Porcuna o El Pajarillo de Huelma, sino que pone de manifiesto una "democratización de la imagen" en la que "todo el mundo empieza a representarse".

Por otro lado, el director del CAAI aludió a otro de los descubrimientos más sobresalientes de la necrópolis: una cámara, la de mayor tamaño, con una cuidada mampostería, acceso por escaleras y un rico ajuar que actualmente se encuentra en fase de estudio.

Los primeros resultados de estos trabajos se darán a conocer en el encuentro internacional que se celebrará en Arjona los días 17 y 18 de julio, en el que también se debatirá sobre la iconografía de la 'Caja de los Guerreros'. En cualquier caso, Ruiz adelantó que sus "espléndidos resultados" e interesantes materiales "redundan en la importancia" que tendrá la necrópolis de la Cuesta del Parral en el marco de la cultura ibera.
(Fuente: Europa Press)

15 de mayo de 2010

NOTICIA: Importante hallazgo arqueológico en Arjona (Jaén)


El cerro de Piquía, en Arjona, va camino de convertirse en uno de los principales yacimientos íberos  de la provincia jiennense. Investigadores de la Universidad de Jaén han descubierto piezas de gran relevancia. El más importante de estos restos arqueológicos es la Caja de los Guerreros.
Figura de Guerrero Íbero (Siglo.V a.C) encontrado en el muy próximo yacimiento de Porcuna (Jaén)

El yacimiento iberomano de Piquía, en Arjona, en el que se trabaja desde hace meses, es uno de los más importantes de la provincia. Eso es decir mucho en una tierra que es uno de los principales referentes para el estudio de esta cultura, de la que se tienen las primeras noticias en el siglo VII antes de Cristo y que llega a mantenerse hasta los primeros días del Imperio Romano. Por el momento, nada ha trascendido oficialmente sobre la excavación —los detalles del trabajo en este paraje se conocerán, el lunes, en el Museo Provincial—. Sin embargo los arqueólogos del Centro Andaluz de Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén, que son los encargados de esta intervención, han encontrado una gran cantidad de piezas de gran valor en esta cata. Entre los objetos más destacados está la llamada Caja de los Guerreros de Arjona, que no tiene parangón entre los muchos vestigios que los Íberos dejaron en tierras jiennenses.
El arca recibe el evocador nombre porque sus lados están adornados con figuras. Está previsto que, ya de manera oficial, se desvelen más detalles de lo encontrado y de los trabajos realizados en “Piquía”, el lunes, en una rueda de prensa. Las cautelas que han acompañado a estos trabajos arqueológicos están motivadas por la importancia del sitio y por el temor a que sea objeto de los expoliadores que, como conocen los expertos en la materia, trabajan sobre todo en los municipios de las campiñas jiennense y cordobesa, donde está ubicada Arjona. Para prevenir cualquier incursión en este lugar, la Guardia Civil vigila el emplazamiento día y noche. Además, el Centro Andaluz de Arqueología Ibérica cuenta con la colaboración de otras instituciones, como el Ayuntamiento arjonero, que también se mostró muy precavido.
A pesar de ello, la noticia de que se habían encontrado importantes restos arqueológicos en Arjona sí había saltado a la luz pública. Uno de los arjoneros más ilustres, el novelista Juan Eslava Galán, que siempre que tiene la oportunidad hace gala de su gran apego al municipio, lo llegó a comentar durante la presentación de su última obra “Rey Lobo”,  en la que rescata a los íberos  DIARIO JAEN